Capítulo 12 | "Superbike"
Kylie Hills
Terminaba de salir de la universidad cuando Adam se atravesó en mi camino, una sonrisa algo forzada se formó en mi rostro.
Lo cierto era que no habíamos hablado desde lo que ocurrió aquel día mientras hablábamos con Kansas y me disgustó un poco la manera en que reaccionó cuando se enteró de la existencia de Noah. Yo nunca había necesitado la aprobación de la gente en cuestiones de cuando se tratara de Noah, entendía que a veces la gente se impactaba cuando se enteraban de la edad de Noah porque había sido una madre joven, pero vamos, existían millones de madres jóvenes en el mundo, tampoco era para tanto.
Su reacción me incomodó en sobre manera, como si la existencia de Noah fuera algo que tendría que estar gritando a los cuatro vientos cuando la verdad es que yo nunca ocultaba la existencia de mi hijo, más no lo iba gritando por todo lado dado que nunca se terminaba de conocer a las personas, y lo cierto es que Adam y yo sólo éramos conocidos de la universidad, no había necesidad de hablarle de mi hijo.
— Hola, Adam — sonreí un poco.
— Kylie — sonrío mientras rascaba su cabeza nervioso — No te he visto estos días.
— He estado justo aquí, donde siempre — intentaba ver sobre su hombro para encontrar a Hunter, dado que quedamos en que él vendría por mí al salir de la universidad porque pasaríamos la tarde en la playa con Noah, pero no había rastros de él.
— Creo que te debo una disculpa — habló de nuevo el castaño — No reaccioné bien el otro día.
— No, no lo hiciste — no iba a endulzarlo, hizo una mueca ante mis palabras.
— Me sorprendió un poco que tuvieras un hijo, es que, eres muy joven.
— Fui madre joven — tomé un par de pasos hacia él — Mira, Adam, la existencia de mi hijo no es algo que oculte o me avergüence, simplemente el tema nunca había salido entre nosotros y no ando hablando de mi niño con personas que no conozco realmente, con Kansas la conversación sólo surgió, pero no oculto a mi hijo y no me avergüenzo de él, por el contrario, Noah es lo mejor que me ha pasado en la vida.
— Y no trato de que lo ocultes, solo... me sorprendió, ¿vale? — intenta tomar mi mano entre las suyas y disimuladamente la llevo a mi cabello para acomodarlo — La verdad es que me has gustado desde que te vi la primera vez, me has parecido guapa desde siempre y me preguntaba si de casualidad tu...
— ¿Me invitarás a salir sólo porque te parezco guapa? — lo corto.
— Eh... ¿sí? — balbuceó — Muchos chicos en la universidad te consideran atractiva y yo también lo considero, no me gustaría que nadie se me adelantara y...
— Adam — corto todo su balbuceo mientras tomo una respiración tratando de ordenar mis próximas palabras — Sólo lo estás empeorando. En este momento no me interesa salir con ningún chico, me gusta que seamos sólo mi hijo y yo por el momento, está muy pequeño y todas las personas que entran a mi vida indirectamente también lo hacen a la de él, y no estoy diciendo que busco un padre para mi hijo, porque conmigo le basta y sobra, pero realmente si comenzamos a salir tendrás que interactuar con él y no te veo lo suficientemente emocionado con la idea, ¿no es así?
La mueca en su rostro me lo confirma, así que continúo.
— Asumo que no te gustan los niños y eso está bien, no a todos nos gustan las mismas cosas, pero a la próxima podrías tratar de no invitar a salir a una chica que tiene un niño pequeño, Noah y yo somos un equipo, donde yo voy él también irá y tampoco dejaré de lado a mi hijo para salir contigo — le sonrío mientras aprieto su mano — Me agradas, Adam, realmente podría llegar a considerarte un amigo, pero no me apetece salir contigo.
— Creo que lo entiendo.... — me regala una sonrisa incómoda en el rostro, veo que varios de sus amigos nos miran a la distancia — ¿Al menos podría invitarte a una fiesta este fin de semana?
— Adam...
— Será como amigos, le prometí a mis amigos que te llevaría, yo podría pasar por ti y luego te llevaría a casa — se acerca de nuevo a mí y me toma desprevenida cuando acomoda un mechón de mi cabello tras mi oreja — También podrías invitar a Kansas, o a quien tú quieras.
— ¿Esto no tiene nada que ver con lo que dijiste hace rato sobre varios chicos de la universidad interesados en mí y que tú quieras presumir con tus amigos? — le cuestiono y veo como un sonrojo invade su rostro ligeramente — Adam, cuando salgo con un chico, me gustaría que el chico salga conmigo por algo más que mi físico, algo como que le parezca atrayente mi personalidad o algo por el estilo, porque para mirarme guapa ya puedo hacerlo yo misma — me aparto de nuevo de él.
No volvería a ser el trofeo de un hombre, con Craig había tenido suficiente.
— Sólo una fiesta, Kylie, cómo amigos, de verdad — me insiste — Así podría presentarte a gente de la universidad, creo que aparte de mí y de Kansas no conoces a nadie más.
Bueno, tenía un punto.
— Sólo piénsalo, ¿vale? — intentó de nuevo — Y mañana me dices la respuesta.
Iba a contestar de nuevo cuando el rugido de un motor atrajo mi atención, un motor que se me comenzaba a hacer familiar, además que me bastó con girar mi rostro cuando los chicos que estaban fuera de la universidad, entre esos los amigos de Adam, giraron en dirección hacia las motocicletas aparcadas frente a la universidad, entre esos chicos, los amigos de Adam.
Todos estaban babeando por las motocicletas de Axel y Cody, de las cuales le cuestioné a Hunter la última vez que nos vimos y me dijo los modelos de las motos, Axel manejaba una Kawasaki H2R pintada de blanco mientras que su hermano manejaba una BMW S1000RR, dos motos totalmente costosas e impresionantes.
Eran unas motos tan costosas que cuando miré su precio en internet me dolieron los ojos, y Hunter me comentó que eran aún más costosas puesto que los hermanos las habían personalizado en tema de pintura, escapes, motor y demás, por eso aquel día en que Axel me llevó a casa estaba tan asustada, su moto podría llegar de cero a trescientos kilómetros en cinco segundos, tal vez menos, y la de su hermano no estaba tan lejos.
Era una superbike, o al menos eso decía internet.
Así que, mientras ambos chicos estacionaban su moto haciendo sonar el motor logró tener la atención de todos los estudiantes que se encontraban en las puertas del campus que comenzaron a babear por las motos de mis amigos, ambos bajaron de sus motos mientras charlaban entre ellos y achiqué mis ojos cuando distinguí a Aria bajar de la moto de Cody, no se había quitado su casco y la visera era polarizada, pero distinguiría su cuerpo donde fuera.
Sentí mis mejillas enrojecer cuando Cody gritó mi nombre y tanto él como Aria agitaron sus manos en mi dirección, consiguiendo que todas las personas giraran a mirarme, en tanto Axel sólo me veía fijamente mientras estaba recostado a su moto, podía ver sus ojos gracias a que había subido la visera de su casco y la diversión se reflejaba en ellos.
Me distraje un poco cuando cruzó sus brazos aún con su cuerpo arrecostado a la moto, consiguiendo que sus brazos tatuados resaltaran aún más sus músculos, traía una simple camiseta negra y vaqueros negros que resaltaban aún más los tatuajes de sus brazos y cuello.
— Debo irme — le hablé a Adam.
— ¿Los conoces? — preguntó Adam incrédulo — ¿Conoces a los hermanos Cox?
— Eh...sí — fruncí mi ceño confundida — Trabajo con ellos.
— ¿En la tienda de tatuajes?
— Sí, es de mi tío.
— ¿Tu tío es Grayson Hills?
— Pues, la última vez que vi mi identificación decía Kylie Hills.
— Joder, Kylie — revolvió su cabello — Así jamás tendré una oportunidad contigo.
Fruncí mi ceño incrédula, pero Adam continuó su interrogatorio.
— ¿Y qué hay de Hunter Jones?
— Es mi hermano.
— ¿Tu hermano...?
— Bueno, no es mi hermano, pero lo es — ok, ni yo me entendía — Es mi mejor amigo, aunque es como mi hermano.
— Vale...
Adam parecía desinflarse como un globo con cada cosa que le decía, al parecer mis amigos eran populares aquí en California, eso consiguió hacerme reír.
— Te avisaré sobre la fiesta, Adam — llamé su atención mientras me alejaba — Iré con mi mejor amiga, espero no te moleste, es la chica que está en la moto.
— Vale...sí, claro.
— También puedes decirle a Kansas.
Terminé de alejarme mientras caminaba hacia mis amigos que conversaban entre ellos, sus cascos reposaban sobre las motos, Cody y Axel no parecían nada incómodos con la atención que estaban recibiendo, pero Aria sí se encontraba con su ceño fruncido.
— ¿Qué hacen aquí? — cuestioné nada más acercarme.
— ¡Pero si es el tesorito de la tienda! — Cody me envolvió en sus brazos en un abrazo de muerte que consiguió hacerme reír.
— Vinimos por ti, hubo un cambio de planes porque la camioneta de Hunter no arranca, al parecer tiene un problema con el arrancador, así que está en el taller, nos dijo que Grayson y Noah pasarían por él en la camioneta de tu tío y que nos verían en la playa, así que los hermanos se ofrecieron a recogerte — me explica Aria — Y yo no podía perderme un viaje en esa moto tan impresionante.
— Tu sigue alagando a mi moto, rubia — se emocionó Cody en broma, estos dos llevaban coqueteando en broma desde que mi amiga había venido.
O bueno, yo creía que era en broma.
Tendría que hablar con Hunter sobre ello.
Giré mi rostro hacia Axel el cual miraba fijamente hasta donde se encontraban los amigos de Adam, donde se encontraba también el castaño, los cuales susurraban sobre la moto de mis amigos, pero Axel miraba fijamente hacia Adam.
— Vale, muchas gracias por venir hasta acá — sonreí mientras ajustaba las correas de mi mochila, agradecía que el día de hoy sólo tuve una clase por lo que en mi mochila apenas cargaba mi computadora. Tenía entendido que Tío Gray llevaría la pañalera que dejé lista para Noah y ahí incluía mi traje de baño para cambiarme.
— Anda, sube — Cody subió a su moto mientras se colocaba su casco y le entregaba el suyo a Aria quien emocionada se lo colocó y subió tras Cody.
Axel me tendió el mismo casco blanco de la última vez, me lo coloqué mientras él lo hacía con el suyo y me sorprendió cuando se acercó hasta mí y me ayudó con el cierre de mi casco, pese a que podría haberlo hecho sola, con sus manos subió la visera de mi casco para que pudiéramos vernos a los ojos.
— Te ves linda hoy, tesoro.
Su cumplido me tomó desprevenida y sentí como el sonrojo corría a mi rostro con fuerza lo que lo hizo reír por lo bajo.
— ¿Sólo hoy? — me reí recobrando la compostura.
— Hoy más que otros días.
Subió a su moto y encendió el motor haciéndolo rugir lo que consiguió que de nuevo las miradas se posaran en nosotros, Cody rugió su motor y luego de fijarse que no viniera ningún coche salió a una velocidad atemorizante hacia la carretera, coloqué los estribos de la moto de Axel.
— Como manejes igual que tu hermano, te mataré.
Sentí su cuerpo sacudirse por la risa mientras terminaba de subirme a la moto y rodeaba su cuerpo con mis brazos colocándolos sobre el tanque de la moto, sabía que le estaba dando una buena vista de mi trasero a los chicos que nos miraban gracias a la postura de la moto y mis shorts de talle alto, pero traté de no pensar mucho en ello. Axel bajó su visera mientras yo hacía lo mismo con la mía.
Hizo rugir el motor de la moto y se fijó que no viniera ningún coche, me tomó por sorpresa cuando quitó mis manos del tanque de la moto e hizo que las apretara en torno a su cuerpo, de tal manera que me mantenía bien sujeta a su cuerpo, con mis brazos rodeándolo con fuerza.
— Te mataré, lo juro que lo haré — gruñí.
Su cuerpo se tambaleó de nuevo con su risa y lo siguiente que sentí fue como apretaba mis brazos en un agarre de muerte en torno a su cuerpo cuando salió disparado por la carretera justo como lo hizo su hermano.
Agradecía que la visera del casco estuviera abajo si no estaba segura de que mis ojos se hubieran secado completamente, íbamos a una velocidad atemorizante y me preocupaba la manera en que apretaba sus costillas con fuerza, podría quebrarle una.
Axel alcanzó a su hermano rápidamente por la carretera quien había reducido considerablemente la velocidad asumo que mientras nos esperaba, el pelinegro pasó a una velocidad impresionante a Cody quien rápidamente se puso al corte con a la velocidad de su hermano.
Y pese a que estaba bastante atemorizada con la velocidad a la que íbamos también conseguí relajarme sorprendentemente, me sentía eufórica y pese a que sabía que se debía a la adrenalina del momento conseguí divertirme y disfrutar del paisaje hasta llegar a la playa.
¡Hola, preciosos!
Volvemos con las actualizaciones de los tatuados, esta vez es definitivo, dado que la otra historia que estaba escribiendo ya llegó a su fin, lo cual me tiene nostálgica, pero ahora podré centrar toda mi atención en Entre la tinta.
Tengo pensado que no sea una historia tan larga como la anterior, esta historia podría tener unos cuarenta capítulos maso menos, o al menos así lo tengo planeado en mi esquemita, todo depende de que los personajes no decidan hacer lo que les da la gana y me alarguen la historia.
Publicaré un capítulo por día, ya estoy trabajando en el de mañana.
Se vienen muchas cositas para Axel y Kylie, estoy emocionada de poder dedicarle mi atención cien por ciento a ellos ahora.
No se olviden de votar.
Besos con diamantina.
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