Solo queda una semana para volver a clases, el verano ha pasado volando y ya tocaba volver a la rutina. Ahora mismo Hermione y yo estamos discutiendo con nuestros padres porque ellos no quieren que volvamos a Howarts por ser sangres sucias.
-Llevamos ya 4 años allí.- protestó mi hermana
-Pues ya va siendo hora de que no sea nunca más.- dijo mi padre
-¿Que más da acabar los pocos años que nos quedan?.- pregunté
-T/n tiene razón, además cuando algo empieza se tiene que acabar.- me defendió Hermione
-Y eso lo decís vosotros siempre.- finalicé
-Podrían acabar y después nada más de magia.- sugerió mi madre mirando a mi padre.
-Esta bien, a la mínima que pase algo raro otra vez os venís sin protestar, ¿Está claro?.- accedió mi padre
Mi hermana y yo accedimos y nos fuimos a contárselo a los Weasley y a Harry.
Llegó el día y fuimos hacia el muro que tanto temía, la primera vez me estampé contra el y me rompí la muñeca, desde ahí siempre odio esa parte de la vuelta a clases.
-A la de tres.- dijo mi hermana
-Uno...- empecé
-Dos...
-¡Tres!- gritamos a la vez
No me estampé y llegamos a nuestro asiento en el tren junto a Ron y Harry.
Llegamos y como todos los años fuimos a las habitaciones cenamos y tiempo libre hasta la hora de dormir.
Al día siguiente desperté a Hermione y nos fuimos a desayunar. Al llegar nos sentamos con nuestros amigos y vimos al pobre Neville temblando.
-Neville, ¿te pasa algo?- preguntó Harry
-¿Miedo Longbottom?.- la voz del profesor Snape sonó a mis espaldas.
Y ahí lo entendí, aún le tenía miedo al profesor.
Escuché las risas de Malfoy y su grupito de ridículos.
-¿Malfoy quieres tener miedo también?- le preguntó Snape.
El negó con la cabeza.
-Pensaba.- y sin más se fue a la mesa de profesores.
Dumbledore pidió silencio y empezó a hablar.
-Este año los prefectos de las casas son, Gryffyindor: Ron Weasley, Hufflepuff: Cedric Diggory, Rebenclaw: Cho Chang y Slytherin: Matteo Riddle.
Todos empezaron a susurrar respecto al último profecto.
-Imposible.- dijo Ron- no puedo ser yo.
-Lo que es imposible esque Riddle lo sea.-dijo mi hermana
-Creo que Dumbledore se ha olvidado que es el hijo de Voldemort.-dije susurrando
-Al menos no somos de Slytherin y no lo tenemos como profecto.- dijo Harry
-Voy a ser superior a ti igualmente Potter.- la voz de Riddle hizo que toda la sala se callara
-Aunque lo intentaras siempre vas a ser inferior a todos Riddle.- dijo sin mirarlo
-Eso ya lo veremos señorita Granger.- dijo sonriendo