Alex
—Te dije papá la única manera en la que estudié, es que sea música o nada mas
—Y yo te dije que mi casa mis reglas, así que no se discute —rodé mis ojos
Llegamos a la universidad, mis padres bajaron de inmediato, me tome unos pocos minutos en procesar aquello, era estúpido que me la pase estudiando cuatro años una carrera que no le veo ningún sentido alguno, pero no podía hacer nada al respecto.
Me había librado de ello un año, fue el tiempo que mi padre me tolero de que no asistiera a la escuela y me dedicara a trabajar, pero luego la idea dejo de gustarle y decidió que era momento de inscribirme a la escuela, admito que, a pesar de que me dique a trabajar, ese año había sido todo un lujo, porque en mis tiempos libres podía estar con mi guitarra, haciendo lo que más me gusta.
—El papeleo no es muy complicado, su hija solo tiene que llenar los papeles y nosotros haremos el resto —comento aquella secretaria
—¿No tendríamos que hacerlo nosotros? —pregunto mi madre
—Tendrían, pero la joven es mayor de edad, así que ella puede hacerlo sola —bufé
Rellené todo lo que aquel papel decía, pero me detuve un momento en aquellas casillas.
Carrera a la cual aplicar.
Medicina []
Administración []
Contaduría []
Gastronomía []
Leyes []
Arte []
Música []
Ahí estaba, entre otras carreras más, aquella fue la única que me llamo la atención y despertó mi curiosidad, ¿y si la marcaba? No, no podía, mis padres iban a terminar enterándose.
—Alex, ¿ya está? —hablo mi padre
Marqué aquella carrera por la cual habíamos venido y, al hacerlo, vi un buen futuro irse de mis manos.
—Perfecto, nosotros terminaremos el papeleo —comentó aquella secretaría una vez que le di la hoja—, le enviaremos un correo electrónico indicándote tu horario de clases y tus aulas
—Muchas gracias
Me levante una vez que mi madre agradeció, no me quede a escuchar que más decía, me apresure a salir de aquel lugar.
—Es estúpido hacer esto, yo no quiero estudiar leyes y ustedes no quieren gastar su dinero, a mi parecer es un muy buen trato —solté una risa negando
Al parecer había más chicas como yo en la misma situación. Vi aquella rubia renegar ante su madre, no escuche que más dijo al voltear, vi un mechón azul salir de su cabellera rubia.
—Vámonos Alex —seguí a mis padres una vez que salieron de la oficina
Durante todo el camino mis padres charlaron de como seria una grandiosa idea aquello, las posibilidades que tendría y como podría salir adelante, me dedique a escuchar mi música haciendo que "los escuchaba" entre ratos.
Ese mismo día me escape de casa, habría una fiesta en las afueras de la ciudad y no pensaba perdérmela. Al llegar el ambiente se miraba increíble, había demasiadas personas en aquel lugar, me adentre más a la fiesta y tome un trago en el camino.
La música estaba bien, pero decidí salir de la casa, unas bandas improvisadas estaban cantando. Me quede un par de ratos escuchando aquellos chicos, y si mi mente no le gustara divagar, me imagine en aquel lugar, teniendo una banda, haciendo que las personas proclamaran mis canciones, logrando lo que de verdad quiero.
—Oh, disculpa amiga, que torpe —mire mi ropa
Aquella chica había chocado conmigo, y quise asegurarme de no haber derramado alcohol encima.
—Descuida, no sucedió nada —comente asegurándome
Al mirarla, recordé a la chica rubia que había visto en la mañana. Ella frunció su ceño al verme.
—¿Nos conocemos? —negué
—No, bueno te vi hoy en la universidad —asintió—, no sé si también...
—Sí, si lo recuerdo, ibas saliendo cuando mis padres iban entrando —asentí—. Samantha Wells, encantada —tome su mano cuando la extendió
—Alexandra Rooney
—Son buenos eh —comentó refiriéndose a la banda de aquellos chicos
—Muy buenos
—¿Fumas? —asentí tomando el cigarrillo que me ofreció— ¿Qué vas a estudiar?
—Mis padres me obligaron a estudiar administración de empresas —comente dándole una calada
—Mierda —expulso el humo—, los míos me mandaron a leyes —hice una mueca
—No se que es peor
—Cuando no te apasiona la carrera, todo es peor —asentí dándole la razón—. Cuanto daría por estudiar música —la mire, su mirada seguía en la banda
—¿Tocas algo?
—De todo —dio una calada—, pero me gusta más el bajo y la guitarra eléctrica —asentí—, ¿y tú?
—La guitarra eléctrica —asintió
Sam
—Tendremos que poner reglas en esta casa —enarque una ceja
—¿Hablas en serio?
—Sí Sam, hablo en serio. Tenemos que vivir ordenadamente, y para eso tenemos que tener unas reglas básicas —rodé mis ojos
Saque un churro para poder soportar el sermón que estaba apunto de darme.
—Y como punto número uno
—¡Hey! —me había quitado mi churro
—Nada de cigarros en la casa —la mire mal
—Es un churro de marihuana —abrió sus ojos como platos
—Ni esto, ni ninguna droga, Sam —rodé mis ojos, le quité mi churro—. Hablo en serio Sam, no quiero la casa con olor a cigarro
—Mira Emma —di una calada—, ambas somos las dueñas de este lugar, ambas tenemos habitaciones —asintió—, por ende, ambas tenemos derecho a todo
—No quiero olor a cigarro en la sala —repitió
—Bien, fumare en mi habitación —iba a protestar, pero la corte— Mi. Habitación. —puntualice
—De acuerdo —me miro cuando di otra calada—, tu habitación —rodé mis ojos, apague el churro para que no siguiera armando más escandalo
Y tuve que pasar un rato entero escuchando todas y cada una de las reglas absurdas que ella había impuesto, reglas obvio que no iba a obedecer, o no la mayoría.
Después de aquello necesitaba escapar de su vista por un largo rato.
Estacione en cuanto llegue a la fiesta, al adentrarme tome un poco de alcohol en el camino. Alex me había enviado un mensaje de que vendría con retraso, después de haber convivido en la fiesta hace semanas mantuvimos la conversación.
Aparte de que a las dos nos unían los problemas familiares, había algo todavía mucho mejor que nos unía, el amor por la música.
Estuve un rato contemplando la banda que se estaba presentando, por lo que había escuchado aquella banda era de la universidad, y los chicos en verdad tocaban asombroso.
Fruncí mi ceño al ver que algunas personas corrían hacia otro punto de la fiesta y como si el chisme no me gustara fui de metiche a ver de que se trataba.
Al parecer se debía a una pelea, ya que había varias personas mirando el espectáculo, a como pude me escabullí para ver mejor de quien se trababa, en el camino maldije por debajo al perder mi bebida.
Un par de chicos se estaban peleando, el castaño iba ganando, pero aquel chico rubio se incorporó dándole un buen golpe en la mejilla al castaño, haciendo que él cayera.
—¡Déjalo ya! —una chica de cabello castaño por encima de sus hombros entro a la discusión
¿Esa chica estaba loca?, ¿por qué interfería?
Aquel chico castaño se levanto e intento dar otro golpe, pero aquella chica o detuvo, el rubio no dudo en darle un puñetazo.
—¡Uy!, eso debió doler
La chica ni siquiera se movía, miro su labio sangrar, el castaño sonrió negando y se alejo un poco, la chica le dio solo dos puñetazos aquel chico rubio, y solo eso basto para dejarlo en el suelo.
Las personas abuchearon y comenzaron alejarse del lugar.
—Wooo, recuérdame no meterme contigo —comente mientras llegaba a su lado
Ella rio negando.
—Bueno, eso es lo que pasa cuando Taylor no controla sus enojos —el chico nos miró a ambas—, iré por algo para curarte el labio —se alejó de nosotras
—¿Novio? —pregunte, ella frunció su ceño
—No —negó—, se me dan mejor las chicas
—Eres de las mías entonces —asintió riendo—, buena pelea Taylor
—Gracias...
—Samantha Wells —tendí mi mano y ella la tomo
—Taylor Garnet
—Te vez muy quieta para aparentar que sabes pelear —empezó a reír
—Gracias —dejo de reír—, tengo problemas de ira, tiendo a golpear muy fuerte cuando estoy en ese punto —miro aquel chico que seguía en el suelo—, ese chico ya nos había fastidiado la noche —asentí
—¿Ves a un doctor?
—Terapias —asentí
—Sam, te he estado buscando
—Oh, lo siento Alex, me entretuve viendo un espectáculo —asintió—. Te presento a Taylor, Taylor ella es Alex —se dieron la mano
—Un gusto
—¿Qué te paso? —señalo su labio que estaba un poco morado y ensangrentado
—Nada grave, un espectáculo —reí asintiendo—, ¿tienen una banda? —fruncí mi ceño
Mire a Alex, no me había dado cuenta que traía una guitarra consigo.
—No, no —negué—, estamos en proceso
—Tocaremos justo ahora —mire a Alex
—¿Ahora? —asintió
—Te dije que tenía una letra guardada —se encogió de hombros—, tú me dijiste que para improvisar eres muy buena —asentí
—Lo soy sí, pero esto se ve con antelación ¿sabes? —se encogió de hombros—, aparte ¿no nos falta una baterista?
—Ya conseguiremos a alguien, tenemos que tocar después de esta banda
—Pero, Alex —se había alejado
De lo poco que la conozco sé que cuando una idea se le mete a la cabeza, no hay quien la saque de ahí, y sé que cuando se trata de la banda hace lo que sea.
Aquel chico regreso con un poco de alcohol y un paño para pasarlo en la herida de Taylor.
—Tienes problemas de ira dijiste —asintió, mientras se quejaba por el ardor en su herida— ¿Tocas la batería?
Cuando vivía con mis padres todo el tiempo estaba frustrada y siempre quería golpear algo, la batería ayudaba mucho en aquellos momentos de ira, así que tenia que preguntar y si no lo hacía, estaba desperdiciando una oportunidad.
Aquel chico dejo de colocar el paño en su labio y me miro.
—Taylor es asombrosa en la batería —aseguro, mire a Taylor
—Tampoco exageres John
—Entonces es verdad
—Toco un poco, sí
—¡Sam! —mire a Alex que me hacía una seña para que me acercara
—¿Tocas con nosotras? —sus cejas se alzaron ligeramente
—No conozco la canción, ni siquiera hemos ensayado la melodía —me encogí de hombros
—Ni siquiera nosotras. Vamos, es todo o nada —me miro, luego miro a su amigo que le indicaba que nos siguiera, miro hacia donde Alex estaba
—De acuerdo —sonreí
—Lo haremos bien, y si no —me encogí de hombros—, de los errores se aprenden
Taylor
Estábamos apunto de cometer una completa locura.
Estas tipas están locas al cantar algo sin haberlo ensayado.
Pero más loca estoy yo por ayudarlas.
—Te envié la letra por un mensaje, dale una revisada —asentí sacando mi teléfono
Me había pedido mi número para mandarme la letra, ella había entendido que era una locura tocar sin ver la letra, así que me ayudo en eso, aunque creo que lo del número fue innecesario, no creo que nos vayamos a ver después de esta noche.
Le di un par de repasadas a la letra, debo admitir que era buena, entendí en que tiempo podía entrar y en qué momento podría dejar de tocar, solo espero ellas estén de acuerdo con la decisión.
Cuando aquellos chicos dejaron de tocar, empecé a sentir nervios, nunca antes había tocado para un grupo de personas, o para una persona, solo tocaba en le garaje de mi casa. Me estaban empezando a sudar las manos.
—Animo Taylor, lo haremos bien —asentí, Sam me animaba un poco
Me coloque en aquella batería, tome las baquetas con un poco de torpeza, sentí la mirada de Alex encima de mí, de reojo vi que miraba a Sam y ella solo le sonreía.
La pelinegra no tenía nada de fe en mí, pero aquella chica rubia estaba segura de mi talento sin siquiera conocerme y solo eso me bastaba.
Aunque no me sentía cómoda con aquella batería tenia que lograrlo, nunca había tocado en ninguna otra que no fuera la mía, pero bueno, para todo hay una primera ves ¿no?
Escuche las guitarras, a la tercera rasgadura entre con un poco de rapidez, el ritmo iba aumentando al ritmo de las guitarras, estamos en sincronía, Sam me dio una mirada de aprobación. Trate de no ver mucho al público para no ponerme más nerviosa de lo que ya estaba.
Alex comenzó a cantar, mantuve el ritmo, aunque ellas disminuyeron sus guitarras, cuando el coro entro creí que sería buena idea solo sonar los platillos en tono bajo, y así me mantuve en unos instantes, luego retome mi ritmo. Cuando a voz de Sam entro deje de tocar, Alex solo la acompañaba con pequeñas rasgaduras, me hizo la indicación que entrara despacio, luego me detuve y retomamos el ritmo, sonreí a la par que me daba la aprobación. En la última parte de la canción me pidieron elevar el ritmo y ellas hicieron lo mismo, cuando la canción termino unos aplausos de hicieron presentes.
Aquella canción había estado sencilla, y un poco corta, pero el sentimiento que Alex quiso transmitir en la letra fue mucho.
—¡Otra, otra, otra! —el público aclamaba
—Eso fue una puta locura —Sam rio—, eres buena Taylor
—Ustedes igual chicas
—Tengo una canción más, ustedes dicen si la cantamos —Alex nos miró, mire a Sam
—Ya estamos aquí ¿qué no? —ambas me miraron
—De acuerdo —sonrieron
¿Qué podíamos perder?
La canción estuvo bien, y supimos coordinarnos muy bien, hubo uno que otro mínimo error, porque supongo que ellas son igual de primerizas que yo en este ámbito, pero fuera de eso, aquella tocada estuvo bien.
Decidí disfrutar eso, al final de todo sabía que no las volvería a ver.
🥁
Fruncí mi ceño cuando tome mi teléfono, en el había muchas llamadas perdidas de Sam, me había entretenido jugando tanto, que no escuche aquellas llamadas.
Regrese la llamada sin dudarlo, ella no tardo mucho en atender.
—Taylor, hola
—Hola Sam, ¿Qué paso?
—Sabes que ese día te dije que tienes un gran talento con la batería
—Lo recuerdo
—Genial, Alex y yo queríamos ver si quieras tocar con nosotras de nuevo —mis cejas se alzaron ligeramente
—¿Hablas en serio?
—Jamás bromeo —asentí dándole la razón
—¿Cuándo es?
—El sábado
—De acuerdo
—Genial, sabía que no me defraudarías
—¿Me mandaras la dirección de la fiesta?
—Sí, claro, pero..
—¿Pero?
—Alex, quiere ensayar antes
—Ah, de acuerdo
—¿Tienes algún lugar donde podamos ensayar? —hice una mueca
Hice memoria, mis padres saldrían en un rato y no volverían hasta más tarde y mi hermano jamás le ha molestado que yo me ponga a practicar en la batería.
—Podrían venir a mi casa en un par de minutos
—Genial, tu siempre tan amable
—Te enviare la dirección, te aviso a que hora pueden venir
—Claro, claro
—Bien
—Gracias Taylor
—No hay de que —colgó
Bufé dejando mi teléfono de lado, le di play a mi videojuego y me concentré en ellos. Cuando me aseguré que mis padres se habían ido, le envié la dirección a Sam, no tardaron mucho en llegar a mi casa.
—Que puntuales —comente una vez que llegaron a mi garaje
—Ha Alex le gusta la puntualidad —comento Sam, sentándose en el sillón que había ahí
—¿Es tuya? —pregunto Alex señalando mi batería
—Sí
Alex dejo la guitarra de lado y le entrego a Sam una.
—Tendremos una tocada el sábado, en una fiesta por la avenida veintisiete, alguien nos vio tocar en la fiesta de hace tres semanas y nos contactaron —asentí ante la información que Alex nos dio
—De acuerdo, ¿cantaremos las mismas canciones?
—¿Tienes algo más? —preguntó Sam mientras afinaba su guitarra
—No, creí que ya tenían algo más —comenté acercándome a mi batería
—Tengo unas letras, pero les falta —asentí ante el comentario de Alex—, tal vez ustedes sean de ayuda
—Podremos con eso —comento Sam muy segura
—Bien, repacemos primero las que ya tocamos —Alex nos dio unas hojas con las letras de las canciones—, me gustaron tus entradas en la primera canción, si puedes repetirlo te lo agradecería —sonreí asintiendo
—Lo haré
—De acuerdo, supongo que no tendremos mucho tiempo y si queremos vernos bien hay que darnos prisa —asentí dándole la razón
Empezamos a tocar la primera canción que cantamos aquel día, Alex en verdad tenia buen oído, solo hizo un par de modificaciones a mis entradas, y a las de Sam igual, ellas terminaron de a completar las canciones que Alex ya tenía, y las ensayamos de paso.
La tocada había sido todo un éxito, ensayar si nos había servido de mucho y nos ayudo a mejorar, las personas no dejaban de aclamarnos por más canciones, pero lamentablemente para nosotras solo eran las únicas que teníamos, Alex nos dijo que nos habían pagado por la tocada y aunque no fue mucho lo vimos justo.
Creí que después de esto no volvería a suceder nada, solo éramos tres desconocidas a las cuales se les ocurrió una locura y funciono, pero en el fondo sabíamos que esto era el inicio de algo.
Me dio sentimiento escribir esto.
Se que varios necesitaban saber cómo mis tres hijas talentosas se habían conocido, solo necesitaba el momento justo para publicar esto. 🥺
La historia lleva más de 60K de lecturas, y en verdad no saben lo agradecida que estoy por haberme dado una oportunidad de entrar a su vida a través de esta historia.
Gracias a las personas que esperaban meses por un capítulo y gracias a los nuevos que recién llegan.
Octubre siempre ha sido un buen mes para mi y necesitaba contarles este inicio de esta bella historia en este bello mes.
Espero les haya gustado, se que varios querían un extra y sé que también quieren un extra de otras cosas, se los traeré porque yo hago lo que ustedes pidan🫡. Solo les pido paciencia, saben que Alex siempre cumple lo que promete.
Nos vemos luego mis lectorxs, y gracias a los que le están dando una oportunidad a mi nueva historia🫶🏻.
Recuerden que en mi insta tienen las ilustraciones de mis niñas🫶🏻.
Insta: Alex_escritor08
Alex 🎸