Entendido, profesora. TERMINA...

By Lilu_MJ

371K 19.7K 5.1K

Angela Marel es solo una alumna problemática mucho mayor a sus compañeros por haber reprobado sus materias. ... More

Prólogo
Capítulo 1. ANGELA MAREL
Capítulo 2: ANGELA MAREL
Capítulo 3. ANGELA MAREL
Capítulo 4: ELENA LAMDAN
Capítulo 5. ANGELA MAREL
Capítulo 6. ANGELA MAREL
Capitulo 7. ANGELA MAREL
Capítulo 8. ANGELA MAREL
Capítulo 9: ELENA LANDAM
Capítulo 10. ANGELA MAREL
Capítulo 11. ANGELA MAREL
Capítulo 12. ANGELA MAREL
Capítulo 13. ANGELA MAREL
Capítulo 14. ANGELA MAREL
Capítulo 15. ANGELA MAREL
Capítulo 16: ELENA LAMDAN
Capítulo 17. ANGELA MAREL
Capítulo 18. ANGELA MAREL
Capítulo 19: ELENA LAMDAN
Capítulo 20. ANGELA MAREL
Capítulo 21. ANGELA MAREL
Capítulo 22. ANGELA MAREL
Capítulo 23: VALENTINA ALTAMIRANO
Capítulo 24. ANGELA MAREL
Capítulo 25: VALENTINA ALTAMIRANO
Capítulo 26. ANGELA MAREL
Capítulo 27. ANGELA MAREL
Capítulo 28. ANGELA MAREL
Capítulo 29. ANTONELLA FLORES.
Capítulo 30. ANGELA MAREL
Capítulo 31. ANGELA MAREL
Capítulo 32. ANGELA MAREL
Capítulo 33: ELENA LANDAM
Capítulo 34. ELENA LANDAM
Capítulo 35. ANGELA MAREL
CAPÍTULO 36: VALENTINA ALTAMIRANO
CAPÍTULO 37. ANGELA MAREL
Capítulo 38: ANGELA MAREL
Capítulo 39: ANGELA MAREL
Capítulo 40: ANGELA MAREL
Capítulo 42. ANGELA MAREL
Capítulo 43. ELENA LANDAM
Capítulo 44: VALENTINA ALTAMIRANO
Capítulo 45.
Capítulo 46.
Capítulo 47.
Capítulo 48.
Capítulo 49.
Capítulo 50. FINAL.
Extra 1.
Extra 2.
Extra 3.
Extra 4
Extra 5
Extra 6
Extra 7
Epílogo.
NOTA

CAPÍTULO 41. ANGELA MAREL

4.5K 292 86
By Lilu_MJ

Después de aquel día desperté como cualquier otro, esperaba encontrarme a Valentina aún durmiendo a mi lado pero mi sorpresa fue una cama vacía. Al bajar a la cocina descubrí que mientras a mi se me caía la baba al dormir, Valentina y mi madre estaban conviviendo.

Aunque la convivencia se baso en Valentina aprendiendo a prender el fogón por primera vez y picando el primer tomate de su vida. No es que mi amiga tuviera muchas ganas de aprender a cocinar, simplemente su manera de evitar el lío en el que se convirtió su vida era distraerse lo más posible en cualquier cosa que pudiera ocupar su tiempo.

__ ¡Ahg! No sé qué hice, no se que hice, me arde, algo entro en mis ojos __ Valentina tenía los ojos cerrados y pude ver lagrimas caer de ellos, mi madre se acercó preocupada a ella.

__ ¿Qué pasa? ¿Qué tienes?

__ Mis ojos, partí la cebolla a la mitad y ahora mis ojos arden __ Valentina avanzaba por la cocina aún con los ojos cerrados y la mano extendida tocando las encimeras para caminar sin chocar y llegar al lavado donde se encargó de lavarse la cara __ quedaré ciega. Señora Rosa, voy a quedar ciega. __ mi mejor amiga estaba realmente desesperaba, incluso pegaba brincos y aleteaba las manos sin control.

Mi mamá tenia muchas ganas de reírse, lo pude notar en su cara pero se aguantó y comenzó a picar ella la cebolla.

__ Tranquila, Val, es algo normal, la cebolla suele hacer eso, no vas a quedar ciega. __ le explicó mi madre, yo aún no les avisaba de mi presencia, simplemente las observo desde el marco de la puerta.

__ ¿Qué clase de verdura criminal es la cebolla? __ Valentina quien ahora tenía solo uno de sus dos ojos abiertos parecía realmente molesta, las gotas de agua resbalaban por su rostro llegando a mojar incluso la blusa que le preste por la noche. La cual recuerdo que me criticó porque la tela no es la mejor de todas.

__ No volverás a picar cebolla, hija, no dejaré que la delictiva cebolla afecte tus ojitos de nuevo __ mi mamá dijo para al final comenzar a reírse de la situación.

Valentina, que no entendía lo divertido de todo eso permaneció con su ceño fruncido y frotando con su puño el ojo que aún continuaba cerrado.

Después del primer desayuno con mi mejor amiga en casa, era momento de ir a la escuela. Lo cual también sería toda una aventura, empezando por el hecho de que yo no tengo quien me lleve y traiga de la escuela.

Así que Valentina estaba parada esperando uno de sus temores más grandes, el autobús. Que aunque en una ocasión Tony ya la había subido, ese era uno completamente vacío. A estas horas de la mañana no hay autobuses vacíos, todos están abarrotados de personas apachurradas a las que el chófer les exige seguir corriendose hacia atrás.

__ Mira, ahí viene __ le avise para que ella se parará y colocará su mochila. Pero fui ignorada pues ella simplemente miró el autobús a lo lejos y negó con la cabeza.

__ No cabemos en ese, esperemos otro.

Ruedo los ojos y le hago la señal al autobús para que se detenga, Valentina me mira con los ojos muy abiertos y totalmente asustada, parece realmente incrédula, lo entiendo, no parece que pudiéramos ir en ese autobús tan lleno, pero después de unos cuantos empujones y de ser aplastadas por fin pudimos acomodarnos en un pequeño hueco.

Pero Valentina comenzó a hiperventilar, su respiración era rápida y se aferraba a mi brazo como una pequeña niña indefensa y pérdida.

__ Tranquila, te acostumbraras.

__ Ese hombre suda muy cerca de mí, me ha rozado el brazo y lo siento húmedo, Angela, voy a desmayarme __ ella estaba exagerando por completo, y lo peor de todo es que me dejaba en ridículo, Valentina ni siquiera hablaba bajito para que la gente no escuchará. Era todo lo contrario.

__ ¿Quieres pasar de este lado? __ Le ofrecí pararse en mi lugar, la chica que iba muy pegada a mi parecía también dirigirse a la escuela así que Valentina acepto de inmediato, todo con tal de alejarse del hombre sudoroso.

__ Aquí huele horrible __ no es posible, como si no fuera suficiente ahora estaba teniendo arcadas __ todo este lugar huele tan mal, me siento en una pecera, creo que si voy a un baño publico ahí huele mejor que aquí.

Todos nos miraban feo, claro, doña criticona 3000 no dejaba de quejarse de todo en voz extremadamente alta, Valentina miraba mal a todo el mundo, luego ponía cara de asco y se cubría la nariz con la mano. Estaba a punto de alejarme de ella y prometer a todo los pasajeros que no la conozco.

__ Ya casi llegamos.

__ ¡Aahhh! __ Cuando el autobús paso un tope Valentina perdió el equilibrio y casi cae al piso, pero fue bien recibida por un hombre que vestida un pantalón de mezclilla, un sport blanca y traía una mochila de princesas colgado en su espalda. Cerré los ojos sólo de verlo, es un albañil que aparte va manchado no se si de polvo o qué, no señor, por favor. Ayúdame, diosito, ayúdame, por favor. __ Ay no, no, no __ Valentina se alejó de el tan rápido como pudo y se abrazo de nuevo a mi brazo negando con la cabeza y con los ojos cerrados __ Ahora estoy sucia, la gente de aquí no se baña. Bajame de aquí, por favor, no aguanto más.

__ ¡¿Cuál es tu maldito problema, niña?! __ Una señora de cara redonda y el cabello pintado de rubio que iba sentada le grito a Valentina.

No, por favor no.

Valentina no sabe diferenciar entre lo que se debe y puede decir y lo que no. No quiero problemas, no quiero pelear, si al amor, no a la guerra.

__ ¿Me habla a mi? __ Valentina le respondió.

__ Eres la única que viene todo el camino quejándose de todo, ¿Qué te pasa? ¿Quieres problemas?

__ Ehh no, señora __ Valentina iba a seguir hablando pero luego se detiene y mira curiosa a la señora, la analiza detenidamente.

__ ¿Qué tanto me ves, mocosa?

__ ¿Por qué si su cabello es rubio las raíces son oscuras? __ Puta madre __ ese color no combina con su cara.

Oh no.

La señora se levanta del asiento dispuesta a irse contra mi amiga pero justo veo mi escuela así que grito tan fuerte como puedo.

__ ¡Bajaaaaaan! __ el autobús se detiene y halo a Valentina de la mano para bajarla apresuradamente del camión antes de que le llegue el primer golpe y de que aquella señora la use como trapo para limpiar las ventanas del autobús.

El autobús avanza y por fin logró respirar tranquila mientras Valentina se la pasa sacudiendo su uniforme porque aún sigue sintiendo el polvo de aquel albañil.

__ No me vuelvas a hacer eso __ me quejo, Valentina me mira confundida.

__ ¿Hacer qué?

__ ¡Val! Te la pasaste hablando mal de todo y de todos, esa señora casi te golpea.

__ Ella me preguntó que tanto le veía y le respondí con la verdad __ se encoge de hombros, yo grito con frustración porque ella es simplemente imposible, no entiendo como puede ser tan inteligente y tan tonta al mismo tiempo __ vengamos en taxi mañana.

__ No voy a pagar un taxi todos los días, Valentina.

__ No voy a volver a subirme en eso.

__ Pues te vendrás caminando entonces, Valentina.

Valentina me cerró la boca.

Porque al día siguiente cuando yo salí de casa para ir a la parada de autobús, vi a Tony estacionada en su motocicleta en la puerta de mi casa.

Luego mi mejor amiga pasó al lado de mi diciéndome "te veo en la escuela", se monto a la motocicleta, se puso el casco, se abrazó al cuerpo de Tony y arrancaron levantando todo el polvo de mi calle dejándome humillada.

Maldita Tony, a mi nunca me vino a buscar con su motocicleta para ir a la escuela, yo siempre tuve que ir en autobús.

Los siguientes días se repitió la misma historia, yo la veía irse con Tony mientras caminaba hacia mi parada de autobús, Valentina parecía tranquila estando en casa y platicaba mucho con mi mamá. Mamá empezó a quererla más que a mi, porque Valentina se paraba todos los días a las 5:00 am y bajaba a ayudarla, mientras que yo a duras penas lograba abrir los ojos y mirar fijamente a la pared a las 6:00 am.

Y aunque había momentos en que mi mejor amiga se quedaba callada y pérdida mirando hacia cualquier punto de la nada ella siempre parecía estar feliz. Incluso si durante las noches me daba la espalda y podía escuchar sus suaves sollozos y su nariz sorber.

Esas noches sabía que ella no necesitaba consejos, no necesitaba palabras, simplemente necesitaba mi compañía, así que siempre me aferraba a su espalda, abrazándola y frotando sus brazos, sin hablar, sin la promesa vacía de que todo estaría bien, pero brindándole la certeza de que sin importar lo que sucediera, yo nunca iba a faltarle.

¿Lo único malo? Me convertí en todo lo que Valentina tenía, más allá de Tony, Valentina confiaba en mi más que en nada, y me amaba demasiado. Tanto que en una ocasión, mientras hablaba por mensajes con Xenia, mi amiga del viaje, hubo un mensaje muy lindo que mereció la pena subir en uno de mis estados. La descripción fue "Agradecida por una de las mejores amigas que me ha dado la vida".

Cuando Valentina vio mi estado escuche su grito desde la planta baja de mi casa.

__ ¡ANGELAAAAAAAAA! __ No entendía nada, pero la vi aparecer en la puerta de mi cuarto, furiosa y con la cara roja mientras me mostraba la pantalla de su celular y señalaba con su dedo la publicación __ ¿Qué es esto? ¿Qué demonios significa esto?

__ ¿Qué? __ me hice la loca. Aunque realmente no lograba comprender porque me enseñaba mi estado y actuaba de esa manera.

__ ¿Una de tus mejores amigas? __ sus dientes rechinaban después de cada palabra __ ¿Cómo que una de tus mejores amigas? ¡¿Cuántas mejores amigas somos eh?! Porque hasta donde yo sabía ¡NADIE MAS QUE YO ERA TU MEJOR AMIGA!

__ Tranquila, es solo Xenia, me llevo muy bien con ella, es la chica del viaje. Solo me mando algo lindo y me pareció bien presumirlo un poquito.

__ ¡Presumeme a mi! __ una almohada se estrelló en mi cara haciéndome caer hacia atrás en la cama para luego ser atacada por la misma almohada que ahora ella había aventado hacia mí dirección __ ¿Sabes qué? Quédate con ella, eh, quédate con esa. Eso no hacen las mejores amigas, las mejores amigas no se traicionan y cambian por otras.

Ella abrazo la almohada contra su cuerpo y halo las sabanas de mi cama desnudandola casi por completo, hizo bolita todo eso y la abrazo contra su pecho.

__ ¡Hey! ¿A dónde vas con eso?

__ A dormir en la sala, no quiero respirar el mismo aire que una traicionera. No vuelto a dormir más contigo, ¡Ex mejor amiga!

Y salió dando un portazo.

Claramente no durmió en la sala, mamá jamás permitiría que nuestra inquilina pasara esas incomodidades, así que Valentina durmió felizmente en mi cama, y yo fui quien terminó esa noche en el sofá.

Al día siguiente, con el cuello torcido y la espalda matándome de dolor, le pedí perdón a Valentina y le jure que ella era la única en mi vida, que nadie más que ella era mi mejor amiga y que jamás la cambiaría por nadie más. Valentina me tuvo en ley del hielo durante varias horas antes de finalmente aceptar mis disculpas y permitirme dormir de nuevo a su lado, tuve que rogar para que la señora Valentina Altamirano me diera permiso a entrar a MI cuarto y dormir en MI cama.

La compañía de Valentina durante todo el día, todos los días me ayudo un poco a sobrellevar mi lejanía con Elena, con mi mejor amiga en casa lograba distraerme y sentirme un poquito menos miserable por no poder estar junto a mi novia. Pronto faltaban solo dos semanas más para la graduación.

Pero justo ahí, a medio camino de llegar a la meta y de que por fin se cumpliera el mes, Sergio cumplió su palabra, cuando dijo que se vengaria y que me iba a doler realmente lo tome a juego, yo nunca lo tomaba en serio, para mi el solo era un estúpido hablador.

Aquel lunes cuando me desperté por la mañana cometí la mayor estupidez del mundo. Abrí los ojos y dije en voz alta "Hoy será un buen día", eso fue suficiente mal augurio como para arruinar mi día por completo.

Cuando llegue a la escuela todo parecía al inicio ir bien, clases tranquilas y mi clase con Elena, nuestras miradas cómplices, las sonrisas que me regalaba a lo lejos y el como aveces me decía que me amaba solo moviendo los labios. Ese día estaba más optimista que cualquier otro, era el primer día de las últimas dos semanas que teníamos que aguantar para poder estar juntas.

Luego llegó la hora del descanso, los pasillos se llenaron de alumnos y yo la pasaba en cualquier rincón comiendo lo que sea que Tony me comprará mientras ella y Valentina platicaban. Tal y como dije, parecía un día normal, exactamente igual a todos.

Pero no lo era.

Cuando la cuchara de mi platillo cayó al piso tuve que bajar a recogerla, y cuando levante la vista mis ojos enfocaron hacia un hombre que caminaba a lo lejos, siguiendo a la secretaria del director.  Seguramente iría a hablar con el. Aunque esa complexión física, esa manera de caminar, ma parecía conocido.

Entonces aquel hombre giro la cabeza hacia mi dirección, como si un imán lo hubiese atraído hacia mí. Cuando el me reconoció me dio una sonrisa que me hizo temblar por completo.

¿Qué hacia mi padre en mi escuela, en mi ciudad? ¿Qué hacia mi padre dirigiéndose a la oficina del director?

Con los gritos de Valentina y Tony detrás de mi preguntando que pasaba fui corriendo hacia el, la secretaria entró a dirección pero yo llegué justo a tiempo para colocarme en la puerta y prohibirle a él la entrada. Mi padre me miraba con una sonrisa altanera y rodando los ojos intento empujarme del camino pero yo mantuve mi postura.

__ ¿Qué haces aquí?

__ Déjame pasar, Angela.

__ ¡No! ¿Qué haces aquí? __ pregunté de nuevo, sentía mi cuerpo lleno de adrenalina, pero al mismo tiempo sentía escalofríos y mi pulso acelerado, el corazón en el pecho se me estrujaba solo de pensar en el entrando ahí y hablando de mi y Elena.

__ Sabes que hago aquí. __ sentí la boca seca, sudaba tan frío como si pudiera caer desmayada en cualquier momento. La desesperación que consumía mi cuerpo me hacia querer llorar.

El no debería estar aquí.

Qué hace aquí.

Que se vaya.

Por favor, que se vaya.

__ No lo hagas, por favor __ le supliqué __ ya no estoy con ella, la deje desde que le dijiste a mamá. Mamá me obligo a alejarme, no estoy con ella. No lo hagas, papá.

__ Ahora si soy tu padre, ¿no? __ mis ojos lagrimeaban y a el no parecía importarle para nada el evidente estado de desesperación en el que me encontraba. Al contrario, parecía incluso divertirle. __ No te creo nada, y mucho menos a tu madre. Yo mismo voy a solucionar esto ahora mismo.

__ No, no, no __ impedi de nuevo que entrara cuando quiso alejarme __ iré a las terapias, te lo prometo, iré y se me quitará, se me quitará. Será fácil porque es verdad que ya no estoy con ella.

Con el corazón completamente presionado, no me sentía valiente. No me sentía como la Angela que podía enfrentarse a él y mandarlo al demonio. La escuela era terreno peligroso, y con el aquí Elena y yo somos muy vulnerables. El podría incluso gritar en el pasillo lo nuestro y todos escucharían. Tenía que cuidar muy bien mis acciones y mis palabras.

__ No hay manera de que te crea que no estas con ella, no te puedo creer.

__ Por favor __ le rogué, mis lágrimas ya habían comenzado a caer sin ningún tipo de impedimento. La impotencia que sentía en ese momento era tanta.

__ Voy a hacer que esa maestrita pierda su trabajo y que no la vuelvan a contratar en ningún otro lugar, voy a acabar con ella y con su carrera y voy a...

El bullicio que se armo de repente por todos mis compañeros fueron los que llamaron la atención de mi padre, luego me di cuenta del motivo. Era Sergio con un ramo de rosas entre sus manos y vestido con un traje negro muy elegante, uno de los alumnos sostenía un cartel detrás de él que era el causante de todo aquel ruido descontrolado.

Entre porras, gritos y chiflidos Elena apareció entre la multitud, mi padre y yo la vimos. Mi padre y yo fuimos testigos de como el se puso de rodillas frente a ella y sacó de su saco una pequeña cajita.

Todos los alumnos, los maestros, la subdirectora,  el director que salió de su oficina por todo el ruido producido, mi padre y yo, absolutamente todos escuchamos a Sergio leer en voz alta la pregunta escrita en aquel cartel.

"¿Te quieres casar conmigo?"

Mi vista cayó en Elena, la vi a ella mirar hacia todos lados y luego por fin encontrarme, ella negó con la cabeza, haciéndome saber la respuesta que saldría de sus labios. Ella diría que no, era obvio, ella me ama.

Pero luego su mirada se tropezó con el rostro de mi padre, Elena parecía sorprendida de verlo ahí, justo a un lado de mí y a un lado del director.

Elena dijo que sí.

Todos gritaron emocionados y aplaudieron llenando de felicitaciones a los recién comprometidos.

Mi padre sonrió satisfecho y creo que lo escuché decir que ahora podía creerme, se disculpó con el director y abandonó la escuela.

O no.

No sé.

Realmente no recuerdo si así fueron las cosas, no logre prestar mucha atención.

Todo me daba vueltas y en mis oídos solo retumbaba un profundo y largo pitido que me hacía incapaz de escuchar cualquier cosa, mi vista era borrosa porque la cantidad de lágrimas que se acumulaban en mis ojos me bloqueaban la visión por completo.

En mi cabeza se repetían las palabras de Sergio una y otra vez.

"Me vengare y juro que te va a doler"

"Juro que te va a doler"

"Te va a doler"

Dolió, dolió como la mierda porque eso no podía entenderlo.

Entendía una relación falsa, entendía el aparentar un noviazgo inexistente con ese hombre. Pero un compromiso de matrimonio, con tanta gente como testigo, un compromiso de esa magnitud.

Eso Elena nunca me lo mencionó, eso no estaba en el maldito trato. ¿Por qué dijo que sí? ¿Por qué de repente mi mujer se convirtió en la futura esposa de otro?

Eso no podía entenderlo.

Eso no lo entendería nunca.

Elena Landam rompió mi corazón y todas mis esperanzas de estar juntas algún día, todo lo que había esperado y lo mucho que intente ser fuerte por lo nuestro ya no tenía ningún tipo de sentido.

Elena Landam se convirtió en la desilusión más grande de mi vida, y no lograba entender como pase de sentirme en el cielo para terminar cayendo de la forma en que lo hice.

La sensación de haberlo tenido todo y después darte cuenta de que lo has perdido todo es una de las peores cosas que pasé, un día estaba enamorada del ser más perfecto y atento y al otro tenia que verla eligiendo a otra persona por sobre mi. Ver en primera fila como la persona que más decía amarme se encargaba de romper todas nuestras promesas fue algo que me destruyó por dentro, y me destruyó tanto que sentía que podría colapsar en cualquier momento. Porque es horrible ver a la persona que amas en brazos de alguien más y que eso te haga preguntarte una y otra vez ¿Por qué? ¿Por qué tenía que ser así? ¿Por qué tenía que romper con todo lo que alguna vez nos prometimos? Con todo lo que un día soñamos juntas.

Elena no me buscó ese día.

Yo tampoco lo hice porque no tenía ganas de verla, ni de escucharla. Aunque era una situación bastante irónica porque al cerrar los ojos no podía ver nada más que no fuera su rostro cerca del mío, sus ojos oscuros mirándome, su voz prometiendo que me ama.

Era irónico porque mis sueños también estuvieron totalmente ocupados por ella, porque nos miraba en mi cama abrazadas, besándonos y hablando una y otra vez de nuestro amor, de nuestra vida después de la escuela. De cómo estaríamos juntas al final de todo.

Y ahora todo eran palabras vacías.

Todo lo nuestro fue simplemente la historia más bonita que pude haber escrito en mi cabeza.

Una historia que al final no era real.

Una historia en la que estuve dispuesta a darlo todo por ella, y en la que ella se acobardo una y otra vez en cada situación que se nos puso al frente.

A partir de ese día comencé a creer firmemente que la única de las dos que realmente se había enamorado, fui yo.





~•~

Algo tiene que salir mal para que las cosas salgan bien.

Las cosas empeoran antes de mejorar.

Muchas gracias por leer.

__ Maira.

Continue Reading

You'll Also Like

486K 57.6K 73
Meredith desde que tiene uso de razón, conoce la existencia de Darek Steiner, aunque ha estipulado una regla bien marcada en su vida: NO ACERCARSE A...
1.4K 116 41
Amelia es una joven que vive en una aldea con su familia pose una belleza deslumbrante es envidiada y querida por muchos un día su madre le pide de f...
2.5K 114 3
Isabella Hamilton, una alumna casi perfecta, rica y religiosa, se encuentra en un problema cuando ingresa al baño del Instituto y atrapa a dos alumna...
1K 74 13
Todo lo que podía captar mi lente y mi atención de una forma esencial eran los bellos paisajes que me ofrecía la naturaleza, pero tenia que llegar el...