- Alexa! Alexa! - Gritaba Carl mientras corría hacia mí. -
- ¿Que paso Carl? ¿Estas bien? - Pregunto asustada.
- Mamá quiere cortarme el cabello y no quiero que lo corte. - dice abrazándome. Yo solo ruedo los ojos
- Pensé que te había pasado algo malo tonto. - Veo que mamá viene hacia nosotros.
- Carl! - Dice mamá un poco cansada. - Vamos. -
- No quiero, Lexa dile algo. - dice él poniéndose detrás mío.
Yo río y mamá rueda los ojos.
- Carl, si no dejas que mamá te corte el cabello entonces lo haré yo mientras duermes y te dejaré pelado. - él abre grande los ojos, yo y mamá reímos. - Ve Carl, deja que mamá te corte el cabello. - dicho eso él de mala gana va con mamá.
Al rato mamá ya le estaba cortado el cabello de Carl, yo estaba a un lado de ellos mientras limpiaba mi arma. Shane también estaba ahí con nosotros.
- Mamá apurate. - dice Carl cansado.
- Cariño, entre más te mueves más tiempo me llevará. -
- También te podría dejar sin cabello. - Carl me mira con los ojos entrecerrados y mamá me da una mirada de "no ayudas".
- Estoy intentando no moverme. - dice él
- Bueno sigue intentándolo. -
- Si crees que esto es malo, espera a que te tengas que afeitar. Es horrible, cuando llegue ese día extrañaras cuando tu mamá te cortaba el cabello. - dice Shane.
- Cuando suceda lo creeré. - contesta Carl.
- Te diré algo. Solo soporta esto con dignidad y mañana te enseñaré algo especial. Te enseñaré a cazar rana. -
- Dije ranas. En plural. Es todo un arte, no puedes tomarlo a la ligera, tiene... Muchos secretos que muy pocos los conocen. - Shane mira a mamá y luego a Carl. - Estoy dispuesto a compartir mis secretos contigo. - Carl mira a mamá y luego a mí, yo niego con la cabeza.
- Nosotras somos mujeres, habla con él. - dice mamá.
- Es una oferta única hijo, no se repetirá. - dice Shane, al escucharlo decir hijo a Carl levantó la mirada y lo miro y luego a mamá.
- ¿Y para que necesitamos ranas, en plural? - dice Carl
- ¿Alguna vez comiste ancas de ranas? -
- Ewww. - dice Carl con cara de asco.
- No! Sabrosa. - dice Shane sonriendo.
- Que asco. - digo yo
- Ellos tienen razón, que asco. - dice mamá
- Cuando se acabe la última lata de frijoles, les encantarán las ancas de ranas. Ya los veo, "Shane, ¿Podrías darme otra porción, por favor? ¿Solo una más? - dice el riendo y mirando a Mamá.
- No haré eso. - responde ella riendo.
- Si, no le hagas caso, amigo. Tú y yo seremos héroes, les daremos de comer las patas de la rana René. -
- Preferiría comerme a Piggy. Eso sería mejor. - dice mamá y Shane la mira con una sonrisa.
- Hijo, seremos héroes, seremos leyendas. Tú y yo, Shane y Carl. - ellos ríen. Yo solo miro todo en silencio, papá solía decirnos eso a Carl y a mí, que juntos seríamos héroes y leyendas.
Me levanto y me voy de ahí, estaba por subir a la casa rodante de Dale cuando un sonido me detuvo, era la alarma de un auto que se escuchaba a lo lejos. Rápidamente subí a la caravana.
- ¿Es un auto? - pregunto al lado de Dale.
- Si, eso parece. - dice él mirando por los binoculares.
- ¿Que es? - preguntan desde abajo.
- Es un auto robado, supongo. - Contesto.
Luego de eso bajo de la caravana, mamá y Carl estaban a mi lado.
- ¿Quién es el idiota ese? - digo acercándome al auto.
El auto estaciona y Glenn sale del auto muy feliz.
- Con que ese es el idiota. - digo. - apaga esa cosa! - le gritó.
- No sé cómo. - dice él
- Levanta el capó. - le ordena Shane.
Amy comienza a bombardearlo con muchas preguntas sobre dónde está su hermana, y el dice que está bien.
Yo me acerco a él y lo abrazo. Shane logro apagar la alarma.
- Me tenías muy preocupada imbécil. - digo después de separarnos.
- Estoy bien, estoy vivo. - me sonríe.
- ¿Todos se encuentran bien? - pregunto.
- Si lo están, bueno... Merle no tanto. -
Mientras Shane y Dale regañaban a Glenn por la alarma del auto que atraería a los caminantes yo me fui con mi mamá y Carl a su lado. Una camioneta llega y todos los del grupo sale. Glenn me mira y da una sonrisa.
Todos estaban reuniéndose con sus familias, menos nosotros. Carl y yo mirábamos la reunión con tristeza mamá se dio cuenta de eso y nos abrazo del hombro a mi hermano y a mí y no alejo un poco de ahí. Shane miraba de lejos, mamá se agachó a la altura de Carl y comenzó a hablar.
- Escuchen, puede que papá no vuelva nunca más... - ella siguió hablando y yo dejé de escuchar, estaba hundida en mis propios pensamientos.
De un momento a otro escucho que llaman a alguien "chico helicóptero", no les presté atención, no hasta que Carl comienza a gritar "papá" y correr, rápidamente levanto mi vista y veo que era él, era mi papá, él estaba vivo y estaba aquí. Corrí hacia él lo más rápido que pude y lo abracé. Realmente era él, mis lagrimas comenzaron a salir sin parar, él nos abrazaba y comenzaba a llorar.
*Horas más tarde*
Estábamos sentados alrededor de la fogata, ya era de noche.
Carl estaba sentado entre las piernas de papá, mamá a su lado y yo en el otro, él me abrazaba por los hombros.
- Rick, ¿Que fue lo que sentiste cuando te despertaste? - le preguntaron.
- Desorientado. Creo que es lo más cercano. Así es como me sentía, desorientado. - dice con algunas lagrimas en los ojos. - Miedo, confusión, todo eso. Pero la palabra desorientado es lo más cercano.
- Las palabras pueden ser escasas. Algunas veces quedan cortas. - responde Dale.
- Sentí que me sacaron de mi vida y que me habían puesto en otro lado. Durante un momento pense que estaba en coma o algo, de lo que nunca despertaría.
- Mamá dijo que habías muerto. - dice Carl mirándolo.
Mamá y yo nos miramos y luego miramos a papá.
- Ella tenía razón para pensarlo. No lo duden nunca. - dice mirándonos a ambos. Yo recuesto mi cabeza en el hombro de papá.
- Cuando las cosas se pusieron feas, en el hospital nos dijeron que te evacuarian, a tí y a otros pacientes a Atlanta, y eso nunca sucedió. - dice mamá.
- Es lógico después de lo que pasó en Atlanta. Y por cómo lucía ese hospital, parecía que estaba desbordado. -
- Si, estaba desbordado. A duras penas los pude sacar. - responde Shane.
- No sabes lo agradecido que estoy contigo, Shane. No puedo expresarlo. - dice sinceramente papá.
- Otras vez las palabras se quedan cortas. - digo, Dale me mira y asiente.
Papá me da un beso en la cabeza. Veo que Shane mira de vez en cuando a mamá y ella solo le evita la mirada.
Ed, el esposo de Carol comenzó a arrojar ramas a la fogata logrando que las llamas se hagan más grande.
- Oye, Ed, ¿Porque tiraste esa rama? - pregunta Shane.
- Hace frio, amigo. - Ed le contesta
- El frio no cambia las reglas. Hay que mantener el fuego bajo para que no nos vean desde lejos, ¿No es así? -
- Dije que hace frio, no te metas en lo que no te importa. -
A Shane se le estaba agotado la paciencia, y más cuando le contesto así, por lo tanto se levantó y se acercó hasta él, le dijo que apague la fogata y Ed mando a Carol a que lo haga, la cual rapidamente hizo lo que su esposo le pidió. Nunca me gusto el como era Ed con Carol, o con Sophia, el era un hombre desagradable. Shane hablo un poco con Carol y luego volvió.
- ¿Pensaron acerca de Daryl Dixon? - dice Dale, "mierda, Daryl" pienso, no sabríamos como reaccionaria acerca lo de su hermano. - No le gustara saber que dejaron a su hermano alla.
- Yo se lo diré. - dice T-dog. - Perdi las llaves, es mi culpa.
- Yo lo espose, eso fue mi culpa. - habla papá
- Amigos, esto no es una competencia. No quiero hablar de razas pero creo que se escucharía mejor si viniera de un blanco. - dice Glenn mirando a T-dog.
- Lo hecho, hecho esta. No voy a ocultárselo. -
- Podríamos mentir. - sugiere Amy
- O podríamos decir la verdad. Merle estaba descontrolado. - dice Andrea. - Había que hacer algo o nos mataría a todos. Tu esposo hizo lo que tenia que hacer. - dice mirando a mamá. - Y si Merle quedo allá no es culpa de nadie.
- ¿Y eso le diremos a Daryl? No creo que surga una discusión racional después de eso, ¿Ustedes que creen? - hablo por primera vez.
- Seamos inteligentes y estemos preparados para cuando vuelva de su caceria. - habla Dale.
- Alexa tu podrías decirle ¿No te parece? Contigo no se pondrá tan agresivo. - dice Glenn yo lo miro sorprendida, papá también me mira sorprendido, siento la mirada de todos sobre mí.
- ¿Acaso me perdi de algo? - me pregunta papá por lo bajo y yo solo niego y le sonrio.
- Tuve miedo y escape. Y no me averguenzo de eso. - habla T-dog, que bueno que hablo porque si no todos me seguirian mirando esperando una respuesta y eso es algo incomodo. - Todos teníamos miedo y escapamos ¿Cual es tu punto? - le pregunta Andrea.
- Me detuve lo suficiente para poner una cadena en la puerta. La escalera es angosta, solo unos cinco o seis caminantes podrían empujarla a la vez. No es suficiente para derribarla, no con esa cadena. - dice T. - Lo que quiero decir es que Dixon esta vivo y continúa allá, esposado en ese techo. Depende de nosotros. - dicho eso se levanta y se va.
- Entonces, ¿Lexa no se lo dirá a Daryl? - pregunta Carl mirando a mamá y papá, ellos me miran.
- Bueno creo que es hora de dormir, ¿vamos Carl? - hablo levantándome, él asiente y toma mi mano, saludamos a todos y nos fuimos.
Llegamos a la casa de acampar, nos acomodamos en la cama que dormía con Carl, hablamos un rato y luego nos dormimos.
*A la mañana del otro dia*
Despierto debido a que siento que mueven mi cuerpo levemente, abro mis ojos y veo que es Carl mirándome con una sonrisa.
- ¿Que hora es? - pregunto mientras me tallo los ojos.
- Nunca sabemos que hora es desde que todo esto comenzo. - dice él y yo ruedo los ojos. - No lo sé, es temprano ya que mamá aún no se levanta. Entonces giro mi cabeza y veo que ninguno de nuestros padres están despiertos aún.
- ¿Que es lo que quieres? -
- Quiero ir a orinar pero no quiero ir solo. - me mira con esa mirada que él sabe que es mi debilidad entonces accedo y lo acompañó al bosque. Él se pone detrás de un árbol y yo me doy vuelta dándole la espalda.
- No vallas a mirar. - me dice
- Tranquilo, no pienso mirar tu traserito de bebé. - hago una pequeña pausa. - Pero quizás los caminantes te lleguen a ver. - Le digo.
- Alexa! No me asustes. - dice Carl y yo rio, me gustaba tanto molestarlo. - Bien, termine.
Luego de eso los dos volvemos al campamento, ya ninguno tenía sueño así que nos cambiamos y nos quedamos despiertos. Dale había hecho guardia la mitad de la noche, me ofrecí a cubrirlo pero el se negó. Luego de un rato aparece Carol con su hija y su esposo, Carl se fue a jugar con Sophia y yo me quedé con Carol.
- Oye. - llamo su atención. - ¿Está todo bien? Pregunto por lo de anoche. -
- Todo bien, cariño. - responde y baja la mirada ya que su esposo se acercaba.
- ¿De qué hablan? - Pregunta Ed serio.
- No te importa, metiche. - Le digo levantadome pero el se acerca a mí intimidante lo cual hace que retroceda un paso hacia atrás.
- Ten cuidado en como me hablas, niña. - dice él con algo de enojo.
- Ni siquiera te atrevas a tocarme. - le digo enojada viendo que quiere agarrar mi brazo.
Justo Shane aparece en ese momento. - Oye, aléjate de ella. - Shane lo empuja levemente, se pone delante de él dejando a mi detrás suyo. - No quieres tener problemas, amigo. - le dice Shane.
Ed mira con odio a Shane y luego a mí, se da la vuelta y se va.
Carol se acerca para disculparse pero Ed le grita que valla con él y ella le hace caso.
Shane se da la vuelta y me mira.
- ¿Estas bien? ¿Él te hizo algo? - pregunta suavemente
- Estoy bien, gracias. - él asiente y se me queda mirando como si me quisiera preguntar algo. - ¿Que pasa? -
- Yo.... Emm.. Siento que estás distante conmigo, ¿Pasó algo? ¿Es por lo del otro día? - pregunta
- Está todo bien Shane, solo... Nada no importa. - Si importaba, estaba así de distante y evitándolo por haberlo visto con mi mamá en el bosque, pero no le diría que es por eso, bueno, no ahora.
- ¿Segura? - yo asiento, mamá llega en ese momento.
- ¿Todo bien por aquí? - pregunta ella y yo asiento. - Bien, vamos a prepararle algo a papá para cuando se levante. - ella me abraza por los hombros y nos alejamos de Shane.
Estaba ayudando a mamá con el desayuno cuando me pregunto.
- ¿Paso algo malo con Shane? ¿Él te dijo algo? - pregunta ella, "algo como que tú y él tenían sexo" pienso yo.
- No pasó nada, solo me defendió de Ed, el idiota se enojó por qué le dije metiche. - digo riendo.
- ¿Enserio le dijiste metiche? - ella ríe y yo asiento. - Esa es mi hija. - dice orgullosa.
Ella continúa con sus cosas y yo por un momento le quedó mirando y sonrió. No importa lo que haga, o lo que hizo, ella era mi mamá y la amaría con todo mi ser, aunque halla hecho algo malo como lo que hizo. Ella tuvo sus razones y jamás podría odiarla, yo amo a esa mujer.