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Narra ___
Miraba dudosa el papel entre mis manos sin saber que poder escribir, tenía muchas opciones que solo opte ir por la más fácil.... "Si"
Fue lo único que se me cruzó por mi cabeza para luego volver a doblar el avioncito y dirigirlo hacia la dirección de Urugi
Cuando el avión cayó a su destino, voltee rápidamente mi mirada hacia el pizarrón, volviendo a anotar lo que el profesor había puesto, estando nerviosa por como reaccionaria el contrario, teniendo curiosidad por verlo pero no tiendo la valentía para girar mi cabeza hacia el....
Pasaron las horas y aún no había volteado para nada, tenía nervios y un miedo infinito, creyendo que solo era mentira o solo me estaba ilusionando como los demás lo hacían....
Estaba sobrepensado mucho otra vez, así que pedi permiso para poder retirarme e ir al baño a lo cual el profesor me dijo que si, pues notaba algo raro en mi, así que me dio todo el tiempo que necesitará, ganándome algunas miradas de envidia y unas de preocupacion, las últimas eran de esas dos personas que te trataron bien al inició y sin necesidad de molestarte pero ahora no estabas en el momento adecuado como para sonreír o contestar amablemente por lo las cuales no me importaron... Pues en este momento sólo importaba yo...
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Narrador
Caminaba por los pasillos que estaban desolados una joven de pelo ___, miraba a sus alrededores al querer distraerse con algo, soltando un suspiro de alivio al ver que todo estaba vacio gracias a que todos los alumnos se encontraban en clase, por lo cual era un alivio al no tener que aliviar con el ruido
Soltaste otro suspiro, esta vez con pesadez al estar frente a la puerta, tardaste más de lo normal en llegar, pues ibas a un paso lento pareciendo como un caracol,pero eso ya no importaba, ahora mismo estabas delante de la puerta y con tu mano temblorosa la abriste con lentitud, podiendo entrar así al baño por fin...
Lo primero que hiciste fue despejar la zona, no querias que alguien te viera o hablará así que giraste a ambos lados tu mirada, asegurando que no había nadie más que tu, así que con una sonrisa de alivio te fuiste hacia los lavabos, donde abríste la llave para que saliera el agua por el grifo
Te inclinaste con lentitud para poder enjuagar tu rostro con el agua que era fría pero de alguna otra forma era relajante, te sentias menos estrésada y podías estar en paz alfin de un buen tiempo, de tu bolsillo sacaste un pañuelo blanco con toques de flores amarillas... Lo pasate por todo tu rostro para así poder limpiar el agua y no dejar ningún rastro de ella
Una vez terminado volviste a guardar tu pañuelo y colocas te ambas manos a un lado del lavabo, viendo tu cara en el espejo frente a ti, tomaste compostura y sonreiste de manera cálida, abriendo de nuevo el grifo para tomar el agua y echarla en tu pelo para poder acomodartelo, pasando unos mechones rebeldes detrás de tu oreja
Ahora te volvías a mirar al espejo, pensando en que harías cuando tuvieras a Urogi adelante de ti,sin previó aviso un rojo camersi se apoderaba de tus lindas mejillas, sonrojandote al imaginar a esa persona que por alguna extraña razón se hizo realmente especial en cuestión de segundos, ahora era parte de tu corazón y pensamientos al igual que Aizetsu que realmente era alguien dulce y tierno, haciendo que tu corazón salte de alegría
Esa alegría fue rota por un fuerte azotón de puerta, sacandote de tus pensamientos haciendo que voltees tu mirada hacia el causante de ese ruido molesto, fue ahí donde tu mirada cayó sobre una chica que hiba realmente furiosa, pareciendo que hiba a soltar humo... Por alguna extraña razón se te hacia conocida
Miraste el techo pensativa tratando de recordar quien era, hasta que algo o más alguien refresco tu memoria -Oye tu!- hablo aquella chica molesta mientras se acercaba a ti amenazante y su mirada hiba dirigida a ti como dos afilados cuchillos
-s-si?... - respondiste con timidez, teniendo un escalofrío por toda tu espalda mientras sudabas frío y en tu mente rezabas para que no te hiciera nada
Pensaste en huir lo antes posible, pero no se te ocurría nada para escapar, pues tenias miedo de que te golpearia si tratabas de escapar,estabas debatiendo con tú cerebro no fue hacia hasta que sentiste esa mirada de víbora sobre ti, alzando tu cabeza para ver a la chica frente a ti -tu fuiste la idiota que me tiro el café encima!?... - hablo alterada la oji-morada, viendote fijamente, rechinando sus dientes de frustración y furia...
-fue un accidente- contestaste algo seria, agachando tu mirada para no verla
-pues tu "accidente" hizo que toda la escuela me tachara de rara y también hiciste que el amor de mi vida me vea como bicho raro, estas feliz!?- hablo la chica, fulminandote con la mirada mientras se acercaba más a ti, evadiendo tu espacio personal
-El a-amor de tu vida?- respondiste algo curiosa queriendo saber quién era, retrocediendo con lentitud al ver cómo ella se acercaba a ti
-SI! y ahora tu estas con el! Aizetsu es todo para mi! Y haré cualquier cosa para mantenerlo cerca de mi, haría lo que fuera para quitar a personas molestas como tu de nuestro camino- te acorraló en una esquina de la pared del baño, colocando ambas manos a los lados de tu cabeza, teniendo una sonrisa psicópata, sacando de su bolsillo una navaja pequeña pero sin duda se veía filosa
Se acercó lo suficientemente hacia ti, sintiendo su asqueroso aliento pegar en tu cara, para pasar la najava sobre tu mejilla, sintiendo lo fría que estaba...
-voy a continuar lo que dejamos en la mañana!... -
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Narra Urogi
Veia con atención mi libreta llena de dibujos que hize por estar aburrido en la clase... Soplaba mi mechón que se resbalaba de mi oreja mientras movía mi pluma entre mis dedos...
Era tan aburrido si no estabas aquí...pensaba en tu rostro tan lindo,con tu piel pálida y tus mejillas rosadas, eras jodidamente linda, fui muy afortunado al enamorarme de ti que no me di cuenta que al estarte pensando te estaba dibujando en mi libreta, tenias tus ojos cerrados y lindo vestido blanco, tu cabello recogido mientras tenias unos lindo aretes de pluma de color blanco, teniendo una sonrisa y un sonrojo acompañado... Te veías realmente hermosa, haciendo que mi corazón latiera como loco y en mis mejillas hubiera un rojo camersi. . .
-Urogi, concéntrate en la clase- hablo con tristeza su hermano que estaba alado de el, chasqueando sus dedos de lante de el para sacarlo de sus pensamientos, algo que realmente logró al instante
-eh? Que pasó? Donde? Cuando?- hable algo confundido mientras volteaba a ver a ambos lados y parpadeaba varias veces
-pon atención Urogi, has estado más distraído que lo normal pasa algo?- hablo con tristeza su hermano mientras lo tomaba del brazo para verlo a los ojos, queriendo una respuesta
-no-.... No es nada- respondi con pena, desviando mi mirada hacia el reloj, donde pude ver ya había pasado una hora!? Entonces faltaba un minuto para dar comienzo al recreo!! No podía estar más que feliz! Te hiba a volver a ver, que increíble noticia!
-10, 9, 8, 7!- susurra bajo para mi mismo, queriendo que esa maldita campana suene por una vez! Agh!
No fue así hasta que un golpe de una campana sonó por todo el lugar, dando inicio a la salida para poder comer
-bien chicos, pueden salir- hablo el peli-rosa, quitándose sus anteojos y mirando a sus estudiantes
-si!- hable entusiasmado, tomando la mano de Aizetsu y empezar a correr hasta el jardín..
-o-oye! Ve más despacio,si alguien nos ve nos van a regañar- hablo el emo mientras cerraba sus ojos y su pelo se movía por lo rápido que hiban
-NUNCA! ESPERE TODO ESTE TIEMPO PARA "COMER!"- grite con felicidad, soltando una pequeña risita, estando afuera del patio donde moví mi cabeza hacia todos lados, queriendo encontrarte... Pero... No estabas por ningún lado
-eh?- dije confundido al no verte, borrando mi sonrisa de mi rostro, pensando que tal vez me dejaste plantado
-que tienes ahora? Me hace realmente triste al verte haci- hablo Aizetsu, acomodando su pelo y uniforme
-n-no... N-no esta ella- hable en un hilo de voz, echandome hacia atrás, sentando me en el pasto verde que a mí vista se hacía blanco y negro
-quien? Quien buscas?- hablo su hermano, sentándose a un lado de el, colocando su mano en mi cabeza para acariciar me
Solté un suspiro derrotado, mirando el suelo sin decir nada -a... Nadie, ya olvidalo- respondi, ocultando mi rostro entre mis piernas...
-debemos ir con Sekido, o se va a enojar- hablo el oji-azul, parandose de su lugar listo para irse
-ve tu... Yo en unos minutos voy- dije sin mostrar aún mi rostro
-si tu lo dices- hablo su hermano para empezar a caminar lejos de mi, dejándome completamente solo...
Después de unos minutos mire el cielo y solté otro suspiro, levantándome del suelo y ponerme de pie para empezar a caminar
-UROGI!!- hablo una voz femenina detras de el
-eh?- pregunte confundido, girando mi mirada hacia atrás para ver quién me gritaba, fue ahí donde pude ver todo de nuevo a color, estaba la chicha que robó mi corazón, corriendo hacia mi con gran velocidad
Narrador
Se podía ver a una chica temblando y jadeando por lo tanto que corrió mientras era atenta por el azabache que sonreía como nunca
-l-lo siento mucho por llegar tarde! S-se me complicó el camino- hablo entre jadeos cortos la chica, recuperando su compostura para verlo
-tu mamá te persiguia?- dijo burlonamente el azabache, soltando una pequeña risita mientras la veia
-ay no! Ahí si me muero- le siguió el juego para luego también reír al igual que el
Urogi le sonrió de forma tierna y la tomó del brazo, caminando hacia una banca que estaba por debajo de un árbol de cerezos, sentandola y sentarse alado de ella
-y dime~ porque te tardaste?- pregunto Urogi mientras te veia
-a pues resulta que se me apareció un maestro y me dijo "señorita que hace aquí!?" y yo como de que "aquí no era el baño?" y el profesor dice- hablaba la chica, haciendo señas con sus manos mientras que Urogi le ponía atención, pareciendo una pequeña niña contando un cuento
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Mientras tanto en el piso se podía ver a una peli-morada con la mirada perdida, estando en el piso, teniendo grandes lesiones en su cuerpo... Teniendo grandes moretones morados y un ojo cerrando, mientras que de su mano brotaba sangre junto con una pequeña cuchilla
-maldita perra!- hablo con dificultad la chica para después cerrar sus ojos y caer rendida al suelo...
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