Sigue pasando el tiempo y cada vez voy mejorando más y más a he llegado al punto en el que me ha dejado una o dos veces encargarme bajo su vigilancia oculta, también he aprendido a controlar cada vez más mi magia y no le he vuelto a hacer daño y con las ilusiones he ido mucho mejor al igual que he empezado con los conjuros en los pactos o negocios que hemos hecho. Tambień hemos ido aprendiendo más la una de la otra y es razonable el que Úrsula tenga tanta enemistad con su hermano, también yo me he ganado algo de fama al ser su aprendiz y han puesto más soldados en mi búsqueda y captura para eliminarme, pero no lo lograrán. Es muy agradable estar con Úrsula aunque por fuera sea cruel, despiadada y sin corazón, si sabes cómo tratar con ella es diferente a como lo aparenta, nos hemos hecho buenas amigas, por no decir que es la única amiga que he hecho en toda mi vida aunque últimamente no sé, la manera en la que la veo es diferente, pero serán cosas mías, será mejor no prestarle mucha atención.
-Luz, ¿te atreves hoy a usar tu magia de camuflaje para ir al mercado?- la verdad es que me sorprende su propuesta
-Claro, creo ser capaz de lograrlo por bastante tiempo- me centro en lo que quiero y por fin lo consigo y me ve con orgullo
-Bien hecho, aquí tienes una lista de lo que nos hace falta, si necesitas algo ya sabes lo que debes hacer- me recuerda y yo asiento mientras tomo la lista y la guardo en mi bolso
-Tranquila, estaré aquí cuando menos te lo esperes- le sonrío antes de salir de la cueva y recorrer las cavernas hasta el exterior
Nado con cautela de no ser seguida por nadie ni observada por nadie, llego al mercado pasando desapercibida, compro todo lo necesario y lo que pone en la lista menos mal que me ha dejado algo de dinero y yo también me he traído del mío, cuando me dispongo a irme me detengo en un puesto de joyas y veo unos pendientes de color violeta que me gustaron bastante para ella por lo que los compro y los guardo para dárselos cuando llegue. Nado de vuelta a nuestro escondite prestando atención a lo que me rodea y asegurándome de que nadie me sigue, recorro las grutas y llego por fin a la gran cueva, coloco lo que he comprado en su respectivo sitio y justo cuando ya he terminado la veo aparecer por una de las entradas de la cueva.
-Has sido rápida esta vez- dice con un poco de sorpresa
-Te lo dije, estaré aquí cuando menos te lo esperes- le sonrío y con discreción cojo lo que le compré y lo escondo en mi espalda- por cierto, te he traído algo- me ve con sorpresa y curiosidad
-¿De qué se trata?- intenta ocultar una pequeña sonrisa, siento mis mejillas comenzar a arder y saco las manos de mi espalda y extiendo mi mano derecha dejando en la suya lo comprado, lo observa y me ve con asombro
-Los vi y me dije que te quedarían bien y pues te los he traído pensando que te gustarían, pero si no es así no pasa nada- digo esto último más rápido por culpa de los nervios
-Son muy bonitos, y es un bonito detalle que te hayas acordado de mí, gracias, hacía tiempo que nadie me regalaba algo, la última fue mi padre antes de fallecer, él fue quien me dió mi colgante- acaricia dicho objeto- me gustan bastante, gracias- sonrío con timidez mientras la veo ponérselos
-Me alegro mucho que así sea- voy a decir algo pero veo que la bola de cristal comienza a mostrar la imagen de Ariel recogiendo objetos humanos- veo que la pececita cada vez se siente más atraída por el mundo de arriba- nos acercamos a la esfera y me río amargamente por lo bajo- si ella supiera la realidad de la gran mayoría de los reinos de arriba, su mundo bonito se vendría abajo- niego con la cabeza
-Pero será mejor cuando su papaito se de cuenta de lo que su preciada hijita está haciendo y le ponga las aletas en su sitio y se la vea perder su ilusión- continúa ella y la verdad es que tiene razón
-O ambas partes, eso sí sería realmente entretenido de ver- concuerda conmigo y seguimos observándola hasta que las anguilas ya no puedan seguirla
-Tengo curiosidad, nunca me has dicho cómo es ser una humana por tanto tiempo allí- apoya sus codos en sus tentáculos mientras está boca abajo y yo me siento en una roca que sobresale, suspiro y trato de hacer memoria del tiempo que estuve allí
-Pues dependiendo del lugar en el que estés te tratan de una manera o de otra, pero en su mayoría dependiendo de las zonas del reino en el que estés los hombres te ven con deseo o intentan tomarte como si fueras un objeto sin importancia, tuve que aprender a defenderme sin usar mi magia, pero en otros sitios los aldeanos son muy simpáticos y amables, los reyes suelen pelear por territorios y riquezas que otros tienen y se mueren por descubrir mundos nuevos y conquistarlos, cada lugar tiene su esencia y lo que le caracteriza, la verdad es que tengo que elegir si estar arriba o aquí no podría elegir, tal vez en un tiempo suba a la superficie y me consiga una casa alejada del resto para que no me molesten y poder cultivar mi propia comida y cerca de alguna playa para poder nadar un poco y seguir conociendo cosas, tal vez tú podrías venir conmigo algún día- le miro con ilusión y vuelve a sorprenderse
-Así como lo describes no suena tan mal algunas cosas, tal vez cuando ya no seamos tan buscadas podamos ir y me muestras todo lo que sabes, ¿qué te parece?- asiento con la cabeza sonriendo e inconscientemente le tomo de las manos
-Ya verás, me encargaré de que veas lo mejor de ese mundo y puedas ser tú misma sin necesidad de ser juzgada- le digo con mucha seguridad en mis palabras
-Bueno, en verdad puedes intentar hacer un avance de lo que más te gusta de allí- le miro confusa- sólo céntrate en lo que quieres que yo vea y deja que tu magia haga el resto, déjate llevar por ella- asiento no muy segura y busco entre mis recuerdos los más felices de ellos y me enfoco únicamente en ellos y de mis manos sale mi poder creando como una ilusión en la que se me ve a mí en la plaza de un pueblo costero, es por la noche y están tocando música bastante movida, y se me ve a mí riendo por mi torpeza y poco a poco seguir los pasos y dejarme ir por la música- ¿esto es a lo que le llaman bailar?-
-Sí, esta fue la primera vez que me enseñaron a bailar, tenías que verme, era un pez fuera del agua con tres pares de aletas, era muy torpe, pero tuvieron paciencia conmigo y me pude dejar llevar hasta el punto de que incluso les acompañé improvisando canciones- sonrío ante el recuerdo
-¿Y no acabaron hechizados por tu voz de sirena?- me ve confusa
-No, he comprobado que según la persona afecta de una forma u otra, los de ese pueblo no tenían muchos recursos pero con lo que tenían se sentías más que satisfechos y no necesitaban de más cosas para ser felices, es cierto que de alguna manera se quedaron hipnotizados con mi voz, pero no al punto de hacer con ellos lo que yo quería o hacer que queden obsesionados con mi voz, simplemente les gustó- alzo mis hombros no muy segura de si me he explicado bien- tal vez algún día te enseñe incluso a bailar, no es tan difícil como lo parece, es más bien dejar que la música se apodere de ti y te dejes llevar por ella- sonrío al ver el recuerdo
-Se ve bastante divertido y se te ve realmente feliz ahí- sonríe muy levemente
-Feliz por fuera, pero en verdad estaba triste, la música y aquello me distraía de lo que sentía por un rato, pero en verdad me sentía sola al ver a todos esos humanos con sus hermanos y amigos y yo sin nadie con quien compartir- suspiro y dejo de mostrar mis recuerdos sintiéndome un poco cansada- bueno, los tiempos han cambiado y mi situación también con ello y la verdad es que me gusta cómo estoy ahora- sonrío un poco y veo que se está empezando a oscurecer todo- ya queda poco para que anochezca-
-Tienes razón y seguro que debes de estar cansada, hoy has usado bastante magia y has aguantado más que otras veces, poco a poco vas mejorando- le doy la razón y preparo algo para comer las dos antes de dormir, cenamos y cuando ya está más oscuro cada una se acuesta a dormir en su parte
Caigo dormida casi de inmediato pensando en que dormiré toda la noche pero error mío, estoy viendo el cómo le hice daño a mi hermana y ahora toda mi familia comienzan a decirme cosas como que soy una deshonra para la familia, que soy un monstruo, y me veo a mí misma perdiendo el control otra vez y en vez de dañar no sólo a mi hermanita, también le hago daño al resto de mi familia, intento ver si están bien pero la única persona que no reacciona es la menor de todos, mi familia sigue diciéndome que soy un monstruo mientras intento despertar pero me resulta muy difícil hasta que siento que me mueven a la vez que veo a mi hermana pequeña moverse otra vez pero con una brecha de la que sale sangre en su cabeza y con la mirada perdida y me dice que soy un monstruo.
-¡Neira!- grito a la vez que consigo por fin despertar, me encuentro otra vez en la cueva, con la respiración acelerada al igual que mis latidos mientras miro a todas partes en busca de mi hermanita, siento algo en mi hombro haciendo que me sobresalte y me aleje- no me toques, no quiero herirte- me aparto de inmediato y me encojo en mí misma rodeando mi cola con mis brazos
-Tranquila Luz, sólo ha sido un mal sueño, es solo una pesadilla, no es más que eso, tranquila- con sus tentáculos me acerca a ella y me rodea con sus brazos- tranquila, no era real- poco a poco consigue que me calme hasta que me encuentro más estable- ¿te encuentras mejor?-
-Sí, gracias por sacarme de ahí y perdona si te desperté- me encojo de hombros
-No te preocupes, de todas maneras me costaba dormir, te vi moverte bastante y empezaste a balbucear cosas incoherentes hasta que empezaste a llamar a alguien, Neira si mal no recuerdo, empezaste a llorar y a seguir gritando entonces decidí despertarte- me explica lo que ha hecho mientras me acaricia la espalda ya que aún sigo alterada
-Gracias por sacarme de ahí, volví a ver lo que ocurrió cuando huí de casa y el cómo le hice daño a mi hermana, pero esta vez le hice daño a mi familia y a había matado a mi hermana, era demasiado horrible- me estremezco ante un escalofrío que recorre toda mi espalda
-Solo ha sido un sueño, ellos seguro que están bien en tu casa- hace que mi cabeza quede apoyada en su hombro
-No lo sé, desde que me fui no he vuelto a saber nada más de ellos, ojalá pudiera ir a verles, pero seguro que si me ven volverán a echarme de allí- me encojo de hombros
-Bueno, tal vez puedas verlos por la bola de cristal, he dejado que las dos criaturas vaguen observando y seguramente estarán bastante lejos vagando, ¿recuerdas el lugar exacto donde están ellos?-
-Perfectamente-
-Entonces ven conmigo- le sigo y llegamos hasta la bola de cristal, toma mis manos y las pone con cuidado sobre la esfera- ahora concéntrate en tu casa y ellos irán a allí de inmediato- eso hago y cierro los ojos para centrarme más en mi objetivo, los vuelvo a abrir y veo que la bola comienza a brillar y muestra una imagen que no me esperaba
-¿Qué ha pasado?- digo confundida, está todo hecho un desastre, destruido, sin rastro de algo de vida- esto se supone que no debe estar así, así no estaba mi casa cuando yo me fui, algo tuvo que pasar, tengo que ver qué ha pasado- me empiezo a desesperar más hasta que ella me toma de los hombros para que la vea bien
-Luz, tranquilízate, así puedes cometer un grave error o puedes meterte en problemas muy graves-
-Pero es mi familia y debo ver que están bien, tengo que saber dónde están y si están bien- la desesperación está empezando a apoderar de mí, ahora toma con fuerza mi mentón para que la mire a los ojos
-Y eso harás, pero primero debes calmarte, debes tener la cabeza fría para así poder pensar mejor y no por impulso, entiendo que estés preocupada, pero se debe actuar con conciencia, ahora necesito que te calmes para poder pensar mejor, ¿entendido?- asiento con la cabeza e inspiro profundamente antes de soltarlo lentamente para calmarme más rápido
-De acuerdo, ya estoy mejor- ella me suelta pero no se aleja de mí- debo ir en su búsqueda o por lo menos conseguir algo de información sobre dónde pueden estar o qué ha pasado ahí-
-Y lo harás, deberás partir de inmediato si está lejos de aquí, pero deberás usar bastante magia para cuando estés cerca del palacio no ser reconocida o si al final los encuentras pasar desapercibida, no podré ir contigo porque llamaría mucho la atención, pero Flotsam y Jetsam te buscarán y te acompañarán, así yo también podré verte y así mantenernos comunicadas, sabes cómo defenderte así que no dudes en usar lo que te he enseñado todo este tiempo, ¿lo has entendido?-
-Sí, intentaré volver lo antes posible- nado rápido a coger el bolso con el que vine y meto un par de cosas que podría necesitar para el viaje hasta que me aseguro que lo tengo todo
-Toma, lo vas a necesitar- me da un saco no muy grande que puede caber dentro del bolso, lo abro y es comida, voy a decir algo pero me interrumpe- no te preocupes, te has encargado de que tengamos comida casi de sobra, con la que tengo aquí es más que suficiente- le resta importancia y ahora la veo coger algo que tiene en uno de los armarios y lo pone en mis manos, es un colgante similar al suyo pero más pequeño- para si necesitas mi ayuda puedas avisarme y yo acudiré todo lo rápido posible- asiento y le doy un abrazo que ella corresponde tras reaccionar
-Gracias, prometo no tardar mucho-
-Tarda lo que sea necesario, ten mucho cuidado y buen viaje- me acaricia la mejilla y me sorprende más al ella dejar un beso en mi frente, esto me da el valor y coraje suficiente para poder partir