01. recuerdos
dolorosos.
Kaylee tenía la vista pegada en el libro que estaba leyendo mientras fingía poner atención en clases, cuando de pronto siente que alguien le toca el hombro haciendo que se asustara, mirando hacia su derecha viendo al chico castaño.
— oye, kaylee, ¿estás bien? — pregunta Marco al ver a la rubia algo asustada.
— si, si, solo anoche no dormí bien. — dice kaylee mirando al chico.
mientes.
kaylee vio como el chico le dió una mirada para luego dirigir su mirada hacía el profesor que aún estaba explicando, kaylee no podía estar atenta simplemente no podía.
kaylee la noche anterior poco había dormido, hace unas semanas había terminado con Jeremiah y no ha podido dormir bien hace varias semanas, aparte:
Susannah había muerto.
Belly y Conrad habían terminado.
los veranos en Cousins no serían lo mismo.
esas eran las cosas que kaylee pensaba kaylee en vez de poner atención pero aún así la materia para ella era fácil así que no tuvo problema para pasarla, el resto de materias ya las había aprobado por completo.
su mente viajo a meses antes de todo lo que sucedió.
— papá, necesito volver. — dice kaylee cuando su padre ya habían llegando al aeropuerto, ya estaba amaneciendo y el aeropuerto estaba casi vacío.
— ¿que? — pregunta John sin saber que hacia su hija.
— no me puedo ir. — dice la chica desesperada.
no podía dejarlos y menos ahora, no quería.
— quedemonos, quiero quedarme, ellos me necesitan, conrad me necesitará. — insiste kaylee.
— ¿de verdad quieres quedarte?
— si papá, lo necesito. Además no quiero dejar a Susannah aquí, luego ya vemos que hacemos. — dice kaylee mirándolo.
su padre asiente mientras deja que kaylee se fuera, él tenía que hacer llamadas y la alcanzaría en el camino, la rubia tomo un taxi mientras que esté la llevaba de regreso a casa, al llegar se baja rápidamente del taxi sin antes pagarle.
Kaylee entro a la casa, mirando a Susannah en el comedor la cuál estaba sorprendida al verla.
— ¿Kay? pensé que ya habías tomado tu vuelvo.
— no pensaba en irme, dejándote aquí.
— me alegra que no te hayas ido. — dice Susannah invitando a Kay a sentarse junto a ella.
kaylee sonríe mientras la abrazaba, no quería perder a su segunda madre no lo permitiría, la chica abrazaba fuertemente a Susannah sintiendo el cariño de una madre, ese cariño que siempre sintió con ella.
kaylee levanta su mirada viendo a Conrad y Belly entrar por la puerta trasera.
— definitivamente ustedes dos no saben guardar silencio. — habla kaylee haciendo sonreír a ambos chicos.
— ¿kay? pensé que ya estabas en el aeropuerto. — dice conrad confundido.
— si bueno, no quería irme y dejar a Susi sola. — dice kaylee sonriendo. — me alegro por ambos. — apunta sus manos sonriendo.
— lo veía venir. — habla Susi sonriendo mientras kaylee se sentaba a su lado.
— estaban destinados a estar juntos. — dice kaylee sonríendole al par.
Belly mira algo nerviosa a Susannah para así irse del sitio sonríendole a conrad.
— adiós. — le murmura a conrad sonríendole.
conrad se acerca a la rubia sentandose junto a ella, mientras la abrazaba.
— no quería dejarte, Connie. No quería dejar la casa sin antes ayudar. — dice la chica mientras sonríe.
— me alegro que estes aquí, Kay. — conrad la mira.
— no quería irme sin antes solucionar todo. — habla Lee mientras sonríe.
— ¿y como fue? digo, ya son novios, ¿no? — pregunta Susannah interesada en todo.
— eso eso, deben cuidarse, ocupa condón. — habla kaylee riéndose recordando la vez en dónde Taylor le había dicho que se había acostado con conrad.
𓆉
Kaylee guardaba sus cosas mientras salía del salón, viendo a Marco quién caminaba junto a ella.
— vamos a hacer una fiesta, ¿quieres venir? — pregunta el italiano mirándola.
— uhmm, no podré ir, tengo que ir a la graduación de Steven. — dice la chica sonríendole.
— ¿por fin decidiste ir? — pregunta Marco sorprendido.
— si bueno, tengo que ir, es la graduación de uno de mis mejores amigos.
— ¡YA TERMINÉ TODOS MIS EXAMENES, PERRAS! — grita Alexa mientras caminaba por los pasillos saludando a varias personas.
la mejor amiga de kaylee, Alexa, había decidido irse con ella a Italia sabía que la necesitaría además ellas dos no podían pasar todo un año separadas, así que era lo mejor para ambas. Le costó mucho convencer a sus padres pero lo logro diciéndole que viviría con Kaylee, quedándose ambas en la residencia de la universidad.
— me alegro por lo que harás Kay. — dice Marco sonriendo.
— uuh, ¿dónde irá Kay? — dice la chica castaña sonríendole.
— iré a ver a Steven a su graduación. — inquiere kaylee sonriendo. — bien, me tengo que ir, tengo un almuerzo con mi papá y este señorito de aquí. — murmura mirando la hora.
— y aprovecho de ir a dejarte al aeropuerto. — añade Marco sonríendole.
Kaylee lo mira para luego tomar su brazo entrelazando éstos, era algo que hacían ambos cuando salían o hacían cosas.
— diviértanse. — dice Alexa sonriendo. — acuérdate de avisarme cuando llegues.
— ¡claro! — alza su pulgar la chica mientras salían del instituto riéndose por algo que había dicho Marco.
— ¡YA BESENSE! — se escuchó gritar a Alexa quién recibió una mala mirada de su mejor amiga.
— ¿ya son pareja? — pregunta Jeremiah mirando a Belly.
Kaylee iba de camino al cuarto de Jeremiah pero se detuvo al escuchar a Belly junto a Jeremiah.
— no. Yo no... no quería que fuera raro. — se excusa Belly.
— si, belly, es raro.
— Jere, por favor.
— ¿sabes que? está bien, lo entiendo. Solo fui la distracción mientras esperabas a conrad, me alegra que finalmente haya pasado, Belly. — se escuchan aplausos de parte del rubio. — te elegí a ti antes que kaylee, Belly.
— no quería lastimarte, ¡eres uno de mis mejores amigos!
— no, no puedes llamarme así, Kay también era tu mejor amiga y mira como la dejaste.
— no lo dices en serio.
— puedes salir de mi cuarto. Por cierto, Belly: el te romperá el corazón.
y al escuchar aquello, era la señal de kaylee para irse del pasillo entrando en su cuarto rapidamente.
𓆉
— ¡te irá estupendo en tu graduación, Stevie! — dice kaylee a través del teléfono.
— deberias estar aquí con nosotros. — se escucha hablar a Steven.
— lo sé pero no puedo y lo sabes. — dice Kaylee suspirando. — además no estoy en buenos terminos con Jeremiah.
— ¿que sucedió?
— ambos necesitábamos sanar de lo ocurrido en el verano pasado.
— entiendo, aún que insisto ojalá estuvieras aquí.
— igual me gustaría estar contigo, pero ya nos veremos pronto. — le dijo Kaylee.
— ¡STEVEN APURA! — se escuchaba la voz de laurel.
— mándale mis saludos a Laur, debes irte, suerte con todo, Steven, ah y felicidades por entrar a Princeton.
— gracias, Kayboo.
Kaylee se ríe para así cortar la llamada, mientras suspiraba mirando a Marco quién estaba junto a ella.
— ¿Kayboo?
— si es un apodo que Steven me puso cuando teníamos 8 años. — dice Kaylee riéndose.
— ¿de verdad no quieres que te acompañe? puedo ir si quieres.
— no, necesito ir sola. — dice Kay mientras suspiraba.
Marco hace una mueca para luego atraer a la chica abrazandola. Está se sorprendió por aquello pero le siguió el abrazo mientras apoyaba su cabeza en el pecho del mayor haciendo que esté sonriera un poco.
ambos sienten como unas pequeñas entraban en la habitación.
— ¡Papá! ¡Kay está con su novio! — grita Andrea mientras miraba a ambos adolecentes.
— ¡con el tal Marco! — aclara Emma mientras giraba su cabeza.
— ¡oigan! — exclama Kay mientras se cruzaba de brazos. — se suponía que teníamos un trato.
— se acabó desde que papá nos dió helado está mañana. — dice la pequeña emma sonriendo divertida.
— eso eso. — le sigue Andrea riéndose.
— papá parece un niño chico. — suspira negando. — ¿que necesitan?
— mamá dice que la cena está servida, también puede venir tu novio. — dice Andrea sonriendo.
— que no es mi novio. — dice Kay suspirando mientras miraba a marco quién se reía de la situación.
— aún. — murmura marco sonriendo mientras miraba a las gemelas.
— me agrada para ti, Kay. — dice Emma.
ambas gemelas eran tan distintas pero a la vez eran demasiado parecidas en personalidad, Andrea era la mente maestra la que hacía los planes a sus cortos 5 años ya había negociado con su padre y hermana más de 5 veces en todo esté tiempo, Emma era la que seguía los planes de su gemela, si ella hacía algo, emma estaba ahí apoyándola en sus travesuras. Ambas eran parecidas a su madre en cuanto al físico.
— iré en unos minutos, díganle a papá que no mate a Marco y les daré lo que quieran.
aquello hizo que la mirada de ambas pequeñas se les iluminará.
— ¿lo que queramos? — preguntan ambas.
— lo que quieran.
— queremos tu postre entonces. — dice Andrea sonriendo.
Kay arruga su nariz para luego asentir.
— está bien.
ambas gemelas sonríen para luego correr escaleras abajo, Marco mira a Kay sonríendole cuando vio como ambas gemelas se les iluminó la cara.
— definitivamente eres una hermana excelente.
— nunca pensé en llegar a tener hermanas, siempre fuimos mamá, yo y papá, bueno antes de todo. — Murmuró la rubia.
— lo entiendo, pero eres una hermana excelente para Andrea y emma.
Kay asiente para luego tomar la mano del chico y empezar a caminar hacia abajo, encontrandose con su familia abajo en el comedor, ya todos sentados en la mesa.
— hola papá. — dice Kay sonríendole mientras le dejaba un beso en su mejilla para luego ir a sentarse en su lugar.
Marco sonríe saludando, mientras se sentaba junto a Kay.
— Kay, que alegría volver a verte. — dice Karen sonriendo amablemente.
— si, termine todos mis exámenes, y ahora tengo unas cuantas semanas libres. — dice Kaylee.
— me alegro que te haya ido bien en tu primer año, despues de todo, lograste superarte.
Kay al escuchar aquello, supira mientras asiente haciendo una pequeña mueca.
— perdón, no quería...
— no te preocupes, Karen, no fue tu culpa. — murmura kaylee suspirando.
— detesto sentirme mal. — dice Kaylee mirando a Jake. — es que, estábamos tan bien, ¿sabes? y no quiero ponerle la culpa a Belly pero ella fue la que se metió entre nosotros sabiendo que yo he estado enamorada de Jeremiah desde hace muchos años. — kaylee siente rabia pero a la vez tristeza.
— todo estará bien, Kay. Lo prometo. — habla Jake mientras miraba a su mejor amiga.
— ¿cómo? — murmura Kay. — no quiero ni ver a Jeremiah, ¡el se beso con una de mis mejores amigas!
Jake mira a su amiga, mientras está jugaba con sus dedos, lo cuál no era inconsciente de aquello. Ambos estaban concientes de los cambios que ocurrían de ahora en adelante pero sabía que Jake apoyaría a Kaylee en todo momento.
— no vuelvas a sacar ese tema en la mesa, cariño. — dice John mientras mira a su pareja.
Karen asiente mientras mira a Kay quién seguía cenando. Se le había quitado el apetito pero trataba de comer ya que no iba a despreciar la comida que hizo Karen para todos.
— ¿cómo te fue a ti, Marco? tus padres siempre hablan sobre tus notas. — habla John mirando a Marco.
— este año fue algo extraño, pero logré pasar bien todos mis ramos. — explica Marco sonriendo.
— me alegro por eso, muchacho.
John miraba a su hija para luego ver la hora.
— ya debes estar en el aeropuerto, querida. — dice mientras miraba la hora.
— oh, cierto, los veo en unos días. — habla de forma rápida despidiéndose de todos. — mis postres quedan para las gemelas, por cierto, en la noche las llamo.
ambas sonríen para así salir de la casa tomando su mochila que había dejado sobre el sofá, saliendo junto a Marco quién entraba en su auto junto a kaylee.
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Kaylee miraba por la ventana del avión suspirando mientras veía como el avión empezaba a aterrizar en la cuidad dónde tenía destinado a ir.
la chica se bajó para luego tomar un Uber que la llevará a la secundaria de Steven. Al llegar le pago al chófer para luego caminar hacia adentro, viendo cómo todos estaban sentados, viendo a Belly, Taylor, Laurel y al padre de ambos hermanos sentados en una fila, con tres asientos a su lado desocupados. Kaylee camino hacia ellos.
— espero no haber llegado tan tarde. — dice Kay mientras le sonríe a Laur.
— ¡Kay! pensé que no vendrías. — dice Laurel feliz por ver a la rubia.
— era una sorpresa para Steven.
le comenta para luego pasar entre todos, sin molestar mientras le sonrió un poco a Belly, sabiendo que después de todo ella no tenía la culpa de nada.
aún que, aún así tenía un pequeño remordimiento muy dentro de ella, que le hacía no confiar en Belly del todo.
— dicen que todo pasa por algo, no sé quiénes lo dicen. Tal vez lo acuñó un teólogo o quien configuro la simula en la que claramente vivimos. — dice Steven haciendo reír a todos incluyendo a Kaylee quien miraba orgullosa a su amigo. — Quizá fue Rihanna. No, Rihanna no puede equivocarse. Ella no. Pero lo escuchamos, una y otra vez. Se supone que debe convencernos de que todo tenía que suceder así para enseñarnos algo, para que crezcamos y sigamos el destino. Eso es pura idiotez. — dice Steven mirando a su madre disculpándose, para así dirigir su mirada a Kay quién estaba sonriendo orgullosa.
» lo siento, mamá, lo siento. Las rupturas no siempre generan grandes avances, a veces, una chica te deja después de un gran verano y apesta y no aprendes nada con ello pero te obligado a seguir adelante. Pero luego, sucede lo impensable y te das cuenta que no tiene sentido pensar así.
— Kaylee.
kaylee estaba caminando, y al escuchar la voz de Susannah se detuvo para así ver qué estaba en el estudio antiguo que hace años no se ocupaba.
— hace tiempo no te veía aquí. — murmura Kay entrando.
— Laurel me dijo que limpiará aquí, es la más fácil. No creo que haya venido a escribir este verano. — dice Susannah mientras Lee se sentaba en el sofá.
— ¿no contratas a alguien que limpie? — Susannah hace callar a Kay sonriendo.
Kaylee tenía la vista decaída mientras distraídamente se tocaba su collar de tortuga que compartía con Jeremiah, antes de todo, ella y él compartían el mismo collar para tenerse un poco más cerca el uno con el otro.
— me encanta ese collar. — dice la mujer rubia sonriendo. — Jeremiah me contó lo que sucedió con ustedes cuatro.
— perdón, no quería arruinarte el verano con esto. — murmura Kay suspirando.
— no te disculpes.
Kay miraba a Susannah quien tenía su mirada de madre comprensiva, sabiendo que kaylee amaba a Jeremiah como él a ella pero simplemente se equivocó o eso ella pensaba.
— Susannah yo lo amaba. — murmura kaylee con un nudo en la garganta. — ésto se me fue de mis planes. Siento que cada vez estoy perdiendo a Jeremiah y se que es tu hijo pero dios, no sé porque lo hizo...
Susannah miraba a la menor con su típica mirada que solucionaba todo, una mirada comprensiva que siempre le daba seguridad a Kaylee al momento de hablar con la mujer rubia.
— él te ama, cielo. Siempre lo hará, pero ambos necesitan un tiempo para recuperarse de todos los obstáculos, ya encontrarán la forma de volver a encontrarse. Este lugar siempre está aquí para tí. — le asegura Susannah a Kaylee quien la miraba pensativa.
— si, pero has hecho que cada verano aquí sea mágico, Susannah. — dice Kaylee con los ojos llorosos. — ¿que sucederá...? ¿que sucederá cuando...?
Kay sentía que el nudo en su garganta aumentaba al momento de pensar en lo peor.
— Kay, amas este lugar tanto como yo o como lo hizo tu madre en su momento. Y si alguien puede conservar esa magia, eres tú.
Kaylee asiente suspirando mientras sonreía un poco.
— eres mi ricitos de oro.
— siempre. — murmura Kay mirándola.
— llamaré para que limpien.
Susi se levantaba del asiento mientras que Kay se levantó rapidamente abrazando a Susannah con fuerza, sin querer soltarla.
— ¿prometes que nunca me dejaras?
— nunca te dejaría, Kay. — dice Susi con una sonrisa mirando a kaylee.
— las cosas simplemente pasan. — seguía hablando Steven. — cosas buenas, cosas malas de formas que nunca esperamos de formas tan fuera de nuestro control que podría volverte loco. Hay momentos en los que parece que el mundo te está pasando a ti, pero recuerda que también le estás pasando al mundo, así que no esperes. Haz lo que quieres, mañana no es seguro, así que asegúrate de vivir hoy.
termina de hablar haciendo que kaylee aplaudirá orgullosa levantándose de su asiento sonriendo mirando a su amigo quien la miraba sonriendo.
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— si papá estoy bien. Regresare en unas horas, lo prometo. Bien, dile a las enanas que las llamaré antes de que se duerman. — dice Kaylee en italiano cortando la llamada cuando vio como Steven se acercaba sonríendole.
— Kayboo. — dice Steven.
— Stevie. Felicidades. — habla Kaylee sonríendole mientras lo abrazaba fuertemente haciendo que Steven la levanté.
— esto es una sorpresa, creí que no vendrías. — dice emocionado.
— claro que vendría, tenía que hacerlo. Era una sorpresa nadie más sabía de esto. — dice Kay mientras Steven la bajaba sonríendole emocionado.
— gracias por venir, por cierto, tendremos una fiesta en la noche, ¿vienes? — pregunta Steven.
Kay lo pensó unos segundos pero luego hizo una mueca negando.
— tengo que volver en unas pocas horas, Steven. Perdón, me gustaría pero le prometí a papá que estaría en Italia en unas horas. — dice Kaylee mientras suspira.
— lo entiendo, pero igual gracias por venir en serio, aprecio esto, aún que me hubiera gustado que estuvieran todos.
— a mi también, pero bueno estoy yo en representación de los dos hermanos que andan por ahí dando vuelta. — dice Kay riéndose.
Ambos se rieron nostálgicos.
— Fue un gran discurso, a Susannah le hubiera gustado. — dice Kay sonriendo.
— lo sé.
Steven le sonríe a kaylee para luego despedirse de ella, quizá hasta cuándo no la volvería a ver, pero agradeció que pudiera estar para él en su graduación, por más que las cosas no hubieran resultado bien después de todo siempre ellos dos estarían el uno para el otro.
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nota de la autora. buenas, estamos de vuelta con el fanfic, definitivamente ésto me duele pero kaylee quizá vuelva a recuperarse y ser feliz como siempre lo tuvo que hacer, ¿teorías sobre la relación entre Jeremiah y Kaylee?