Daniela
Sentía el viento golpear en mi cara y eso hacía que mi cabello fuera de un lado al otro. Entonces me puse la capucha de la sudadera y me abrigue bien para no resfriarme. Me gustaba sentarme en los escalones de la puerta de mi casa para ver el amanecer, me gustaba ver los colores que se formaban en el cielo.
Un rato más tarde mi mejor amiga se sentó a mi lado y me abrazó. Apoyé mi cabeza en su hombro y sentí que volvíamos a ser dos niñas pequeñas corriendo por el parque y contándonos nuestros problemas.
—¿En qué piensas?—me preguntó Nicole
—En nada, solo miraba el cielo
—Siempre te gustó ver los amaneceres
—Sí
Después entramos a casa y desayunamos. Mi hermano apareció más tarde, venía de correr y no sé paró a hablar con nosotras porque ya venía todo sudado.
—Nicole, sé te va a caer la baba como sigas mirándolo
—Perdóname que te lo diga, pero tú hermano está muy bueno
—Nicole es mi hermano y lo dices delante de mí como si solo fuera una desconocida
—Lo siento, no tengo filtro
—Ya lo veo
—Eh Dani, yo podré quedarme embobada viendo a tu hermano, pero ¿qué pasa tú con Thiago?
—¿Qué pasa de qué?
—Dani, vi como lo mirabas el otro día en la piscina. Y no te culpo no es fácil evitar de mirar esas abdominales
—No lo miraba a él
Nicole soltó una risa irónica, después se acercó a mí y puso su mano encima de la mía. Ya me iba a soltar una mini charla y no me apetecía escuchar nada que tuviera que ver con Thiago.
—Como amiga te voy a dar un consejo
—Te escuchó
—Tú te puedes engañar las veces que quieras, también puedes ignorar lo que siente tú corazón, pero que sepas que las miradas nunca mienten
—Nicole estás alucinando
—Quizás el problema es que no quieres aceptar lo que sientes por él
—No siento nada por él
—Dani que estés con un chico y sentir cosas por otro es normal. Quizás no todas las personas tienen que acabar formando una familia con su amor de instituto
—¿Por qué me estás dando esta charla?
—Porque quiero lo mejor para ti y creo que en la vida hay que arriesgar
—Nicole yo estoy muy feliz con Mateo y nos queremos mucho
—Algún día espero que te des cuenta que tenía razón
Después tocaron el timbre y mi amiga fue a abrir la puerta. Al instante que abrió la puerta se giró hacia mí y me guiñó el ojo.
—¡Es Thiago y Mar!—me avisó desde la otra punta de la habitación
—¡Diles que pasen!—le grité para que me escuchará
Mar vino corriendo hacia mí y me agaché para abrazarla, después me dio la mano y me llevó al comedor. Estuvimos peinándonos y después salimos al patio para hacer volteretas.
—¿Mar, por qué no vino Grace con vosotros?
—Le dolía la cabeza
—Espero que se recupere
Después entramos a la casa y los chicos estaban jugando a videojuegos. Mi mejor amiga estaba fingiendo que leía un libro, pero en realidad no le quitaba la mirada de encima a mi hermano.
—¿Daniela, me dejarías maquillarte?—me preguntó Mar
—Sí, pero tenemos que subir arriba
Antes de subir arriba llamé a Nicole para que viniera con nosotras y dejará de mirar un rato a mi hermano.
—¿Qué vais a hacer?—nos preguntó mi amiga
—Voy a maquillar a Daniela
—Solo os puedo desear suerte porque salga bien
Le dejé a Mar todos los maquillajes y las brochas encima del tocador para que cogiera lo que quisiera.
—¿Oye Mar, tu hermano no tiene novia todavía?—le preguntó Nicole
—No
—¿Y te gustaría que tuviera novia?—le volvió a preguntar y yo aproveché para beber agua
—No, pero si fuera Daniela no me quejaría
Cuando pronunció mi nombre empecé a toser, casi me atragantó con el agua. Solo a ella se le ocurrían decir esas cosas en los momentos menos oportunos.
—Mar, no deberías decir eso
—¿Por qué?
—Porque yo estoy con Mateo y nunca podría salir con tu hermano
—¿Por qué no?
—Tú hermano y yo somos muy diferentes
—Eso no es verdad. A los dos os gusta boxear
—Mar, el amor no es solamente que nos guste el mismo deporte a los dos. El amor es respetarse, es quererse y es apoyar a la otra persona
Ella me siguió maquillando y después dejó las cosas en el tocador. Me miré al espejo y me quedé sorprendida porque no esperaba que me maquillará tan bien.
—Chica no está tan mal es más bien te quedó mejor de lo que esperaba—le dije y ella sonrió
—¿Por qué no vamos un rato abajo?—propuso Nicole
—Sí, yo quiero ir con mi hermano
—Bajar vosotras primero que yo voy a recoger esto
Salieron por la puerta y abrí la página del libro que estaba leyendo mi amiga.
A veces la persona que tú más quieres te puede dañar
Le estuve dando un par de vueltas a esa frase y después decidí bajar con los demás y distraerme.
—¿Thiago, te gusta como maquillé a Daniela?—le preguntó su hermana
—Sí, está muy bonito, pero a ella le queda fatal—mi sonrisa desapareció y lo maté con la mirada
—¿Siempre tienes que ser tan capullo?
—Eh, no digas palabrotas delante de una niña—le tapó las orejas a su hermana
—Thiago, tengo unas ganas increíbles de soltarte un puñetazo
—Hazlo
—Muy bien
Sin pensarlo puse mi manos en la altura de mi pecho, las alejé de mí, cerré los puños y cuando estaba lanzando el puñetazo, él paró el puñetazo, entonces lancé un puñetazo con la otra mano y volvió a pararme el puñetazo. Me cruzo los brazos y me quedé con mi espalda pegada en su pecho. Notaba su respiración en mi cuello y solo quería alejarme de él.
—Rubia, ¿qué son esos modales?
—¡Suéltame!
—¿Qué pasa si no lo hago?
—Te prometo que te sacó de mi casa a patadas
—Está bien
Me soltó y cuando me di la vuelta puso las manos en forma de rendición. Estaba tan cabreada que no pensé las cosas y cuando intenté golpearlo de nuevo se agachó y me colgó en su hombro.
—¡Eh, imbécil, bájame ahora mismo al suelo!
—¡Rubia, tú te lo buscaste!
Levanté la mirada como pude y la desvié hacia ellos, entonces vi que se estaban riendo y me fastidio más.
—¡Mar, te juro que hoy me cargo a tu hermano!
—Me encantan tus chistes—dijo él
—¿Me vas a soltar, idiota?
—Aquí no
—¿Eso que significa?—me ignoró
—Gabriel, perdóname por lo que voy a hacer
Thiago empezó a caminar a la puerta de mi casa mientras me llevaba en el hombro y ellos lo siguieron.
—¡Thiago, suéltame!
—¿Me dijiste algo, rubia?—me vaciló
—Cuando me sueltes me voy a encargar de borrarte esa sonrisa
Lo vi acercarse a la piscina y ahora si que sufrí porque sabía lo que se avecinaba.
—¡Ni se te ocurra!
—No me hubieras desafiado
Se acercó al bordillo y me dejó en el suelo muy rápido para después empujarme a la piscina. Ni siquiera me dio tiempo cogerle del brazo para que cayera yo sola.
Por dios, el agua estaba congelada e iba a pillar una neumonía por culpa de ese imbécil, pero me iba a vengar.
—¿Qué haces ahí quieto, idiota?
—Verte congelarte
—Jaja, muy gracioso
—Lo sé
—Ugh, no te soporto
—Siempre me lo dices
—Te puedes callar y darme una toalla
Mi hermano le paso una toalla y él se agachó para dármela, entonces lo cogí del brazo y tiré de él para que cayera al agua.
—¿En serio, Thiago? ¿No esperabas que me vengara?
—Te mataría aquí mismo, pero hace mucho frío
Me acerqué al bordillo para salir y entonces escuché unas palmadas y la vi ahí sonriendo.
—Nunca cambiáis, eh
—Grace—dije sorprendida y Mar fue hacia ella corriendo
Salí del agua y me tapé con la toalla para no congelarme de frío. Después fui hacia ella y le di un abrazo.
—Tú mejor amigo siempre me maltrata
—Ahora la culpa es mía
—Sí
Grace empezó a reírse y los demás también, pero yo le sostuve la mirada a ese chico que me sacaba de quicio.
Amando el final, estos dos son íncreibles siempre acaban sacándose de sus casillas 😂
Por lo que veo, les gusta mucho la piscina porque siempre acaban ahí
¿Daniela es feliz o solamente esta negando lo que siente por Thiago?
¿Quién ama a Mar? Todos somos fans de ella, al igual que ustedes quieren verlos juntos
Este capítulo fue bastante divertido, espero que lo hayan disfrutado, nos vemos en el próximo.
Gracias por seguirme y votar los capítulos. Los amo ❤