LA LEYENDA

By Patricia01234

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EL RENACIMIENTO DE LA EMPERATRIZ ENVENENADA Total Capítulos 551 (novela original) Sinopsis Después del renaci... More

CAPÍTULO 1
CAPÍTULOS DEL 2 AL 5
CAPÍTULOS DEL 6 AL 10
CAPÍTULOS DEL 11 AL 15
CAPÍTULOS DEL 16 AL 20
CAPÍTULOS DEL 21 AL 25
CAPÍTULOS DEL 26 AL 30
CAPÍTULOS DEL 31 AL 35
CAPÍTULOS DEL 36 AL 40
CAPÍTULOS DEL 41 AL 45
CAPÍTULOS DEL 46 AL 50
CAPÍTULOS DEL 51 AL 60
CAPÍTULOS DEL 61 AL 70
CAPÍTULOS DEL 71 AL 80
CAPÍTULOS DEL 81 AL 90
CAPÍTULOS DEL 91 AL 96
CAPÍTULOS DEL 97 AL 101
CAPÍTULOS DEL 102 AL 107
CAPÍTULOS DEL 108 AL 113
CAPÍTULOS DEL 114 AL 119
CAPÍTULOS DEL 120 AL 124
CAPÍTULOS DEL 125 AL 132
CAPÍTULOS DEL 133 AL 140
CAPÍTULOS DEL 141 AL 148
CAPÍTULOS DEL 149 AL 154
CAPÍTULOS DEL 155 AL 160
CAPÍTULOS DEL 161 AL 166
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CAPÍTULOS DEL 173 AL 178
CAPÍTULOS DEL 179 AL 184
CAPÍTULOS DEL 185 AL 190
CAPÍTULOS DEL 191 AL 196
CAPÍTULOS DEL 197 AL 202
CAPÍTULOS DEL 203 AL 208
CAPÍTULOS DEL 209 AL 214
CAPÍTULOS DEL 215 AL 220
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CAPÍTULOS DEL 239 AL 244
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CAPÍTULOS DEL 293 AL 298
CAPÍTULOS DEL 299 AL 304
CAPÍTULOS DEL 305 AL 310
CAPÍTULOS DEL 317 AL 322
CAPÍTULOS DEL 323 AL 328
CAPÍTULOS DEL 329 AL 334
CAPÍTULOS DEL 335 AL 340
CAPÍTULOS DEL 341 AL 346
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CAPÍTULOS DEL 353 AL 358
CAPÍTULOS DEL 359 AL 364
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CAPÍTULOS DEL 492 AL 498
CAPÍTULOS DEL 499 AL 505
CAPÍTULOS DEL 506 AL 512
CAPÍTULOS DEL 513 al 520
CAPÍTULOS DEL 521 AL 527
CAPÍTULOS DEL 528 AL 536
CAPÍTULOS DEL 537 AL 542

CAPÍTULOS DEL 311 AL 316

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CAPÍTULO 311. ESPOSO Y ESPOSO CON UN SOLO CORAZÓN (1)

"Vale, vale, te lo contaré todo, pero antes tienes que prometerme que te calmarás."

Huo Yelin no tuvo forma de asentir para estar de acuerdo. Shen Da finalmente se calmó un poco y lentamente soltó su agarre. Huo Yelin no le contó inmediatamente lo de Shen Liang, sino que se inclinó hacia él y le abrió la ropa, desenredando con cuidado la tela blanca que envolvía la herida, asegurándose de que no se agrietara, antes de exhalar un suspiro de alivio.

"Esposo mío, ¿sabes cuánto esfuerzo le tomó a Liangliang ayudarte a curar tu herida? Si se agrieta debido a tu excitación, sus esfuerzos serán en vano. ¿No sentirás pena por él entonces?"

Mirándole con expresión lastimera, Huo Yelin volvió a vendar la herida. Sólo delante de Shen Da podía el renombrado Dios de la Guerra tener un lado tan verborreico.

"Lo siento, yo..."

Al ver la angustia y la culpa en sus ojos, Shen Da soltó instintivamente, pero Huo Yelin tomó la iniciativa y le apretó los labios con el dedo: "No hace falta que lo sientas. Somos pareja. Pero espero que puedas ser más claro sobre la situación. Tu vida no gira sólo en torno a ti. Aunque no me tengas a mí en tu corazón, al menos deberías tener a You'er y a Liangliang. Ya sabes..."

"¡No!"

Antes de que pudiera terminar, Shen Da le agarró la mano y le dijo con voz seria enfrentándose a su mirada: "No, Yelin, yo... te llevo en mi corazón, ¡lo digo en serio!"

El gran general, con un hijo de casi un año, no pudo evitar sonrojarse al decir aquello. Estas palabras le hicieron sentir particularmente avergonzado. Sin embargo, cuando escuchó a Huo Yelin decir que no le tenía en su corazón, inconscientemente sintió que debía hacérselo saber. Eran marido y mujer y vivirían juntos toda la vida. Si se separaban por esas especulaciones infundadas, sería malo. Le quiere, aunque lo comprendió un poco tarde, tenía que decírselo.

Huo Yelin tampoco esperaba que admitiera sus sentimientos por él en un momento así. Se quedó momentáneamente atónito y de repente se inclinó para abrazarle, diciendo: "Hmm, esposo mío, yo también te tengo en mi corazón, siempre."

Habían pasado cinco años, y finalmente esperó a que Shen Da admitiera personalmente sus sentimientos por él. Si fuera una persona corriente, se habría rendido hace tiempo, pero no era una persona corriente. Era Huo Yelin, el Dios de la Guerra del Gran Qin, e incluso como Shuang'er, podía superar a todos. Tenía suficiente confianza y paciencia para esperar a que se enamorara de él. El hecho demostró que tenía razón. En este tira y afloja emocional de cinco años, ambos eran ganadores.

"Hmm, lo sé."

¡Siempre lo supe!

Levantando una mano para abrazarle, Shen Da sonrió. Huo Yelin era una persona fría y distante en apariencia, y de hecho era frío con la gente y las cosas que no le importaban. No prestaba atención a nadie. Pero si se trataba de alguien de su propio círculo, se volvía muy considerado y amable. En esta relación, nunca se inmutó ni qué. Le quería y no tenía miedo de hacérselo saber a nadie, especialmente a él. Por eso, siempre supo lo que sentía por él y le agradeció que nunca se rindiera, dándole tiempo suficiente para aceptarlo.

"Ejem..."

Sonó una ligera tos y los esposos giraron la cabeza al mismo tiempo. Gongsun Xu, con el rostro ensombrecido y sosteniendo una bandeja, estaba de pie en el centro de la habitación. Parecía que llevaba un rato de pie, y Shen Da no pudo evitar sentirse un poco avergonzado. Huo Yelin le fulminó con la mirada y le espetó: "Aunque no hagas ruido, nadie te considerará mudo."

"..."

Gongsun Xu se quedó sin habla. Él tampoco quería hacer ruido. El cielo sabía cuánto tiempo había estado allí de pie, pero los dos maestros de artes marciales ni siquiera se dieron cuenta de su existencia. ¿Qué otra cosa podía hacer? Su quinto hermano tenía razón. Ambos sólo tenían a su otra mitad en los ojos, pero no a ellos como hermanos. Desde que tuvo a Shen Da, su segundo hermano ya no era el que se preocupaba por él como antes.

"Yelin."

Sintiéndose divertido, Shen Da tiró de Huo Yelin, que obviamente le estaba tomando el pelo intencionadamente. Giró la cabeza y dijo: "Xu, cuánto tiempo sin verte. Siento molestarte esta vez."

Conocía a todos los hermanos de Huo Yelin, aunque sólo los había visto unas pocas veces. Después de celebrar la boda con Huo Yelin, Huo Yelin encontró tiempo para llevarlo al Pico Nieve a conocer a su shifu.

"No, no digas eso. ¿No ves que mi segundo hermano todavía tiene un problema ya que he hecho tanto?"

Mientras se acercaba con la bandeja, Gongsun Xu lanzó una mirada resentida a Huo Yelin, que actuó como si no tuviera nada que ver con él. Le entregó la bandeja y se inclinó con cuidado para ayudarle a levantarse, "¡Vamos! Dale de comer. Estará totalmente bien después de despertarse mañana por la mañana. Supongo que estoy en deuda con ustedes. ¡Si lo hubiera sabido, no habría bajado a la montaña! ¿Y ahora qué? ¡No puedo volver aunque quiera ahora!"

Cualquiera que tuviera éxito como Ermitaño Pico de Nieve sólo podía bajar de la montaña una vez en su vida, es decir, tres años. Ahora que lo habían bajado de la montaña, tenía que esperar tres años antes de volver, además, nunca más podría bajar de la montaña.

"Vamos, no creas que no lo sé. Hace tiempo que quieres bajar de la montaña."

Poniendo los ojos en blanco, Huo Yelin cogió el cuenco y lo sopló frío antes de llevárselo a la boca a Shen Da. Después de que Shen Da se lo terminara, Gongsun Xu se escabulló inmediatamente. ¡No quería quedarse más tiempo para ser aborrecido por esta pareja!

"¿Cuántos días he estado inconsciente?"

Después de tomar la medicina y comer algo, el espíritu de Shen Da mejoró mucho. Levantó su mano y tocó el apuesto rostro de Huo Yelin, y sus ojos se llenaron de un sentimiento de pena. Tal vez no había descansado bien durante mucho tiempo. El fondo de los ojos era azul y morado, y toda su persona parecía mucho más delgada.

CAPÍTULO 312. ESPOSO Y ESPOSO CON UN SOLO CORAZÓN (2)

Después de disfrutar de sus caricias con los ojos cerrados durante un rato, Huo Yelin se quitó la ropa de abrigo, tumbándose a su lado: "Ocho días. Liangliang tiene un canal de comunicación especial. Recibió la noticia hace cinco días, y Yuanlie lo trajo esa misma noche. Hoy no han llegado hasta que ha oscurecido. Esposo mío, realmente asustaste a Liangliang. Estaba llorando tan tristemente que incluso yo casi lloro con él. Pero nuestro Liangliang es realmente capaz. Tu veneno, incluso Xu no pudo hacer nada. Pero Liangliang lo eliminó tan fácilmente. Después de calmarse, inmediatamente te ayudó a procesar la herida y resolvió el veneno residual. Pero ya sabes, han estado viajando durante cinco días y cinco noches sin parar a mitad de camino y en realidad acortaron el viaje que lleva más de diez días a cinco días. Tan pronto como Liangliang relajó sus tensos nervios después de salvarte, se desmayó. Supongo que ahora sigue desmayado."

Pensando que tenía prisa por saber sobre Shen Liang, Huo Yelin dijo lentamente, apoyándose en él. A pesar de su amable comportamiento frente a Shen Da, en realidad era una persona de corazón muy frío, y rara vez reconocía a alguien. Al principio, sobre Shen Liang, era sólo como 'quiéreme a mi perro'. Sin embargo, cuando vio caer a Shen Liang, lo admiró desde el fondo de su corazón, un Shuang'er que no tenía artes marciales en absoluto, y parecía tan frágil, pero su delgado cuerpo contenía una enorme energía, lo que hizo que la gente lo admirara.

"¿Dijiste que Liangliang se desmayó?"

Shen Da se inquietó por reflejo, y Huo Yelin le cogió la mano sin poder evitarlo. "No te preocupes, está bien. Sólo está demasiado cansado. Déjale descansar una buena noche. Te prometo que verás a un hermano menor animado al despertar mañana."

Si realmente le hubiera pasado algo a Shen Liang, no habría estado vigilando aquí todo el tiempo.

"Yo... bien."

Shen Da, su hermano más joven, abrió la boca y finalmente se rindió bajo la fría mirada de Huo Yelin, pero...

"¿Quieres decir que Pei Yuanlie lo trajo?"

Al pensar en esto, no pudo evitar sentirse furioso. Cuando se enteró de que Liangliang había vuelto, además de Xiang Qing, no se le ocurría nadie más que pudiera cuidar de él. Sin embargo, hacía cinco años que no contactaba con Xiang Qing y no sabía si ya se había casado y tenía hijos. Si le pedía que cuidara de Linagliang y provocaba una ruptura entre él y su otra mitad, sería malo. Finalmente, Huo Yelin sugirió que Pei Yuanlie le ayudara a cuidar de él, considerando la identidad de Pei Yuanlie y los férreos guardianes que tenía en sus manos, pensó que debía ser el candidato más adecuado. Quién lo iba a decir, quién iba a saber que ese bastardo se había enrollado en secreto con su hermano menor sin decírselo y que al final incluso había utilizado algunos trucos para que el viejo emperador les concediera el matrimonio. ¡Su pobre e inocente hermano menor fue engañado por él!

En la mente de Shen Da, Shen Liang era ese pequeño tímido que se escondía detrás de él incluso al encontrarse con algunas pequeñas cosas y que tenía un miedo especial a los dolores. En su opinión, Pei Yuanlie debía de haber utilizado algún medio indecente para engañar a su hermano menor y que aceptara casarse con él. No estaba en absoluto satisfecho con este matrimonio, ¡y sólo esperaba encontrar una oportunidad para poner fin a su compromiso después de regresar!

"Sí, no viste lo avergonzado que estaba Yuanlie. No le había visto así en todos estos años."

Sin mirar a su hombre, Huo Yelin sabía lo que estaba pensando. Tuvo una rara muestra de amor fraternal y dijo algo agradable para Pei Yuanlie.

"..."

Shen Da bajó los ojos en silencio y, al cabo de un rato, dijo tímidamente: "Yelin, ¿de verdad apruebas su matrimonio?"

Desde que se enteró de lo de su matrimonio, había maldecido a Pei Yuanlie como cien veces. Huo Yelin nunca había hablado por él antes, y a veces cuando se enfadaba incluso reconocía sus quejas. ¿Por qué ahora de repente cambiaba de bando?

"¿En qué estás pensando?"

Sintiéndose a la vez divertido y enfadado, Huo Yelin le golpeó en la mejilla. Después de recostarse, sonrió y dijo: "Sólo siento que no es como si hubiera engañado a Liangliang como tú crees. Deberías volver a conocer a Liangliang. Ya no es el que recordabas. Ha crecido, se ha vuelto muy inteligente y valiente. Sabe lo que quiere, y deberíamos respetar sus sentimientos."

Él también tenía a alguien a quien quería profundamente, y naturalmente pudo darse cuenta de que hay amor entre Pei Yuanlie y Shen Liang. Aunque al principio había dudado de que Yuanlie se casara con Liangliang porque sus antecedentes pudieran ayudarles con su gran causa, cuando vio que Liangliang, que se derrumbaba, se calmaba rápidamente bajo el consuelo de Yuanlie, y que éste, que siempre había sido egocéntrico, dejaba a un lado su orgullo para consolarle, incluso sin tener en cuenta su propia vergüenza, no pudo evitar reírse de su propia estupidez. ¿Cómo iba a ser Yuanlie la clase de persona que se equivocaría a sí misma por el bien de la gran causa? Liangliang es tan inteligente y capaz, ¿cómo podría ser engañado fácilmente? Deberían tenerse el uno al otro en sus corazones.

"..."

Shen Da se quedó mudo de nuevo, y los esposos permanecieron tumbados uno al lado del otro durante mucho tiempo, hasta que Huo Yelin casi se durmió, la voz de Shen Da sonó lentamente, "Cinco años pueden realmente cambiar muchas cosas. Cuando supe que Xiao Yu fue enviado por Liangliang, supe que Liangliang ha crecido y ya no es como era antes. Sin embargo, no importa cómo haya cambiado, siempre será mi hermano pequeño al que crié con mis propias manos. En esta vida, me siento en deuda con él. Si hubiera sido más fuerte entonces, tal vez no lo habrían enviado al campo. Si ha sufrido un cambio tan grande en cinco años, ¿qué clase de tortura inhumana ha experimentado? Yelin, siento que me duele el corazón."

Después de decir eso, los ojos de Shen Da se pusieron rojos. No era que no supiera algunas cosas, simplemente no quería enfrentarse a ello. Mientras supiera que Liangliang era su único hermano menor al que tenía que proteger por el resto de su vida.

"Hmm, lo sé. En el futuro, protegeré a Liangliang contigo y no dejaré que nadie le toque ni un pelo."

Girándose de lado para abrazar su brazo, Huo Yelin apoyó suavemente la cabeza en su hombro.

"Gracias."

¡Yo también te protegeré!

Sujetándose la cabeza con la mano, se la frotó suavemente dos veces, y Shen Da hizo una promesa silenciosa. Incluso a costa de su vida, protegería a los dos Shuang'er más importantes de su vida.

"Duerme, de lo contrario, si Liangliang te ve desanimado mañana por la mañana, volvería a preocuparse."

"Hmm."

Los esposos apretaron los dedos y cerraron los ojos. Después de ocho cansados días, Huo Yelin estaba realmente cansado. Pronto se quedó dormido, pero Shen Da no podía conciliar el sueño. Pensó en Shen Liang, y luego miró a Huo Yelin con pena en los ojos.

CAPÍTULO 313. EL ASESINATO (1)

La Ciudad de Ding'an era la ciudad más fronteriza del noroeste de Gran Qin. Había sido acosada por los reinos vecinos durante años, y los civiles habían sufrido insoportablemente. No fue hasta que Huo Yelin nació en el campo de batalla hace unos años que la gente de Ciudad Ding'an vivió por fin una vida relativamente estable. Con el paso de los años, la reputación de Huo Yelin se hizo cada vez más prominente, y junto con Shen Da, había sobrecogido a los reinos vecinos de los alrededores. Excepto el Reino Chu, que no era inferior al Gran Qin en términos de área territorial y fuerza nacional, ningún otro reino vecino se atrevía a ofender al Gran Qin ahora.

En los últimos dos años, el Reino Chu había emprendido acciones frecuentes, lanzando batallas a gran escala en más de una ocasión, cada una de ellas bloqueada por Huo Yelin y Shen Da. Este año, la relación entre los dos reinos se había vuelto aún más tensa, y Huo Yelin ordenó la evacuación de todos los civiles. Al mismo tiempo, también envió lejos al hijo de Shen Da. Ambos sabían que la mayor batalla estaba a punto de llegar.

Nadie esperaba que Shen Da se envenenara de repente, pero el Reino Chu parecía tener la capacidad de predecir las cosas y lanzó una ofensiva en ese momento. Durante varios días consecutivos, la Ciudad de Ding'an se llenó de humo de guerra.

"Hmm..."

Shen Liang, que se desmayó después de salvar a Shen Da, fue despertado por el sonido penetrante de un cuerno. Apoyó su frente ligeramente hinchada y gimió mientras abría los ojos. El entorno desconocido le dejó momentáneamente aturdido. Pero pronto, cuando se dio cuenta de dónde estaba, no tuvo tiempo de preocuparse por el dolor de cabeza y saltó de la cama.

"Liangliang, más despacio."

Yaoguang escondido en la oscuridad apareció inmediatamente. Llegó en mitad de la noche. Antes, Shen Liang le había enviado a comprobar si Liu Wenjin estaba en la mansión. Cuando completó la tarea y regresó, ya se habían marchado. En cuanto se abrió la puerta de la ciudad al amanecer, lo persiguió hasta el noroeste.

"¿Yaoguang? ¿Dónde está mi hermano mayor? ¿Cómo está? ¿Se le ha quitado el veneno?"

Al verle, Shen Liang no pudo evitar quedarse paralizado, y luego luchó por levantarse de la cama mientras preguntaba.

"Eh..."

Pero como sus pies sólo tocaban el suelo, se sentó inmediatamente. Las heridas de la cara interna de sus muslos le producían un dolor sincero, y un sudor frío cubrió instantáneamente su frente.

"El general Shen ya está bien. Anoche se despertó en mitad de la noche, y Childe Gongsun dijo que la mayoría de las toxinas habían sido eliminadas, y que estaría bien después de tomar la medicina que le prescribiste para eliminar el veneno restante. Liangliang, te lo ruego. Cuídate primero, ¿de acuerdo? Tú también estás gravemente herido."

Yaoguang le apoyó en la agonía. Él ya sabía cómo Liangliang se forzó a lo largo del camino. En cinco días, había llegado al noroeste desde la ciudad imperial. Por no hablar de que no tenía ninguna habilidad en artes marciales, y su condición física ya era pobre, y un Shuang'er. Aunque fuera gente como ellos, era demasiado para soportarlo. Realmente se preocupaba por él. Por el bien del General Shen, casi perdió la mitad de su vida. Si Qi Yue y los demás supieran esto, ¿quién sabe con cuánta tristeza llorarían?

"Mientras esté bien, mientras esté bien."

Al oír que su hermano mayor estaba bien, la ansiedad de Shen Liang disminuyó gradualmente. Después de un momento, levantó la cabeza y sonrió: "Siento haberte preocupado. Es sólo un traumatismo cutáneo, y estaré bien después de descansar unos días. No es gran problema, pero tengo hambre. ¿Puedo comer algo?"

Al ver el sentimiento de pena en su rostro, Shen Liang trató de desviar su atención y tampoco tenía prisa por comprobar cómo estaba su hermano mayor.

"Sí, el maestro acaba de enviar algo de comida. ¿Te llevo?"

Al oír que quería comida, Yaoguang quiso sostenerlo. Shen Liang se apresuró a detenerle: "No hace falta, no soy discapacitado. Sólo sostenme."

"De acuerdo."

Entonces Yaoguang cogió una capa azul agua y se la puso, luego le apoyó para que caminara hasta la mesa que había en medio de la habitación y se sentara. Sobre la mesa había una olla de sopa de verduras, una cesta de albóndigas al vapor, algunos encurtidos y un cuenco de sopa humeante. Shen Liang lo cogió y lo olió, abrió la boca y lo engulló..

"¿Por qué no vi a Yuanlie?"

Después de recibir la sopa de arroz que le había entregado Yaoguang, Shen Liang preguntó mientras comía. En circunstancias normales, Pei Yuanlie debía estar junto a la cama esperando a que se despertara, ¿no?"

"El enemigo está invadiendo, el maestro y el general Huo han ido juntos."

"¿El Reino Chu?"

Shen Liang frunció el ceño inexplicablemente, y sus movimientos al comer se ralentizaron. En su vida anterior, el cuerpo de su hermano mayor fue colgado de la puerta de la ciudad por un general del Reino Chu, y recordaba muy claramente que la batalla final debía estar a pocos meses vista. ¿Por qué el Reino Chu comenzaba una guerra ahora mientras su hermano mayor estaba envenenado? ¿Liu Wenjin o Qin Yunshen llevaban tiempo confabulados con ellos? Si no, ¿por qué fue tan coincidente tanto en su vida anterior como en esta?

"Bueno, el Reino Chu ha estado inactivo durante años y ahora ha acumulado una fuerte fuerza nacional. Si no fuera por el General Huo vigilando aquí, el Gran Qin probablemente habría perdido muchas ciudades."

Teniendo un tic de su boca, Yaoguang lo sintió tan indigno para Huo Yelin, no para todos los oficiales militares del Gran Qin. Estaban sangrando duro fuera, en lugar de darles la confianza básica, Su Majestad a menudo trataba de suprimirlos. ¡Hijo de puta!

"No importa lo fuerte que sea un reino, no puede soportar el consumo sin fin."

La fuerza nacional del Reino Chu ya no podía sostener una batalla de larga duración, por lo que trataron de lanzar una batalla final. En la vida anterior, colgaron el cuerpo de su hermano mayor en la puerta de la ciudad para demostrarlo, enfadando completamente a Huo Yelin. Después de que Huo Yelin recuperara su cuerpo, lanzó un contraataque antes de recuperarse de sus heridas, derrotando completamente al Reino Chu. Entonces, en el tercer o cuarto año, el Reino Xia, que estaba muy lejos del Reino Chu, lanzó de repente un ataque contra el Reino Chu. En sólo medio año, alcanzaron su capital, el Reino Chu fue aniquilado, y el Reino Xia saltó a ser una de las cinco grandes potencias, alzándose como un gigante.

Sin embargo, como había renacido en esta vida, aunque le fuera imposible derrocar al Chu como al Reino Xia, debía cobrar algún interés.

"¿Liangliang?"

Agudamente consciente del aura feroz y asesina que emanaba del cuerpo de Shen Liang, Yaoguang encogió el cuello y no pudo evitar recordar su conversación, tratando de encontrar la razón de su ira.

"¿Hmm? Está bien. ¿Está Lei Zhan aquí?"

Después de recuperar la compostura, el aura asesina de Shen Liang desapareció al instante y retomó su porte tranquilo.

"Mi señor."

CAPÍTULO 314. EL ASESINATO (2)

Al momento siguiente, Lei Zhen llegó volando desde fuera, y Shen Liang le hizo señas para que se sentara y comieran algo juntos. "¿Cómo está Xiao Yu?"

Ayer, todo su corazón estaba ligado a su hermano mayor. Antes de que pudiera pensar en Xiao Yu, ya se había desmayado. Y ahora ni siquiera sabía cómo estaba su situación. Él los tomaba como familia, así que, no quería que les pasara nada.

"Solo algunas heridas en la piel, asustan a la vista, pero no son un gran problema. Después de unos días de sueño, la mayoría de sus heridas se han curado. Zheng Han le dio otra transfusión de sangre ayer, y debería poder parecer vivito y coleando en unos días."

Pensando en la excitación de Xiao Yu ayer y en su deseo de disculparse ante el señor en cuanto se despertara hoy, Lei Zhen no pudo evitar sentirse a la vez enfadado y divertido. Sería extraño que el señor no le ordenara guardar cama durante uno o dos meses después de verle cubierto de heridas.

"¿Sólo algunas heridas en la piel?"

Shen Liang sacudió la cabeza. Si sólo eran unas heridas en la piel, ¿por qué no aparecía ahora delante de él? Sin embargo, como Lei Zhen y los demás no querían que se preocupara, no pensaba presionarlos. Pensaba esperar a ver a su hermano mayor e ir a ver cómo estaba.

"Lei Zhen, ¿los guardias oscuros del inframundo tienen sus ojos en el Reino Chu?"

Después de comer por completo, Shen Liang preguntó despreocupadamente.

"Sí, pero no muchos. ¿Qué quiere, mi señor?"

Mirándole, Lei Zhen también dejó su cuenco y sus palillos. Tras contemplarlo un poco, Shen Liang entrecerró los ojos peligrosamente y dijo: "Si te pido que asesines al general Zhao Qing del Reino Chu, ¿cuántas posibilidades crees que tenemos?"

"¿Zhao Qing?"

Con el ceño indescriptiblemente fruncido, Lei Zhen pensó un momento y sólo recordó que Zhao Qing era uno de los principales generales del reino de Chu. Actualmente se encontraba en la ciudad fronteriza de los Chu, y la batalla de hoy probablemente fue iniciada por él.

"Um, ¿puedes matarlo?"

El tono de Shen Liang era muy ligero, pero la intención asesina en su interior era bastante penetrante. Todavía recordaba que en el memorial de su última vida, se mencionaba que Zhao Qing insultó el cuerpo de su hermano y lo azotó públicamente. Ya que quería cobrar algún interés, ¡debería ser el primero!

"No hay problema."

No habiéndole visto nunca así, después de mirarle a los ojos un rato, Lei Zhen le dio una respuesta afirmativa. ¡El asesinato era cosa de sus oscuros guardianes del inframundo!

"De acuerdo, te daré tres días. Espera un momento."

Ya que dijo que no había ningún problema, entonces no debería haber ningún problema. Lei Zhen no era una persona imprudente. Shen Liang se levantó y fue a la cabecera de la cama con el apoyo de Yaoguang para buscar su paquete. Sacó dos pequeños frascos de porcelana y se los entregó a Lei Zhen, diciendo: "El rojo es altamente tóxico que he desarrollado yo mismo. Se puede aplicar a las armas. El blanco es el antídoto. Intenta asegurarte de que puedes escapar ileso antes de actuar."

Quería la vida de Zhao Qing, pero no cambiarla usando las vidas de los guardias oscuros del inframundo.

"Puede contar conmigo, mi señor."

Ahuecando las manos e inclinándose, Lei Zhen se dio la vuelta y se marchó. Los ojos preocupados de Yaoguan le observaban sin que él mismo se diera cuenta. Ahora que los dos ejércitos estaban en guerra, y Zhao Qing no era una persona corriente. ¿Cómo podía ser tan fácil asesinarle?

"¿Yaoguang? ¿Yaoguang?"

Shen Liang ya se había cambiado de ropa, y cuando vio que Yaoguang seguía tontamente allí de pie como una estatua, no pudo evitar alzar la voz y le llamó unas cuantas veces más.

"¿Hmm? Liangliang, ¿me has llamado?"

Volviendo en sí, Yaoguang tenía la mirada perdida. Shen Liang sonrió sin poder evitarlo. Se acercó cojeando y le dio unas palmaditas en el hombro, diciendo: "No subestimes al comandante de los guardias del inframundo, estará bien."

Lei Zhen tenía excelentes artes marciales y era un tipo versátil. Puede que no dominara todo, pero lo sabía todo. Incluso si no lograba su cometido, definitivamente no era un problema escapar ileso.

"¿Quién está preocupado por él? Yo sólo... sólo... por cierto, estaba pensando en la guerra."

Al oír eso, Yaoguang lo negó instintivamente. ¿Cómo podía estar preocupado por esa madera? ¡Hmph! Más le valía no morir, si no, ¡a ver cómo se burlarían de él ante su tumba!

"¿De verdad?"

Echándole una mirada significativa, Shen Liang estaba a punto de cambiar de tema. Pero, por el rabillo del ojo, vislumbró a Pei Yuanlie, vestido de blanco, entrando. A excepción de los pocos días de camino anteriores, era la primera vez que le veía con ropa que no fuera morada. Comparado con el elegante e inalcanzable morado, el blanco acentuaba su impecable aspecto apuesto con un toque más refinado y elegante, dándole un sabor de santidad, parecido al de un hada desterrada en el reino celestial.

"¿Por qué te has levantado?"

Todo recto ante él, Pei Yuanlie alargó la mano y le tocó la cara. La ternura de sus ojos no se podía ocultar. Shen Liang le cogió la mano y se inclinó hacia él, diciendo: "Después de haber dormido lo suficiente, por supuesto que me levanté de la cama. ¿Mi cuñada fue a luchar contra los enemigos?"

Aunque Huo Yelin fuera él mismo a la guerra, iría a la torre de la puerta a vigilar, levantando la moral. Ahora que su hermano mayor estaba bien, no debía ausentarse de la provocación del enemigo.

"No, después de discutirlo con mi segundo hermano, decidimos mostrar la debilidad del enemigo y atraerlo para lanzar una guerra a mayor escala. Entonces, los destruiríamos por completo de una vez por todas, ¡haciendo que no tuvieran pelotas para invadir de nuevo dentro de dos o tres años!"

Como había llegado personalmente al noroeste, ¿cómo iba a dejar que esta guerra durara mucho tiempo?

Ya que el Reino Chu pedía la perdición, ¡la harían!

"Acabo de enviar a Lei Zhen a asesinar a Zhao Qing. ¿Afectará a tu plan?"

Después de un momento de contemplación, Shen Liang le miró.

"¿Zhao Qing?"

Alzando las cejas, Pei Yuanlie bajó los ojos al mirarle. El mariscal de Chu es He Chengfeng. ¿Cómo podría haber pensado en asesinar a Zhao Qing?

"Bueno, he oído que es feo y tengo un problema con él."

Asintiendo, Shen Liang se inventó casualmente una razón, lo que hizo que Pei Yuanlie no pudiera evitar soltar una risita. "¿Debería sentirme afortunado por ser guapo?"

De lo contrario, tendría que preocuparse constantemente por su propia vida.

Tras un breve aturdimiento, Yaoguang no pudo evitar taparse la boca y soltar una risita. Liang Liang era realmente bueno diciendo gilipolleces, y sólo él se atrevía a decir tonterías delante del maestro con tanta seriedad.

CAPÍTULO 315. REUNIÓN OFICIAL DE LOS HERMANOS (1)

"Por supuesto. Te pareces a Qin Jian, por no hablar de comprometerme contigo, ni siquiera te daría una segunda mirada."

Su hermano mayor estaba bien ahora, y Xiao Yu no parecía tener ningún gran problema, y estaban Huo Yelin y Pei Yuanlie en el campo de batalla, no había necesidad de preocuparse por nada ahora, Shen Liang ahora tenía humor para bromear.

"¡Qué travieso!"

Pei Yuanlie sonrió e inclinó la nariz, "Zhao Qing podría considerarse ahora un general tigre a las órdenes de He Chengfeng. Tiene una gran reputación en el Reino Chu, pero ¿no crees que sería mejor asesinar a He Chengfeng?"

Como comandante en jefe, una vez muerto He Chengfeng, esta batalla declararía un final anticipado, pero...

"¡Ahórratelo! ¿De verdad crees que no sé nada de política?"

Lanzándole una dura mirada, Shen Liang continuó: "el Reino Chu no es Gran Qin. He Chengfeng no es sólo el general, sino también el yerno del emperador del Reino Chu. Su prestigio en el Reino Chu no es inferior al de Liangliang, e incluso puede igualar al de la familia Wei en Gran Qin. Si lo asesinamos en ese momento, sería extraño que el Reino Chu no lanzara ataques más locos contra Gran Qin. No olvides que Gran Qin ha sido severamente golpeado por adversidades naturales este año, y las condiciones nacionales son aún peores que el Reino Chu. Si van por la campana del reino, seríamos sólo nosotros los que sufriríamos pérdidas."

La supervivencia de Gran Qin no tenía nada que ver con él, pero no podía dejar que la cosa perdiera el control en estos momentos.

"Estás muy bien informado. ¿Sospechas que Liu Wenjin está confabulado con el Reino Chu?"

Lanzándole una mirada gratificante, Pei Yuanlie dijo de repente con tono serio. Ya había hablado con Huo Yelin, y también pensaban que el momento de la invasión militar del Reino Chu era demasiado coincidente. Además, según los recuerdos de Huo Yelin, el día que hirieron a Shen Da, le pareció haber visto las figuras del espía del Reino Chu cuando llegó. Si no hubiera estado demasiado preocupado por Shen Da y temiera retrasar su tratamiento, ya habría atrapado a esas personas.

"No es Liu Wenjin, es Qin Yunshen."

Bajando los ojos, Shen Liang pareció frío y dijo: "El veneno de mi hermano mayor viene de la Mansión del Cuarto Príncipe. Sobre el asesinato, también debe tener parte del mérito de Qin Yunshen."

El Alma Oscura mejorada es una de las armas imprescindibles de Qin Yunshen. Era una persona desconfiada, aunque Liu Wenjin hubiera estado con él tantos años, no le habría dado algo tan importante. La única posibilidad era que Liu Wenjin quisiera matar a su hermano mayor para que no tuviera vuelta atrás, y Qin Yunshen lo aprobaba tácitamente.

"¿Qin Yunshen?"

Pei Yuanlie frunció el ceño. Realmente no esperaba que el príncipe del Gran Qin se hubiera confabulado con el Reino Chu y se hubiera convertido en un traidor. ¿Quería ofrecer su Gran Qin al otro bando?

"Lo sabremos después de preguntar a mi hermano mayor. Él debe saber algo, Yaoguang, ¿algún resultado del asunto que te pedí investigar?"

Aunque probablemente estaba confirmado, Shen Liang todavía preguntó. Yaoguang ahuecó las manos y respondió con seriedad: "Mi princesa heredera, como usted esperaba, Liu Wenjin no está en la mansión. En cuanto a si está o no en la ciudad imperial, como tenía prisa por alcanzarte, no tuve tiempo de indagar más."

"No hay necesidad de hacer eso, no estar en la Mansión Liu es suficiente para explicarlo todo."

Con un gesto de la mano, Shen Liang quiso dar un paso adelante: "Vamos a ver cómo está mi hermano mayor. Aunque le han quitado el veneno, la herida tardará al menos siete u ocho días en curarse, y no puede usar artes marciales por el momento, debe descansar de tres a cinco meses hasta que crezca la nueva carne... ¿qué estás haciendo?"

Antes de que Shen Liang pudiera terminar de hablar, fue cogido por Pei Yuanlie, lo que le asustó ya que rápidamente le agarró del cuello. Su pequeño puño no pudo evitar golpearle el hombro.

"Tu propia herida aún no se ha curado. Puedes irte, pero sólo en mis brazos. Si no, antes de recuperarte de tu herida, quédate en la cama obedientemente."

Sujetando su cuerpo ligero, Pei Yuanlie no parecía estar bromeando en absoluto. Antes, le había dejado venir porque la situación era realmente urgente. Ahora que todo había terminado, no le dejaría meterse en líos otra vez.

"..."

Su Alteza habla en serio esta vez

La boca de Shen Liang se crispó, y después de un momento, lo abrazó con una expresión halagadora en su rostro y dijo: "De acuerdo, te escucharé. Su Alteza, ¿puede llevarme a ver a mi hermano mayor ahora?"

"Siempre y cuando te comportes."

Mirándole, Pei Yuanlie lo dijo, y al mismo tiempo, dio un paso adelante. En lugar de seguirle el paso, Yaoguang se escondió con un destello. Con Su Alteza alrededor, él, a quien se le había ordenado proteger a Liangliang, era innecesario.

En la habitación principal de al lado, Shen Da, que se había dormido muy tarde la noche anterior, también se despertó temprano por el cuerno. Al enterarse de que el Reino Chu había estado atacando la Ciudad de Ding'an durante los últimos días, su cara se puso inmediatamente muy fea, y su mirada hacia Huo Yelin estaba llena de sentimiento de pena. Aunque Huo Yelin no dijera nada, podía imaginar lo difícil que había sido para él estos últimos días.

"¿Cuánto tiempo vas a seguir mirándome así? Ya ha pasado todo. Mientras estés bien."

Después de discutirlo con Pei Yuanlie, Huo Yelin ordenó hoy colgar su tarjeta de exención y ya no participar personalmente en la batalla. Deliberadamente dio al enemigo la impresión de que ya eran insoportables. Tras regresar, sirvió personalmente a Shen Da para que tomara medicinas e ingiriera alimentos, mientras le miraba así, lo que le hizo sentirse un poco avergonzado. Una vez que este hombre abrió su mente, era cierto que estaba caliente, pero su inteligencia estaba algo estirada.

"Yelin... ¡Mierda! ¡Pei Yuanli! ¿Quién te ha permitido sujetarle así?"

Shen Da, que estaba sentado junto a la cama, estaba a punto de mantener una conversación con su esposo, pero por el rabillo del ojo, vio accidentalmente a Pei Yuanlie que se acercaba a grandes zancadas cargando con alguien. Al darse cuenta de quién era esa persona, Shen Da gruñó, olvidándose por completo de todo.

Huo Yelin se tocó la frente con impotencia. Así que lo que había dicho anoche no era nada. Una vez que Liangliang estaba cerca, su hombre tonto se volvía más tonto.

"¿Necesito el permiso de alguien para abrazarle?"

CAPÍTULO 316. REUNIÓN OFICIAL DE LOS HERMANOS (2)

Sin llevar en absoluto su enfado a los ojos, Pei Yuanlie llevó a Shen Liang a la cabecera de la cama y lo acostó con cuidado.

"Por supuesto que yo..."

"Hermano..."

La ira de Shen Da desapareció instantáneamente por completo después de que Shen Liang le llamara así. Con el movimiento de girar la cabeza, sus ojos se centraron totalmente en Shen Liang, y un sentimiento agrio y astringente surgió rápidamente en sus ojos mientras también llamaba con cierta dificultad: "Liangliang..."

Un Liangliang contenía miles de palabras...

"Hermano..."

Shen Liang derramó lágrimas en el acto y se lanzó a sujetarle la cintura, pero sin olvidar evitar cuidadosamente la herida de su omóplato izquierdo. "Hermano, hermano..."

Era estupendo que estuviera bien. El cielo sabía lo temeroso que estaba de llegar tarde por el camino. Incluso no se atrevía a dormir demasiado apretado durante las dos horas de descanso diarias, temeroso de que Yuanlie se sintiera apenado y no tuviera corazón para despertarle si dormía demasiado apretado, retrasando así su viaje. Ayer, al verle tendido inconsciente en la cama, Shen Liang sólo sintió que sus fuerzas se habían agotado, y su corazón casi dejó de latir. Ahora, al ver que podía sentarse bien en la cama, ya no pudo contener las lágrimas de emoción y alegría. Esta vez, por fin compensaba la estupidez de su vida anterior y sacaba personalmente a su hermano mayor de las manos de la Muerte.

"Liangliang..."

La mano que podía moverse se levantó y le abrazó débilmente. Los ojos de Shen Da también se humedecieron. Después de cinco años, Liang Liang había pasado de ser un niño que necesitaba que lo vigilara y protegiera en todo momento a un adulto, e incluso ahora lo salvaba. A lo largo de los años, nadie sabía por lo que había pasado. Se culpaba a sí mismo por ser un inútil. Si hubiera podido ser más fuerte, no habría sufrido tanto.

A un lado, Huo Yelin le lanzó a Pei Yuanlie una mirada de "debemos hacer algo o no", y éste puso los ojos en blanco. Si pudiera hacer algo, ya lo habría hecho. Liangliang lloraba de alegría. ¿Qué podía hacer sino compadecerse de él en silencio?

Bien.

Después de entender el significado de Pei Yuanlie en los ojos, Huo Yelin también se limitó a dejar que los dos hermanos que se habían reunido después de una larga separación se agarraran la cabeza y lloraran amargamente. Cuando se les acabaran las lágrimas, naturalmente se detendrían.

Para Shen Da, sólo habían pasado cinco años desde que vio a su hermano menor, pero para Shen Liang, habían abarcado las dos vidas enteras, especialmente que Shen Da fue brutalmente asesinado por su culpa. La alegría del reencuentro impactó fuertemente en el esbelto cuerpo de Shen Liang, haciéndole sentir como si estuviera hecho de agua y no pudiera contener las lágrimas.

"Liangliang, deja de llorar. Levántate y déjame echarte un buen vistazo."

Viéndole llorar tan fuerte que su garganta se volvía ronca, Shen Da se sintió inexplicablemente apenado. Sin embargo, ahora no podía hacer uso de su fuerza, sino que sólo podía decir con la mayor calma posible.

"Hermano..."

Shen Liang sollozaba mientras apuntalaba su cuerpo, alternando el dorso de sus manos para secarse las lágrimas. Al ver esto, Pei Yuanlie no pudo soportarlo más y le tendió en silencio un pañuelo. Shen Liang tenía los ojos llenos de lágrimas, pero aun así le lanzó una mirada de agradecimiento. Al ver aquello, Pei Yuanlie no tuvo más remedio que alargar la mano y tocarle la cabeza, pero Shen Da no pudo evitar un tic en la comisura de los labios. Inmediatamente, sintió que todo no estaba bien. Su hermano pequeño, que por fin había crecido, como la col, ¿era manoseado por un cerdo? Si fuera posible, él realmente quería ser carnicero.

"¡Tú!"

Huo Yelin se sentó a su lado, con un tono lleno de impotencia. Normalmente era un hombre tan serio y recto, y cuando se trataba de cosas sobre su hermano menor, era como un niño, haciendo que la gente se enfadara y se divirtiera a la vez.

¿Qué me pasa? ¿No es que tengo miedo de que a mi hermano pequeño se lo lleve un lobo, sin dejar hueso?

Shen Da le dirigió una mirada agraviada, alargó la mano y agarró la de Shen Liang, llamando su atención de nuevo. "Liangliang ha crecido, y apenas pude reconocerle, pero sigue siendo tan hermoso como imaginaba."

"Hmm, tú también eres tan guapo y tan capaz".

Asintiendo, Shen Liang también le dio su cumplido. En su mente, su hermano mayor era el más guapo, e incluso Su Alteza tuvo que admitir ser secundario ante él.

"¡Tu boca sigue siendo tan dulce como cuando eras un niño!"

El tonto hermano mayor, que recibía un cumplido de su propio hermano menor, le pellizcó la cara cariñosamente. De repente, se sintió un poco apenado y dijo: "¿Soy capaz? Si realmente fuera capaz, no te habría dejado sufrir durante tantos años."

Shen Da se había entristecido profundamente por no haber podido evitar que su hermano menor fuera enviado lejos ese año, y sentía que se lo debía. Su padre había fallecido pronto, y su hermano mayor era como un padre. Debería haber hecho todo lo posible para protegerle y darle lo mejor, pero la realidad le había dejado incapaz de cumplir sus expectativas. En cinco años, Liangliang pasó de ser un niño tímido a un hombre tan sobresaliente ahora, y había aprendido notables habilidades tanto en medicina como en veneno, incluso se atrevió a viajar miles de li al noroeste después de saber que estaba envenenado, incluso sin preguntarle, sabía qué clase de vida había estado viviendo en esos años.

"No digas eso."

Al oír eso, Shen Liang se puso la mano en el dorso de la mano y dijo ansiosamente: "No es así. Eres el mejor hermano mayor. Si no fuera por ti, ni siquiera habría tenido la oportunidad de crecer. Si no fuera por mí, no habrías... como hijo mayor legítimo, no habrías tenido que venir al campo de batalla del noroeste a sufrir. Te hice daño, pero hermano, créeme, no dejaré que nadie vuelva a intimidarnos como hermanos en el futuro. Haré que los que nos han intimidado antes paguen el precio uno por uno."

Al final de sus palabras, la expresión y el tono de Shen Liang se volvieron severos, con una aguda luz reflejada en sus pupilas. Nunca olvidaría lo enfadado, resentido y arrepentido que estaba en el último momento de su vida anterior. Ya que el cielo le había dado la oportunidad de empezar de nuevo, esta vez, debía hacer que esas personas también probaran todos los dolores que él había experimentado en su vida anterior, y finalmente morir trágicamente.

"Liangliang..."

Tocando sus agudos ojos, Shen Da se quedó ligeramente aturdido y luego asintió con severidad: "¡De acuerdo, nunca podemos dejar ir fácilmente a aquellos que nos han intimidado!"

No importa cuánto dolor experimentara su hermano pequeño antes de transformarse en lo que es hoy, Shen Da hizo un solemne juramento en su corazón en este momento: ¡haría que mucha gente se arrepintiera de haber venido a este mundo!

"¡No te olvides de contar conmigo!"

Huo Yelin se apoyó en el hombro de Shen Da. Intimidar a su hombre era intimidarle a él. Le gustaría ver cuántos demonios y fantasmas había en la familia Shen.

"Haz lo que quieras, no importa cuán grande sea el problema que causes, yo estaré a tu lado."

Poco dispuesta a quedarse atrás, Pei Yuanlie miró a Shen Liang con ojos cariñosos. Después de experimentar tantas cosas, su afecto por Shen Liang no hacía más que aumentar. Sólo quería hacer lo posible por quererle y mimarle, convirtiéndole en el Shuang'er más noble y feliz del mundo.

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