Lujuria [ROMANCE 4] [Vol.1: T...

By Briii_SR

42K 1.7K 270

Una apuesta... ¿Seducir a tu jefe? ¿Qué podría salir mal? More

𝙲𝙾𝙽𝚃𝙴𝙽𝙸𝙳𝙾
𝐿𝒰𝒥𝒰𝑅𝐼𝒜
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐔𝐧𝐨
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐃𝐨𝐬
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐓𝐫𝐞𝐬
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐮𝐚𝐭𝐫𝐨
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐢𝐧𝐜𝐨
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐒𝐞𝐢𝐬
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐒𝐢𝐞𝐭𝐞
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐎𝐜𝐡𝐨
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐍𝐮𝐞𝐯𝐞
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐃𝐢𝐞𝐳
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐃𝐨𝐜𝐞
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐓𝐫𝐞𝐜𝐞
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐚𝐭𝐨𝐫𝐜𝐞
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐐𝐮𝐢𝐧𝐜𝐞
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐃𝐢𝐞𝐜𝐢𝐬𝐞𝐢𝐬
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐃𝐢𝐞𝐜𝐢𝐬𝐢𝐞𝐭𝐞
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐃𝐢𝐞𝐜𝐢𝐨𝐜𝐡𝐨
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐃𝐢𝐞𝐜𝐢𝐧𝐮𝐞𝐯𝐞
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐕𝐞𝐢𝐧𝐭𝐞
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐕𝐞𝐢𝐧𝐭𝐢𝐮𝐧𝐨
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐕𝐞𝐢𝐧𝐭𝐢𝐝ó𝐬
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐕𝐞𝐢𝐧𝐭𝐢𝐭𝐫é𝐬
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐕𝐞𝐢𝐧𝐭𝐢𝐜𝐮𝐚𝐭𝐫𝐨
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐕𝐞𝐢𝐧𝐭𝐢𝐜𝐢𝐧𝐜𝐨
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐕𝐞𝐢𝐧𝐭𝐢𝐬é𝐢𝐬
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐕𝐞𝐢𝐧𝐭𝐢𝐬𝐢𝐞𝐭𝐞
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐕𝐞𝐢𝐧𝐭𝐢𝐨𝐜𝐡𝐨
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐕𝐞𝐢𝐧𝐭𝐢𝐧𝐮𝐞𝐯𝐞
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐓𝐫𝐞𝐢𝐧𝐭𝐚
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐓𝐫𝐞𝐢𝐧𝐭𝐚 & 𝐔𝐧𝐨
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐓𝐫𝐞𝐢𝐧𝐭𝐚 & 𝐃𝐨𝐬
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐓𝐫𝐞𝐢𝐧𝐭𝐚 & 𝐓𝐫𝐞𝐬
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐓𝐫𝐞𝐢𝐧𝐭𝐚 & 𝐂𝐮𝐚𝐭𝐫𝐨
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐓𝐫𝐞𝐢𝐧𝐭𝐚 & 𝐂𝐢𝐧𝐜𝐨
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐓𝐫𝐞𝐢𝐧𝐭𝐚 & 𝐒𝐞𝐢𝐬
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐓𝐫𝐞𝐢𝐧𝐭𝐚 & 𝐒𝐢𝐞𝐭𝐞
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐓𝐫𝐞𝐢𝐧𝐭𝐚 & 𝐎𝐜𝐡𝐨
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐓𝐫𝐞𝐢𝐧𝐭𝐚 & 𝐍𝐮𝐞𝐯𝐞
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐮𝐚𝐫𝐞𝐧𝐭𝐚
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐮𝐚𝐫𝐞𝐧𝐭𝐚 &𝐔𝐧𝐨
𝐼𝑀𝒜𝒢𝐸𝒩𝐸𝒮 - 𝒞 𝟦𝟣
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐮𝐚𝐫𝐞𝐧𝐭𝐚 & 𝐃𝐨𝐬
𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐮𝐚𝐫𝐞𝐧𝐭𝐚 & 𝐓𝐫𝐞𝐬
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐮𝐚𝐫𝐞𝐧𝐭𝐚 & 𝐂𝐮𝐚𝐭𝐫𝐨
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐮𝐚𝐫𝐞𝐧𝐭𝐚 & 𝐂𝐢𝐧𝐜𝐨
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐮𝐚𝐫𝐞𝐧𝐭𝐚 & 𝐒𝐞𝐢𝐬
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐮𝐚𝐫𝐞𝐧𝐭𝐚 & 𝐒𝐢𝐞𝐭𝐞
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐮𝐚𝐫𝐞𝐧𝐭𝐚 & 𝐎𝐜𝐡𝐨
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐮𝐚𝐫𝐞𝐧𝐭𝐚 & 𝐍𝐮𝐞𝐯𝐞
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐢𝐧𝐜𝐮𝐞𝐧𝐭𝐚
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐢𝐧𝐜𝐮𝐞𝐧𝐭𝐚 & 𝐔𝐧𝐨
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐢𝐧𝐜𝐮𝐞𝐧𝐭𝐚 & 𝐃𝐨𝐬
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐢𝐧𝐜𝐮𝐞𝐧𝐭𝐚 & 𝐓𝐫𝐞𝐬
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐢𝐧𝐜𝐮𝐞𝐧𝐭𝐚 & 𝐂𝐮𝐚𝐭𝐫𝐨
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐢𝐧𝐜𝐮𝐞𝐧𝐭𝐚 & 𝐂𝐢𝐧𝐜𝐨
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐢𝐧𝐜𝐮𝐞𝐧𝐭𝐚 & 𝐒𝐞𝐢𝐬
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐢𝐧𝐜𝐮𝐞𝐧𝐭𝐚 & 𝐒𝐢𝐞𝐭𝐞
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐢𝐧𝐜𝐮𝐞𝐧𝐭𝐚 & 𝐎𝐜𝐡𝐨
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐢𝐧𝐜𝐮𝐞𝐧𝐭𝐚 & 𝐍𝐮𝐞𝐯𝐞
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐒𝐞𝐬𝐞𝐧𝐭𝐚
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐒𝐞𝐬𝐞𝐧𝐭𝐚 & 𝐔𝐧𝐨
𝐄𝐩𝐢𝐥𝐨𝐠𝐨
𝐀𝐠𝐫𝐚𝐝𝐞𝐜𝐢... + 𝐈𝐧𝐟𝐨...
𝐀𝐋𝐁𝐔𝐌 𝐃𝐄 𝐅𝐎𝐓𝐎𝐒
𝐋𝐔𝐉𝐔𝐑𝐈𝐀 [𝐋𝐢𝐛𝐫𝐨 𝟐]
𝐍𝐀𝐓𝐇𝐀𝐍𝐈𝐄𝐋 - 𝐑
𝐃𝐀𝐑𝐂𝐘 - 𝐑
𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟏

𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐎𝐧𝐜𝐞

843 29 1
By Briii_SR

𝙲𝚘𝚗𝚝𝚎𝚗𝚒𝚍𝚘 𝙰𝚍𝚞𝚕𝚝𝚘

┏━━━━━୨♡୧━━━━━┓
ᴀᴍɪꜱᴛᴀᴅ & ʙᴇɴᴇꜰɪᴄɪᴏ
┗━━━━━୨♡୧━━━━━┛
ɴᴀᴛʜᴀɴɪᴇʟ ᴍᴇʏᴇʀ

  Trataba de realizar un esquema para Montgomery, con cada línea que diseñaba sentía más impulso de desistir de él, pero sentía temor por lo que pudiera decir sobre Darcy en caso de hacerlo. He pasado toda la mañana en esto, y quería acabarlo, necesitaba que Arisha tuviese un plano para iniciar rápidamente con esto, así no lo tendría tanto tiempo sobre la empresa.

Acabé una gran parte para cuando escuché el ascensor llegar, lo cual llamó mi atención ya que no esperaba a nadie, me mantuve en silencio hasta que escuché los tocones resonar en el piso de porcelana blanco, tuve una vaga sensación de saber de quien se trataba, pero no pude confirmarlo hasta que mis ojos llegaron a verla.

La mujer de cabello color miel, ojos avellanas, delgada figura y alta estatura cautivo un poco mi atención con su presencia, pero solo era por una razón, no imaginé que fuese a llegar, ya que originalmente debió de haberlo hecho ayer.

Me mantuve neutro ante su presencia, girando el lápiz electrónico entre mis dedos, no planeaba decir nada, dejaría que fuese ella quien hablase primero.

Posó una mano en su cintura viéndome directamente a los ojos, una pequeña sonrisa se asomó en sus labios teñidos de rojo.

— Sorpresa — la escuché decir en un tono divertido. — ¿Así expresas tu alegría por verme?

Preferí no contestar a eso, ya que no me alegraba, estuve esperando ayer como un completo idiota, confiando en su palabra una vez más... como siempre solía hacer.

— Cariño, ¿no te alegras de verme?

Acortó la distancia, tocando mi cabello con sus manos, bajándolas lentamente hacia mis mejillas para luego inclinarse hacia delante y tomar mi boca con la suya, besándome con cierta ternura.

— Te estuve esperando ayer.

— Lo supuse, y lo lamento, surgió algo y...

— Como siempre, ¿no? Siempre surge algo.

Hubo un extenso silencio de su parte, volví a lo que hacía antes de escucharla hablar.

— Lo lamento, mucho, pero ya estoy aquí y es lo que cuenta. — Sentí el tacto de su mano en mi nuca, dejando leves caricias con sus roces. — ¿Me perdonas mi amor?

Asentí sin más remedio, con su mano me hizo desviar la mirada en su dirección otra vez, volviendo a besarme con la misma ternura de hace un momento.

— Me tienes por toda una semana, y podrás hacer conmigo lo que quieras. — Susurró contra mi boca. — Por el momento, eso lo compensaba todo. — Si quieres podemos empezar ahora.

Su mano bajo lentamente con la intención de llegar a un destino fijo, y aunque sus acciones me estuviesen incitado a hacer realidad aquel decreto, tenía que ocuparme en terminar el otro asunto pendiente que tenía, por lo que la detuve antes de que pudiera despertar a mi mejor amigo.

— Ahora estoy trabajando.

— Siempre estás trabajando, Nate.

Era irónico decir eso de su parte, ya que ella hacia lo mismo todo el tiempo, y sé que la verdadera razón por la que estaba aquí era para cobrar algo que le había ofrecido; sobre el trabajo.

Retome lo que hacía sin decir nada al respecto.

— Bien, te dejare que trabajes, pero no creas que voy a esperarte — sentí el roce cálido de sus labios en mi oído seguido del susurro de su voz que me hizo estremecer. — Voy a quitarme prenda por prenda hasta quedar completamente desnuda, ¿y sabes que voy a hacer? Voy a tumbarme en tu cama, y abriré mis piernas...

— Ela — murmure en un tono de advertencia.

Su pequeña y juguetona risa me dejo saber que no detendría su juego.

— Y con mis dedos voy a masturbarme en tu honor, tan solo te lo digo para que no te sorprendas en caso de que llegues a escucharme gemir tu nombre desesperada... Nathaniel.

Lo próximo que escuche fue el tono de sus zapatos contra el suelo alejarse

Sacudí mi cabeza en cuanto ya no estuvo en mi vista, después de todo aquello necesitaba poner mis ideas en orden.

︵‿︵‿୨♡୧‿︵‿︵

— Mañana puedes llevarme a cenar, y quizás puedas tomarte el miércoles libre del trabajo, así puedes llevarme de compras, ¿qué dices? — Charla, no era mi parte preferida en el sexo con Elaine, era sorprendentemente capaz de hablar incluso sobre el perro que no tenía. — O ... en caso de que no puedas Giancarlo puede acompañarme, tan solo necesitaría tu tarjeta de crédito.

Observe lo que hacía aún sobre mí, moviendo sus caderas suavemente de atrás hacia delante, quería concentrarme en tan solo en eso, pero era llanamente imposible. Subí mis manos a su cadera para sostenerla, cambiando de posición quedando sobre ella, volví a meterme en su cálido y húmedo interior con suaves embestidas.

Un tenue gemido salió de su garganta antes de continuar hablando.

— Aunque preferiría hacerlo contigo.

Levante la mirada hacia la suya un momento.

— Tengo cosas que hacer, no puedo darme el lujo de salir de "compras".

Note sus ojos rodar con disgusto.

— Nunca tienes tiempo... ¿Ya te vas a venir?

Me detuve de una vez.

— No estoy ni remotamente cerca, Elaine — más bien era una tortura.

— ¿Quieres que tome otra postura?

Lo que quería era que parara ya de hablar por una vez... ¿Qué estaba haciendo?

— Creo que deberíamos parar.

— ¿Ya? Pero si acabamos de empezar... Bueno está bien.

— Tomaré una ducha. — Sali de entre sus piernas con la intención de bajar de la cama también.

— Pero ¿qué dices sobre el miércoles?

— Lo que quieras está bien — salí de la habitación tomando camino hacia el baño — Solo que no podré acompañarte.

La escuché quejarse, pero al cerrar la puerta su voz cesó, entonces pude tomar un respiro; no comprendía su capacidad para hablar en un momento así, pero estaba acostumbrado a escucharla por horas, sin embargo, hoy no me apetecía hacerlo de esa manera.

Toque el botón en la ducha encendiendo la regadera para luego meterme debajo de esta.

Estuve unos extensos momentos debajo del agua fría con el único objetivo de calmar el deseo de mi cuerpo, pero era imposible, y extremadamente frustrante. ¿Acaso tenía otro remedio?... Apoyé mi brazo de la pared mojada a mi lado, animándome a tomar mi miembro erecto con mi mano libre y acariciarlo lentamente.

Cerré mis ojos con la imagen de Elaine desnuda plasmada en el cabeza... pero eso duró un segundo, bastó tan solo un momento para que la imagen del cuerpo desnudo de mi asistente remplazara la suya.

Con la respiración agitada abrí los ojos rápidamente. Estaba mal, lo sabía, no debería de estar haciendo esto con la imagen de su cuerpo desnudo que había creado mi imaginación para cubrir un espacio vacío en mi cabeza... Pero, no estaba mal del todo, ¿o sí? Lo único que quería era liberarme un poco, no tenía la culpa de que su imagen se proyectara sin previo aviso en mi conciencia.

Volví a cerrar mis ojos apretando y acariciando mi pene entre mi mano, diseñando más explícitamente su figura en mi cabeza, por un segundo imaginando tener sus perfectas tetas entre mis manos, azotar su perfecto trasero y acariciar lo que se escondía entre sus piernas.

No había idealizado cuanto la deseaba, pero lo hacía, y ahora más que nunca.

︵‿︵‿୨♡୧‿︵‿︵
ᴅᴀʀᴄʏ ᴅᴜʙᴏɪꜱ

  — ¿Cómo amigos?

La ironía en la voz de Cloe me hizo por un microsegundo arrepentirme de haberles contado lo sucedido con Enrique.

Me abrigue aún más con la manta de corazones rosas.

— Tiene sentido que haya perdido la cabeza, puesto que nunca se había comportado así — añadió en un tono pensativo. — Aunque su lógica no es muy inteligente.

— Eres estúpida. — Afirmó Sasha mirándome a los ojos.

— Gracias — murmuré.

— ¿Amigos? ¿Con beneficios?... No creo que deberías de volver a verlo en tu vida, una persona que no sepa reaccionar ante cosas que pueden solucionarse hablando con sinceridad es simplemente que tiene menos del funcionamiento normal del cerebro... sigan viéndose si quieren, pero no quiero a esa perra cerca de mí, después de todo lo que me hizo pasar esta semana.

Estaba en todo su derecho, Sasha no era una persona muy tolerante, y ella y Enrique no tenían una relación tan agradable, por lo que entendía que se haya enojado con él por buscarla con esa entonación sobresaliente.

— Eres muy odiosa — Cloe negó repetidas veces con su cabeza. — Ya la escuchaste, solo enloqueció porque tenía miedo de perderla, ¿qué te cuesta creer eso?

— Y tú eres otra idiota... — La señaló antes de dirigirse a mí. — Si hubiese tenido miedo de perderte como dice, hubiera puesto un anillo en tu dedo, o aún más sencillo, te hubiera explicado cómo eso lo hace sentir para tratar de tener una relación más planea en el estado en el que estaban... ¿Saben qué? Mejor me voy porque te juro que no quiero seguir escuchando esto.

Se levantó enojada... muy enojada, tomó sus cosas y caminó hacia la salida con determinación, pero antes de salir se dio la vuelta y volvió a señalarme con su dedo.

— Y no soy mensajera, si tienes algún problema con tu hermano soluciónenlo, ya estoy harta.

Confundida la vi marcharse. ¿Acaso se refería a David?...

— ¿David?

— Sí... Perdió su teléfono y dice que no se sabe tu número telefónico.

¿En serio?

— Pero sí el de Sasha. — Se encogió de hombros — ¿qué dijo? ¿En dónde está?

— Que vendrá pronto.

Hice un ademán con mi mano restándole importancia. Hace dos años que ya no vivimos juntos, hace dos años que se comprometió con su novia, ahora es responsabilidad de ella mantenerlo con vida, no mía. Aunque no conocía mucho sobre ella, apenas sí la he visto unas tres veces.

— Yo también debería de irme, pero antes de hacerlo quería decirte algo con respecto a Enrique, y es que tal vez una amistad en ese ámbito no sea lo más conveniente, honestamente no sé qué le paso, o si es cierto que realmente se volvió loco por "perderte", pero no fue para nada agradable, al menos tu no estuviste por lo que no pudiste presenciar su comportamiento, realmente fastidio mucho a Sasha, por eso esta así. No sé qué quieras hacer ahora que tu relación acabo, pero si fuese tu consideraría muy bien el tener una amistad con él.

— Solo fue algo que el menciono, de todos modos, no creo que vaya a hacerlo.

— Bien, tu igualmente escribe si quieres hablar, sabes que siempre llevo mi teléfono conmigo.

Me levante para darle un abrazo. Cloe siempre era tan atenta.

La acompañé hacia la salida terminado de despedirme de ella, una vez se marchó, cerré la puerta y me dirigí hacia mi habitación, recostándome sobre mi cama y encendiendo el plasma que estaba colgado en la pared frente.

Tomé mi teléfono notando el nuevo mensaje que tenia de Enrique, habia eliminado y bloqueado su número, por lo que tuve que recitarlo otra vez para desbloquearlo, sin embargo, no lo añadí.

Desconocido: ¿Te gustaría salir por unos tragos? Aun podemos hacer eso, ¿no?

No realmente, no estaba segura en si de verdad quería tener una amistad así, la ruptura y hablar con él me ha afectado un poco más de lo que imagine, y en lo único que pensaba era en pasar página y seguir adelante.

Dejé mi teléfono en donde estaba y me escondí debajo de mis sabanas.

︵‿︵‿୨♡୧‿︵‿︵
𝑀𝒾𝓁 𝑔𝓇𝒶𝒸𝒾𝒶𝓈 𝓅𝑜𝓇 𝓁𝑒𝑒𝓇

Continue Reading

You'll Also Like

10.1K 1.4K 71
"Mi nombre es Lorena, y mi vida dio un vuelco cuando perdí a mi madre a los 15 años. Quedé al cuidado de mi padre, un hombre atrapado en las garras d...
295K 21.4K 49
Es la segunda parte de Mi jefe el papa de mi hijo. No es necesario leer la primera parte , pero te la recomiendo para no estar tan perdida o perdido...
42.6K 4.3K 28
Ella creía que él estaba muerto. Él creía que ella lo abandonó para casarse con otro. Dos vidas destinadas a estar juntas pero obligadas a estar sepa...
7.9M 367K 60
Engreído, prepotente y frío, pero sobre todo un empresario millonario sexy que arrasa con todo a su paso, eso define perfectamente a Alexander Harris...