La Slytherin se sentía extraño por ver como Umbridge la trataba de la mejor manera posible, aunque lo hacía de mala gana; era claro que aquella platica con Charlotte había servido de algo, porque Dolores Umbridge parecía forzada a no hacer algo contra Harry, ____________ y Regulus, pero parecía que buscaba una excusa para tener que hacerlo.
Ahora los tres estaban esperando a Charlotte en una aula vacía, ninguno decía nada, hasta que la puerta se abrió, dejando ver a la mujer en un estado de seriedad. Se puso frente a ellos, mirándolos unos segundos, haciendo que Harry y su hija se sintieran culpables por no haberle dicho nada.
—Sus manos —les dijo a los tres. Así que los tres, sin quejarse, le mostraron el dorso de sus manos, donde estaban aquellas cicatrices, haciendo que frunciera el ceño—. ¿Por qué no dijeron algo?
—Bueno... yo... —empezó a balbucear la chica.
—No queríamos ocasionar molestia —dijo Harry algo apenado, pero con aun más cariño a la mujer por irlos a defender.
—Chicos —hablo ahora con calma—, de verdad que si algo les ocurre, prefiero que me digan. Yo los tratare de apoyar y cuidarlos lo mejor que puedan —miró a su hija y a Harry—. A los tres —miro a Regulus.
El corazón de Regulus empezó a latir muy rápido cuando escucho eso; él había sido quien le dijo a Charlotte sobre los castigos, porque no quería que ___________ sufriera más, pero jamás pensó que iba a defenderlos, que iba a defender a los tres; aquello hizo que creciera un cariño maternal por Charlotte Manson, un cariño que no había sentido desde la muerte de su madre.
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Para el primer fin de semana de octubre, ___________ había ido a la reunión a la cabeza de puerco que estaba en el pueblo de Hogsmeade junto con Regulus, que por alguna extraña razón fue al único que le había confiado en que fuera y sobre todo porque ya tenía la idea de que sería. Los que estaban en la reunión no estaban muy cómodos con la idea, pero no dijeron nada cuando la Slytherin los miraba mal.
Una vez que firmaron el pergamino, los dos se fueron de ahí, era mejor regresar con sus amigos antes de que los buscaran y los vieran con todos aquellos chicos.
—Y al final convenciste a Potter a enseñarnos —le dijo Regulus mientras caminaban por el pueblo en buscando de los otros tres Slytherin's.
—Yo solo volví a hablar con él y darle las opciones de enseñarnos o dejar que Voldemort nos matará —simplifico la platica que había tenido con Harry para que aceptara—, creo que la decisión era clara.
Regulus solto una pequeña risa, amaba como ___________ podía convencer a la gente con palabras o les explicaba que ocurriría si no le hacían caso. Pero aquello no había resultado también como esperaban, porque al día siguiente, en las cuatro casas, pegados en los tablones anuncios, se encontraba un nuevo letrero.
_________ miraban aquel anuncio con cierto temor. ¿Cómo se puedo haber enterado tan rápido la cara de sapo?, pensó.
—Supongo que tendremos que hablar con la profesora Umbridge para que dejen jugar a Slytherin —les dijo Draco a sus amigos—. Vamos, Stanley.
Ambos chicos fueron de los primero en salir.
—Vayamos a desayunar —sugerido Blaise a las chicas.
Lo siguieron, mientras empezaban a hablar de que más iba a cambiar Umbridge, pero ___________ no le prestaba atención, en realidad miraba de reojo por el pasillo, mirando a los chicos que habían ido a la reunión. A lo lejos vio a Harry, Hermione, Ron y para su sorpresa a Regulus juntos. Se excusó con sus amigos diciendo que se la había olvidado algo y se acercó a los cuatro Gryffindors.
—Alguien nos hecho de cabeza —dijo Ron.
—No lo creo —negó con la cabeza Hermione.
—¿Por qué no? —pregunto Harry—. No pueden decir que todos son fiables —haciendo que ambas chicas de miraran.
—Yo nunca he pensando eso —dijo la Slytherin.
—El pergamino que firmaron, bueno... —empezó a decir Hermione.
—Le puse un hechizo —terminó de decir __________, llevándose mirara de sorprenda por pete de Harry y Ron, mientras Regulus la miraba orgulloso—. Si alguien nos delataba, bueno... lo sabrán si eso ocurre.
—A veces me das miedo —le murmuró Ron, haciéndola sonreír.
—Solo actuemos normal —les dijo la castaña—, y sin nadie del grupo fue, solo debemos de ir con cuidado en esto —los cuatros Gryffindors asintieron con la cabeza—. Vamos a desayunar.
Ella empezó a caminar rumbo al Gran Salón, Regulus no tardo en ponerse a su lado mientras caminaban a la mesa de Slytherin.
—Me encanta cuando diriges a la gente —le dijo con una sonrisa.
—Y yo ya me había olvidado de tu enamoramiento por mí —respondió mirandolo desconcertada—. Y hay que dejar que tu amor por mi sea un secreto.
—No creo hacerlo —confesó aun sonriendo.
—¿No crees hacer que? —preguntó Zabini mientras los dos chicos se sentaban con él y Pansy.
—Que Regulus esconda su amor por mí —respondió ___________ my normal mientras se servía su desayuno.
Regulus sintió las mejillas un poco calientes, mientras Blaise y Pansy se empezaban a reír de él, sintiéndose ofendido.
—Mi amiga no tiene gustos tan pésimos —le dijo Pansy.
—Lo mismo diría de Blaise, pero... —Pansy se puso roja, mientras Zabini se ahogaba con su bebida, haciendo reír a ____________.
—Tenemos nuestros permiso —dijo Draco llegando junto con Stanley—. Podremos jugar quidditch sin problema —sonrió.
—¿Por qué esas caras? —pregunto Stanley al notar como Pansy y Blaise miraban a Regulus, quien les sonreía.
—No les gusta cuando les regresan algo —respondió ____________.
Los días siguieron en Hogwarts, mientras Dolores Umbridge seguía haciendo de las suyas como la Suma Inquisidora, siendo una de ella el no querer darle el permiso al equipo de Gryffindor. ___________ estaba leyendo la carta que sus padres le habían mandado, donde la regañaban por aquella reunión en la cabeza de puerco; era claro que la carta carecía de sentido, para quien quisiera leerla no le entendiera, era una forma de comunicarse que ella y Remus habían creado.
Regulus caminaba por el pasillo, hasta que la vio sentada en el patio leyendo su carta, así que sin esperar se acercó y se sentó a su lado.
—Por tu cara pareces molesta —le dijo.
—A veces me da miedo que sepas que significa cada uno de mis gestos, ¿sabes? —suspiró mientras él sonreía—. Solo son mis padres. Enojados por hacer un grupo de "rebelión" junto más alumnos —aquello lo hizo reír—. Y dijeron que tú tampoco te metas en problemas —aquello hizo que dejará de reír.
—Al menos sé que le importo a alguien —soltó cansado.
—¿Canuto aún no te ha mandado nada? —preguntó ella frunciendo el ceño.
—No —respondió seco—. Pero tus padres sí —sonrió al ver que la chica la miraba desconcertada—. A ellos parece que si les importo.
—¿Por qué hablas con mis padres?
—Es entretenido —alzo los hombros—. Parecen que me quieren adoptar —bromeo.
Stanley buscaba a _____________, habían quedado en ir a la biblioteca a estudiar, pero a mitad del camino la vio, la vio hablando y riendo con Regulus Black, lo cuál no entendía. Recordaba todas las veces que se habían peleado, insultado e incluso a llegar a lanzarse hechizos y hacerse bromas pesadas, pero verlos de aquella manera. Necesitaba saber que había ocurrido con esos dos, ya no le estaba agradando aquella amistad.
—Hey, chicos —los saludos y sentó con ellos o en realidad en medio de ellos—. ¿Qué hacen?
—Oh, nada importante —le respondió la chica mirando divertida a Regulus—. ¿Tú que hacías?
—Te buscaba, iríamos a estudiar —le recordó, haciendo que la chica se sonrojara.
—Lo olvide —confesó ella—. Estaba leyendo la carta de mi padres y Regulus llego...
—¿A molestar? —se aventuro a preguntar, haciendo que Regulus lo mirará mal.
—En realidad no —respondió ella desconcertada con aquella actitud nueva—. Solo charlábamos un poco —alzo los hombros.
—Para que no volviera de la madriguera de la biblioteca donde siempre la tienes —habló Regulus con una sonrisa sarcastica.
Ambos chicos se miraban mal, haciendo que ____________ se sintiera incomoda. Le era muy extraño ver a Stanley portarse de cierta forma protectora.
—De acuerdo —habló ella intentando salir de esa situación, miró a todos lados hasta que vio a Harry caminar solo—. Yo tengo que hablar con Harry.
Se levanto rápido de su lugar y camino directamente a Harry, que se desconcerto por completo cuando la castaña lo jalo del brazo y lo hacía caminar lejos ahí.
—Deja de aparentar que te importa ___________ —le dijo Stanley, dejando de ser amable.
—Ella me importa —respondió serió, haciendo reír al chico.
—Eso no decías los años anteriores, cuando ambos peleaban —se levanto de la banca—. Te lo advierto Regulus. Tal vez le empieces a caer bien a los chicos, incluso tengas amigos nuevos en Gryffindor, pero dime, ¿cuánto te durara el ser amable y volver a ser la horrible persona de antes?
El ojigris se tensó al oír eso, mientras Stanley se retiraba del lugar.
Tenía razón, él era horrible con todos y era algo que no iba a negar, pero también quería dejar se serlo. Tal vez no era e mismo Regulus, pero intentaba mejorar, ser mejor persona, no quería volver a sentirse solo en su época de Hogwarts.
—Regulus... —escucho una voz.
El pelinegro alzo la vista, mirando a Ron, que se veía entre indeciso o no el sentarse a su lado, pero lo hizo cuando Regulus le indico con un gesto con la cabeza que podía hacerlo.
—¿Ocurre algo? —le preguntó Regulus.
—Eso mismo te iba a preguntar —se aventuro a decir—. Escuche tu conversación con Stanley sin querer; y con ____________ también. Pero fue porque estaba tirado ahí escondido tratando de dormir —habló rápido, haciendolo reír.
—¿Por qué estabas escondido? —preguntó Regulus con diversión.
—Oh, pues verás. Hermione suele ser intensa con estudiar para los examenes y ahora con los TIMOS —suspiro cansado—. Quería un respiro —el pelinegro asintió con la cabeza—. A Stanley no parece agradarle que te lleves con ___________.
—Ni a Potter —agregó Regulus—. Draco lo esta aceptando.
—Bueno, pero Stanley se veía celoso —rasco su nuca—. Y tal vez dijo todo eso por celos —Regulus lo miró con cierta ternura al ver a Ron tratando de explicarle.
—Pero tiene razón —suspiró—. Soy una horrible persona.
—Pero ya no lo eres —menciono Ron con el ceño fruncido—. En vacaciones nos demostraste ser alguien agradable. Ya no nos dices de cosas, dejaste de pelear con todos, a mis hermanos les agradas, defendiste a ___________ de mi horrible madre e incluso me escuchas a mí en las noches que tengo pesadillas —murmuro lo último sonrojado y mirando al suelo.
Regulus lo miró aún con más cariño; recordando como el Ron del futuro, ambos eran amigos muy cercanos y sentía mucho cariño por él, cosa que le estaba volviendo a transmitir ahora el Ron Weasley de 15 años.
—Gracias por pensar eso de mí —le dijo con sinceridad—. Y Ron —el pelirrojo lo miró—, perdoname todas aquellas veces que pude ser un completo idiota contigo.
—Para eso son los amigos, ¿no? —le dijo con cierta sonrisa de timidez, contagiandosela a Regulus.
Harry no entendía porque su amiga se lo había llevado de aquella forma, hasta que se detuvieron mitad de un pasillo.
—¿Qué ocurrió? —pregunto el de lentes.
—Bueno, huyó de una situación en la que no quería estar —le respondió, pero dejo a Harry aún más desconcertado—. Stanley y Regulus parecían que iban a pelear.
—¿Por qué pelearían?
—Creo que ambos estaban celosos porque le hablo al otro —pensó unos segundos.
—Bueno, es que no es normal verte a ti y Regulus hablar sin que se quieran matar —alzo los hombros—. Además, si a ti te gusta Stanley, ¿por qué no defenderlo a él?
____________ se sonrojo, en ese caso tenía razón. Le gustaba Stanley Morcklin, eso lo tenía claro, pero Regulus Black, si era sincera, era su debilidad que nadie sabía; la chica había sentido cierto flechazo cuando lo conoció la primera vez, debía de admitirlo, tenía cierta debilidad por los chicos callado, serios y con cara de que no le hablen.
Pero cuando intento hablar, él la mando al carajo, como a todos lo que se le acercaba, pero el hecho de que ahora tuviera un cambio de actitud le hacía desenterrar aquel sentimiento en ocasiones.
—Creo que esa chica se te queda viendo —le dijo tratando de evitar el tema. Harry miró donde le indicaba su amiga, sonrojándose de inmediato—. Uy, te gusta, Cho Chang —se burlo—. Ve hablar con ella.
—No —le dijo asustado—. Lo arruinare —se arrepintió al instante de decir eso, porque en el rostro de su amiga apreció una sonrisa radiante.
—¡Oye, Chang! —le habló ___________—. Harry quiere hablar contigo —y miró a su amigo—. Suerte, Potter —le sonrió alejandose y dejándolo con aquel dilema amoroso raro.
Volvió de nuevo donde había dejado a Stanley y Regulus, llevandose con la sorpresa que Regulus ya no estaba con Stanley, sino con Ron, conversando y riendo; su madre tenía razón cuando le dijo que Regulus necesitaba amigos.
—Hola, __________.
—Hola, Lunita Bonita —saludo al ver a la Ravenclaw acercándose a ella.
—Es raro ver a Regulus con Ron —dijo mirando a ambos chicos.
—Ni me lo digas —sonrió volviendo a mirarlos también.
—Aunque también es raro verlo contigo —la miró—. ¿Son novios? —la castaña se atraganto un poco con su saliva al oír esa pregunta.
—No —respondió con voz algo aguda—. Es algo así como mi amigo.
—Él me dijo que le gustas —comentó con una sonrisa.
—¿Qué le gusto? Espera —la miró desconcertada—. ¿Desde cuando hablan tú y Regulus Black? —frunció el ceño.
—Oh, es mi amigo —respondió feliz—. Hace un año me defendió de unos Slytherin. Pero solo somos amigos, yo no te quitaría a tu novio —le dijo divertida.