Escribi este libro acerca de la vida de una vieja amiga que conoci en el pasado y yo sentia que su vida tenia que ser contada. La admiro demasiado. Es una gran amiga. Personas como ella no se encuentran a la vuelta de la esquina. No mencionarè el nombre real de mi amiga ya que quiero mantenerlo en el anonimato y por respeto a su privacidad y respeto a ella.
Con esa persona entendi y aprendi que la siguiente frase tiene mucha razòn y mucho sentido y es la siguiente: La depresiòn tiene rostro, se parece mucho a una persona con sonrisa.
Me siento muy agradecida y muy feliz por todo el apoyo que ha recibido este libro. Sin ustedes este proyecto no hubiera sido posible. Se los agradezco mucho. Los llevo y los llevare siempre a todos en mi corazòn.
Ahora mismo siento muchas emociones y sentimientos porque termine este libro. Siento alegria, tristeza y muchas otras emociones. Pero me siento muy feliz ya que escribir este libro fue un largo y hermoso viaje.
Panamà🇵🇦 los ama infinitamente. Los quiero mucho. Y recuerden lo siguiente:
•El suicidio no es la soluciòn. Solo Dios tiene el poder de dar y quitar la vida.
•No estan solos.
•Vas a tu ritmo. Vas a estar bien. Estas a tiempo y en tu tiempo. Cada ser humano tiene su velocidad.
•Esta bien no estar bien.
•No es de debiles buscar ayuda profesional en la salud mental.
•La salud mental es igual de importante que la fisica.
•Eres una creaciòn maravillosa de Dios.
•Eres real, no perfecto. Todos cometemos errores, somos humanos. Pero hay que ser lo suficientemente valientes y bondadosos para corregirlos.
•Dios te ama mas de lo que imaginas. Un alma vale màs que el mundo entero.
Asi que quierete, respetate, hablate con cariño, tratate con cariño, se tu mismo y sobre todo amate a ti mismo y a ti misma. Eres ùnico y ùnica en este planeta. No hay una persona igual que tù en este mundo.
Si no sabes como amarte a ti mismo y a ti misma solo tienes que empezar a ser tu mismo y tu misma. Ser tù yo real.
Asi que me despido con esta frase: NO AL SUICIDIO, SÌ A LA VIDA.
Dios les bendiga a todos y a todas.
Con cariño y amor,
Argelis Yisel