Si le preguntarás a Zacil acerca de sus deseos sobre ser una semidiosa ella te hubiera respondido con un "No gracias, así estoy bien" más rápido que las entregas de Hermes. Si ella pudiera haber elegido, Zacil preferiría mil veces mantener su vida como estaba antes por que vamos, era feliz con su familia en Oklahoma.
Su mamá la amaba, su padrastro aun no descubria que Zacil no era su hija biológica y su hermanastro no la odiaría, ella seguiría siendo feliz.
No era como si en el campamento mestizo ella fuera totalmente infeliz, si no que podría ser mejor.
El día que descubrió a su verdadero padre, fue el peor en su vida, ella fue perseguida por una empusa qué casi acaba con la vida de su madre. Afortunadamente Ares escucho las plegarias de Sharon Stronghold y envío ayuda, sin embargo Zacil quedo aterrorizada de por vida.
Temía de los monstruos qué acechaban el mundo, por lo tanto dejo varios episodios post-traumaticos en ella. Zacil no podía siquiera tocar una espada o cualquier arma sin tener flashbacks acerca de ese día y nadie en el campamento entendía que sucedía, el único que pareció comprender su situación fue Luke Castellan quien poco a poco la ayudo a superar aquel trauma.