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¡Rose! ¡Rose!
Gritaba HyunJin mientras corría, tratando inútilmente de alcanzar los pasos de Rose. Sus ojos estaban cubiertos de lágrimas y sus labios temblaban.
No podía evitar imaginarse lo peor. Pasó sus manos por el cabello, angustiado y desesperado. No tenía idea de que camino tomar, y ni siquiera pensaba en que estaban a punto de huir en la lancha, solo quería encontrar a Rose.
Después de unos minutos, llegó hasta cierto lugar, donde se arrodilló al encontrar la blusa que cargaba Rose. Esta estaba totalmente manchada de lodo y sangre, además de rota.
HyunJin sostenía aquella prenda con sus temblorosas manos, mientras veía hacia todos lados. Comenzó a sollozar en alto, pegando la prenda hacia su pecho.
- Ro-Rose.... - Cerró sus ojos, dejándose caer sentado sobre aquel lugar lleno de tierra y sangre. - ...¡ahhhh! ¡ahhhh!
No le importaba gritar y llamar la atención de aquel monstruo, ya no le importaba nada. Rose, su Rose. La había perdido, y jamás tuvo la oportunidad de decirle cuanto la amaba.
- ¡Noooo! ¡Noooo! - arrugó aún más aquella destrozada prenda, manchando su camiseta con esta. - ¡Maldito! ¡Eres un maldito Jimin!
HyunJin se puso de pie, dejándose llevar por la ira y dolor. - ¡¿Por qué no das la cara imbecil?!
- Creí que preferirías ver la cara de tu amada - aquella espantosa voz, lo hizo voltear hacia el lugar donde provenía. - por eso la traje para ti.
Jimin tenía la cabeza de Rose en sus manos, sostenida de los pocos cabellos que le quedaban. Entonces la alzó para que HyunJin la viera.
Hyunjin soltó un jadeo ahogado, sintiendo como la bilis subía por su garganta, ocasionandole tremendas ganas de vomitar. Sostuvo su estómago, cayendo de rodillas otra vez al suelo.
- Oh ¿qué pasa? No pensé que te diera asco volver a verla. - rió Jimin.
HyunJin tuvo una arqueada cuando ya no pudo resistir sus ganas de vomitar, y así sucedió. Quedó con la cabeza casi clavada al suelo, inhalando y exhalando. Sus ojos lagrimeaban sin parar. El dolor y el enojo invadiendolo.
Entonces, miró hacia Jimin otra vez, tratando de no centrarse en la cabeza de Rose. - Te voy a matar, maldito. Te mataré. ¡TE MATARÉ!
Jimin sonrió. - ¿En serio? Quiero ver como lo intentas, tengo mucha curiosidad.
HyunJin apretó sus puños. Sí, ya no le importaba nada, ese monstruo ya no era Jimin, su amigo, y había matado al amor de su vida, no le importaba morir.
Tomó una puntuda rama de árbol que estaba por allí, y fue corriendo hacia Jimin, intentado aunque sea herirlo en cualquier sitio y ganar algo de tiempo y ventaja, pero, obviamente jamás iba a poder contra él, solo que el dolor e ira no lo dejaron recapacitar.
- ¡Ahhhhh! - gritó, mientras corría sin detenerse hacia él, apuntando en su cara.
Jimin lo miró atento, y entonces HyunJin se detuvo involuntariamente. Miró a Jimin, quien sonreía, moviendo sus garras y mesiendo la cabeza de Rose.
- Al menos lo intentaste, eso es admirable. - dijo Jimin.
Las rodillas de HyunJin cayeron al suelo, dejando de tener control en su cuerpo. - ¡Déjame imbecil! - la mano que tenía aquella rama puntuda, se levantó, apuntando hacia él mismo.
- Podrás estar con ella - se burló Jimin, mesiendo la cabeza de Rose más cerca de HyunJin.
Jimin volvió a mover su mano, haciendo que HyunJin se clavara él mismo aquella rama. La metió en su boca, rompiendo sus labios de inmediato ante el grosor y las astillas que la rama tenía. Los gemidos y gritos de dolor de HyunJin, eran ahogados. Siguió clavandose la rama más profundo, su cuerpo retorciéndose de dolor, pero incapaz de caer al suelo.
La punta de la rama atravesó su cabeza, saliendo por la parte del cerebelo. Entonces, el cuerpo de HyunJin cayó hacia atrás, teniendo leves arqueos y manteniendo los ojos abiertos, los cuales estaban rojos por la hemorragia interna. Sangre salía por su nariz, orejas, y boca.
Jimin se acercó, y tiró la cabeza de Rose al lado del inerte cuerpo de HyunJin.
- No me lo agradezcas. - Había sido tan divertido y relajante presenciar aquella muerte. Tenía ganas de ver más.
La tarde estaba cayendo, y con ella, toda esperanza que tenía Yoongi de librarse de aquel monstruo.
Al menos ya no estaba en aquel lugar, rodeado de carne podrida y muerta. El solo recordar aquella imagen y olor lo hacía arquear de asco.
Se mantenía hecho bolita, mientras temblaba y sollozaba. No quería volver a presenciar la muerte de otro de sus amigos. No quería.
Pero, ¿qué podía hacer? El monstruo en el que Jimin se había convertido tenía mucho poder y fuerza. Por el simple hecho de que jugaba con su mente haciéndole ver y creer algo inexistente, era demasiado como para poder contra eso.
- Eso es...
Entonces, algo se le vino a la mente a Yoongi.
No lo había matado aún, porque le gustaba jugar con él, y Yoongi obviamente no actuaba bajo su voluntad porque era manipulado, y si...¿y si Yoongi actuaba por voluntad propia? ¿Podría acercarse a él de igual manera? Yoongi creía que si.
Tenía que intentarlo, después de todo no tenía nada que perder. Una última esperanza había venido hacia él.
Limpió sus lágrimas de manera brusca y se levantó lentamente de aquel lugar. Su cuerpo estaba muy lastimado y adolorido, pero suspiró y caminó cojeando, hasta llegar a una posa de agua, la cual se formaba cuando subía la marea en las tardes.
Se metió en está, hasta llegar a la mitad de su torso, y comenzó a limpiarse lo mejor que podía. Sus heridas ardían por la sal del agua, pero resistió, apretando su labio para evitar gritar.
Minutos después, salió del agua, la cual había quedado manchada de sangre, pero su cuerpo un poco más limpio a comparación de como estaba.
Sus heridas ardían y latian, pero no le prestó importancia, aún más cuando sintió la presencia de Jimin detrás suyo. Respiró hondo, y volteó a verlo.
Jimin alzó una ceja ante lo que veía. - Si. Tu piel se ve mejor así.
Yoongi tuvo la ansiedad de cubrirse, pero no lo hizo, antes bien, caminó sin prisa alguna hasta Jimin, este observando con detenimiento sus pasos.
- Ya me acostumbré a estar desnudo, solo quería limpiarme. No quiero que juegues con mi mente, no es necesario, puedo ser yo mismo ante lo que deseas.
Jimin caminó alrededor de Yoongi, pasando su mano por el brazo de este. Yoongi sintió un temblor ante las puyas recorriendo su piel.
- ¿Ah si? ¿Y qué deseo, según tu?
- Complacerte con mi cuerpo. - Yoongi vio de reojo la seria expresión de Jimin. El monstruo pasó una de sus garras por la ranura del trasero del Yoongi, haciéndolo jadear.
- Ya hice realidad ese deseo.
- Pero jugando con mi mente, aún no sabes el placer que yo puedo hacerte sentir de verdad.
- ¿Por qué quieres demostrarmelo? - rió Jimin. - ¿De verdad quieres intentar manipularme, simple humano?
- Un simple humano que deseas - susurró Yoongi.
Jimin sonrió. - Creo que me subestimas. No deberías.
- ¿Qué tengo que hacer para demostrarlo?
- Mnmm...nos entendemos ahora. Eso es fácil.
Entonces, una daga apareció en la mano de Yoongi, haciendo que se sorprendiera. - ¿Qué hago con esto?.
- Complacerme. - Yoongi frunció el ceño. Estaba confundido. - Iremos con tus amigos.
Taehyung le había quitado las llaves de la lancha a Nam Joon, después de la discusión que tuvieron.
Hoseok y Taehyung le habían dicho que querían esperar un momento más por si acaso HyunJin regresara con Rose, pero Nam Joon no quería, y estaba dispuesto a irse sin ellos. Pero entre los dos, lograron atrapar a Nam Joon y tomar las llaves.
A causa de su pierna lastimada, Nam Joon no podía defenderse ni hacer mucho para ir en contra de Hoseok y Taehyung, así que se sentía impotente y enojado.
- Son unos maltidos - susurraba Nam Joon, sentado en la arena, con sus mejillas mojadas por las lágrimas. - ¡¿Por qué tengo que morir a causa de esos dos?!
Hoseok se encontraba de espaldas, viendo hacia el interior de la isla, haciendo caso omiso a lo que decía Nam Joon, mientras Taehyung apretaba las llaves en su mano y vigilaba a Nam Joon.
- Si fueran tus amigos Niall y MinJi también tratarías de esperarlos - respondió Taehyung.
- ¡Pero no lo son! ¡No lo son! ¡Ellos están muertos! - sollozaba Nam Joon - ¡Y si no nos vamos también lo estaremos nosotros!
- ¡Ya cállate Nam Joon! ¡Cállate ya! - Taehyung pateó un poco de arena en el cuerpo de Nam Joon.
Nam Joon estuvo a punto de levantarse y darle un buen golpe a Taehyung, importandole poco su pierna lastimada, pero se detuvo en seco. Su mirada centrándose detrás de Taehyung. La expresión de Nam Joon era de asustado e incrédulo.
- T-Tae... - tartamudeo.
- ¿Qué sucede? - Taehyung volteó para ver que es lo que había dejado así a Nam Joon, pero al hacerlo, recibió una puñalada en el vientre bajo.
Los ojos de Taehyung se quedaron abiertos y perdidos. No pudo pronunciar ninguna palabra, ni mucho menos gritar.
- Y-Yoongi - susurró Nam Joon, mientras retrocedía. Prácticamente estaba viendo a un fantasma, el cual había apuñalado a Taehyung, quien se supone era su amigo.
Hoseok volteó enseguida ante el susurro de Nam Joon, quedando incrédulo y estático ante lo que veía.
Yoongi sacó la daga del vientre de Taehyung, dejando que el cuerpo de este cayera de rodillas, y en segundos cediera por completo. Taehyung solo cubría con su mano aquella grave herida. Su vista centrada en Yoongi.
- S-sé que n-no eres t-tu... - dijo por último, antes de ir perdiendo la conciencia.
Yoongi apretó la daga en su mano manchada de sangre, tembloroso y sintiendo como la conciencia y dolor por lo que le había hecho a su amigo, lo carcomia por dentro. Pero no podía hacer nada en contra de eso.
- Yoongi, por favor, si eres tu, no lo hagas, somos tus amigos, no te dejes manipular por ese monstruo - dijo Hoseok, sollozando y retrocediendo, pero al querer dar la vuelta e intentar escapar, frenó. Jimin bloqueaba su paso.
Hoseok cayó de rodillas en la arena, llorando más fuerte. - ¡Por favor! ¡Basta! ¡Jimin! ¡Yoongi!
Nam Joon solo observaba el horizonte en el mar, resignandose a lo que le esperaba en cuestión de minutos.
Jimin dirigió su mirada a Yoongi, quien al instante, pasó encima del agonizante cuerpo de Taehuyng, y la vez rosando la daga por el hombro de Nam Joon, ya que tenía su mano estirada y caída. Nam Joon sollozó, encogiéndose cuando sintió la punta de la daga.
Después de unos pasos, Yoongi llegó hacia donde se encontraban Hoseok y Jimin. Hoseok dio un leve grito, pues creyó que Yoongi lo iba a apuñalar, pero pasó de largo, quedando frente a frente con Jimin.
- ¿Te gustó? - preguntó Yoongi.
Jimin sonrió. - Mucho.
La ronca y horrible voz de Jimin, hizo que Hoseok se encogiera en su lugar, tapando sus oídos y cerrando sus ojos.
Yoongi sonrió, y llenándose de valor y coraje, subió una de sus manos y la envolvió en el cuello de Jimin, lastimandose con sus puyas, las cuales ignoró, y lo inclinó hacia él para cubrir sus labios con los suyos.
Nam Joon desvió la mirada hacia ellos, quedandose asqueado y anonadado ante lo que veía. Jimin prácticamente se comía la boca de Yoongi. Sintió arqueadas, de tan solo ver como Yoongi pasaba su mano sobre la ensangrentada piel llena de puyas de Jimin.
Las garras de Jimin pasaron por la espalda baja de Yoongi, jadeando roncosamente. - Te he complacido - susurró Yoongi encima de su boca, pasando intercaladamente la punta de su lengua sobre la barbilla de Jimin.
- Dame más - le respondió Jimin, volteandolo hacia Hoseok, quien gimió de miedo al escuchar la tenebrosa risa del monstruo.
Yoongi tragó grueso y apretó la daga en su mano, mientras que con la otra, quitó la pegajosa sangre que había en sus labios y mejillas. Hoseok abrió sus ojos, sollozando.
- Yoongi, Yoongi, por favor, no lo hagas, Yoongi... - rogaba Hoseok. Nam Joon tapó su boca para callar sus sollozos, al ver como Hoseok rogaba a los pies de Yoongi y del monstruo.
- Hazlo - susurró Jimin en el oído de Yoongi. Entonces este, apretó sus dientes y alzó la mano con la daga, apuntando al cuello de Hoseok. Nam Joon cerró los ojos, cubriendo sus oídos ante los gritos suplicantes de Hoseok.
Yoongi enterró la daga, lo más profundo que su mano y valentía le permitió, sin importarle donde cayera la puñalada.
Un ahogado y ronco gruñido hizo temblar a todos. Yoongi lo ignoró subiendo más la daga. La sangre comenzó a chorrear como cascada, espesa y negra.
Hoseok salió del transe en el cual estaba, y retrocedió arrastrándose en la arena, ante tal espantosa escena. Yoongi había clavado la daga en el pecho de Jimin, la cual rasgó hasta uno de sus pectorales.
Con la poca fuerza que aún le quedaba, Yoongi soltó la daga, empujando el monstruoso cuerpo, el cual cayó hacia atrás, entonces sin quedarse viendo ni un segundo más, corrió hacia Nam Joon, quien también estaba estupefacto.
- ¡Nam Joon! ¡Las llaves de la lancha! ¡Las llaves! ¡Las llaves! ¡Tenemos que irnos ahora! - le gritó, mientras lo sarandeaba de los hombros.
Nam Joon volvió en si, y empujó a Yoongi, para ir hacia el ya inerte cuerpo de Taehyung y quitar las llaves de su mano. Sin decir nada, corrió cojeando hasta la lancha, siendo seguido por Yoongi y Hoseok, quien aún seguía impactado, pero con ganas de salvarse.
Al subir a la lancha, Yoongi se arriesgó a mirar hacia atrás, viendo el cuerpo de Jimin, el cual seguía en el suelo, con la mano en la daga.
- ¿E-está muerto? - susurró Hoseok, incapaz de poder ver a Yoongi a la cara.
- N-no lo sé, solo vayamos de aquí, ¡r
ápido!. - Yoongi apartó la vista sollozando y abrazándose, ignorando el cuerpo de Taehyung.
Nam Joon tragó grueso, retrocediendo y arrancado la lancha, sin evitar ver el cuerpo del monstruo, el cual extrañamente había cesado, pero no se quedaría a averiguar si había muerto o no.