—Deja de mirarlo —dije mientras leía mi libro.
—¡Pero es tan lindo y perfecto! —susurro emocionada y con un bonito brillo en sus ojos.
Quite la vista de mi libro para mirar a ese chico tan lindo y perfecto, era pelinegro, ojos oscuros y por su altura puede ser uno de los de último año.
—Pero es mucho más grande que tú.
—¿No has oído que para el amor no hay edad?
Iba a decir algo hasta que se escucho el timbre dando señal de que ya terminó la hora del almuerzo.
—Vamonos, ya va a comenzar biología y no quiero llevar otro regaño de la profesora por tu culpa.
—Tks, ya te había dicho “el que no arriesga no gana” — dijo refiriéndose a aquella vez y se levantó junto a mi.
—Si, si como digas.
Empezamos a caminar hacia nuestro salón mientras bromea vamos sobre una que otra cosa hasta que llegamos, abrimos la puerta encontrándonos con la profesora en media clase. Al parecer nos tardamos un poco en volver al salón.
—Mierda..—dijimos en unísono.
°°°
Estaba en la salida del instituto esperando a Megan, hasta que un chico se me acercó, algo que me incomodo fue que me agarró el hombro.
—¿Eres T/n?
—Eh..si, soy yo. ¿Por que?
—¿Sabes dónde se encuentra Megan? — sonrió mientras sobaba mi hombro.
—«¿Ahora en que mierda te metiste Megan?»—pense, hice una mueca de confusión —Eh, no, hoy no llego a clases...¿Por que la pregunta?
Su sonrisa desapareció, quitó su mano de mi hombro y se rasco la nuca.
—Bueno, es que no ha contestado mis mensajes y como no estaba en su casa pensé en venir a buscarla.
—Ah, ya veo. Buen-
—Si llegas a verla avísame a este número ¿Si?
Tomo mi brazo y escribió su número.
—Ah... —no sabía que decir—eh, si claro.
sonreí incómoda, el también sonrió y se fue despiendose de mi, hice una mueca de asco y mire mi brazo.
—Bicho raro..
—¡T/N! —Megan apareció de entre los arbustos.
—¡AAHH! —la empujé y cayó otra vez en los arbustos —¡Megan!
—Ahg
La ayude a salir de allí y le quite una que otra ramita que tenía en su cabello.
—¿¡Por que mierda sales así de la nada!?
—¿¿Que te dijo??
—¿Eh? —la mire confundida.
—¿Que te dijo Maison? El chico que te hablaba.
—Ah si, te estaba buscando.
—¿Le dijiste que estaba aquí? —preguntó nerviosa.
—Claro que no. Me pareció demasiado raro.
Ella me abrazo apretando me un poco contra su cuerpo, y soltó un suspiro.
—Aaahhh que bueno.....
—....¿Que pasó entre tu y el? Se veía bastante desesperado por encontrarte —me safe de su abrazo y la mire seriamente.
—Eh, bueno...estuve con el cierto tiempo, me trató muy bonito, era muy amable y afectuoso pero cuando comenzamos algo serio se volvió muy controlador y tóxico-
Mientras me contaba comenzamos a caminar hacia mi casa.
—Y le cortaste.
—Exactamente, je. Y ahora no para de mandarme mensajes.
—¿Por que no lo bloqueas?
—¡Lo hice! Pero siempre termina escribiendo me por otro número —vi su incomodidad y nerviosismo en su rostro.
—¿Por que no le has dicho a tu hermano que ese tipo te acosa?
—¿Estas loca? Si llega a enterarse de que estuve de novia con alguien nunca más me dejara salir —lloriqueo, yo simplemente rode mis ojos.
—Eres una tonta, podrías estar en peligro y lo único que te preocupa es que no te dejen salir de fiesta.
Ella se quedó callada en todo el camino hasta mi casa. Cuando llegamos la deje entrar, le dije que subiera a mi habitación y yo iría en un rato con algo de comer, fui a la cocina e hice unos sándwiches para pasar el rato, más dos vasos de jugo de naranja, subí con la bandeja de sándwiches y los jugos y toque la puerta para que me dejara entrar.
—Aahh~ por fin, algo de comer~ —dijo cuando deje la bandeja en mi mesita, intento agarrar uno y yo le di un manotazo —¡Oye!
—No comerás ni beberás nada hasta que arreglemos el asunto con el tipo ése.
—¿¡Ah!? ¡No puedes hacer eso!
—Si puedo, son mis sándwiches y mis vasos con jugo —dije y me crucé de brazos.
—¿Y que quieres que haga?
—Dile a tu hermano lo que sucede con ese tipo —frunció el ceño.
—¡No!
—¡Tienes que, Joder! Megan, ¿Que tal si es peligroso? ¿¿Y si te hace algo?? —estaba más que preocupada.
—No me va a pasar nada T/n, no te preocupes.
Mordi mi labio tratando de no estallar, ella tomo uno de los sándwiches, lo mordió y se sentó en mi cama yo solo la mire molesta y ella palmeó mi cama invitando me para que me siente a su lado, lo cual hice después de eso me abrazo con uno de sus brazos haciendo que mi cabeza caiga sobre su hombro y suspiré pesadamente.
—Eso es, ya...tranquila —dio unas cuantas palmadas en mi espalda.
°°°
—¡M-megan! ¡Megan! Respondé por favor..
—Aquí e-estoy —escuche y se arrastró hasta mí.
Estábamos amarradas de manos y pies, todo estaba oscuro y apenas se veían unos destellos de luz. Megan estaba pegada a mí, no recuerdo el como llegamos aquí, me desespera el no saber dónde estoy, mi cabeza duele y no puedo ver nada de la nada escucho sollozos, era Megan.
—...P-perd-don T-t/n debí ha-haberte escuchado..to-do e-esto...es mi...¡Mi c-culpa!
—Shh no Megan, n-nada de e-esto es tu culpa....no sabrías que esto p-pasaría
—¡C-claro que S-si! Tú misma l-lo...lo dijis-te —sollozaba sin parar y eso hacia que mi corazón se partiera en trizas.
—Shhh shhh tranquila Megan....todo va a estar bien ¿Si?...alguien vendrá por nosotras..
Su llanto no paraba y su respiración seguía algo acelerada, hasta que de tanto decirle que todo estaría bien se fue calmando. Estuvimos unos cuantos minutos en silencio, lo único que se escuchaba eran nuestras respiraciones hasta que se escucho como se abrían unas cerraduras, la puerta se abrió dejando entrar la claridad a lo que me segue enseguida, se escuchaban pasos hasta que se detuvieron.
—Vaya, vaya, por fin despiertan.
Abrí con algo de dificultad mis ojos y pude ver a maison con una maldita sonrisa en su rostro.
—¡Maison! P-por favor...—megan volvió a respirar aceleradamente.
—Shhhh, tranquila cariño está bien.
Puso sus dedos en los labios de Megan y luego su mano acarició su rostro.
—Te voy a llevar arriba.
—¿Q-que?
Dicho eso la cargo entre sus brazos y empezó a caminar hacia la puerta, Megan gritaba y suplicaba, me llamaba y yo no podía hacer nada.
—¡Déjala! —fue lo único que salió de mi boca.
—¡P-por favor déjame! Por favor...¡te lo ruego, déjanos i-ir!—sollozo.
—No llores preciosa, no te ves linda así —fue lo único que escuché.
Y la puerta se cerró, dejando me sola entre la oscuridad, mis lágrimas salían sin parar, no pude hacer nada...sentía un nudo en mi garganta y una presión en mi pecho, debí haber dicho algo, o a ver hecho algo pero en vez de eso, me quedé callada y no hice nada para que no se la llevarán.
Pasaron los minutos y lo único que podía oír eran sus gritos pidiendo ayuda. Yo lo único que hacía era llorar y gritar su nombre sin parar.
—¡MEGAN! ¡MEGAN RESISTE!
Era lo único que salía de mi boca, estaba desesperada, forcejeaba y movía sin parar mis manos tratando de salir de aquellas cuerdas pero nada funcionaba, mi piel estaba roja y ardía como el carajo pero eso no importaba, hasta que llegó un momento en que sus gritos y llantos cesaron.
—¿¡MEGAN!? ¡MIERDA POR FAVOR RESPONDE!
Mis lágrimas no dejaban de salir, mi garganta dolía mucho.
—¡MEGAN! ¡POR FAVOR!
Y así paso, pasaron varios minutos hasta llegar a ser horas, mis labios estaban secos y tenía sed, creo que me deshidrate de tanto llorar. Ya no oía más la voz de Megan, por un momento me engañe de que había huido y estaría bien, pero en muy en el fondo sabía que no era así.
—Dios....P-por favor...cuida de ella...ella no es mala..solo tomo malas decisiones, se equivocó y quien no se equivoca...así que por favor te lo ruego ayudala...salvala por favor... —a de saber si me estaba escuchando, pero estaba tan desesperada que empecé a rezar por ella, habían pasado más de 72 horas desde que deje de escuchar su voz.
Estuve unos minutos más así, y cuando termine no de cómo pero empecé a llorar de nuevo diciendo una y otra vez su nombre y pidiéndole perdón. Estaba cansada ya, mis párpados pesan, no había bebido ni comido nada desde aproximadamente hace tres dias o cuatro, creo que me iba a desmayar y como dije así fue.
Empecé a oír ruidos de la parte de arriba pero aún así no abrí mis ojos, sentí cierta claridad contra mi rostro, escuché como se abría la puerta más varios pasos de personas y una de estas se me acercó y tomo mi pulsó, escuché gritos pero no entendía nada de lo que hablaban o de lo que estaba sucediendo.
—¡Esta aún tiene pulsó!
—Llevala a la ambulancia.
Sentí como sus brazos me cargaban y me desespere me retorcía con todas las fuerzas que tenía para que aquel hombre me soltara.
—Tranquila, estarás bien te vamos a ayudar.
Fue lo único que escuché trate de abrir mis ojos pero por toda la claridad que había solo pude ver una máscara toda borrosa. Salió conmigo en brazos y otros tipos se me acercaron a lo que yo me asusté hasta que escuché nuevamente aquella voz.
—Ellos te ayudarán no te preocupes.
Me recostaron en una camilla y quitaron aquellas cuerdas que hacían mis muñecas y tobillos arder y luego solo perdí el conocimiento.
Fin del sueño....
—¡T/N! JODER T/N LEVANTATE.
Y fui empujada hacia el duro y frío suelo.
—¡AHG! ¿¡QUE MIERDA TE PASA!?
—Por fin despiertas. Ya levántate tienes que ir a trabajar o el jefe te cortará el cuello.
Me exalte.
—¿¡Que horas son!?
Reviso el reloj de mano que cargaba y dijo;
—Las 10:30 AM
—¿¡10:30!? ¡MIERDA, ME VAN A HACER MIERDA!
Me levanté rápido y me empecé a desvestir.
—Ups, me equivoque son las 6:36 AM. Perdón mi error —se acercó a mí y empezó a besarme el cuello.
—¡No me vuelvas a asustar así! —sentí como tomo mis caderas con sus dos manos y me pegaba a su pelvis.
—Si, si, perdón.
Se empezó a frotar contra mi, me incomode bastante.
—N-no hay tiempo, me tengo que arreglar e irme lo antes posible —salí de su agarre y le sonreí para luego salir corriendo de aquella habitación con mis ropas en brazos.
El soltó un bufido y se tiró a la cama.
—¡El desayuno ya está listo! —escuche di una sonrisa de felicidad. No tendría que cocinar nada así que estaba feliz.
—¡Que bueno, gracias!
Explicando lo que sucedió antes, estoy en una especie de relación con ese demonio. No me gusta ni lo amo solo es para no sentirme sola y el muy bien lo sabe, pero se comporta muy cariñoso algo que me preocupa demasiado. Aunque me gusta que me haga el desayuno. Después de comer salí como alma que lleva el diablo para llegar a mi trabajo, una vez ahí todos me quedaron viendo mal, bueno era de esperarse después de todo le robe a su jefe, entre a la oficina de este y ahí lo vi, un demonio abeja con un parche en el ojo izquierdo y al verme frunció el ceño y yo solo sonreí
—Ah, eres tú.
—Si señor —el alzó una ceja, ¿en serio T/n? “¿si señor?”
—Bueno, no te quiero en mi oficina haces que todo empiece a apestar, así que seamos breves —fruncí el ceño ante tal comentario —¿Tienes mi dinero?
—Sep —dije y puse un saco lleno de dinero sobre su escritorio.
—A de saber a quién le robaste todo esto —comento con una sonrisa.
—Si, bueno. Ya que terminamos con todo esto y no te debo nada, Bombinhas —dije dando me la vuelta para salir de aquella oficina pero algo que dijo me detuvo.
—Oh, ¿En serio creías que ya no me debes nada, pequeña perra?
Me di la vuelta con una mirada sería.
—¿Que significa eso?
—Lo que oíste.
Tuve un tic en el ojo. «esto debe ser una maldita broma».
—¡Pague todo lo que me pediste!
—Pues no es suficiente.
—“no es suficiente ” ¿No es suficiente? ¿¡Como que no es suficiente!?
—Me jode la bulla, bajale dos rayitas. Y si, no es suficiente.
—....¡ese maldito ojo no debe costar tanto!
—Pues lo es querida. Ese “maldito ojo” como tú lo llamas, es un diamante —se levanto de su asiento y trato de intimidarme con su estatura, por que obvio era más alto y ¿si funcionaba? Tal vez un poco —Y tu lo perdiste. Otra cosa fuera que tengas mi ojo, así yo te dejaría en paz, pero como no lo tienes —tomo el dinero —Esto no es suficiente.
«¿Un diamante? ¿Que mierda?»
—Ese ojo me parecía muy común y corriente. Ni sé parecía a un diamante —dije con una ceja alzada.
—Dentro del ojo hay un diamante, diminuto pero costoso. Y este dinero de aquí ni siquiera es la mitad de lo que vale.
El me tomo de los hombros y me saco de su oficina.
—Así que, comienza a trabajar más duro, tienes suerte de que no te cobré nada de lo que rompiste ese día —y me cerró la puerta en cara.
Me fui molesta y de la nada me llegó algo a la mente.
«Si recuperó el ojo no tendré deuda».
En mi rostro creció una sonrisa y salí corriendo lo más rápido posible, hasta llegar a un taller y entre rápidamente hasta ver a un demonio diablo bajo un auto, me imagino que reparandolo.
—¡WILL! —exclame.
—¡Oh, mierda!
Grito, y escuché como pego la frente contra el auto.
—Ahg... —vi como salió de abajo de aquel auto y me miró mientras sobaba su frente —T/n —dijo y hizo una mueca de disgusto.
—La misma —sonreí —no pareces muy feliz de verme.
—¿tú qué crees? Cada que vienes es por algo así que sueltalo.
—¿Como crees? ¿Acaso no puedo venir a visitar a mi querido amigo?—el me quedo mirando con cara de “¿En serio?” intento levantarse pero no pudo así que me acerqué a él y lo ayude —bueno, ya que lo mencionas...¿Aún tienes aquel ojo que te di hace un mes?
—¿Ojo?
Yo asentí frenéticamente.
—..Hmmmmm...no.
Fruncí el ceño.
—¿¡Como que no!?
—Como oyes, no lo tengo. Lo vendí hace algunas semanas y quien diría que me darían una buena cantidad de lana por un ojo asqueroso.
—....
Sufrí de un tic, tenía ganas de agarrarlo por el cuello y ahorcarlo con todas mis fuerzas hasta que deje de respirar.
—Ah...
—¿Por que preguntas?
—No es tu problema, y segundo ¿Quien te compro ese ojo?
—No recuerdo bien su nombre, lo único que recuerdo es que es un Overlord
—¿Qué?
—Como oyes —dijo limpiándose la grasa las manos —normalmente vienen cada que su limosina tiene fallas.
—¡Eso no ayuda!
El quedó unos minutos mirando a la nada a lo que yo me desespere hasta que hablo.
—Creo que tiene un estudio.
—¿Un estudio porno?
—See, no se.
—¿¡Hablas de Valentino!?
—Ni idea, lo unico que se es que tiene un estudio. O eso escuché.
—¡Ese es Valentino!
El se encogió de hombros. Estuve cierto rato ahí junto a él hasta que se hizo algo tarde y me fuí.
—¿Como mierda le voy a robar ese ojo a un Overlord?
Estuve pensando sobre eso hasta que llegue a mi casa.
—¡Literalmente si no me mata me viola! Ok, no, tal vez solo son rumores de que el es así. Tal vez no se tan malo.....¿¡A quien engaño!? ¡Es el infierno obviamente es malo!
Me tire en mi cama tratando de pensar en qué hacer.
«Ni siquiera sé cuánto vale ese maldito diamante....¿Y para que el querría un diamante?......¿Tanto así costará?....estoy frita.....»
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Holaa :D
Bueno, este es el primer cap xd en unos días publicaré el segundo :> solo déjenme ver para ponerle fecha de actualización a la historia xd.
Espero hubieran disfrutado la lectura:3 si ven algún error ortográfico por favor corregirme en los comentarios uwu y sin mas que decir. Gracias por leer mis pendejadas :3 byee