Supongo que sabrán que pasó el resto del primer día y los días posteriores, Ronaldo probó distintos métodos para acercarse a Messi. Bueno, intentó sacarle conversación.
Sabemos que terminaban mal todos esos intentos.
——¡Leo! ¿Quieres-
——Estoy ocupado.
——Oh, ¿más tarde-
——Tampoco.
——Supongo que después de la escue-
——Raja de acá. Ahora.
——¡Lo que tú digas! Vuelvo en cinco.
Dios le dé paciencia a Messi porque si le da fuerzas lo mata.
Cristiano tampoco estuvo al tanto de lo que pasaba en las distintas clases. Se quedaba mirando a la ventana, recargando su cabeza en su mano mientras su codo se apoyaba en la mesa.
No era solo porque el primer día de clases era súper aburrido y no ocurría nada interesante o atrayente (una pequeñísima parte era por eso).
Lionel había conquistado sus pensamientos desde el primer contacto visual. Cuando observó lo atrevido y valiente que parecía en la tienda, le llamó la atención. Una vez que lo vio sin capucha le pareció sumamente guapo, agregándole al hecho de que le dió una patada, ¡era el chico perfecto!
No creyó ser un homosexual y masoquista hasta ese día (plot twist). Nunca lo creyó. Ahora aplicaba la frase "nunca digas nunca".
Pero ahora lo encontró, no lo perdería de vista y se encargaría personalmente de que no se le fuera de las manos. Aunque el chico era un hueso duro de roer...
...así como Cristiano era un muchacho complicado en todo aspecto posible.
No se rendiría hasta conseguir el corazón de ese solitario y atractivo alumno.
Y hablaba en serio. Sus amigos al principio no lo tomaron en serio antes del comienzo de clases, el momento dónde su enamoramiento empezó pues parecía algo absurdo y cómico en alguna forma. Ahora que había pasado casi dos semanas desde la vuelta al colegio, ellos temían de que tan lejos llegaría Cristiano.
Ronaldo se podría predecir hasta cierto punto con cierta dificultad, luego era impredecible hasta los dedos de los pies. La palabra límite no existía en su vocabulario, así como cualquier sinónimo de esta, solamente antónimos. Un chico que, sin la supervisión correcta y adecuada, había que preocuparse por su vida y salud.
Hernández ya se lamentaba de no haber tomado en serio a su amigo antes, Marcelo se desesperaba y preocupaba como una madre sobreprotectora y Chicharito ya se había rendido y aceptado que perdió a su mejor amigo.
Cristiano tenía el corazón y la cabeza en el cielo—— ¿Cómo alguien puede ser tan lindo? ——dijo mirando al espejo del baño, la sonrisa tan boba como lo era el amor en si.
——No sé si hablas de Leo o de ti mismo a este punto ——la confusión era audible en la voz de su amigo pero poco podría importarle.
——Obviamente de Leo, yo soy tan lindo que no es ni una duda. Soy hijo de mi madre.
Esta vez, Hernández se quedó callado. Suficiente con escuchar a su amigo en ese estado tan... extraño.
——No puede ser que sigas hablando de ese asocial ——intervino Chicharito, saliendo de uno de los cubículos para lavar sus manos——. Cris, te recuerdo que te pegó en los huevos y hoy te dió una cachetada que resonó hasta China.
——Me tocó... ——murmuró tocando su mejilla dónde fue golpeado hace unos días. Ya no estaba hinchada pero el moretón ya era violeta azulado, por lo que pronto desaparecería. Se negaba a ponerse hielo porque según él; “borraba la marca de Leo.”
Se había vuelto el tema de conversación, uno aburrido y molesto. Ciertamente, Cristiano era el más charlatán del grupo y Chicharito, Marcelo y Hernández eran un tanto introvertidos por lo que podían escucharlo hablar por horas.
Pero en esos días, donde todo giraba alrededor de Messi, no lo soportaban. Claro no se lo dirían en la cara pero el momento en el que se iban del colegio para volver a sus casas, significaba no tener que escuchar más a Ronaldo hablar sobre Leo (en WhatsApp simplemente lo dejaban en visto).
¿Creían que Cristiano dejaba de pensar en Lionel una vez llegaba a casa? sigan soñando, bobos.
Se quedaba en su cuarto gran parte del día, saliendo solo para cosas específicas como ir al baño, comer, etc.
Y no, no es que se quedaba jugando al FIFA o al Fortnite. Su interés por los videojuegos bajó drásticamente desde que conoció a Messi.
Literal solo se quedaba pensando en formas de acercarse al chico emo, conocerlo más. Muchas veces pedía consejo e ideas a sus amigos y el único que no lo ignoraba era Marcelo, quien aportaba ideas.
Cristiano lo maltrataba por inútil.
Elfuckboy
eyey, que opinan si trato de doxearlo en Twitter así descubro dónde vive y lo visito??
15:23 pm
Mariela
o... podrías acercarte como una persona normal y cuerda y tratar de entablar una conversación sin parecer un frikie.
15:25 pm
Elfuckboy
ESO YA LO HICE AYER!!!!! T ODIO MARIELA, NO SERVÍS
15:25 pm
Mariela
:((((
15:25 pm
Cristiano tiró su celular a un lado y se llevó la almohada a la cara, ahogando un gemido de desesperación. Necesitaba un descanso. Es decir, pasar horas tratando de encontrar una forma de acercarse a Messi lo valía porque, bueno, era Messi.
Pero mierda, su cabeza ya le gritaba a dolores que parara aunque sea un rato y se distrajera con otra cosa. De hecho, sus párpados le estaban pesando y desde hace unos minutos estaba cerca de caer dormido.
Había perdido su horario de siesta y ya le estaba afectando, pues no dormía las 8 horas necesarias en la noche.
No quería dormir, no tenía sueño (si lo tenía). Volvió a agarrar su celular y estuvo un rato viendo Instagram. Le daba like a pocas publicaciones ya que no muchas eran de su interés.
Lo de siempre: publicaciones de famosos que seguía, de algunos compañeros de clases que seguía (no recordaba porqué en primer lugar), sorteos de zapatillas dónde su mamá lo etiquetaba, una foto de Kylian con Neymar, Kun y Messi, nada intere—
Sus ojos se abrieron como platos, toda pista del sueño se desvaneció. Volvió a la publicación de Mbappe y en su rostro se formó, involuntariamente, la sonrisa más alegre y brillante. También, sus ojos se iluminaron con felicidad al notar un detalle: Kylian había etiquetado a cada integrante de la foto, y por lo tanto, tenía el Instagram de Messi.
Tocó y lo llevó a la cuenta de Lionel y tuvo que cubrir su boca con su mano para no dejar escapar un grito de emoción pues su hermana estaba durmiendo (sabía su horario de siesta a la perfección).
Sin siquiera pensarlo un segundo más, tocó la opción "seguir" que cambió a "pendiente". No apagó el celular para seguir haciendo otra cosa... se quedó viendo la pantalla por unos minutos. 5 minutos reloj, siendo exactos. Reiniciaba y cargaba la página cada minuto, esperando por alguna actualización. Nada.
Esta vez, apagó el celular y miró al techo unos segundos para volver a mirar si su solicitud de seguimiento había sido aceptada. Hizo eso por los siguientes 20 minutos: miraba si Messi ya lo había aceptado, no cambió nada, se quedaba viendo al techo, volvía a mirar el celular y así se repitió la secuencia por quien sabe cuantas veces.
A la vez, su mente vivía en una nube de pedos en donde Ronaldo ya se imaginaba una boda con Messi (cuando este ni se dignaba a hablar con él). Que delulu.
No obstante, el sueño le iba ganando y sus ojos le pesaban cada vez más. Hacia todo lo posible para no dormirse pero llegó al punto que no tenía energías para volver a prender su celular.
“Solo voy a descansar los ojos un rato...” pensó para sí mismo mientras los cerraba.
Y al minuto, se quedó dormido profundamente.
Fue abriendo sus ojos lentamente, el sueño aún presente pero no tanto como antes. Parpadeó unos segundos y bostezó, estirándose en su lugar.
Ignoró el hecho de que estaba en el piso y le falta una media.
Tomó su celular, no le dió importancia a los mensajes de sus amigos y otras notificaciones, solamente quería fijarse si Lionel ya había aceptado su solicitud.
Grande fue su sorpresa al ver que esta había sido rechazada.
Echó un gemido de tristeza, tirándose al suelo duro de madera, mirando fijamente al techo.
¿Cómo podría acercarse al chico ahora? Él no iba a negar que era encantador y que, con mucha facilidad, podría atraer a quien quisiera pero Leo era un caso especial y difícil de resolver. Si este no quería ni verlo en los recreos pues básicamente huia de él ni bien se acercaba, ¿que podría hacer?
Preguntarle a los amigos de Messi había sido uno de sus planes en un principio pero los tachó de su lista al ver que Lionel andaba pegado a ellos. No iba a preguntar acerca de él frente a él, ¿verdad?
Su cabeza daba vueltas y vueltas, ¡las ideas no venían! Y las pocas que pensaba, no eran de su agrado o terminaba por descartarlas en un santiamén.
¿Quien podría ayudarlo? ¿Quien podría brindarle información de Messi para acercarse a este y formar un vínculo? ¿Quien podria—
La lamparita de su cerebro se encendió.
Tomó su celular a toda velocidad y buscó en WhatsApp el contacto del pelado con cáncer.
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Ken negro
PEPEEEEEEEEEEEEEEEEE
PEPE
PEPE
PEPE
16:55 pm
pepepepepepepepepepepe
PEPEEEEEEEEEEEEEEEEE
PEPITO
SAPITO
pelado
PELAAAAAAAAAAAAA
p
e
p
e
PEPEPEPEPEPEPEPEPE
PEPEPEPEPE
PEPEPEPE
16:56 pm
Sapo Pepe
COMO ME ESCRIBISTE???????
creí que te había bloqueado!!!!!!
16:56 pm
Ken negro
NECESITO TU AYUDA
seguís con el negocio ese????
16:57 pm
Sapo Pepe
Cuál de todos? Y te aviso que te voy a cobrar más caro a vos...
16:57 pm
Ken negro
ay ya sabes de cuál hablo!!
16:57 pm
Sapo Pepe
la verdad que no
ESPERA
volviste a tus manías de antes??
creí que tu mamá te había descubierto
16:57 pm
Ken negro
eh??
AAAAA ESE? no pelado, no hablo de ese
16:58 pm
Sapo Pepe
entonces pues, explícate
16:58 pm
Ken negro
el otro negocio!! ese dónde investigas a la gente tipo FBI
16:58 pm
Sapo Pepe
A
si, aún sigo con ese
porque?
16:58 pm
Ken negro
cuánto te doy para que investigues a Lionel Messi???
16:59 pm
Sapo Pepe
quien es??
uno nuevo de primer año?
16:59 pm
Ken negro
no, de cuarto informática
16:59 pm
Sapo Pepe
pero ni su mamá lo conoce
16:59 pm
Ken negro
QUE TE PASA CON MI ESPOSO
NO HABLES ASÍ DE ÉL
16:59 pm
Sapo Pepe
que
espera
es el que te pego una cachetada el primer día
16:59 pm
Ken negro
Siiiiii ese
necesito que lo investigues
16:59 pm
Sapo Pepe
...
😂😂😂
tienes suerte que estoy de buen humor
dame una semana y después definimos cuánto es el costo
16:59 pm
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Ronaldo sonrió victorioso al ver el último mensaje de Ferreira. En el fondo, sabía que no era la mejor forma, pero estaba desesperado.
Y recuerden, no existía la palabra 'límite' para él.
Dejó el chat y fue al que tenía con sus amigos para contarles. Pero antes de empezar a escribir el mensaje, su dedo paró. Algo en él le decía que fuera un secreto. Sabía que sus amigos lo molestaría y dirían cosas como ‘ay por qué hiciste eso??’ ‘no está buen’ y bla bla. No tenía ganas de escucharlo.
——¿Que podría malir sal? ——dijo en voz alta para él siendo el único en la habitación.
Que boludo.
Probablemente esa semana fue un poco una tortura para Cristiano. Pepe le había advertido que no se acercara mucho a Messi así podría aprovechar los pocos momentos en el que estaba solo para investigarlo un poco más. A regañadientes, accedió.
Eso no le impidió seguir hablando de él. Claro era inconsciente de lo harto que tenía a sus amigos (especialmente a Hernández que tenía un tic en el ojo cada que Ronaldo hablaba de Leo).
Aún así, no les mencionó a ninguno lo que le pidió a Pepe. No quería escucharlos quejarse y reclamarle, prefería vivir con la consciencia limpia (no la tenía).
Muchas veces se había sentido tentado a contarles pero por el mero hecho de que no había ningún secreto entre ellos, al menos por parte de Ronaldo. Les contaba absolutamente todo, por más estúpido que sea, debido a la confianza que había desarrollado con ellos.
Una pequeña parte de él se sentía mal por ocultarles eso y la otra gran parte no le importaba en lo más mínimo.
Pero ellos sospechaban que algo ocurría. Marcelo fue el primero, le comunicó su preocupación a Hernández y Chicharito fue el último en empezar a cuestionarse si Cristiano les ocultaba algo.
Trataron de sacarle la verdad y si bien nunca lo lograban, sus sospechas incrementaban ante el nerviosismo e incomodidad de Ronaldo.
Y en una ocasión, casi lo consiguieron.
Estaban en los pasillos por el horario de recreo, esperando a que Chicharito terminara de guardar sus libros para pasar a la siguiente clase luego del descanso.
——¡Apenas van casi dos semanas y ya hay como tres exámenes! ——lloriqueó Marcelo y José lo abrazó, entendiendo su sufrimiento pues iban a la misma modalidad.
Cristiano suspiró—— Yo tengo dos exámenes y tengo que hacer un ensayo de toda la Edad Media para mañana... ¡solo por dormirme en la clase de historia! ——se cruzó de brazos, molesto—— Como odio a Fernando...
Chicharito se acercó a Ronaldo y acarició su hombro, viéndolo con una mirada empática—— ¿Sabes, Cris? Me alegra que seas muy sincero con nosotros. Eso demuestra que nunca nos mentirias ——le costó decir eso—— y que confías plenamente en nosotros...
——Asi como nosotros confiamos en tí ——intervino José y Marcelo asintió a su lado.
Tragó duro y se mordió el labio, se estaba sintiendo muy presionado. No entendía porqué sus amigos últimamente actuaban de esa manera pero temía que supieran que les escondía algo, aunque ya era notable que lo sabían para su mala suerte.
Estuvo a punto de sucumbir por la culpa y presión. Abrió su boca para empezar a hablar y su teléfono vibró. Eso llamó la atención de los cuatro. Lo tomó y vió la notificación.
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Sapo Pepe
ven al gimnasio, detrás de las gradas
09:04 am
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——Uhhh, ¡discúlpenme queridos amigos! Tengoalgoquehacerrelacionadoamessiadios.
Antes de que cualquiera pudiera preguntar algo, Cristiano ya se había ido de ls vista de los tres chicos. Ser el más rápido del equipo de fútbol de la escuela sirvió para algo más que los partidos, ¿no?
Al ver que ya se había alejado bastante, bajó el ritmo de sus pasos y caminó lentamente hacia donde Pepe le indicó.
El gimnasio estaba prohibido para los alumnos en el horario de recreo ya que solo era usado para clases de educación física y partidos de fútbol en el colegio. Si habían alumnos allí, era porque se escabulleron y tuvieron suerte que los directivos fueran despistados.
Él había sido de esos alumnos junto con sus amigos, hacía mucho tiempo. Pero muy pocas veces. Aún así, él solía ir solo antes. Tuvo una época de 'rebeldia', diferente a la actual. En ese tiempo, casi llegó a formar una amistad con Ferreira, pero solo fue porque—
Sacudió su cabeza, no queriendo recordar ese horrible tiempo. Quería borrar aquellos momentos y recuerdos de su memoria pero sabría que nunca podría. Su día podía arruinarse ante la simple mención, incluso si no se tratara explícitamente de eso.
Antes de pasar por las puertas que daban al gimnasio, se fijó que no hubiera ningún directivo o alumno que pudiera delatarlo. Al confirmar que no había nadie, fue rápidamente (casi corriendo) hacia el gimnasio y llegó atrás de las gradas.
Vió a Pepe Ferreira dándole la espalda. Notó que en su mano derecha llevaba hojas de papeles. Al parecer, el chico no notó su presencia por lo que aclaró su garganta para llamar su atención. Ferreira giró y Cristiano vio el cigarrillo en su boca, provocándole una mueca.
——¿Sigues fumando? ——preguntó asqueado, acercándose.
Pepe se sacó el cigarrillo de la boca y exhaló el humo en la cara de Ronaldo, a propósito. Este tosió un poco y lo miró con enojo—— Oh, vamos, no me mires así. Antes hubieras—
——Ya sabemos para que estoy aquí ——lo interrumpió al segundo, sacando una gran cantidad de billetes de su bolsillo——. Dime cuánto te debo y dame todo lo que tengas. ——dijo mientras contaba el dinero.
Ferreira mantuvo silencio por unos segundos al volver a poner el cigarrillo en su boca para luego sacarlo y exhalar, esta vez no en la cara de Cristiano. Luego sonrió con malicia—— Dame todo.
Ronaldo abrió los ojos como platos y lo miró entre sorprendido y preocupado—— ¿¡T-Tanto!? ¿D-Desde cuando pides esa cantidad exagerada?
——Desde hoy.
El moreno vio al contrario y luego al dinero en sus manos. Eran todos sus ahorros, tenía pensado en gastarlo en una notebook para su mamá así podía trabajar pues la que tenían era demasiado vieja. También, otra parte era para llevar a comer algo, dónde él pagaría todo. Probablemente para su cumpleaños, por agradecimiento por ser tan buena madre.
Estaba en un dilema. Tenía en su hombro izquierdo a su grillo de Pinocho, que le decía que ayudar a su madre en el trabajo y hacerle su día era lo mejor. En el derecho, a Satanás que lo convencía que su amor por alguien que no le daba atención y no tenía interés en conocerlo era mejor que complacer a su querida madre.
Estuvo por unos segundos pensando pues no podía hacer esperar tanto a Pepe. Al final, sucumbió a la manipulación del demonio y entregó todos sus ahorros, con el corazón apuñalado por la culpa que apareció rápidamente.
Ferreira sonrió, tomó el dinero y le entregó los papeles—— Me costó mucho conseguir información de él ——dijo mientras contaba la cantidad——. Pude conseguir cosas simples como su dirección... pero no mucho. El chico es un completo misterio.
Ronaldo asintió mientras leía el contenido. Tal como Ferreira dijo, no había tanta información como a él le gustaría, lo cual lo desilusionó un poco. Pero se convenció que como a Pepe le tomó mucho trabajo, por eso le estaba pidiendo bastante dinero como paga.
Su atención se posó en la categoría de ‘gustos’, específicamente en la parte que decía:
“Amante del chocolate con almendras.”
Enrolló los papeles y miró a Ferreira—— Hiciste un buen trabajo, sapo pepe ——sonrió burlón ante la mirada molesta del contrario.
Se dió la vuelta y antes de irse, escuchó un:
——Yo siempre estaré aquí si quieres volver al club, Ronaldo.
Decidió ignorarlo, a él y a la punzada en su corazón.
Al día siguiente, Cristiano llegó al colegio con un pequeño postre de chocolate con maní guardado en una caja de cartón.
Tuvo que convencer a su mamá para que le comprara y le costó trabajo pues él no era fan de las cosas dulces y mucho menos del maní. Al final, ella accedió a regañadientes y dudando.
Ronaldo directamente ignoró a sus amigos y fue en busca de Lionel por los pasillos. Tardó bastante en encontrarlo pero pudo hacerlo antes de que este entrara a clases.
——¡Leo! ——llamó a la distancia con una gran sonrisa en su rostro.
El mencionado reconoció esa molesta voz y resopló, girando con una cara de orto y el ceño fruncido—— ¿Qué querés?
Al mayor poco puso importarle la mala educación del menor, pues sabía que eso pronto cambiaría—— ¡Te traje esto! ——extendió la caja con el postre adentro frente al rostro de Lionel quien arqueó una ceja.
Miró el ‘regalo’ extrañado y al mirar de nuevo a Cristiano, volvió a su expresión desinteresada—— No lo quiero, gracias.
——Oh, ¡vamos, anda! ——suplicó un tanto impaciente, rogando que Messi lo aceptara.
——Ni siquiera sé que es.
——¡Un postre de chocolate con—
——Te dije que no sé que es, no te pregunté que es.
——¡Igual te digo! ——estaba a punto de arrodillarse si era necesario—— Por favor, Leo. Es solo un obsequio como muestra de nuestra amistad.
——No somos amigos y nunca lo seremos.
——¡Nuestra futura amistad!
——No.
——Si.
——No.
——No.
——No soy boludo, negro ——contraatacó fastidiado Messi.
Después de unos segundos, Leo resopló cansado y tomó la caja con brusquedad——Te lo aceptó para que me dejes en paz el resto del día.
Cristiano aplaudió un poco y lo miró expectante, esperando a que probara.
Messi notó esto y suspiró resignado al darse cuenta que tendría comerlo frente a él. Con un poco de inseguridad, dió el primer bocado y masticó con lentitud. Había sido un bocado un poco grande, teniendo en cuenta que el postre no era tan grande.
Su expresión desconfiada se fue rompiendo, cambió a una sorprendida y después, poco a poco se iba transformando en una de gusto.
Los ojos de Cristiano se iluminaron como nunca antes lo hicieron al verlo.
¡Le gustó el postre!
¡Le gustó tanto que a los segundos empezó a convulsionar en el suelo!
Cristiano se sentía furioso y triste.
La primera emoción era para Ferreira, quien le dió información falsa de Messi pues a este no solo no le gustaba el chocolate, sino que también era ALÉRGICO al maní.
La segunda emoción era para Lionel pues estaba muy preocupado por él. ¡No tenía ni la más mínima idea! Se sentía muy arrepentido y desesperado, su mente no paraba de imaginarse los peores escenarios posibles donde o perdía a su querido chico emo o el menor lo sacaba de su vida y no le volvía a dirigir la palabra nunca más.
Prefería la segunda, por el bien de Messi.
El doctor salió y miró a Ronaldo—— ¿Tú eres el chico que lo acompañó?
Cristiano se levantó con rapidez y asintió—— ¿Se encuentra bien? ¿Sobrevivió? ¿Como está? ¿Está enojado? ¿MURIÓ?
El adulto hizo un movimiento con la mano, indicándole que se callara y guardara la calma—— Tu amigo está bien. Pero se le ve muy... malhumorado. Quizás tu compañía le haga bien ——se hizo a un lado para que el menor entrara.
Ronaldo tragó duro y entró a la habitación, murmurando un ‘gracias’ al pasar al lado del doctor quien cerró la puerta. Cristiano miró a Messi el cual estaba en la camilla y cuando fue notado, pudo ver el fuego de ira en sus ojos.
——Le—
——¿¡QUÉ PORONGA HACÉS ACA, PELOTUDO!? ¿¡DAS LA CARA DESPUÉS DE CASI MATARME!?
——¡Leo espera! ¡Déjame explicarte! ——se acercó, tomándolo de la mano pero Lionel se zafó con brusquedad y sin cuidado alguno, frunciendo el ceño. Cristiano sabía que la había cagado y muy fuerte—— ¡Yo no sabía que eras alérgico, te lo juro!
——¡No me digas pelotudeces, re que sabías! ¿¡Si no por qué me habrías dado ese postre!? ¡No me trates de boludo! ——se notaba a kilómetros que sería casi imposible para Cristiano que Messi le creyera aunque sea un poco.
——¡N-No, déjame te explico t-toda la historia! Pepe me dijo que te gustaba el maní y chocolate y—
——¿El sapo Pepe? ¿El de salta y salta por todo el jardín?
——¿Qué? ¡No, Pepe Ferreira! ¡El pelado con la ceja de Frida Khalo! ¡Está en mi mismo curso! Aunque desconozco si salta... probablemente con toda la droga y los cigarrillos que se fuma sea capaz.
——¡Bueno igual me chupa un huevo! ¿Por qué ese pelado dice que me gusta el chocolate? ¡Lo detesto con el alma!
——¿¡C-como que lo detestas!? ¡P-Pero él me dijo que te gustaba cuando t-te investigó y—
——¿¡CÓMO QUE ME INVESTIGÓ!?
——N-No, o sea, yo le pedí que te investigara—
——¿¡QUE VOS QUÉ!? ¡SOS UN LOCO PELOTUDO VIRGEN DE MIERDA, RONALDO! ¡SALÍ DE ACÁ YA MISMO! ¡SEGURIDAD, SEGURIDAD!
——N-NO LEO ESPERA—
Si, definitivamente, estaba en un gran lío.
volví jjj