Mia y Mack habían logrado salir del lugar y en la salida se habían encontrado con Laila y Brian, así que los cuatro decidieron marcharse de ahí juntos y sabían que se iban a encontrar con Dominic más adelante. Y así lo hicieron, los cinco salían de unos túneles de desagüe pues según Mia era buena idea y Laila la había apoyado al igual que Mack, el resto solo acepto.
—No entiendo en qué momento acepte este trabajo— se quejó Mack mientras salía del túnel del desagüe.
—Está vez estoy totalmente de acuerdo contigo— concordó Laila.
Pero aquellas quejas fueron ignoradas por Dom, mientras que Mia solo asentia, pues también entendía la razón por la que se quejaban ellos dos, Brian solo reía un poco por su actitud.
—Ahora nos buscarán a los cinco juntos— hablo Dominic, haciendo que el resto se detuviera y lo miraran prestando le completamente su atención. —Hay que separarnos.
—¿Qué?— Laila estaba desconcertada ante el pedido de su hermano, apenas se habían reunido y Dominic ya pensaba en que debían de volver a separarse.
—Mack— hablo Dom ignorando la pregunta de Laila. —Tu y Mia huyan al sur, Brian y Laila hacia el oeste, yo los desviare.
—No— negó Mia.
—Dom tiene razón— interrumpió Brian.
—Puede ser— fue lo único que dijo Laila.
—A la siguiente no escaparemos, así que tenemos que separarnos— termino Mack, recibiendo una mala mirada de Mia.
—¿Y durante ese tiempo nos mantendremos ocupados?— cuestionó Laila.
—Si, y si las cosas se alivianan podremos reunirnos, nuevamente— aclaró Dominic. —Pero por ahora tenemos que separarnos.
—Bien, hagámoslo— acepto Laila, todos estaban de acuerdo en ello, todos, excepto Mia.
—¿A nadie le importa mi opinión?
—Mia, ya lo ha dicho Dom— hablo Mack poniéndose enfrente de Mia, tratando de convencerla. —Solo será por un tiempo.
—Siempre dicen que es por un tiempo— hablo molesta Mia. —La primera vez duró cinco años.
—Pero está vez solo fueron semanas distanciados— intervino Laila.
—¿Y eso se supone que me tranquilice?— miro está vez a su hermana, la cual ni respondió. —¿Y si está vez son más de cinco años?
—Es por el bien de todos— dijo Dom, pero Mia negó.
—Estoy embarazada— todos se quedaron boquiabiertos observando a Mia, apenas procesaban aquella información, Mia estaba embarazada, como era posible eso. —Un día perdí a mi familia, no quiero que vuelva a suceder.
El primero en acercarse a Mia, fue Mack, la tomo por el brazo y la inspeccionó aún dudando de lo que había dicho Mia.
—¿Es una broma?— Mia solo una risa y negó con la cabeza, sin previo aviso Mack beso a Mia para después abrazarla.
Todos observaban a aquella pareja aún en shock, una vez que ellos dos se habrían separado se acerco Laila y detrás de ella Brian.
—¿Embarazada?— dijo Laila con cierta emoción. —¿Hablas enserio?— Mia rió y asintió con un movimiento de cabeza. —¡Oh dios!— exclamó la menor. —Voy a ser tía.
—Y yo seré tío— festejo Brian, de los dos, él fue el primero en abrazar a Mia. —Felicidades, Mia.
—Gracias Brian— respondió Mia correspondiendo el abrazo del rubio.
Brian una vez que dejó de abrazar a Mia, se acercó a su amigo Mack, ambos se abrazaron, Mack estaba totalmente emocionado con la idea de que sería padre, nunca se le había cruzado aquella idea por la cabeza, pero en realidad le gustaba aquello.
—Seran unos buenos padres— decía Brian a la vez en que le daba unos golpes en la espalda a Mack. —Felicidades amigo.
Laila aún seguía sin creer que su hermana mayor fuera a ser madre, solo tomo unos segundos para que ella ya se encontrará abrazando a su hermana.
—Necesito ser la madrina— sugirió emocionada.
—Lo serás— le sonrió Mia, ambas hermanas se miraron una vez que se separaron del abrazó. —Ahora, ¿Sigues pensando en que debemos separarnos todos?
—No, yo no me iré— aclaró Laila. —Ire contigo y Mack si es que Dom sigue con la idea de tomar distintos caminos.
Mack y Brian se colocaron a un lado de las dos hermanas y se miraron entre si.
—Yo tampoco voy a ningún lado— hablo Brian apoyando la decisión de Laila.
—Mucho menos yo— admitió Mack. —Estare a tu lado Mia— le mostró una sonrisa la cual la chica devolvió inmediatamente.
—Dom— hablo Laila a su hermano, haciendo que esté los mirará a los cuatro, el había estado callado en todo ese momento, aún entendiendo que ahora una de sus hermanas estaba embarazada.
—Promete que seguiremos juntos— Dom sonrió a su hermana, y asintió.
—Lo prometo— camino hacia los cuatro y abrazo primero a sus dos hermanas. —Vengan aquí ustedes dos también— les dijo a Mack y Brian, y al instante se unieron al abrazo familiar. —La familia está aumentando— soltó con cierta emoción haciendo reír al su familia.
[....]
Hobbs y su equipo se encontraban inspeccionando el lugar donde habían estado quedandose las últimas horas, unos dos días o algo así, revisaban el auto y como lo habían dejado todo desarmado, buscaban pistas por toda la habitación, huellas, información, todo lo que encontrarán servía. Cada uno tenía algo que hacer según las órdenes que les daba Hobbs, algunos revisaban el auto, otros buscaban pistas por otros lados, entre otras cosas que les hubiera mandado a hacer.
—Algo no tiene sentido— dijo Elena que estaba revisando algunos papeles. —Toretto, O'Conner y Jackson, no huyen cuando deben de huir, roban gasolina y después la regalan— Hobbs se había cruzado de brazos y estaba poniendo atención a lo que la chica decía. —¿Ahora matan a agentes federales? No es muy lógico.
—Esto tiene sentido— se acercó hasta Elena, y extendió su mano para que ella le diera los papeles, lo cual hizo, pero no espero que cuando Hobbs los tuviera en sus manos los aventara al suelo. —Solo son nombres en una lista, si están ahí los atrapamos sin cuestionar, sin preguntar nada— dijo en un tono severo. —¿Wilkes, encontraste algo?— pregunto a uno de su equipo sin quitar la vista de Elena.
—Solo lo básico señor, huellas de zapato, fibras, huellas en todo el auto— dijo a la vez en que caminan hacia el y le entregaba unos papeles.
—¿Algo más?
—Si, rastreamos al dueño con el número del auto, hay varias empresas intermediarias, pero lo rastreamos hasta una corporación en manos de un inversionista llamado Hernán Reyes.
—¿Inversionista?— pregunto con ironía. —Si hay una actividad ilícita en Río, Reyes la maneja.
—¿Si? Nosotros también, si el nos da pistas quiero saber todo acerca de el— le entrego los papeles devuelta al hombre, para luego mirar al resto de su equipo. —Chato estaras en el techo quiero que vigiles por si alguien vuelve por algo— el mencionado asintió. —Matt quiero toda la información sobre Reyes, si va a orinar quiero saber si se lava las manos.
—Claro jefe.
—Wilkes, Fusco— les hablo y ellos inmediatamente miraron en su dirección. —Dejemos esto como estaba.
Los dos compañeros se miraron entre sí, sabiendo que reconstruir el auto llevaría mucho tiempo, demasiado.
—Eso llevará tiempo— explico Fusco.
—Es mejor que inicien— contestó. —Lo desarmaron por algo, ahora lo armaremos para averiguar que falta.
[....]
Dominic rompió las cadenas que mantenían cerradas las rejas de una casa la cual parecía estar abandonada, pero Laila ni los demás se molestaron en preguntarle. Dom los dejo entrar, primero entraron sus dos hermanas seguidas de los Brian y Mack, el dejo que pasaran y se quedó unos segundos observando afuera, que nadie los hubiera visto o seguido hasta ahí.
Habían llegado ya tarde, en la noche, por lo que todos estaban cansados, en especial Mia por su embarazo, así que hicieron una Mack y Laila trabajaban en hacer algo cómodo para Mia.
—¿Crees que esto sea cómodo?— cuestiono Laila.
—No tanto como una cama, pero es lo que conseguimos— hablo Mack ayudando a Laila a terminar con aquella cama improvisada, para ella y Mia. —O prefieres dormir en el suelo.
—Idiota— exclamó Laila. —Voy a hacer que Mia te mandé a dormir en el suelo cuando salgamos de todo esto— Mack rió ante la amenaza de su amiga, termino lo que estaba haciendo y se levantó.
—No lo harás— dijo una vez levantado, le ofreció su mano a Laila para ayudar a levantarse. —Vamos, hemos terminado.
Laila se levantó con ayuda de Mack y fueron a buscar a Mia, para que ella ya pudiera descansar, era claro que Mack conforme pasaban los minutos el se hacía más sobreprotector con Mia.
—Puedes ir a descansar, Mia— dijo Laila.
—¿Qué hicieron?
—Oh ya verás, cariño— hablo Mack tomándola de la mano y haciéndola caminar hasta donde habían hecho su cama improvisada.
—¿Te gusta?— pregunto Laila mientras observaba a su hermana, esperando su respuesta.
—Claro, que me gusta— sonrió Mia. —Gracias.
Pasaron unos minutos y Mia ya se encontraba acostada y Laila estaba a su lado en la otra cama improvisada que había hecho junto a Mack, aunque en realidad no parecían siquiera camas, solo fue cuestión de tiempo para que ambas terminarán dormidas completamente.
Mack estaba recargado en el marco de la puerta observando a Laila y a Mia dormidas, sin duda ellas eran lo más especial para él, Laila se había convertido en su hermana con el tiempo, y Mia era la mujer que más amaba, su pareja. Cualquiera que lo viera se daría cuenta de que cada vez que miraba a Mia le brillaban sus ojos, y cuando hablo de cualquiera quiero decir Brian, el había estado prestando atención a Mack el cual había estado observando a las dos hermanas, pero especialmente cuando miraba a Mia sus ojos brillaban de una forma distinta y el rubio no pasaba desapercibido aquello.
—Vamos Mack— hablo Brian. —Dejalas dormir en paz.
—Si— fue lo único que respondió y se acercó a dónde estaba Brian y Dom, los cuales disfrutaban de su cerveza. —Dom, ¿Qué recuerdas sobre tu padre?
Aquella pregunta sorprendió un poco a Dominic y a Brian, pues no esperaban que Mack preguntará aquello, pero estaba más que claro que el chico aún dudaba sobre su sería un buen padre o no, y eso que acababa de enterarse que lo sería.
—Mi padre— lo pensó unos segundos y conforme pasaba el tiempo una sonrisa aparecía en su rostro. —El hacia parrilladas los domingos después de la iglesia para la gente del barrio, si no ibas a la iglesia, no había parrillada— Brian que se había sentado en el muro bajo, para prestar con atención a Dom, se había reído ante lo último al igual que Mack y Dom. —Todo el día se la pasaba en el taller y después, cada noche; en la mesa de la cocina con Mia y Laila ayudándoles con su tarea, y cuando ellas se dormían el se quedaba ahí un par de horas estudiando el siguente capítulo para ayudarlas— los tres volvieron a reír, Dom tenía tan buenos recuerdos de su padre, que hacía que Brian y Mack vieran deseado conocerlo. —Recuerdo todo sobre mi padre, todo.
—¿Y tú Brian?— volvió a preguntar Mack y el rubio miro hacia otro lado tratando de hacerse el sordo. —Brian, ¿Qué recuerdas sobre tu padre?
—Ese es el asunto, yo no recuerdo nada de mi padre— admitió Brian, y justo cuando Dom iba tomar de su cerveza, la dejo a un lado para escuchar aquello. —No lo recuerdo gritando, sonriendo tampoco, para ser honesto, no puedo recordar ni como era— Mack posó su mano en el hombro de su amigo, dándole muestra de apoyo y en forma de disculpa por haberle preguntado. —No tengo memoria, solo— dudo un poco, buscando las palabras correctas para decirlo. —No estuvo ahí.
—Si, bien creo que como ustedes han contado sobre sus padres, yo también debería hacerlo— hablo Mack y tomo un trago de su cerveza. —Mi padre no es malo, común y corriente tal vez, así que si les cuento sabrán algo de mi historia.
—¿Por qué aún temes tanto en contarnos tu pasado?— pregunto Brian desconcertado.
—No lo hago, solo no me gusta— Brian asintió respetando aquello. —Mi padre no era bueno ni mucho menos malo, era agradable, solía hacernos reír a mi y a mis hermanos, nos llevaba todos los fin de semana a nadar a los ríos, si, solía regañarnos en ocasiones, pero nada más que eso. Nos compraba lo que queríamos apesar de que no llegara a tener dinero suficiente— hizo una pequeña pausa y tomo de su cerveza. —Era un buen padre, creo, pero lo arruine.
—Tu relación con tu padre fue buena, ¿No?— Mack asintió.
—Al principio, después se fue al carajo y es como acabe en Japón y conocí a Laila, la única amiga que tuve y el único apoyo que tuve en ese momento— admitió Mack y pudo notar como Brian miraba de reojo a Laila, por lo cual le causó algo de gracia. —En ese tiempo ambos fuimos el apoyo que el otro necesitaba.
—Lo sé— respondió el rubio.
—Nos preguntaste, porque dudaste de si serías un buen padre— Mack asintió. —Dejame decirte que lo serás, mucho mejor padre que hayas conocido.
—Gracias Dom.
—Y tú Brian, no serás nunca como tú padre— Brian dudó. —Y si no me crees, al parecer aún tienes más tiempo que Mack.
—Si, eso parece— hablo el rubio. —Vas a tener razón Dom, no seré como mi padre.
Mack entro de nuevo en la habitación donde estaban dormidas Laila y Mia, se acercó a dónde estaba Mia recostada y se sentó en el suelo para poder observarla.
—Sera un buen padre— dijo a la vez que se acercaba a la puerta y observaba a Mack cuidando de Mia.
—No— negó Brian a lo que Dom lo miro desconcertado. —Ya lo es.
Aquello causo una carcajada en Dom, pero asintió ante la respuesta de Brian, Mack ya estaba siendo un buen padre, y lo sería aún mejor después de que el bebé o la bebé naciera.
Dominic observaba a sus dos hermanas y a su amigo Mack sentado a lado de Mia, Brian observaba a Laila como dormía tranquilamente, había pasado un buen tiempo todos en silencio.
—Ya no quiero huir, Dom— hablo Brian rompiendo el silencio de una vez por todas. —Tenemos que salirnos. Salir ahora.
—Tienes razón— contestó Dom, sin dejar de ver a sus hermanas, pasaron unos segundos y se alejó de la puerta, saco de su bolsillo el chip y lo observó unos segundos. —Esto es lo que hay que hacer— se acercó a dónde estaba Brian a pasos lentos y le mostró el chip. —Usaremos esto, un último trabajo. Tomaremos todo el dinero de Reyes, hasta el último centavo y desapareceremos, para siempre.
—Nuevos pasaportes, nuevas vidas. No tendremos que seguir huyendo— a Brian se le dibujaba una sonrisa, la idea de por fin estar tranquilos y vivir una buena vida con Laila, no le desagradaba. —Compraremos la libertad.
—Exacto.
Mack podía estar adentro cuidando de Mia, pero podía escuchar aquella conversación perfectamente, se levantó y se acercó al marco de la puerta observando a sus dos amigos.
—¿Entienden que quieren enfrentar al hombre más poderoso de todo Río?— cuestionó Mack, llamando la atención de sus dos amigos.
—Si, lo sé.
—Entonces déjenme decirles— hizo una pequeña pausa y los miro a cada uno. —Nos hace falta un equipo.
—¿No ya somos uno?— pregunto Brian, sabiendo perfectamente la respuesta que le daría Mack.
—Uno más grande.
[....]
Al día siguiente ya todos estaban preparados y ya les habían comentado a Laila y a Mia sobre el plan, y ya solo faltaba afinar pequeños detalles.
—Hay que repasar los detalles.
—¿Qué necesitamos?— pregunto Mack.
—Necesitaremos un camaleón— en la mente de Dom la primera persona que se le vino a la mente para ello, fue nadie más y nada menos que Han. —Que pueda camuflarse donde sea.
—¿Qué más?— pregunto ahora Mia.
—Un hablador— y justo Brian tenía a la persona indicada para ello, Román. —Que pueda mentir y salir de lo que sea.
—Ya lo tengo— respondió Brian con una sonrisa.
—Reyes va tener mucha vigilancia, necesitamos a alguien que sepa de circuitos— hablo Laila, por lo que Brian la miro de reojo y asintió. —¿Ya lo tienes?
—Si— respondió el rubio. —Ya lo tengo— su viejo amigo Tej.
—Y con esos circuitos, Reyes tendrá muros— dijo Dom recibiendo nuevamente la atención. —Necesitamos gente que atraviese esos muros.
—Todos sabemos que ya tenemos eso, ¿Cierto?— hablo Mack a lo que todos rieron y asintieron.
—¿Tú?— cuestionó Laila y Mack negó.
—Los latinos— contestó esté y todos negaron divertidos.
—¿Algo más, Dom?
—Herramientas y armas.
—Eso yo sí lo puedo conseguir— respondió Mack, y los demás asintieron.
—Alguien que no tenga miedo a pelear— Mack y Laila se miraron entre si, como complices, ambos sabían que tenían a la mujer perfecta para el trabajo, Gisele. —Alguien que le dé apoyo a todos.
—Muy bien, ¿Qué más?
—Lo más importante, quiero dos pilotos de precisión, hombres que no se quiebren bajo presión y que jamás pierdan.
—Eso ya lo tienes— decía Brian que tan solo con oír lo que había pedido Dom, le brillaron los ojos, del mismo modo que a un niño que le acaban de decir que le van a comprar lo que el quiera.
[....]
Habían decidido que planearían todo en una vieja fábrica abandonada, sería práctico, tomando en cuenta que no tenían otro lugar. Todos tenían trabajo que hacer, aún cuando todavía no estuviera su equipo, pues tenían que llamarlos, uno por uno, cada uno.
—Gisele ha dicho que vendrá— confirmo Laila, regresando después de colgar la llamada con Gisele. —¿Qué les han dicho a ustedes?
—Los latinos vienen— hablo Mack, el cual se encontraba sentado en una silla que había encontrado por ahí, y sobre el estaba Mia sentada en sus piernas.
—Los míos han dicho que si, también— dijo Brian y todos miraron a Dom.
—Han vendrá.
—Perfecto— respondió Laila y sonrió, ya tenían todo, pero luego miro a su hermana sabiendo que había olvidado preguntar algo. —¿Alguien ha llamado a León?
—Yo lo he hecho— hablo Mia. —No vendrá.
—¿Qué?— dijo desconcertada, León era su amigo, uno de los pocos que le quedaban, y no vendría. —¿Cómo? ¿Por qué no?
—Dejo esto hace mucho, Laila— explico Dom. —Leon ya tiene una familia, ya no se mete en estos líos.
—Entiendo— bajo un poco la mirada, fue cuando las palabras de Vince resonaron en su mente, "Y míranos ahora, nuestra familia". —Pense que lo volveríamos a ver.
—Puede que en un futuro lo hagamos— sonrió Mia a su hermana. —Cuando termine esto.
—Tienen razón, Laila— hablo Brian, pero fue interrumpido por el sonido del teléfono de Laila. —¿Quién es?
Laila miro la pantalla de su teléfono y miro a Brian sin saber que decir, e inmediatamente Mack noto aquello, por lo que levantó a Mia de sus piernas para levantarse él.
—¿Gisele, cierto?— dijo Mack intentando ayudar a su amiga, sabía que no era ella sino el número desconocido que había llamado dos veces antes a Laila y con esta sería la tercera.
—Si— fue lo único que respondió en ese momento Laila. —Ire a contestar.
—Te acompaño— hablo Mack. —Quiero hablar con mi vieja amiga, Gisele.
A nadie se le entro por la cabeza la razón de porque Gisele llamaría cuando se suponía que ya habría aceptado, o tal vez se les ocurrió que Gisele podría tener una simple duda sobre el trabajo o quisiera hablar con Laila.
Cuando aquellos dos por fin estuvieron alejados del resto, Laila se detuvo y lo miró.
—Mia está embarazada, ya no deberías involucrarte más.
—Ya lo he hecho— respondió su amigo. —Asi que contesta y créeme no voy a meter a tu hermana o al resto en esto.
—Lo sé— dijo a la vez en que contestaba la llamada. —¿Ahora qué?
—Que carácter— hablo el hombre desde el otro lado. —La última vez que hablamos, ¿En qué nos quedamos?
Mack podía escuchar lo que aquella persona decía, aunque muy bajo por lo mismo que no podían poner el teléfono en altavoz, dado que lo que dijera haría eco en la fábrica y todos escucharían.
—Estoy segura de que lo sabes bien.
—Si, es así— contestó y se quedó en silencio por un buen tiempo. —Has peleado con tu amigo, Vince, si no me equivoco.
—¿A qué te refieres?— cuestionó Laila y miro a Mack, el cual solo le hizo una seña de que se tranquilizara.
—¿Sabes? Creo que sí mi opinión contará en aquel caso, estaría del lado de Vince— comentaba. —Prefirieron creerle a un tipo que acababan de conocer, Brian, en vez de confiar en su propio amigo que lo conocían desde hace años.
—Tu no sabes nada.
—Oh claro que sí, se todo— Laila suspiró, si lo tuviera enfrente ella sería capaz de golpear, o al menos eso pensaba ella. —Ese error lo volviste a cometer, confiar en alguien que acabas de conocer— ahí el les había dado una pista, una pista que Laila no tomo en cuenta, pero Mack si.
—¿De dónde sacaste eso?— cuestionó Laila perdiendo la paciencia.
—Del mismo lugar donde saque la información de que tú hermana está embarazada— la gota que derramó el vaso, Mack tomo el teléfono de las manos de Laila.
—No te atrevas a si quiera volver a hablar de ella— le advirtió Mack.
—Sabía que tarde o temprano Mack sabría sobre esto— hablo con total calma. —Lo supe desde el momento en que los conocí.
—Mira, no sé quién seas o lo que quieras, pero te advierto que si tratas de amenazar a Laila o a su familia, no— se interrumpió a su mismo. —A mi familia, si llegas a hacerles algo, juro que iré por ti y te mataré.
—Oh que violencia, yo solo estoy charlando— y se pudo escuchar una risa desde la otra línea causada por el mismo hombre, lo cual hizo molestar más a Laila y Mack.
—¿Sabes qué?
—¿Qué?
—Ya te lo advertí, te encontraré.
—Bueno, te estaré esperando— hizo una pequeña pausa. —Sin embargo, para cuándo lo hagas será demasiado tarde.
Y sin más colgó la llamada, dejando a Mack furioso solo con que aquel hombre mencionara a Mia y su embarazo.
—No debí contarte— hablo Laila.
—Tienes razón— admitió Mack y le entrego el teléfono a su amiga. —No debiste hacerlo, porque ahora no descansaré hasta encontrar a ese estúpido y matarlo.
—No, no debí contarte porque ahora estás involucrado en esto y te va amenazar con hacerle daño a Mia— respondió Laila y camino devuelta con los demás, tratando de olvidar de nuevo lo que había pasado. —Deberías tranquilizarte y luego volver.
—Lo haré— la chica asintió y cuando volvía a irse se detuvo y regreso para darle su teléfono a Mack. —Dire que te has quedado hablando con Gisele, así que deberías tener el teléfono para que no sospechen.
—Esta bien— dijo a la vez que tomaba el teléfono y veía marcharse a su amiga para ir junto a los demás.
Mack estuvo ahí mirando en teléfono, repitió varias veces el número, y una idea le llegó a su mente.
Cuando por fin Laila llegó con los demás, ellos ni siquiera prestaron atención en ello pues estaban muy concentrados hablando.
—¿Qué pasa?— pregunto Laila a Brian el cual le sonrió al verla.
—Mia insiste en revisar cada detalle del plan— bromeó Brian, lo cual causo risa en Laila. —Tenian que ser hermanas.
—Que gracioso— rodeo los ojos, pero aún así también rió ante lo que dijo el rubio.
—¿Y Mack?— pregunto Mia al no verlo.
—Se ha quedado hablando con Gisele— mintió. —Se quedó discutiendo por teléfono con ella— mintió una vez más, como ya se le estaba haciendo costumbre.
Mia asintió y volvieron a seguir hablando todos sobre el plan, por insistencia de ella, quería que todo saliera bien.
Mack había tomado unos minutos más y cuando regreso ni siquiera se acercó a los demás, lo primero que hizo fue ir a por la computadora, la única que tenían en ese momento. Se sentó en un lugar apartado y comenzó a buscar o a tratar de investigar algo, aunque ni siquiera el sabía lo que hacía.
—Dios— exclamó Mack, al saber que nada de lo que estaba buscando tenía sentido.
—¿Qué es lo que tienes?— pregunto Mia acercándose y poniendo sus manos sobre los hombres del chico, a lo que el rápidamente cerro la computadora.
—Investigo sobre Reyes— mintió, ahora no solo era Laila, sino que Mack también estaba empezando a mentir, ¿Que podría pasar si los demás se enteraban o empezaban a sospechar.
—¿Necesitas ayuda?— Mack negó. —Bien iré con Laila y el resto.
—Esta bien.
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Dos capítulos en un día, termine este capítulo justo hace un par de minutos y por esa razón lo acabo de publicar los dos juntos, y espero poder subir más capítulos pronto, ya solo en un par de meses se cumplirá un año desde que empecé la historia y no la he podido acabar, la inicie el año pasado en diciembre y ya estamos en septiembre y aún falta mucho, no sé cómo voy a sentirme el día que termine está historia, voy a sentir un vacío, pero bueno no nos apresuremos, todavía no hemos llegado ni a la final de este acto y ya estoy pensando en el final de toda la historia.
Pero bueno vemos cómo Mack y Brian hablan sobre sus padre y aquí podrían decir también tienen un pequeño fragmento de la historia de Mack. Además, de que no solo Mack ha obtenido pista sobre quién puede ser la persona que llama a Laila, yo sí se, quiero ver si pueden adivinar, créanme ya tengo totalmente la idea de como va acabar este acto, voy a hacer sufrir mucho a Laila.
Bueno sin más gracias por todo el apoyo, y siempre se los agradezco, y no olviden votar y comentar para más capítulos, dejen su opinión porfas, y bueno digan quién creen que es la persona o bueno hombre, porque es hombre, que ha estado llamando a Laila, y contándole todas esas cosas.