Capítulo 29: Intervención extranjera
Minsk
Pov Viktor
1 de junio.
"¿Esto es todo?
Frente a mí había un rifle Springfield M1903. Un rifle que reconocí de mi vida anterior. Era un viejo rifle que se producía en los Estados Unidos.
—¿Los americanos están vendiendo armas a los comunistas?
Uno de la docena de oficiales en la sala miró el rifle con enojo. No solo teníamos una revolución comunista, sino que contaba con el apoyo de otras naciones.
"Los comunistas usarán todas las reservas de oro para comprar armas en el mercado internacional. Sin embargo, la única nación lo suficientemente traicionera como para hacerlo serían los Estados Unificados".
Las implicaciones de esto fueron grandes. Y seguramente peligroso. Si por casualidad la Federación Rusa logra recuperar sus pérdidas antes que nosotros, perderemos a largo plazo. Porque no importa si cada uno de nuestros soldados mata a tres enemigos. Si al final el enemigo recluta 3 soldados por cada uno muerto y tiene la capacidad de armarlos.
"De ahora en adelante quiero que los cosacos investiguen las armas de los muertos en el Ejército Rojo. Quiero saber qué otras armas tienen los comunistas que nosotros no conocemos. En el peor de los casos, también están comprando artillería, lo que sería desastroso".
Si una nación extranjera armaba suficientemente al Ejército Rojo, éste se convertía rápidamente en una guerra de trincheras. La razón por la que no sucedió aquí es porque hay tan poca artillería que nunca se cumplen las condiciones para una situación de guerra de trincheras. Sin embargo, si la guerra civil se decidiera en una guerra de trincheras, sería una decepción. Y perderíamos.
Tragué saliva. Perderíamos. La Federación Rusa controla la mayor parte de la población y la industria. Sería demasiado peligroso.
"¡Notifique a la zarina inmediatamente!"
Rápidamente alguien salió de la habitación y volví a mirar el mapa. Aunque tenía preocupaciones, no importaban porque la contraofensiva estaba a punto de comenzar pronto.
"Nuestro objetivo es San Petersburgo". Señalé el mapa. "Ya era un objetivo estratégico de relevancia inmediata, sin embargo, con el descubrimiento de que la Federación Rusa está comerciando con otras naciones, significa que tienen que utilizar los puertos para dicho comercio. Y el único puerto que tenían disponible era San Petersburgo. Además, tenía sentido que no viéramos armas extranjeras hasta el verano. Debido al Báltico, y especialmente al puerto de San Petersburgo, es casi imposible tomar un barco en invierno. Ahora que el invierno ha terminado, los cargamentos de armas deberían estar llegando.
Todavía no habría llegado el momento de invadir a los traidores del Báltico. Así que tendremos que pasar por Pskov y Nóvgorod para avanzar y tomar San Petersburgo.
"Bien, que comience la operación cosaca".
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Palacio de Kieva
Pov Tatiana
2 de junio
Mirando el informe escrito de Minsk. Armas de los Estados Unificados en manos de los comunistas. No solo tres países ya nos han invadido, sino que también terceros están involucrados en la guerra civil. No puedes dejarme vivir en paz, ¿verdad?
Toqué el timbre y entraron mis dos sirvientas.
"Llama a los embajadores del Reino Aliado, del Imperio y de Dacia. También quiero que todos los grandes periódicos occidentales traigan un representante a Kieva".
Las relaciones internacionales son algo muy complejo. Miles de intereses nacionales entrelazados, enemistades, hipocresía. Sin embargo, todavía había líneas rojas. Vender armas al Ejército Rojo podría ser una línea roja. Solo tuve que pintarlo un poco. Decir que hemos capturado a militares estadounidenses que trabajaban para el Ejército Rojo o decir que es un plan de los Estados Unidos son mentiras que debido a la falta de acceso a internet mucha gente podría creer. Sin embargo, mentir tan descaradamente, si se descubriera, causaría un enorme daño internacional. Por lo tanto, debe ser una mentira que pueda verificar físicamente.
Reproduje el informe y lo leí detenidamente.
Los Estados Unificados, hasta donde yo sabía, sólo reconocían al Imperio Ruso como nación. Por lo tanto, no han vendido armas de acuerdo con las normas internacionales. Han financiado una rebelión con intereses inciertos.
Saqué una carta y empecé a escribir.
"Querido Viktor
Necesito pruebas de que el Ejército Rojo está ejecutando a civiles con armas que les han dado los Estados Unificados. Créalo
"Quema esta carta tan pronto como te llegue".
Doblé la carta y la metí en un sobre. Sellarlo con cera.
"¡Guardia!" —grité—. Rápidamente entraron dos soldados mágicos. Saludándome militarmente.
"Pidan a uno de ustedes que entregue esta carta. Personalmente de mano, a Viktor. Duque de Kieva.
El que tenía el rango de capitán se adelantó, tomó el sobre y se lo metió en el abrigo.
—Por supuesto, zarina. ¡No te fallaré!"
Asentí con la cabeza y los vi irse, cerrando la puerta.
Tengo la intención de arruinar las relaciones internacionales de los estados unificados. Nadie quería una nación que vendía armas tan descaradamente a los rebeldes. Mucho más a los comunistas. ¿Y si además hay pruebas de que se han utilizado para ejecutar a civiles?
Suspire. Espero que funcione. Saqué más documentos y comencé a leerlos. La moneda finalmente dejó de perder valor y fue recuperando valor. La agricultura mantenía una producción suficiente para mantener a la población y empezábamos a acumular reservas de alimentos en caso de hambruna. La burguesía me escuchó... En términos relativos. Sería muy fácil simplemente nacionalizar todo, pero no se podría hacer.
Me desplomé en la mesa. La sensación de agotamiento y depresión me llenó. Sin embargo, poco podía hacer al respecto. Solo bebe café....
Lo que daría por tener a Karl o a Viktor aquí. O mi familia...
No, no se me ocurren, me hundiré más... Tengo que superarlo...
"Padre... madre... hermanas..."
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5 de junio.
Miré frente a mí la foto que Viktor había tomado. Era perfecto. Si me lo dieran sin ningún contexto, pensaría que es real. Me di cuenta de que había más fotos y casi entré en pánico cuando las vi. Eran zanjas, decenas, si no cientos, de personas muertas en ellas. ¿Esto era real? ¿Genocidio a manos de los comunistas y lo hacen con armas norteamericanas? La opinión pública extranjera va a arder con esto...
Llamaron a la puerta de mi oficina. "¡Ábrete!"
Sasha abrió la puerta e hizo una reverencia. "Los embajadores del Imperio, del Reino Aliado y de Dacia te están esperando.
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Pov: Embajador del Reino Aliado.
Mi trabajo como Embajador del Reino Aliado se ha cumplido durante años. Se había mudado a Kieva cuando comenzó la guerra civil. Su Majestad el Rey Jorge V siempre tuvo una estrecha relación con Nicolás II, por eso, entre otros factores, siempre apoyamos a los leales en Kieva.
Sin embargo, en todo el tiempo que estuve aquí solo llegué a conocer al duque de Kieva. Un estadista donde los haya. Tenía un inmenso conocimiento y un corazón de oro para su pueblo. Además de un coraje increíble.
Sin embargo, cuando Tatiana I, la actual zarina, llegó, nunca llegué a verla. Sería la primera vez que la vería. Tenía curiosidad por saber si los rumores de que era un ángel eran ciertos.
Miré a mi lado al embajador del Imperio, una nación reciente, casi diría yo. El gobierno los considera un peligro por sus tensiones territoriales con Legadonia y la República. Lo cual, en el peor de los casos, si lleva a la guerra y ganan... Dominarían Europa.
A su lado estaba otro embajador del insignificante país de Dacia. Habían avanzado rápidamente en su modernización, pero no eran una nación de interés para nosotros.
Las puertas de la habitación se abrieron, revelando lo que supuse que era la zarina...
¿TENÍA ALAS?
Una niña con alas casi el doble de su tamaño en la espalda, cabello rubio y ojos azules. Pero esos ojos azules eran extraños. Parecían sin vida.
"Muchas gracias por venir a esta reunión. Me gustaría decir que esta reunión se está celebrando muy en contra de mis deseos, pero la situación exige una reunión.
La figura se sentó en una silla e hizo sonar una campanilla. Un sirviente entró y colocó varias imágenes sobre la mesa. Miré con curiosidad a la zarina y luego miré los cuadros. Casi vomité al verlos.
¿Qué era esta barbarie? Eran personas civilizadas que yacían en agujeros, claramente muertas.
Entonces me fijé en una foto en particular, una en la que aparecía un soldado que parecía comunista y tenía un rifle que no se parecía a un mosin-nagat ruso.
"La imagen del embajador del Reino Aliado es una prueba de la presencia de armas de los Estados Unidos en manos de los rebeldes comunistas. Tenemos muchos ejemplares en nuestras manos. También tenemos pruebas de que están siendo utilizados para ejecutar a civiles del Imperio Ruso".
Todavía no salía de mi asombro al ver un ángel, lo que dijo fue muy perturbador. Que los Estados Unidos estuvieran dispuestos a vender armas a los rebeldes comunistas implicaba cosas peligrosas. Si el comunismo llegaba a India y los Estados Unidos vendían armas a los comunistas, la rebelión podría ponerse fea.
—Esto es inaceptable —dijo el embajador imperial, enfadado y con el rostro enrojecido—. Parecía que la respuesta del Imperio era ahora oficial. El reciente acercamiento ruso-imperial les dejó una muy buena perspectiva de futuro. Es por eso que apostaron fuerte en esa apuesta. Sin embargo, todo se fue al infierno. Pero parece que siguen apostando por un régimen ruso favorable a ellos que les permita mantener a salvo el frente oriental.
"Tendré que comunicarme con mi gobierno. Pero esta acción y evidencia es algo escandalosa y lo más probable es que sea denunciada por nuestro gobierno". He dicho.
El embajador imperial que pareció calmarse después de ver las fotos, me pidió la foto que tenía en la mano, se la di y se puso aún más rojo si cabe después de ver la imagen.
"Esto llegará a la zarina del káiser Tsarina", dijo, tratando de no inventar un número. "Personalmente recomendaré un bloqueo naval de San Petersburgo. No podemos permitir que los comunistas se aprovechen de la nación traicionera de los Estados Unidos".
El Imperio era una nación peligrosa. También se mostró en sus políticas agresivas. Su intervención en la guerra civil rusa sólo demostró que el Imperio era un peligro para el equilibrio de Europa.
Volví a mirar al ángel, lentamente, asimilando los detalles. Era increíble, era un ángel. ¿Debo orar?
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Minsk
Punto de vista Tatiana
7 de junio
—Su Majestad —dijo Viktor, inclinándose—. Había venido personalmente a Minsk para supervisar la ofensiva, también para alejarme de Kieva por un tiempo, necesitaba el aire fresco.
También, si la ofensiva funcionó. Lanzaría un ultimátum a los rebeldes bálticos. Por lo tanto, sería bueno estar presente en Minsk para dar el ultimátum de forma inmediata y personal.
"Me alegro de verte de nuevo".
Viktor se enderezó y me estrechó la mano, la tomé y caminamos lentamente alrededor de la mansión donde Viktor se había instalado.
"Hasta ahora la ofensiva va bien. Los comunistas no esperaban esta ofensiva y se están reorganizando. Así que creo que seremos capaces de tomar San Petersburgo".
Asentí con la cabeza y seguí caminando a su lado. Confiaba en Viktor.
"Las fotos que me enviaste. ¿Qué eran?
Se detuvo un momento y me sentó en un sofá cercano, sentado a mi lado.
"Creemos que eran burócratas del anterior gobierno del usurpador. Aprovechamos la oportunidad para tomar fotos y hacer que se vieran como los malos".
Asentí con la cabeza, tenía sentido y había funcionado muy bien. Viktor fue realmente inteligente allí.
"Entiendo, me alegro de que no hayas sido tú quien lo hizo... En caso de que lo hagas. Asegúrate de eliminar cualquier evidencia. Los gobiernos del futuro se apoyarán en lo que creamos en esta guerra civil, la estabilidad del futuro dependerá de lo que hagamos en el presente, por lo tanto, si queremos un futuro. Tenemos que aparentar que estamos limpios. Haz que el discurso del futuro sea el bien contra el mal. Es la única manera de prometer estabilidad en las próximas décadas".