El Mejor Amigo De Mi Padre.

By maarlpzz

952K 42.4K 4.6K

¿Como algo que era incorrecto, algo que estaba mal podía sentirse tan bien? sabíamos que era un error, pero n... More

Reparto.
Prólogo.
Capítulo 1.
Capítulo 2.
Capítulo 3.
Capítulo 4.
Capítulo 5.
Capítulo 6.
Capítulo 7.
Capítulo 8.
Capítulo 9.
Capítulo 10.
Capítulo 11.
Capítulo 12.
Capítulo 13.
Capítulo 15.
Capítulo 16.
Capítulo 17.
Capítulo 18.
Capítulo 19.
Capítulo 20.
Capítulo 21.
Capítulo 22.
Capítulo 23.
Capítulo 24.
Capítulo 25.
Capítulo 26.
Capítulo 27.
Capítulo 28.
Capítulo 29.
Capítulo 30.
Capítulo 31.
Capítulo 32.
Capítulo 33.
Capítulo 34.
Capítulo 35.
Breaking News.
Capítulo 36.
Capítulo 37.
Capítulo 38.
Capítulo 39.
Capítulo 40.
Capítulo 41.
Capítulo 42.
Capítulo 43.
Capítulo 44.
Capítulo 45.
Epílogo.

Capítulo 14.

19.1K 977 32
By maarlpzz

Capítulo 13| Días felices en el caribe.

Antonella Cavalcante:

San Juan, Puerto Rico.

—¡Antonella, una foto!

Me giré con una sonrisa y esperé al «flash». Will se encontraba frente a mi con una cámara digital en la cual lleva tomando fotos desde que llegamos. Ya estaba apunto de oscurecer, el atardecer poniéndose frente a nosotros. Esperábamos todos los días en la playa y luego iríamos a casa para preparar algo delicioso que comer.

—¡Vale venga, una foto grupal!— nos hizo unirnos a los 5; Eleanor, Nate, Sebastian, él y yo.

—¿Quien cocinará hoy?— pregunto yo, ya cuando empezamos a caminar en dirección a la casa.

—Sebastian— contestó Eleanor y el moreno bufó.

—No puedo— abre la puerta para nosotros y luego la cierra tras entrar— Me veré con alguien.

Will y Nate silban.

—¿Con alguien te refieres a Maxandra?— le pregunta Eleanor con diversión. Max es la chica con la cual Sebastian se ha estado viendo tres días después que llegamos— ¡Invítala a venir, idiota!

—No— se alejó de nosotros pero no nos dimos por vencidos.

—¿Por que no?— me coloco frente a él y con confusión le pregunto.

—Por que se como son ustedes y no puedo dejar que me avergüencen— se puso las manos en las caderas, pareciendo una jarra.

—Nadie va a avergonzarte— lo tranquilizó Nate— ¿Verdad chicos?

Ninguno respondió, por que estábamos demasiados ocupados viéndolo indignados.

—¡Ves!— chilló el moreno.

—¡Es que no prometo nada!

—¡Yo tampoco!

—Es que si ellas empiezan para mi es difícil no continuar...

—Además...— puso los ojos en blanco, al parecer no queriendo decir lo que diría a continuación— vamos a ir a una fiesta.

—¿Fiesta?— nos encantaba aquella palabra y no miento al decir que se nos iluminó la mirada— ¿Como es que has omitido aquel pequeño detalle?— lo ataca Will.

—Lo hice a propósito.

—Claramente— asiente Nate— Pero tu para recompensar que nos has mentido nos llevarás contigo.

Sebastian niega.

—¿Por que no?— me irrito.

—¡Por que también se como se comportan en las fiestas!

—¡Como todo el mundo lo hace!— nos defiende Eleanor— solo que a ti te avergonzamos más por que ya nos conoces, a los demás ni les importa...

Luego de un rato, media hora exactamente, convenciendo a Seb, este termina por rendirse y nos dice la hora: 9:30.

Eso nos da tiempo para cenar, conversar un poco en el salón mientras vemos la televisión y cuando ya son las 8 de la noche todos se marchan a prepararse, los hombres en una habitación y las mujeres en otra. Eleanor lanza vestidos de aquí para allá, y yo busco peinados en Pinterest, queriendo verme bien ya que es a la primera fiesta que vamos desde que llegamos.

Decido un vestido blanco, suelto y medio trasparente, con dos trenzas que Eleanor me hace y unas converse del mismo color del vestido. Me coloco un poco de maquillaje, rubor en crema, máscara de pestañas y gloss.

Eleanor va vestida casi igual que yo, solo que ella optó por un vestido más pegado y dejarse el cabello en una cola alta despeinada. Nos hecha perfume a ambas y puedo decir que ya estamos listas.

—¡Vámonos!— Sebastian aporrea la puerta, lo cual me hace poner los ojos en blanco y tomo la mano de mi amiga para así salir de la habitación. Nos subimos a su Jeep, delante no va nadie por que yo he querido sentarme junto a Will y Eleanor junto a mi hermano.

—¿Ya estamos llegando?— pregunto con impaciencia.

Sebastian me dirige una mala mirada por el espejito y yo me hundo en mi asiento.

—¿Ya estamos llegando?— pregunta Eleanor removiéndose en el asiento.

—¡Controlen a sus novias!— pide Seb. Nate ríe ante su irritación y Will me coge de la cara y me estampa un beso que me hace sonreír.

—Ya hemos llegado— anuncia y sin mentir, pasaron más de 30 minutos, por que cuando llegamos son las 10:00 y algo.

Bajamos todos del coche y me aferro a la mano de Will, quien nunca me suelta mientras nos movemos entre la gente que no nos deja de mirar. Algunos me sonríen, otros me miran con burla y otros... no se exactamente lo que hacen, pero de seguro no me quieren allí.

—¡Max!— escucho a Seb llamar, la pelirroja llega casi corriendo al moreno y le estampa un beso, tomándonos por sorpresa a los 4.

No sabíamos que eran así de uniditos.

—Has tardado en llegar— ronronea ella, aferrada a su brazo. Sebastian le susurra algo y luego nos señala— ¡Son los amigos de Seb!

—Somos los amigos de Seb— confirma Nate con una sonrisa— Es un gusto al fin conocerte.

—Mucho gusto, soy Maxandra, para los amigos Max.

—Yo soy Eleanor, ella es Antonella, Nate su hermano y mejor amigo de Seb y Will, quien es nuevo en el grupo.

—Sebastian no ha dejado de mencionarte— comenta Will.

—¿Ah no?— curiosea ella y su acento me causa curiosidad.

—No, de hecho...

—Elle— lo corta el moreno, nervioso de que se nos escapara el gran enamoramiento que tiene por la puertorriqueña— ¿Y bien? ¿que se hace en estas fiestas?

—¡Se perrea, papi!— chilla ella y no pierde tiempo a llevárselo a la pista.

No reconozco la canción que esta sonando pero Will se acerca a mi odio para susurrarme de quien se trata— Es Don Omar.

Entonces soy yo quien me lo llevo a bailar para así recordar cómo nos conocimos. Muevo mi trasero contra él mientras sus manos van a mi cintura y me fijo en cómo lo hace Maxandra. Bajo, subo y lo muevo de lado a lado, hago que sus manos me aprieten el culo con fuerza y jadeo ante el placer que siento.

Este baile es más calenturiento que el que bailamos en mi país, así que con las ganas a mil, me giro a besarlo y Will me recibe con gusto, sintiendo lo mismo que yo. Su lengua invade mi boca y la recibo con gusto, húmeda y caliente. Gimo en su boca y me aferro a sus hombros para no caerme cuando mis piernas flaquean.

—William— ronroneo, acariciando su nariz con la mía y él deja un beso en ella con cariño.

—No podemos hacer lo que queremos hacer aquí, Juls.

—Espero que cuando lleguemos a casa...

Sonríe con malicia.

—Haremos lo que tú quieras cuando lleguemos a casa— me da una nalgada— vamos por unos tragos.

Pido un ron con cola y él una cerveza, me siento en el taburete y Will se coloca frente a mi, entre mis piernas. Escondo mi cabeza en su cuello y reparto besos por doquier.

—Juls...— jadea en medio de una risa. Me aparto de él y se da un trago largo— No podré mantenerme quieto si sigues haciendo cosas para que no lo haga.

—Es que estás tan sexy hoy que quiero comerte a besos— relamo mis labios y me termino mi trago, pidiendo otro.

Ya no me dan grandes ganas de beber, de tres vasos o dos cervezas no paso, Will me cuida y mantiene sus ojos en mi todo el rato. Tampoco me deja sola y me anima cuando me ve decaída, sin saber el por qué, pero lo hace y eso ha hecho que un gran cariño por él crezca dentro de mi.

—Yo he querido comerte a besos desde que te vi bajar por esas escaleras y si te soy aún más sincero, desde esta mañana que te vi en el desayuno— lame mi labio inferior y lo chupa.

Paso mis manos por su cuello.

—Vámonos a la playa— propongo.

Sus manos se aferran a mi cintura y no me sorprende que no se niegue, ha aceptado todo lo que le he propuesto. Salimos otra vez por la misma puerta que entramos y cruzamos la calle corriendo, riendo y jugando entre nosotros. Me lanzo a su espalda y el me carga en ella hasta que estamos alejados en unas rocas, donde nadie nos vería.

La luz de la luna es la única iluminación que tenemos, el sonido de las olas es música para nuestros oídos y el olor a mar nos hace saber que casa vez que pisemos una playa, este momento volverá a nuestras cabezas.

Empieza a besarme con desesperación y yo lo recibo gustosa, mis manos se aferran a su cabello cuando me alza y hace que enrosque mis piernas alrededor de sus caderas. No se cómo y en qué momento termino desnuda, con mis tetas en su cara y él encantado de chuparlas.

Se detiene un momento y desde abajo me mira con esa malicia que me incita y me excita de mil maneras. Mis partes bajas se contraen, queriendo que baje allí ¡ya! y eso hace, bajándome las bragas y perdiéndose en mi monte de venus. Siento como sus dedos también entran en mi junto a su lengua y cómo saborea mi clitoris, siendo este su manjar favorito.

Me retuerzo y tiro de su cabello, no parando de gemir por todo lo que este hombre me está haciendo sentir. Cuando termina, sube a mi boca:—Me encanta cómo sabes... —Su mano me aprieta el trasero con fuerza.

Me encargo de desabotonar su pantalón y de bajarlo junto al bóxer, dejando que mis ojos contemplen a su duro pene con el líquido pre-seminal. Saca un preservativo del bolsillo trasero de su pantalón y se lo coloca.

No se cómo lo hace, pero me coloca las piernas por encima de la cabeza y la mirada se le oscurece ante lo que tiene frente a sus ojos. Su cuerpo encaja con el mío cómo dos piezas de rompecabezas y siento su pene duro contra mi húmeda vagina.

Me abre los labios vaginales para así introducirse dentro de mi lentamente, me arqueo y cierro los ojos:— Ábrelos, quiero que nos mires— me hace ver hacia abajo— ¿Notas lo bien que lucimos juntos, Juls? ¿lo bien que encajamos?— jadea, empezando a embestirme.

Asiento, no puedo hablar, tengo la boca seca.

Me da un azote en las nalgas cuando no le contesto, le gusta escucharme...

—Lo veo— logro contestar con dificultad. Una de sus manos la tengo en la cintura y la otra se encarga de pellizcarme los pezones. El vaivén de nuestros cuerpos me hace arder y me hace pedir más. Más duro, más rápido. Más.

—¿Te gusta? ¿Te gusta como te estoy follando?

Grito de satisfacción.

Me da la sensación de que me va a partir en dos, pero del placer, joder.

—Sí...

Dentro, fuera, suave, lento...

Oigo sus gruñidos, sus gemidos y su respiración entrecortada en mi oído, me abro más de piernas a él y araño su espalda. No suelta mi boca, se hace dueña de ella y siento un cosquilleo en mi estómago. Me corro. Viendo hacia nuestra unión y cómo mi humedad le moja completamente el falo. Entonces se inclina hacia mi y con una última embestida, oído su gruñido de satisfacción.

—¿Todo bien, Juls?— pregunta, acariciándome la cara.

Sonrío.

—Debo lucir espantosa.

—Hermosa querrás decir— me besa los labios castamente antes de salir de mi— ¿Todo bien?— repite.

—Todo bien, Will.

Continue Reading

You'll Also Like

1M 89.9K 69
Arabelle es forzada a comprar un esclavo vampiro, incluso cuando ella detesta tener esclavos. Esto es lo qué pasa cuando tienes un esclavo vampiro y...
248K 12.6K 69
"𝙀𝙡 𝙖𝙢𝙤𝙧 𝙣𝙪𝙣𝙘𝙖 𝙢𝙪𝙚𝙧𝙚 𝙮 𝙡𝙖 𝙫𝙚𝙧𝙙𝙖𝙙 𝙩𝙞𝙚𝙣𝙚 𝙧𝙖𝙯ó𝙣 𝙥𝙤𝙧 𝙦𝙪𝙚 𝙙𝙚𝙟𝙖𝙣 𝙪𝙣𝙖 𝙝𝙪𝙚𝙡𝙡𝙖" "-𝙔 𝙖𝙡 𝙛𝙞𝙣𝙖𝙡 𝙚�...
109K 10K 60
Kate Laforêt agente especial de una de la mejores organizaciones de espías del mundo, la OEDEM. >Debes tener cuidado en quien confías, incluso los...
3K 137 13
El amor es un sentimiento que puede surgir a partir de una amistad, cuando las dos personas comienzan a compartir cada vez más tiempo juntos, lo que...