━━━━━━ negocios, celos y karma
───No Germán y déjame de romper las pelotas loco. Que pesado───.habló Abi mientras terminaba de acomodar la nueva torta de cheesecake que había salido de la cocina.
─── Abril sos la única que me puede ayudar y estoy desesperado───.dije casi entrando en crisis.─── Podemos negociar.
───Ahora si estamos hablando mi idioma───.dijo satisfecha y se giró viéndome.─── 10 mil pesos te va a salir la ayudita.
─── Pero vos sos una hija de puta, no, te recibiste de forra en algún lado ───.la indignación se notó en mi tono de voz a lo que la rubia alzó la ceja.─── ¿5 mil pesos?
Abril se giró viendo cómo sonaba la campanilla dejando ver a un pibe de cabello negro y ojos azules entrar a la cafetería.
─── Yo consideraría mi oferta y más con tu competencia ───.comentó guiñándole el ojo dejándolo confundido.─── ¡Valen! Que gusto verte, pero lastimosamente Mela no está.
¿Este conocía a Mel? ¿De donde había salido? ¿Cómo que lastimosamente? ¿Vino sólo para verla?
───¿Enserio? Mal ahí ───.el tal Valen hizo una mueca acercándose.─── ¿No sabes si viene después? Enserio tenía ganas de verla.
¿Y no tendrías ganas de que te cague a piñas estúpido?
No, basta Germán cálmate. No te pongas mal, no te la bajes solo porque es más alto y tiene ojos claros, ah y también tiene tatuajes y por supuesto que se ve mucho más delgado.
Que día de mierda.
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─── ¿Ósea que le dijiste que mi novio es su competencia? Sos una hija de puta, veni acá───.Román le alzó la mano chocando los cinco con Abril a lo que comenzaron a reír a carcajadas.
Valentino negó mordiendo su labio.─── Sos mala Abi, además yo solo quería agradecerle a Mela que me ayudo con este lindo de acá.
El ojiazul besó la cabeza de su ahora novio y este comenzó a reír. Abril rodeó los ojos divertida mientras esperaban a Mel para cerrar la cafetería.
─── Es para que empiece a usar sus dos neuronas, al estar celoso seguro que activa y por fin le invita a Mela a una cita───.dijo obvia.─── No aposté cinco mil pesos al pedo con Román.
─── Vas a perder, por rubia y por hija de puta───.el castaño la apuntó con el dedo.───Y que suene Karma de Taylor Swift.
─── ¿Por qué tiene que sonar Karma ahora? ¿De quien están hablando mal? ───.Mel apareció entrando a la cafetería llamando la atención de sus amigos.
Valentino sonrío.─── Porque entre los dos no se quien es más malo con Germán.
───¿Por qué están siendo malos con Ger? Déjenlo ───.hizo un pequeño puchero para luego reír saludándolos uno a uno con un pequeño beso en la mejilla.
─── No estábamos siendo malos, acá Valen que no entiende nuestro humor ───.Román le codeo levemente al nombrado que fingió toser.
───Exacto, y Ger también nos bromea así o tengo que volver a contar que me tiene agendada como rubia tarada.
Todos comenzaron a reír.─── Bueno, ¿vamos yendo? Seguro están re cansados. Gracias por cubrirme hoy en el café, les debo una.
─── Cuando quieras Mela, sabes que nosotros por vos hacemos cualquier cosa───.Román le guiño el ojo.
─── Pero contanos como te fue con el doctor, ¿esta todo bien?
Melanie se había tomado el día para ir al doctor, porque hacía días que tenía una molestia en el pecho y siendo mas específica era cerca del corazón. Pero al parecer no era nada para preocuparse ya que le habían recetado medicamentos y evitar pasar por momentos de continuo estrés.
─── Si, me dieron unas pastillas y ya. No se preocupen ───.sonrió y los demás asintieron.
Una vez cerraron y salieron de la cafetería, cada uno fue a su respectiva casa. Tuvo que apresurar el paso ya que comenzaba a gotear y una vez llegó a su edificio se largo a llover. Adoraba la lluvia, le encantaba el clima que se creaba con las gotas que caían.
Subió hasta su departamento y se encontró con una nota en su puerta, la cual leyó haciéndola sonreír.
❝ Mel:
Espero que todo haya ido bien con el doctor y cuando llegues pasa por por el depa que te tengo una sorpresa ❞
Entró a su departamento primero saludando a Panqueque quien corrió para recibir caricias. Porque podía ser frío la mayoría de veces pero si pasaba muchas horas sin su mamá le entraba una ansiedad de separación.
───Hola gordo hermoso, ¿me extrañaste?───.sintió su cabecita moverse buscando mimos.─── Voy a darte unas croquetitas por abandonarte hoy, perdóname Panque.
Bajo al gato luego de una sesión de mimos, colocándole las croquetas en su plato y así cambiarse para ir a casa de Germán. No sabía que sorpresa le tenía preparada pero no habían hablado casi en todo el día, solo el infaltable mensaje de buenos días de Ger y un aviso de parte suyo de que iba a estar ocupada.
Camino hasta el departamento dejando a Panque comiendo tranquilo, total iba a ser un rato el que iba a estar en el departamento de Ger.
Toco el timbre y aparecieron esos rulos que tanto le gustaban, se veía bastante lindo con sus lentes puestos. Ella adoraba sus lentes.
───Hola Ger, ¿me extrañaste?───.reí abrazándolo y este sonrió devolviéndome el abrazo.
─── Te extrañé Mel, encima quede como un estúpido. No leí tu mensaje de que fuiste al doctor y fui a verte al café ───.dijo divertido a lo que reí entrando a su departamento.
─── Eso te pasa por distraído, pero no te preocupes. ¿Qué pasó?
Germán trago saliva de manera dura para luego reír nervioso, si bien ya habían limado perezas por el comentario de hace dos noches; con los girasoles. Aún sentía que no quedaba claro para la pelirroja lo mucho que le gustaba.
Y ahora mucho menos con ese chabon que apareció en el café.
─── Es que la otra noche me contaste que Panque te rompió dos de tus tazas de Disney,¿verdad?───.habló y asentí viéndolo buscar una caja negra con un moño blanco.─── No me dijiste que tazas eran pero quería reponerlas por el gordo.
Melanie abrió la boca sorprendida agarrando la caja para luego mirarlo a él y sonreír agradecida, se sentaron en el sofá mientras abría la caja.
Una taza de Nemo y otra de Hamm; el chancho de Toy Story.
─── Son las únicas dos que encontré originales en Mercado Lib...
Antes de que terminara de hablar Melanie ya se encontraba abrazándolo casi tirándose encima de él. Ger la atrapó agarrándola de la cintura acariciando de a poco su piel desnuda.
───No se que hice para conocerte y merecerte, Ger.
Un trueno sonó por todo el departamento haciendo que la pelirroja se separe del castaño quedando a centímetros. Sus ojos conectaron luego de que miraran por la ventana.
Ambos tenían la respiración agitada y un brillo en los ojos, la cercanía se podía cortar con un solo movimiento y sonrieron al mismo tiempo.
Que feliz le hacían esos ojos azules y esa sonrisa, pensó él.
Ella sentía el corazón acelerado de solo de estar así con su chico de lentes.
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