3 DIAS RESTANTES
-Viernes-
Me caí de la cama y desperté de golpe, solía moverme MUCHO mientras dormía. Acaricié mi cabeza por culpa de sentirla adolorida y bajé a desayunar con la tía Colette. Como siempre, salí justa de casa y fui con Evan hacía el instituto, por el camino pasamos por enfrente de la casa de Amelié y su madre, no pude evitar sentirme melancólica
—Aún no hemos visto el contenido de la caja que nos dejó prestada.
"Cierto, podríamos verlo esta tarde, pero antes quería hablarte de alg-"
—¡Tuvimos mucha suerte de que nos la prestara! Ya quiero averiguar el pasado de Amelié.
"Os noto muy cercanas, sorprendente sobretodo porque os conocéis de hace 5 días."
—Ya, supongo que no es una relación de amistad normal.
"¿A qué te refieres?"
—No lo sé, quizás es más fácil sentirse cercano a un fantasma ya que técnicamente estás hablando directamente con su alma.
"No lo entiendo demasiado, pero me hago a la idea."
Llegamos a clase y nos separamos para cada uno ir hacia su aula. El verano se acercaba y se hacía notar, y no tanto por el calor, sino más porque es cuando los profesores comenzaban a repetir en bucle lo de "el último empujón". Estaba harta, todos los años lo mismo. No solo eso, siempre habían buscado entrometerse en mi vida personal de manera forzada, ¿por qué te crees que te explicaría mi vida personal? La mayoría de las veces solo servía para que minimizaran mis problemas y me dijesen que a pesar de ellos es importante que me centre en los estudios, que tengo un futuro brillante por delante. Pero, ¿te crees que alguien que llora todos los días por el mismo motivo está en las condiciones para ponerse a practicar 5 horas seguidas matemáticas, para memorizar formulas de física y química o para aprenderse las fechas de geografía e historia? Y entiendo que ellos no pueden comprender que tantas cosas pasan por mi cabeza si no se lo explico, pero podrían abstenerse a comentarios que solo les hacen ver como ignorantes. Además, solo porque mis notas no sean las mejores, no significa que no me esfuerce.
Quizás en la actualidad ya haya abandonado completamente mis estudios a causa de mi desmotivación pero, cuando si lo intentaba con la esperanza de obtener resultados, tampoco era suficiente. No importaba las horas de estudio que pusiese, siempre sacaba como máximo un 7 u 8 sobre 10 y da gracias. No entendía como había personas capaces de sacar 10 en todo si yo para un solo examen debía pasarme la semana anterior entera estudiando 6 horas diarias. ¿Era porque ellos estudiaban el doble o porque yo estaba haciendo algo mal? De igual forma, no tengo nada en contra de ese tipo de alumnos, sino en contra de los profesores que dedican su carrera a compararnos a los demás con ellos. ¿Son mejores personas o superiores solo por matarse a estudiar, o por otro lado, tener facilidad para hacerlo? Eso es lo que daban a entender la mayoría.
Lo siento por los docentes que ejercen su trabajo correctamente, pero un gran porcentaje confirma lo que he explicado. Me gustaría pensar que sus motivos tienen para decir esas cosas, sin embargo, lo mal que lo he llegado a pasar por esos comentarios nunca será justificable.
En fin, a pesar de la manera despectiva de referirse a nosotros de algunos profesores la mañana se pasó rápido y nos reunimos como siempre en la biblioteca.
Me fijé en que los bichos viscosos que aparecieron junto a la caída de la estrella y a Amelié, ahora se habían encariñado y enganchado a ella como una lapa. Me reí un poco al fijarme en ese detalle, me pareció adorable. Además, se había hecho un cambio en el aspecto, ahora llevaba dos trenzas que caían sobre sus hombros.
—¡Te quedan muy bien!
"¡Gracias! Me ha enseñado a hacerlas la señorita bibliotecaria."
Me senté en una silla y nos pusimos a hacer una recapitulación de todo.
—Por cierto, señorita bibliotecari-
"Llamadme Alex."
—Alex, ¿por qué decidiste ayudarnos de la nada? Es algo que lleva dándome curiosidad desde el inicio.
"No lo sé, quizás porque actualmente llevo una vida muy aburrida y veros a vosotros tan entusiasmados, me hizo recordar a mi adolescencia."
—... ¿Hace cuánto fue eso?
"Hará unos 7 años."
—Que poco.
"¿Cuántos años creías que tenía?"
—...
"Como sea, al principio ni si quiera me creía lo de Amelié, pero por algún motivo lo asimilé sorprendentemente rápido. Quizás se me hizo más fácil porque siempre he creído en los fantasmas y todo eso."
—Ya... Todo está yendo tan rápido que ni si quiera me ha dado tiempo a ponerme a asimilarlo, quiero decir, es una fantasma, wow.
"Te entiendo."
Interrumpió Evan.
"Por cierto, Ra-"
—Bueno, ¿deberíamos ver el interior de la caja?
"¡Raine!"
—¿Qué?
"Que ya van dos veces hoy que no me dejas hablar."
—Oh, lo siento. Bueno, como estaba diciendo, ¿que creéis que podríamos encontrar ahí dentro?
Amelié intervino.
"No lo se, pero quizás me ayuda a revivir algunos recuerdos."
—Tienes razón.
Después de la pequeña reunión cada uno regresó otra vez a su clase correspondiente. Pasé las tres horas dándole vueltas a mi bolígrafo abrumada, inusualmente abrumada. Es que... de repente me puse a pensar en que ya quedaba poco para tener que despedirnos de Amelié, eso me entristecía muchísimo. No se por qué pero de verdad que sentía una conexión con ella desde nuestro primer encuentro que no sería capaz de explicar, y a pesar de que no podía afirmar nada porque aún era muy temprano, hubiese dado cualquier cosa por tener simplemente más... tiempo.
Tiempo.
Tiempo...
"Tiempo."
No importaba como lo pronunciase en mi cabeza, su escasez siempre parecía ser la culpable de mis problemas. Si hubiese tenido más tiempo a lo mejor podría haberme despedido de Evan, a lo mejor habría conocido más a Amelié y todas sus facetas, habría sido de capaz de adaptarme académicamente, habría podido detener a mi madre o incluso, si ella se hubiese tomado el tiempo de conocer más a mi padre, no habrían terminado de esta manera, no habría nacido. ¿Que hubiese ocurrido si no hubiese nacido? Era lo que ella siempre parecía desear. Lo repetía constantemente "si no te hubiese tenido..." ¿Entonces estaba en lo cierto? A lo mejor llevo siendo un error desde el inicio. No sabía si era o no cierto, pero mi progenitora me había convencido al completo de la adolescente inservible y desechable que era.
Quizás solo decía esas cosas porque se sentía mal consigo misma, y hacer que a los demás les ocurriese lo mismo le resultaba placentero. Puede ser que solo fuera un alma en pena que llevaba años sin ser escuchada y ese era el único modo de desahogarse que tenía, la única manera de calmar toda la ira acumulada.
Me lamento por su muerte pero cuando estaba viva, lo único que quería era que terminase en ese desenlace. Ahora lo pienso y creo que me arrepiento, es confuso y contradictorio porque a pesar de que quisiera que siguiera aquí conmigo, jamás la perdonaría.
Cada vez que estiraba mi pelo, mi piel, cada empujón, cada grito y cada insulto se habían quedado esculpidos en mi cabeza y jamás lograrían desaparecer completamente.
Cada vez que alguien decía que me apreciaba desde entonces yo no podía creerle.
Cada vez... lo único que hacía era cuestionármelo todo.
¿Si no soy una mala persona por qué me trató como una durante tanto tiempo?
No obstante, incluso después de todas estas secuelas y de llegar a desearle la muerte yo actualmente la extrañaba, demasiado, cada día.
Quizás es por eso que las palabras de la madre de Amelié me llegaron tanto al corazón.
A lo mejor es que me había acostumbrado y salir de mi zona de confort era aterrador, a pesar de que era nociva.
No salía de mi cabeza en ningún momento.
Cuando abrí la puerta y vi su silueta contrastar con la tenue luz de la ventana... fue como si mis latidos se detuvieran en seco de golpe.
Era espantoso, absolutamente grotesco.
A veces cuando cierro los ojos aún lo recuerdo y me culpo por lo sucedido, todo por la falta de tiempo.
Los siguientes días los pasé apegada a su camilla, sosteniendo siempre su mano la cual poco a poco iba perdiendo calor... finalmente confirmaron que había quedado en estado de coma.
Desde entonces me culpo cada segundo por no haber llegado a tiempo y sueño con la esperanza de que algún día despierte, aunque si lo llega a hacer solo me rechazará y me dirá que yo fui el motivo.
De repente volví en mí cuando el profesor dijo mi nombre.
"¿Estás bien, Raine? ¿Quieres ir a lavarte la cara?"
Palpé mi cara y me di cuenta de que había comenzado a llorar sin darme cuenta.
—Ah, no es nada, algo de polvo a entrado en mi ojo por la ventana.
La clase no tardó en finalizar y me reuní a la salida con Evan y Amelié, pero algo inesperado sucedió.
—Oye, Evan, te noto raro, ¿pasa algo?
"Hmm..."
Refunfuñó, por algún motivo, tuve el presentimiento de que algo malo iba a suceder pero no le di importancia.
—Bueno, ¡vayamos a mi casa y veamos que había en la caja!
"Creo que yo no iré."
—¿QUÉ? ¿Por qué no?
"Parece que prefieres estar con Amelié antes que conmigo."
Amelié puso una cara disconformidad por esa frase.
—¿Qué te pasa? Ni que tuvieras 5 años.
"Voy totalmente en serio."
—No es gracioso, Evan.
"Llevas ignorándome todo el día, toda la semana de hecho."
—... No me está gustando nada tu comportamiento.
"Si nos ponemos técnicos, llevas pasando de mi 2 años, ¿qué demonios te pasa? Ya me he hartado."
—Esto está siendo incómodamente repentino, Evan.
El ambiente poco a poco iba aumentando en temperatura.
—¿Cuántas veces tengo que repetirte que no estaba bien?
"¿Y TANTO TE COSTABA RESPONDER UNA CARTA? ¿O UN MENSAJE DE TEXTO? ¿O UN CORREO?"
—No empieces, Evan.
"Deja de repetir mi nombre todo el rato y deja de pretender saber mejor que yo de lo que hablas."
—...
"Hacer cualquiera de las cosas que he dicho te hubiese tomado 2 minutos. No necesitaba una larga explicación, solo un "No te preocupes Evan, te sigo apreciando como amigo pero no me encuentro de humor para hablar.""
—Lo siento, no sabía que te sentiste así...
"Lo único que necesitaba era que hicieses lo mínimo como mejor amiga."
—Evan, lo siento, pero ya no puedo hacer nada al respecto.
Comenzó a llorar de frustración.
"¡LO SE! ¡Y NI SI QUIERA YO ENTIENDO POR QUÉ TE ESTOY DICIENDO ESTO SI NO PUEDES CAMBIARLO... PERO NO PUEDO EVITAR SENTIRME ENFADADO!"
—Si te hago sentir así quizás lo mejor es que dejemos de ser amigos, al menos por un tiempo.
"... Raine no me jodas."
—Voy en serio, ya llevas tiempo comportándote así.
"¿De verdad esta es la única solución que se te ocurre?"
—Bueno, es que si no entiendes que ya no puedo hacer nada al respecto no se que más hacer.
Por algún motivo, sentía que no estaba expresando lo que realmente sentía y comencé a crear una barrera emocional entre yo y Evan.
No entendía por qué mi reacción estaba siendo tan fría, de repente todos mis sentimientos se congelaron al sacar ese tema, o quizás por el hecho de no querer mostrar debilidad.
Fue extraño.
Evan se largó a llorar y Amelié, sin estar segura de que hacer, decidió ir con él. Evan se sentó en las escaleras de emergencia del segundo piso y escondió su cara entre sus piernas tratando de entender que acababa de suceder, no solo ahora sino a lo largo de todo este tiempo. Amelié llegó unos pocos minutos después y se quedó observando el paisaje desde la barandilla.
"¿Por qué me has seguido y no has ido con Raine?"
Preguntó Evan costándole hablar por la mucosidad que tapaba sus fosas nasales.
"Raine tiene a otras personas a parte de nosotros con quien hablar, si no hubiese venido yo, ¿tú a quién tendrías?"
"... A nadie, pero no me importa, me lo he buscado por mi comportamiento de mierda."
"Yo no creo que tengas un comportamiento de mierda, simplemente nadie se ha tomado el tiempo de escucharte."
Amelié se sentó a su lado tratando de darle consuelo, Evan se apartó un poco.
"No me toques."
"No pretendía hacerlo, y tampoco puedo."
"Oh, cierto, lo siento..."
"Está bien. ¿Por qué has saltado tan de repente?"
"No lo se... supongo que ha sido acumulación y he terminado explotando por algo tan mínimo."
"Entiendo..."
"Ya se perfectamente que Raine no puede cambiar el pasado, pero incluso en estos dos meses en ningún momento se ha preocupado por preguntarme cómo me fue mientras no estuvo."
"No creo que Raine lo hiciera con mala intención, ella... aunque no me ha hablado de ello, se que tiene muchos problemas. A pesar de eso, es totalmente comprensible que te sientas así."
"... Gracias, escuchar eso me ayuda. Poco después de que Raine se marchara, yo comencé mi transición como chico trans."
"¿Qué es eso? Si se un poco pero... jamás me lo explicaron en detalle, creo, tampoco es como si conservara muchos recuerdos."
"Oh, cierto. Básicamente, cuando naces se te asigna un género según tus genitales, pero en el caso de las personas trans, no nos sentimos conformes con el que se nos atribuye."
"¿Osea que naciste chica y ahora eres un chico?"
"Siempre fui un chico, solo que a diferencia de la mayoría de la población masculina, a mi me tocó descubrirlo. Supongo que es algo un poco complejo de entender."
"No puedo saber cómo te sientes porque no me pasa, pero si lo comprendo."
"Bueno, pues eso me trajo MUCHOS problemas, y no solo que profesores y alumnos me trataran con repulsión o indignación sino problemas internos, si ya de por si un adolescente pasa por muchas inseguridades y dudas, hacer una transición a otro género las duplica. Escuchar constantemente como se pone en duda tu valor como persona, que "es una etapa", que "jamás seré un chico de verdad" entre muchas otras frases dichas por personas ignorantes, termina provocando que te medio creas lo que dicen."
"Eso suena... realmente horrible, ¿tus padres...?"
"Oh no, ellos fueron el menor de los problemas, les costó acostumbrarse pero me apoyaron desde el inicio. Si no fuese por ellos el instituto no habría permitido que usara el uniforme masculino, y a pesar de que en mi documento nacional de identidad aún pone mi nombre de nacimiento, los profesores ya me llaman por Evan y se refieren a mi en masculino."
"Es bueno oír eso... pero, ¿nunca te habías podido desahogar con nadie de esto?"
"La verdad es que no, entre que al inicio fui objeto de burla y que tengo mucho carácter, la gente no quería hacerse amiga mía. Si hice algunos, pero terminaron cambiándose de instituto o nos distanciamos al pasar de curso..."
"Es una lástima..."
"Sí. El acoso fue horrible. Actualmente como me encontré prácticamente en la obligación de cumplir sus estereotipos para conseguir su validación, ya no me dicen nada, pero es inevitable que cuando escucho risas cerca de mi, incluso viniendo de desconocidos, mi primer pensamiento es que van dirigidas hacia mi."
"Oh dios, ¿por qué la gente le da tanto revuelo a esos temas? Quiero decir, literalmente no les afecta en nada... como mucho a tu grupo social porque tienen que acostumbrarse a llamarte con otro nombre y género, lo cual como mucho se tarda unas semanas, pero los demás, ¿por qué? ¿Por qué hacen tanto escándalo por algo tan... irrelevante en sus vidas?"
"Yo tampoco lo entiendo, de hecho, creo que nadie racional lo haría. Supongo que es su manera de desahogarse con alguien, y como culturalmente llevamos siendo muchos años señalados como algo nocivo para la sociedad, supongo que es una excusa para meterse con nosotros. Pero si no hubiese sido yo, hubiese sido cualquier otra persona por cualquier otro motivo."
"Supongo..."
Amelié trató de darle unas palmaditas a Evan en la espalda, pero no fue posible.
"Gracias por escucharme, Amelié. Realmente me caes muy bien, supongo que solo estaba un poco celoso..."
"Tú igual me caes bien, y creo que todo esto deberías explicárselo con calma a Raine."
"Supongo que tienes razón..."
"A todo esto, ¿qué es lo que estabas diciendo antes? Cuando Raine te interrumpió."
"¡Ah, eso! No tiene importancia."
"Oh venga, ¡parecías querer contarlo!"
"Bueno... un chico, va a clase de Raine de hecho, se me declaró ayer a la salida..."
"¡Qué emocionante! ¿Vas a aceptarlo?"
"Me siento muy halagado pero... me veo incapaz de decirle que si."
"¿Qué? ¿Por qué?"
"Es solo que... Uhm... Puede sonar raro, pero nunca me he enamorado, y esto no es la excepción."
"¡No tiene nada de raro! Quizás aún no has encontrado a la persona indicada."
"Lo sé, eso es lo que siempre me dicen, pero yo no lo veo así. Es difícil de explicar, todos a mi edad, o la mayoría han experimentado lo que es el enamoramiento, o alguno de sus síntomas pero... yo jamás he sentido algo así. Cada vez que hablan de que se ponen nerviosas por la presencia de x chico guapo, o que les interesa x persona... Yo, eso, nunca lo he entendido."
"Hmm... Explícate un poco más."
"Bueno, tampoco debo negar que nunca vaya a sentirlo, pero tengo claro que como mínimo me cuesta muchísimo más que a las demás personas. No soy capaz de desear mantener una relación romántica con nadie, todas las veces que he creído "enamorarme" solo me forzaba a que me gustase esa persona para tener algún chisme que contarle a mis amigas, pero se me pasaba a las pocas semanas."
"Ya veo... Quizás la sociedad ha idealizado demasiado el amor, quiero decir, si no encuentras jamás a alguien que te haga sentir eso, ¿que habría de malo?"
"Nada supongo, aunque si sería interesante experimentarlo, solo por la curiosidad. Aunque cuando veo a la gente volviéndose tonta por amor, se me pasa un poco."
"Bueno, ¡ánimo Evan! Hay muchas otras emociones en las que divagar que no sean el enamoramiento, a veces siento que está un poco sobrevalorado."
"Concuerdo. A todo esto, quizás suene un poco directo pero... Uhmm..."
Evan pensó detalladamente cómo expresar la pregunta sin hacer sentir incómoda a Amelié, al final simplemente fue al grano.
"¿Te gusta Raine?"
"¿Q-Qué?"
"Repito, ¿te gusta Raine?"
"Uhm, es complicado, ya sabes que yo dentro de poco ya no estaré aquí."
"Vuelvo a formular la pregunta, ¿tienes sentimientos por Raine?"
"Pues a ver, claro que me interesa... y casi todo en ella me parece genial sin embargo la conozco de hace demasiado poco como para afirmar algo así, aunque daría lo que fuera por tener el tiempo suficiente para poder llegar algún día a ser cercana a ella. Además te recuerdo que ella está viva y yo soy solo un fantasma, algo entre nosotras sería completamente imposible."
"Eso es... realmente triste."
Evan se puso a gritar extendiendo sus brazos al cielo.
"¡AGHHHH! ¡QUÉ RABIA! ¡¡Dios, cambia esta realidad y haz que Amelié Hamlert haya nacido en nuestra época!!"
Amelié se puso a reír después de eso.
"¡Evan no grites! Que vergüenza. 😭 Aunque no puedo evitar que me de risa, ja, ja. Cuando quieres eres gracioso."
"¿Cómo que solo cuando quiero? 😡"
Después de eso ambos se echaron a reír.
"Ahora en serio, ojalá hubieses nacido en la actualidad y pudiésemos ser los tres amigos por más tiempo que- una semana."
"Quizás si eso hubiese sucedido yo nunca os hubiera conocido, así que agradezco que nos haya tocado esta línea temporal, ja, ja. Pero en fin, yo ya he vivido todo lo que me correspondía y Raine aún le queda toda una vida por experimentar."
"Ya... No se le puede hacer nada, ¡pero es muy frustrante! Si te sirve de consuelo, conociendo a Raine te puedo asegurar que ella siente el mismo interés por ti."
Aquello puso muy nerviosa a Amelié y trató de ocultar su expresión girando el cuello hacia otra dirección.
"Ja, ja, en fin, quizás deberíamos regresar ya con Raine."
Durante todo ese tiempo yo había esperado a solas en la biblioteca, tratando de distraerme con lo que fuera pero era imposible, tenía demasiadas cosas en mi cabeza.
Recapacité sobre las palabras de Evan, esta vez de manera más seria.
Tenía razón, había habido veces en las que lo había ignorado descaradamente... No se si lo había olvidado, o hasta ahora no había tenido tiempo de pararme a pensar en ello, pero toda la culpa se acumuló de golpe en forma de pensamientos intrusivos mientras comenzaba a comprender con mayor claridad lo que dijo Evan.
Oh dios, ¿por qué no había caído hasta ahora?
¿Por qué había prácticamente ignorado todos sus intentos de desahogo?
Quizás solo había estado intentando huir de mis problemas, de todo lo que pudiese parecerse a problemas en general hasta el punto buscar distracciones incluso cuando se trataba de Evan.
Oh dios, se generó un nudo en mi garganta y comencé a sentir unas horribles ganas de disculparme con Evan, pero me sentía demasiado avergonzada como para salir a buscarlo, deseaba que simplemente apareciese como siempre por la puerta, saludando como todos los días en el recreo...
Intenté esconder mi cara entre mis brazos los cuales tenía apoyados en la mesa.
"Raine, ¿qué haces aquí? Las clases han terminado hace rato."
Una voz familiar interrumpió el momento... ¡Era Alex! Levanté mi cara roja como un tomate y llena de lágrimas.
"Pero qu-"
Me levanté y la abracé durante dos minutos sin decir nada más.
"Ya, ya, está bien, ¿quieres contarme qué te ha pasado?"
—Sniff... Sniff... He discutido con Evan.
"¡Pero mujer, no te pongas así por esa tontería! No se que ha pasado, pero es imposible que sea para tanto!"
Volví a echarme a llorar y volví a abrazarla por unos largos 3 minutos.
—Es que... Es que... He estado todo tiempo ignorándolo, soy una amiga horrible. Solo quiero disculparme con él...
"¡Pues hazlo! Evan te aprecia mucho, lo noto en su manera de comportarse, aunque sea alguien poco expresivo, estoy segura de que te perdonará."
—¿Estás segura?
"¡Claro! Estoy segura de que no lo ignoraste porque si, con qué le des las explicaciones y no vuelvas a repetirlo, estará todo bien, e incluso si algún día vuelves a cometer el mismo error, ¡lo importante es que te muestres arrepentida! Raine, solo tienes 15 años, esta no será ni la primera ni la última vez que hieras a alguien, y es lo normal."
Al escuchar sus palabras mis ojos volvieron a expulsar cataratas de lágrimas y volví a abrazarla.
"Acompáñame, voy a abrirte los baños para que te laves la cara."
Me abrió con sus llaves de profe, que guay tener una profeamiga. Cuando salí más calmada me esperaba con un zumo de una máquina expendedora.
—Muchas gracias, Alex, muchas, muchas gracias.
"No es nada, te pareces bastante a una amiga que tuve en secundaria."
—Algún día tienes que contarnos sobre tu vida estudiantil, ¿tuviste o tienes novio?
"Queda mucho para que os hable de eso."
—Jo...
Caminando por el pasillo de regreso a la biblioteca nos encontramos con Evan y Amelié al fondo viniendo hacia nuestra dirección. Sin pensármelo, tiré la lata vacía de zumo y salí corriendo hacia Evan hasta tirarlo de un abrazo al suelo mientras lloraba.
—¡Lo siento, lo siento, lo siento, lo siento lo siento!
Evan me apretó más fuerte.
"Yo si que lo siento, he estado siendo un gilipollas hasta ahora... perdóname Raine."
Comenzó a llorar también mientras seguíamos en el abrazo.
—Ahhh, Evaaan, que me dejas sin respirar.
"¡AY! ¡Perdón!"
Nos apartamos, y sin levantarnos del suelo, comenzamos a reír."
—Somos dos tontos, ja, ja.
"¡Habla por ti!"
Me dio un golpecito en el hombro.
"Pero en serio, lo siento, solo te habré hecho sentir culpable... Se que no lo justifica, pero solo necesitaba que alguien me escuchase y agradezco de corazón que Amelié lo haya hecho."
—¡Yo si que lo siento! Debería haberte escrito cuando me fui, lo siento Evan, no volveré a ignorarte.
Después de eso, miramos por la ventana y nos dimos cuenta de que ya era por la tarde.
—¡AH! ¡AÚN NO HEMOS COMIDO!
"¡OSTRAS, AHORA QUE LO DICES ME MUERO DE HAMBRE!"
Amelié y Alex comenzaron a reír por nuestra reacción. Después de eso, salimos del instituto y nos separamos para cada uno ir a su casa. ¡Me sentía genial, como si me hubiese quitado un peso de encima después de hablar de eso! Ah si, le prometí a Evan que le escribiría o llamaría un día de estos para explicarle con profundidad toda mi situación familiar de una vez por todas.
Regresé a casa y me senté a cenar con la tia Colette.
"Te noto más animada que de normal."
—¿Ah, si?
Fingí no saber a qué se refería y seguí comiendo entusiasmada. Al acabar, como aún era temprano, me quedé viendo una serie en la televisión con ella y sin darme cuenta me quedé dormida. Me desperté a mitad de la noche, apagué la televisión y subí hasta mi cuarto.
—¿QUÉ DEMONIOS?
"¡AHH!"
Era Amelié, me la encontré colándose por la ventana.
"Es que dijiste que podía venir cuando quisiera..."
—Creo que debí formular es frase mejor, per bueno, no es tu culpa.
"Si te molesto, puedo irme..."
—Nah que va, quédate.
Ambas nos sentamos a hablar en mi cama.
—Y bueno, ¿de qué has hablado con Evan?
"¿Celosa, ja, ja?"
Por algún motivo eso me hizo sentir sumamente nerviosa.
—¿Q-QUÉ? ¡NO ES ESO! ¡SOLO ME DIO CURIOSIDAD!
"Era solo una broma. Además, no creo que sea buena idea gritar en medio de la noche, ja, ja."
—Tienes razón... Que bien que la tia Colette tiene sueño profundo... Si estuviésemos en los Sims 3 ese sería una o de sus rasgos de personalidad.
"¿Qué es eso?"
—... Ostras es verdad, algún día tengo que enseñarte a jugarlos.
Amelié trató de apoyar su cabeza en mi hombro pero recordó que no podíamos tocarnos.
—¿Aún no te acostumbras, eh?
"..."
Ambas nos sonrojamos después de eso.
"¿Quieres ver algo bonito? Lo he visto de camino hacia aquí."
—¿El qué?
"Ven."
Me guió hasta una puerta de mi habitación que llevaba a una especie de pequeña terraza.
"Por aquí."
Flotó hasta el techo.
—¿QUÉ? ¿Cómo voy a llegar hasta ahí?
"Je, je... No se."
—¡No te atrevas a poner mis habilidades de Spiderman a prueba!
"En ese caso me pido ser Gwen... al fin y al cabo ambas estamos muertas."
—Esa broma ha sido un poco extraña.
"Ya, después de pronunciarla en voz alta me he dado cuenta, bueno, ¡sube!"
Con ayuda de la barandilla y superando mi vértigo cada vez que miraba hacia abajo, logré llegar a la tejas, estuve tan concentrada en no caer mientras gateaba que hasta que prácticamente llegué a arriba, no me di cuenta del precioso cielo estrellado que nos rodeaba.
"Esto era lo que quería que vieras."
—Es... impresionante.
Me senté en el centro del techo al lado de Amelié.
—Siempre me han gustado las Estrellas... quizá es por eso que nos llevamos tan bien.
"¿A qué te refieres?"
—Bueno... apareciste justo después de que cayera una estrella fugaz así que...
"Oh, no conocía ese dato pero me parece bonito."
—Ah... Ojalá pudieras quedarte más tiempo, solo de pensar que dentro de poco te irás... me entristezco. Pero bueno, dentro de lo malo, esta semana se ha sentida eterna, no creo que la olvide nunca.
"A mi... Me asusta un poco la idea de no saber que será de mi. Quiero decir, en tu caso, simplemente pasará el tiempo y continuarás con tu vida tan normal, quizás poco a poco tu recuerdo de que estuve aquí se vaya desvaneciendo y llegue un punto en el que me recuerdes como un sueño o una sombra. Pero, ¿qué será de mi? ¿Qué hay después de esto? ¿Por qué se me concedió la oportunidad de regresar a este sitio? No se si me asusta mas no saber que me depara el futuro, o jamás poder irme."
—A lo mejor al irte te transformas en una bonita estrella... Si así fuese, pasaría las noches intentando reconocerte en el cielo... No se ni que estoy diciendo, no me hagas mucho caso.
"¡No, no! Eso que has dicho es... muy lindo."
Ambas volvimos a ponernos nerviosas, pero en el fondo de esa emoción solo podía sentir melancolía de saber que duraría muy poco, y ni si quiera tendríamos la oportunidad de conocernos a profundidad.
—Gracias, Amelié.
"Igualmente."
Ambas nos quedamos en silencio, probablemente el más cómodo que había sentido nunca, el simple hecho de saber que estaba a mi lado me tranquilizaba. Era una sensación de seguridad que no había experimentado antes.
Hubiese dado lo que fuera para que eso durara más tiempo.
Otra vez el tiempo siendo el culpable...
Si pudiese detendría el tiempo en ese mismo instante, estando a su lado no me asustaba el futuro ni mi pasado, simplemente mi mente estaba silenciosa y tranquila, algo que hasta ahora pensaba que era imposible de conseguir.
—Cuando miro la luna solo puedo pararme a pensar en todas las personas que se han quedado viéndola antes que yo... toda la humanidad hemos vivido bajo la presencia del mismo satélite y eso me parece bonito. Probablemente, hay alguien más pensando lo mismo que yo en estos instantes en alguna otra parte del mundo mientras la observa, y ni si quiera es necesario llegar tan lejos, quizás es en esta ciudad. Para ti, ¿qué representa la luna, Amelié?"
"Hmm... No lo tengo claro, me transmite paz y sobretodo melancolía. Por lo general, cuando salgo a la calle a pasear suele ser bajo el cielo nocturno, y por lo tanto me recuerda a la soledad. Las calles vacías me hacen sentir que el mundo es mío, pero también me hacen plantearme: "Si eso fuera cierto, ¿estaría feliz con ello? ¿Para qué quiero el mundo entero a mi disposición si no tengo con quien compartirlo?" Pero supongo que esta vez es distinto porque estás aquí, y si fuese por mi... Pasaría el resto de las noches acompañada por tu presencia."
Mi cara fue totalmente de sorpresa al escuchar eso y no pude evitar volver a ponerme nerviosa mientras mis mejillas se sonrojaban, ¿qué demonios hace esta chica para hacerme sentir así?
—E-Eso ha sido realmente lindo.
"Se podría decir que eres mi compañía favorita, por encima de la de luna."
—...
Giré mi mirada con la excusa de haber visto una estrella fugaz.
"N-No me hagas mucho caso, debo estar cansada."
—(Pero si se supone que no puede sentir cansancio...)
Al cabo de unos minutos me comenzó a entrar el sueño y regresamos a mi habitación.
—Gracias por lo de hoy.
"No es nada, es lo que hacen las amigas, espero que te haya servido para despejarte."
Dijo desde el exterior de la ventana mientras yo le hablaba apoyada en el marco.
—Ojalá jamás tuvieses que irte.
"Deseo lo mismo..."
Se acercó a mi una última vez y trató de acariciar mi mejilla con su mano. Era triste que por mucho que quisiéramos, jamás notaríamos el calor humano que desprendíamos ambas, jamas podría conocer cómo era el tacto de su piel...
No pude evitar entristecerme por su intento de palpar mi rostro pero en seguida sonreí para que no lo notara y simplemente se desvaneció por las calles de la ciudad. Me tumbé en mi cama y me dormí melancólica y alegre al mismo tiempo por este encuentro.
NOTA DEL AUTOR
HOLAAAAAAAA, perdón por otra vez no haber cumplido la fecha de entrega planificada 😭 Pero mantener la publicación semanal de capítulos es MUY difícil porque yo sola me tengo que encargar de escribir, corregir faltas (si podéis avisarme de las que detectéis me haríais un enorme favor, sobretodo porque mi autocorrector esta reloco) y hacer las ilustraciones y portadas.
Como habréis notado, ha habido un GIGANTESCO cambio en este capítulo en comparación a los otros. Esto es porque quiero a partir de ahora hacer capítulos más extensos para poder participar con Meteor Shower en los Wattys del año que viene. Así que si, en cuanto termine la historia les haré una remodelación a los primeros 4 capítulos, pero no os preocupéis, no cambiaré nada de lo esencial, solo profundizaré mucho más en algunos puntos.
En fin, espero que os haya gustado este formato, nos vemos en cuanto me de la vida para acabar el siguiente capítulo 🫶 Como dato, aviso siempre por instagram unos días antes cuando se publicara el capítulo. ;)
DATOS EXTRA
Las tres Amelié (En un principio le iba a quitar las gafas pero la gente de IG votó que se se las dejara)
Cosas varias de los primeros caps
Las dos chicas del fondo de la clase...
Boceto del cap anterior que como no me gustó como estaba quedando al final lo hice en chibi JAJA (Amelié guapetona)
Amelié sin gafas y Raine