Se había decidido poner una barricada en la entrada del edificio para poder estar mas seguros, mordía mi pulgar viendo como los vecinos ayudaban entre si.
—¡Esperen! Mi hija aun no volvió. Si algo le pasa a Min-ju, ¡será su culpa!
—Pongan la barricada.
La señora se acerca a nosotros y toma su teléfono mostrando el GPS.
—Esta aquí, iré a buscarla rápido, ¿podrían abrir?
—No— Eun-hyuk responde cortamente, pero la señora lo avienta enojada, hago el amago de intervenir pero el toma mi muñeca deteniéndome.
—¿Quién eres para decir que no? ¿Sabes quien soy yo?
—No puedo arriesgar este lugar.— La señora iba a seguir hablando pero un fuerte sonido nos interrumpe.
Tomo mi teléfono del bolsillo de mi trasero y lo prendo viendo que había una notificación de una alerta de emergencia.
—¿Es una epidemia?
Sigo leyendo escuchando de fondo el lloriqueo de la señora frente a mi.
Los que presenten estos síntomas deben aislarse: Sangrado nasal, desmayos o comportamiento agresivo.
—Estamos jodidos— murmure mientras veía los últimos mensajes de mis amigos de la banda.
—Vayamos a nuestra casa, ¿Qué hacemos sentados acá?— Hablo el chico que tenia unos pantalones naranjas.
—¿No vendrán a rescatarnos?
—¿No ves esto?— Responde con otra pregunta.— Estamos perdidos.
—El país no podrá caer así, ¿no es cierto, soldado?
—Ah, si, tienes razón— Responde desconcentrado.— Si se calman y esperan...
—¡Esperare en mi casa!— Cerré mis ojos ante aquel grito.
Odiaba que gritaran.
—Debe de haber un refugio de emergencia cerca.
—Debemos subir por Eun-yoo— comente tocando mi frente— e ir por mi arco, nos puede servir.
—Tienes razón, pero no sabemos si hay infectados o no.
Comenzaron a hablar todos juntos dirigiéndose a la puerta de las escaleras, pero el soldado y otra persona se los impidieron, luego llego el señor pequeño con un paraguas color rosa y los amenazo, miro en esa dirección aun estando recargada en la pared y con Eun-hyuk a mi lado, ya que los vecinos comenzaron a alejarse cuando la puerta fue golpeada, y fue abierta dejando salir a un señor un poco sucio y con rastros de sangre.
—¿Es una mordedura?
—Es una mordedura, ¡Lo mordieron!— Y todos se alejan asustados y el solo los mira seriamente, pero no se dio cuenta que el señor pequeño fue detrás de el y le dio con un arma electrizante dejándolo inconsciente.
—¡Le di!
Nuevamente veo hacia la puerta de las escaleras y suelto un suspiro cuando Eun-yoo sale de ahí, Eun-hyuk se saca su camisa de cuadros y se la pone en sus hombros para cubrirla, pero ella se aleja quitándosela.
Nunca me imagine que el mundo realmente se iba a terminar, y de la peor manera, fuera de aquí no había nadie que me importara, mi madre me abandonó, mi padre es un verdadero idiota alcohólico, y las únicas personas que me importaban estaban aquí conmigo encerrados en su edificio.
Miro hacia donde se había ido, y quería y con ella, pero se notaba que quería espacio, suspire y seguí a los demás, quien nos reunimos en una habitación.
—Vivamos juntos hasta que vengan a rescatarnos. Es mejor estar en grupo.
—¿A donde iremos?— Pregunta el señor con lentes.
Verdaderamente no me aprendí los nombres de los vecinos, venia de vez en cuando.
—A la guardería— Responde Eun-hyuk.— Es seguro porque esta lejos de la entrada.
—También seria mejor dormir ahí que aquí— Opine encogiéndome de hombros.
—De ninguna manera, no— La señora que tenia a su hija fuera entra y se niega.
—¿Quién eres para decir que no?—
—Es la directora de la guardería.
—¡Son unos idiotas! Ignoraron mis suplicas, ¡Descarados!
—Es posible que tu hija también necesite la ayuda de alguien— Hablo la bombero.
—Por eso quiero irme, déjenme— Suplica.— Pueden hacer lo que quieran cuando me vaya.
—¿Qué hay de ti? ¿Te parece bien morir? ¿Tienes un plan?— Eun-hyuk la ataco con preguntas— No hay ni internet, ¿Cómo puedes saber donde esta?
—Igual...— Titubeo.
—Primero debes sobrevivir, si no, no encontraras a tu hija.
—Oiga— Hable mientras acariciaba un hombro de mi novio— Debería tranquilizarse, y por favor, ayudemos.
El soldado se acerca y le tiende una botella de agua, pero ella lo tira haciendo que se derrame en el suelo.
—¡Hagan lo que quieran!— Grito retirándose de ahí.
Al final nos fuimos a la guardería para estar mas seguros, por lo que me fui a una esquina de la habitación y me quede esperando con mis audífonos puestos a bajo volumen en lo que fue Eun-hyuk con el señor pequeño y su esposa.
—Me llamo Lee su-ung...
—Vives en el 1305... y tu en el 308— Escucho que interrumpe la señora acariciando su perro.—Yo vivo en el 1009, me llamo on Hye-in.
—Un gusto.
—Soy Ryu Jae-hwan, ¿tienen protector solar?
Muerdo mi labio para evitar reírme.
—No se te vaya a esconder el sol, cariño— Susurro.
—No hace falta, en fin. Soy No Byeong-il, somos vecinos, pero nunca...un momento— El hombre de coleta baja es el siguiente en presentarse— No te conozco.
—No habla— Se refieren a la chica de cabello corto.
—Sabe todo, señora.
—No me digas señora, seguro soy mas joven que tu.
—Oh, ¿y tu como te llamas?, tu, la chica emo.
—¿Perdón?— Me quito los audifonos prestando atencion un poco confundida.
—Es la novia del chico de lentes, la vez pasada los escuche, deberian irse a otro lugar— La dueña del perro me mira.
—Soy Han Jisoo, y si, ese chico de lentes es mi novio— Jugué con un hijo que se estaba saliendo de mi playera.
—¿Cómo un chico como el puede andar con una chica como tu?
Alce mi ceja prestándole atención a la señora.
—Digo... el es un buen estudiante, callado, y tu... pareces salida de la calle.
—Oiga señora— Hable suspirando— Le pido que no se entrometa en mi relacion, no sea chismosa y mejor céntrese en darle de comer a su perro.
La señora me mira ofendida y solamente me limito a volverme a poner los audífonos y salir de ahí.
Vi la silueta de Eun-hyuk sentado viendo las cámaras de seguridad, entro a aquella habitación y paso mis brazos por su cuello abrazándolo y dándole un beso en su sien, y el me recibe entrelazando su mano con la mía.
—Tus vecinos son unos chismosos, se entrometen en la vida de otras personas— Miraba su perfecto perfil, tenia una nariz muy bonita.
—Solo no les hagas caso, pero estoy seguro que les respondiste.
—¿Cómo sabes?
—Te conozco, llevamos tres años— alza su cabeza y nuestros ojos chocan.
—Oh si, ¿pero sabes que es lo mejor? Que ya casi cumplimos cuatro años.
—¿En serio?
—No me digas que lo has olvidado— Me senté en el escritorio donde estaban las cámaras de seguridad frente a el.
—Claro que no, ya tenia todo preparado.— Se levanta del asiento y se acerca a mi poniendo sus brazos a lado de mi cuerpo, un poco nervioso, ocasionando que abra mis piernas y el se mete entre ellas.
—Te creo, por que eres un grandísimo nerd, que nada se te olvida— Sonrió viendo su bonita sonrisa sin mostrar sus dientes.
Su rostro se acerca lentamente a mi, tragando con fuerza, haciendo que nuestras narices chocaran y nuestra respiración fuera una sola, algo que me fascinaba, era que se ponía nervioso cuando se acercaba a mi, tomo el cuello de su camiseta y lo acerco mas haciendo que nuestros labios choquen, me sentía en las nubes cuando sus labios tocaban los míos, era... era como si fuera una droga para mi, me besaba con amor, con gentileza, y me tocaba como si fuera una muñeca de porcelana temiendo que se rompiera.
A el le gustaba que mis brazos estuvieran alrededor suyo, y a mi me gustaba que sus labios estén en los míos.
Lamentablemente el presidente había muerto.
Unas horas después, buscábamos a Eun-yoo, el cual Hyuk estaba un poco desesperado por buscarla, tuve que tranquilizarlo un poco diciéndole que ella estará bien y que a lo mejor se fue al departamento para poder estar sola.
Ella sabia protegerse.
Seguíamos estando en la sala de cámaras de seguridad, ya que la bombera no había regresado, que se supone que fue a arreglar la luz para no estar a oscuras.
—¿Por que no regreso la bombera? ya volvió la luz— Hablo el militar.— ¿No hay una cámara en el sótano?
—La apuntaron hacia allí— Responde el chico a mi lado.
—Le dije que era peligroso— Se entromete Hye-in— ¿No le dije, bom?
—Esperemos un poco mas.
Eun-hyuk vuelve a tomar el Walkie Talkie esperando a que la mujer respondiera, sin embargo el aprieta fuertemente el aparato.
Lo único que hice fue mostrarle apoyo acariciando su antebrazo.
Como ya era de noche, nosotros decimos quedarnos en la sala de cámaras para seguir vigilando, había tomado una hoja y un lápiz y comencé a dibujar dándome cuenta que esta dibujando el rostro de Eun-hyuk, solté una una pequeña risa y comencé a negar.
Definitivamente estaba muy enamorada.
Comencé a parpadear y a bostezar muy seguido, el sueño me estaba ganando, por lo que deje el lápiz de lado y me acomode en el frio suelo cerrando los ojos, que lo ultimo que sentí fue como Eun-hyuk ponía una pequeña cobija cubriéndome.
A la mañana siguiente despierto con el sonido de una fuerte música, me levanto perezosamente viendo a Eun-hyuk frente a una radio tratando de buscar una frecuencia y poder hablar para que los demás del edificio lo escuchen.
De repente ambos nos miramos y escuchamos al escuchar un escandalo y la persiana abrirse. Por lo que ambos corrimos hacia la entrada y ver a los hombres detener a la señora que cuida la guardería.
—¿Qué pasa acá?— Nuevamente grito— ¡¿Que esta pasando?!
—Mira, mi hija esta acá— se acerco con su teléfono mostrando el GPS como aquella noche.
—Bajen la persiana.
—¡No!— Grita desesperada y nuevamente se acerca siendo detenida.—¡Déjenme ir! ¡Esperen! ¡Mi hija esta allá!
Veo a una niña con uniforme escolar corriendo desesperadamente hacia la entrada.
—Joder, lo esta logrando— murmure respirando hondo esperando que llegue.
—¡Min-ju!
—¿No deberíamos hacer algo?
—¡No te detengas Min-ju!— Grite desesperada viéndola caerse.
Doy pasos hacia adelante, para ir a ayudarla, pero soy detenida y quien sale corriendo hacia la salida es el soldado joven, quien corre desesperadamente hacia ella.
Mi respiración se vuelve pesada cuando veo al soldado tambalearse y caer al suelo dejando ver la lengua larga del monstruo de aquella noche atravesando el cuerpo de la niña y alzándola del suelo succionando su sangre.
Abro la boca sorprendida y dirijo mis manos a esta viendo aquella escena.
Escucho el grito desgarrador de la señora al ver el cuerpo inerte de su hija en el suelo.
Sentía la bilis en mi garganta, estaba totalmente impactada, por lo que trague fuerte.
Una niña acaba de morir.
Una niña.
Jisoo adora decir Joder jaja
Yo aviso que no pago terapias, me están dejando en bancarrota.
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Nos vemos en el próximo capítulo, las amo <3.