Tras llevar dos semanas dándole los hipnóticos a Jin, Namjoon disminuyó las dosis y poco a poco empezó a remplazarlos por los psicóticos que seguían en el contenedor de las pastillas. Esta vez consistían en unas píldoras rosas y de gran tamaño. En cada dosis le daba dos al menor. Las partía a la mitad para que fueran más fáciles de tragar, decidió hacer eso desde el momento en el que Jin se negó a tragarlas por su tamaño.
Reemplazar los hipnóticos por los nuevos psicóticos mantenía a Jin más despierto, aun dormía mucho pero no como en las primeras semanas. Y definitivamente se empezaban a ver los resultados de los que Jungkook hablaba. Con cada día que pasaba el menor parecía estar mucho más dócil, manejable y accesible. Casi no hablaba, a menos de que se lo pidieran, pero solo era cuestión de motivarle poco a poco a que hablara más seguido y con más libertad. Namjoon quería que el menor estuviera bajo su control, pero tampoco quería que se volviera una especie de robot que solo recibiera ordenes.
Ayudaba a Jin con el baño todas las veces; eso era algo que le gustaba, que el rubio tuviera que buscarlo para tomar un baño. También le gustaba que Jin le pidiera quedarse con él hasta que terminara de comer. Eran avances que quería lograr, y los estaba cumpliendo en muy poco tiempo, incluso antes de lo esperado.
Se encontraban ambos en el baño, Jin metido en la bañera, con el agua llegándole un poco más arriba del pecho, y Namjoon ayudándolo un poco con lo que necesitara.
Para Namjoon era gratificante ser testigo de lo bien que se alimentaba SeokJin, y que aun cuando no se estaba ejercitando, se podía apreciar lo bonito que se tornaba su cuerpo. Se podía notar con solo verlo sin ropa que había aumentado unos kilitos desde que se lo había llevado. Kilitos que le habían sentado muy bien, porque siempre era como un placer para los ojos de Namjoon ver cada que podía los notables y bonitos cambios en el cuerpo de Jin.
Su mirada se la llevaron los pezones sonrojados que se entreveían a través del agua jabonosa de la bañera, y le fue inevitable recordar lo bien que se había sentido estar dentro de Jin. Se había estado conteniendo por el estado en el que Jin se encontraba, no quería que que se alterara al estar fuertemente medicado, pero ahora Jin se encontraba más despierto y menos consternado, no tendría porqué contenerse en ese momento.
Se percató de que Jin lo miraba fijamente, solo como él sabía hacerlo; por un momento se transportó al principio de todo, cuando lo vio por primera vez, vestido con aquella bonita jardinera, luego viajó a la cabaña, cuando Jin estaba tan asustado que solo lloraba, después cuando asesinó a la pelirroja que se quiso pasar de lista con Jin, recordó cómo los ojos de Jin empezaron a verlo de forma diferente desde ese entonces, y por último la primera vez que Jin estuvo desnudo en su cama; los ojos de Jin siendo los protagonistas en cada uno de esos gloriosos momentos.
Cuando volvió de nuevo en sí no dudó en atacar los labios del rubio, al principio Jin se notó un poco tenso, y más aun cuando sintió la mano derecha del moreno trazar un camino desde su pecho hasta hasta los confines de la poca experiencia de su cuerpo. Se vio obligado a separar sus labios de los del moreno para no reprimir un gemido cuando sintió el tacto del mayor entre sus piernas; sin embargo, sus labios fueron atacados de nuevo por un beso exigente lleno de deseo y ansias.
La boca de Namjoon se alejó de la de Jin y empezó a repartir besos desordenados en la curvatura del cuello del menor. Su mano seguía en la entrepierna de Jin, acariciando con parsimonia, mientras que devoraba fervientemente su cuello.
En un movimiento rápido tomó a Jin de las nalgas y lo hizo levantar de la bañera, haciendo que en el proceso salpicara un poco el agua. Guio al rubio hasta que estuvo fuera del agua y lo puso de rodillas mirando hacia la bañera. Se ubicó detrás del menor e invadió todo su cuerpo con sus caricias, desde sus mejillas hasta sus pies, demostrando el nivel de adoración que sentía por el muchacho.
Sus besos húmedos viajaron desde el cuello hasta la espalda de Jin, escuchando en todo momento sus suspiros y su respiración acelerada. Jin en todo momento apretaba el borde de la bañera con sus manos.
Separó las nalgas desnudas de Jin y apegó su propia pelvis a la zona, creando una exquisita fricción ente la parte trasera del menor y su miembro aún cubierto por la tela del pantalón. Después dejar otro sucio y húmedo beso en su boca, volvió a su cuello, una de sus manos abandonó su cadera, la llevó a la dulce boca de Jin, apretó con un poco de brusquedad el labio inferior del chico antes de sumergir dos de sus dedos al interior de la boca, buscando ensalivarlos lo suficiente.
Cuando sacó los dígitos de la boca del rubio, dejó de besarlo solo para mirar cuando empezó un recorrido con los dedos ensalivados por toda la espalda contraria, arrastrando con ellos algunas gotas de agua que se encontraban esparcidas por toda la zona. Apresó con sus dientes el lóbulo izquierdo de Jin en el momento en que insertó ambos dedos en la entrada del mismo. Abrió su boca y entrecerró sus ojos cuando sintió la textura interna de Jin y escuchó un gemido gutural escapando de esos labios que tanto le enloquecían.
Dio una pequeña mordida en el hombro del rubio y empezó a mover ambos dedos, de adentro hacia afuera, en círculos, en movimiento de tijeras y curvándolos hacia abajo para alcanzar su próstata. Sintiendo la presión electrizante en su próstata, Jin curvó su cuerpo y soltó el borde de la bañera, dejando caer sus manos al piso y apretó entre sus dedos la alfombra que rodeaba la misma. Sus muñecas temblaban levemente, al igual que sus hombros.
Namjoon acarició por última vez la espalda baja del rubio antes de empezar a desabrochar con impaciencia su cinturón, seguidamente desabrochó sus pantalones y los bajó junto a sus bóxers solo lo suficiente. Inmediatamente su pene rebotó por encima del trasero de Jin. Metió por ultima vez sus dedos en la entrada contraria solo para asegurarse de que se encontraba lo suficientemente dilata.
Secó con sus manos el rastro húmedo que habían dejado las gotas de agua que se escurrían del cabello mojado de Jin y finalmente empezó a introducirse. Él mordió su labio inferior, las piernas de Jin temblaron y sus brazos amenazaron con derrumbarse.
Cuando estuvo por completo en su interior no esperó más y empezó a moverse con fuerza. La boca de Jin se mantuvo abierta todo el tiempo por la cantidad exuberante de gemidos que salían de ella sin control ni descanso.
Las nalgas de Jin rebotaban con cada embestida y su vientre temblaba por la sensación de tener el miembro del mayor adentro.
Una de las manos de Namjoon apretaba con fuerza la nalga izquierda de Jin, mientras que la otra reposaba en el cadera de este, aunque de vez en cuando la arrastraba por toda la espalda de su chico.
Dos de las corridas del rubio ya se encontraban regadas en la alfombra, sus brazos finalmente se habían rendido y ahora se encontraba apoyado sobre sus codos y antebrazos. Las estocadas de Namjoon no cesaban ni la fuerza ni la velocidad, y eso estaba acabando con la poca cordura de Jin.
El moreno lo tomó de los brazos y lo atrajo con firmeza hacia su pecho. Una de sus manos se posó sobre el vientre de Jin y apretó con fuerza, la otra mano la llevó hasta el cuello y dio un par de caricias antes de llevarla hasta la boca del menor, la cual se encontraba con hilos de saliva escurriendo de ella, pues Jin no había podido cerrar la boca en ningún momento. Quitó todos los rastros de saliva con su mano y aumento la velocidad de las estocadas.
Jin se encorvó hacia adelante y luego volvió al pecho del moreno, pero esta vez recostando su cabeza en este. Sus cortas uñas se enterraron en el dorso de la mano que presionaba con fuerza su vientre y se volvió a correr de forma abundante. Namjoon dejó salir un gemido con esa vista y sintió la llegada de su propio orgasmo. Siguió dando embestidas, sobre estimulando al menor, y antes de correrse salió del interior del menor, lo inclinó un poco y dejó caer su corrida sobre las nalgas y espalda baja de Jin.
Repartió cortos besos en los hombros de Jin antes de observar el desastre que ahora tenía que limpiar, incluyendo el propio cuerpo que tanto le encantaba y que acababa de follarse.
Otro capitulo... porque... porque sí, la verdadera pregunta es, ¿por qué no?
Este será el ultimo capitulo con gay sex, ya esto está llegando a su fin, mis bros. Ya faltan pocos capitulos. Vamos a ver si la termino antes de que acabe la semana.
A los que les gusta el kookv, les tengo una noticia. Tengo preparados dos fanfics más, son kookv los dos, uno ya tiene varios capitulos escritos y el otro solo es una idea que ya tiene portada, sinopsis y todo. Si les gusta el kookv y les interesa leer mis fanfics, mantengase al tanto de esos fanfics que subiré. De todas formas en el ultimo capitulo de esta historia les avisaré cuando será publicado el primer capitulo de mi proximo fanfic kookv. Avisados están.
ME LO COMO
👹👹
Que alguien me explique por qué este men entre más viejo más bueno se pone, urgente
Que tiene 38 años, mis tíos de 35 y mis primos de 25 no se ven así de exquisitos... ni nadie que conozca en persona.
bueno, pues
bai bai