Ya había pasado un mes de vacaciones, no solíamos salir de viaje con mis hermanas, pues obviamente no teníamos el dinero suficiente. Durante el año escolar intentaba juntar la mayor cantidad de dinero posible, así en el verano podía disfrutar, pero a pesar de no tener lo suficiente para llevar de viaje a mis hermanas, siempre que podía las llevaba a algún tipo de atracción muggle.
Ese día Penny y Charlotte estaban muy insistentes en que las llevara a un nuevo parque de atracciones muggles, que habían visto por la televisión.
-Por favor Sissy, llévanos ¿sí? - Ambas empezaron hacerme ojitos de perrito para convencerme.
Rei ante sus actos y obviamente no pude negarme.
Cuando llegamos al lugar, había demasiada gente y la cantidad de atracciones eran infinitas. Ya me imaginaba lo que me esperaba, todo el día haciendo filas para subir a los juegos.
Compramos varios tickets e íbamos de una atracción a otra. Estábamos en un puesto de embocar un aro en la botella para ganar un peluche, con Charlotte competíamos por quien ganaría primero, mientras Penny estaba a nuestro lado comiendo una manzana caramelizada.
Punto de vista de Penny
Cuando termine de comer mi manzana, busque con mi vista el tacho de basura más cercano.
-Ya vuelvo- grite mientras corría al tacho que estaba a unos cuantos metros lejos de mí.
Luego de arrojar las servilletas y el palo que sostenía la manzana, me distraje al ver un puesto en donde una señora se encontraba dibujando una mariquita en la cara de otra chica. Me acerque a observar y la señora noto mi expresión de intriga.
-Hola pequeña, ¿Te gustaría que te pinte tu carita? - pregunto mientras me mostraba diferentes tipos de diseños para escoger.
Asentí rápidamente mientras sonría y apuntaba el diseño de unicornio.
-Son £4- Respondió la señora mientras limpiaba sus brochas.
Observe mis bolsillos y ya no me quedaba dinero del que Isa me había dado, me lo había gastado en esa manzana caramelizada.
Mis ojos se pusieron llorosos y la señora se percató de eso.
-Lo siento pequeña.
Di media vuelta para irme a buscar a Isa, pero choqué mi cabeza con la pierna de un chico, eso hizo que mi cuerpo tambaleara un poco.
-Ups- dije mientras frotaba mi frente.
El chico se agacho para estar a mi altura y sonrió al verme.
- ¿Quieres uno de esos? - pregunto mientras señalaba el diseño de unicornio.
Asentí con mi cabeza e inmediatamente saco de su billetera los £4 y se los entregó a la señora.
-Hágale el dibujo a la niña- Pidió mientras se llevaba una especie de palo a la boca y largaba humo de él, lo que hizo que me causara un poco de risa.
Él sonrió muy levente al escuchar mi risa y se quedó a mi lado mientras pintaban mi cara.
-Yo una vez acaricié uno de estos- dije mientras señalaba el unicornio con mi pequeño dedo.
-Así? - sonrió la señora que dibujaba con el pincel sobre mi cara- Mira acá tengo uno- dijo mientras sacaba de una bolsa un unicornio de peluche.
Solté una pequeña risita.
-No, los de verdad, que viven en el bosque.
-Oh un caballo- río por mi comentario.
-No- negué con mi cabeza algo enojada – Un unicornio, los que hablan.
La señora miro algo extrañada al chico que aún seguía a mi lado. Él soltó humo de su boca y sonrió.
-Niños... mucha imaginación.
La señora asintió restándole importancia a lo que había dicho y yo simplemente rodé mis ojos frustrada.
Minutos más tarde, Sali de esa tienda, de la mano del chico a mi lado.
-Debo buscar a mis hermanas- dije mientras daba pequeños saltos al caminar.
-Y en dónde están?
-Por allí- señale el juego en el que anteriormente ellas habían estado.
Caminamos hasta ese lugar, pero al llegar ellas ya no se encontraban ahí. Miré para todos lados y comencé a llorar.
- ¡Quiero a mis hermanas! - decía mientras múltiples lagrimas caían por mis mejillas.
El chico al notarlo rápidamente intento calmarme, para que mi llanto no se transformara en un espectáculo y empezara a llamar la atención de las personas a nuestro alrededor.
-Yo las voy a encontrar, pero ya cállate, ¿sí? - su comentario no sirvió, mi llanto iba aumentando cada vez más.
El chico miro a todos lados intentando encontrar una solución.
- ¿Ves esos globos? Te compro uno si dejas de llorar.
Mire en dirección a donde su dedo apuntaba y habían unos gigantescos globos de animales que flotaban en el aire. Sonreí al verlos e inmediatamente asentí con mi cabeza, mientras limpiaba mis lágrimas.
Punto de vista de Isadora
-Tiene 4 años, pelirroja, ojos grandes y verdes, vestía un vestido con flores rosas... por favor... solo fueron dos segundos en los que me distraje- hablaba con el policía, mientras intentaba no llorar frente a él, a la vez intentaba no sonar desesperada, pero era claro que lo estaba.
El policía asintió y me pidió que esperara sentada, los nervios me estaban matando, los demás policías fueron puestos en alerta sobre una pequeña de 4 años perdida. Charlotte estaba a mi lado sentada y aunque lo disimulara bien, estaba igual de preocupada que yo.
Solo habían sido 2 segundos, la vi acercarse al tacho de basura, me di vuelta para arrogar otro aro a la botella y cuando volteé de nuevo ya no estaba.
Los minutos pasaban y Penny no aparecía, ya no podía ocultar mi desesperación, les gritaba a los policías que parecían no hacer muy bien su trabajo, cuando de repente sentí como algo me abrazaba la pierna.
- Sissy, ese chico de ahí ¡Me dio un cigarrillo! - rio la pequeña pelirroja.
Me agache rápidamente al verla e ignorando completamente lo que había dicho y la tome entre mis brazos, abrazándola fuertemente sin tener la intención de soltarla. El policía sonrió y ordeno que dejaran de buscar a la pequeña, luego Charlotte se unió a nuestro abrazo.
- ¿Dónde estabas Penny? - pregunte algo molesta, pero a la vez feliz de que estuviera junto a mí. Note al mirar bien su cara que había un dibujo de unicornio, pero estaba bastante borroso y que en una de sus manos traía un hilo del cual flotaba un globo gigante de un león, y en la otra un ¿cigarrillo? - ¿De dónde sacaste todo esto? - pregunte quitándole el cigarrillo de las manos.
Penny comenzó a saltar intentando quitarme el cigarrillo de mi mano.
-Nono, es mío, yo también quiero que salga humo de mi boca como hacia el chico.
- ¿Qué chico Penny? - pregunte arrugando mis cejas y tirando el cigarrillo a la basura.
-El que me compro mi globo y mi dibujito de la cara- respondió mientras observaba la basura algo decepcionada por no encontrarlo.
- ¿Dónde está ese chico Penny? ¿Cómo era? - intentaba que Penny me digiera algo para poder reconocerlo, ¿Quién carajos le daba un cigarrillo a una niña de 4 años?
-Ya se fue, pero era muy muy muy muy muy alto- un pequeño bostezo salió de su boca.
- ¿Y qué más? - pregunte algo desesperada por la poca información que me daba.
Penny levanto sus hombros en señal de no saber nada más. Rodé mis ojos algo frustrada, luego la tome en mis brazos al notar que se estaba durmiendo y le indique a Charlotte que ya nos íbamos.
Caminamos por las calles de Londres, ya era de noche, pero al ser verano había mucha gente. Charlotte iba mirando cada una de las vidrieras diciendo lo mucho que le gustaba la ropa que había en estas, mientras que yo lo único en lo que podía pensar era en que Penny ya está bien y a mi lado.
Seguíamos nuestro camino, cuando Penny, quien iba en mis brazos, con su cabeza recostada en mi hombro, hablo:
-Ese... ese el chico- sonreía mientras apuntaba a un chico quien estaba dentro de un bar tomando algo con sus amigos.
Voltee rápidamente en su dirección.
....
¿Nott?
- ¿Ese no es el chico de la estación? - pregunto Charlotte al notar quien era el chico a quien Penny apuntaba.
-Si...
Nota de la autora:
Holaa, ¿Cómo están? Espero que bien y espero que estén disfrutando mucho la historia.
Pasaba a avisarles, que a partir de ahora, voy a subir capítulos solo los fines de semana y quizás algunos días los viernes también, pero no se preocupen voy a intentar subir bastantes y van a ser capítulos muchos más largos.
Besos!