Subastada al mejor postor

By SarahiSalinas_

4.2M 222K 61.3K

[Contenido +18 y +21] Desde recién nacidas somos arrancadas de los brazos de nuestras madres o algunas son de... More

Sinopsis
Personajes principales
1. Origen
2. Dulces dieciocho años
3. Llego el día
4. La subasta
5. Los Friedrich, una nueva vida
6. Jayden Friedrich
7. Beso
8. Secretos y una perforación
9. Un rubio de ojos grises
10. Boda a medias
11. Luna de miel o hiel
12. Eso que huelo ¿acaso son celos?
14. Te llevaré a las estrellas y al mismo tiempo al infierno a sentir las llamas
15. Lo que pasa en las Vegas, se queda en las Vegas
16. La correcta
17. Después de todo el pasado regresa
18. Decisiones
19. ¿Soy una Klein?
20. La libertad que merece
21. Nueva integrante
22. Divorcio
23. El tiempo lo sana todo ¿O no?
24. Solo piel
25. ¡Quiero un papá!
26. Reencuentro inesperado
27. Volverte a ver
28. Hablar, solo quiero hablar
29. Antes de lo esperado
30. La verdad
31. Un paso a la vez
32. ¿Aún queda una segunda oportunidad?
33. Escándalo
34. Unas cuantas verdades
35. Bésame hasta que me harte
36. Dilema
37. Aguarda, aún falta algo...
38. La venganza se sirve en un platillo frío
Epílogo

13. Locuras que llevan nuestro nombre

114K 6.5K 1.7K
By SarahiSalinas_

Estaba frente al espejo viéndome en aquel traje de baño que Jayden compro para mí.

No sé qué diferencia hay entre un traje de baño y la ropa interior. Creo que no me voy a quitar el vestido que usaré encima del bañador.

Andar con estas dos piezas de ropa entre tanta gente no me apetece. Insegura de los que vayan a mirarme, nunca en mi vida voy a andar más descubierta que hoy.

Mi piel resalta entre el rojo haciéndome ver más blanca de lo que soy, me pongo el vestido encima.
Escucho como toca alguien la puerta.

—¿Estás lista?

—No lo se —muerdo uno de mis labios

—Me gustaría saber el por qué

—No estoy segura de salir así frente a todos, ya sabes usar solo el traje de baño —digo apenada.

—Elaine, solo son inseguridades que tienes que vencer, se que no es fácil pero tampoco imposible. En esa fiesta te aseguro que habrá cientos de chicas en traje de baño, es normal llevar uno cuando hay una piscina. Yo también iré descubierto, solo usaré un bañador, no llevaré camisa. —trata de hacerme ver las cosas—. No tengas miedo, voy a cuidar de ti.

—¿Y si no vamos?

—Ayer fuiste tu quien dijo que quería ir —se lo piensa un instante—, de igual manera respeto la decisión que tomes, tampoco me apetece ir.

Ahora estoy en un dilema de ir o no, en mis manos está la decisión.

¿Qué puede suceder?

¡Todo, todo puede suceder!

Hubiera sabido las locuras que íbamos a hacer, no hubiéramos ido. Claro está, que el «hubiera» no existe.

—Vamos, no nos pasará nada y buscaré la manera de enfrentar el miedo a esta ropa que llevo debajo —confío en mis palabras.

—Eres hermosa Elaine y te juro que te verás aún más hermosa en traje de baño —acaricia mi mejilla.

Soy hermosa ante sus ojos, me genera una sensación de revoloteo en mi estómago.
Anoche nos dimos un par de besos más, mis labios quedaron hinchados de tanto besarnos ni hablar de lo rojizo que se intensificaron nuestras bocas.

Esta mañana no hubo ningún beso, solo quedó la sensación de su boca contra la mía. Quiero que vuelva a besarme quiero sentir el roce de los dos, sus brazos rodearme la cintura.

Pensarlo e imaginarlo hace que me ruborice.

—¿Puedo saber en qué piensas?, te has puesto roja —indaga curioso.

No pienso revelarle que estaba pensando en nosotros dos comiéndonos la boca.

—En que moriré de vergüenza aunque se que lo superare algún día —le miento descaradamente.

Salimos de la suite para ir a dónde se llevará a cabo la dichosa fiesta. Jayden ha alquilado un auto para estos días, así se nos hará más fácil trasladarnos a lugares que queramos ir.
Ya dentro del auto coloca la dirección en el gps. Le lleva no tanto tiempo llegar al lugar.

El exterior tiene una fachada de una mansión enorme elegante, en la puerta está el típico hombre que cuida quien entra y quién sale. Ya hay muchos autos estacionados afuera, Jayden busca donde aparcar.

Cuando ya estamos frente extiende la tarjeta que nos ofreció Kyllian, se hace un lado dándonos acceso.

Puedo escuchar la música a todo volumen, todo esto ya se me está haciendo común.
Al entrar puedo notar que la mayoría esta en traje de baño. Suelto un suspiro de alivio.

—¿Conoces a alguien de aquí?

—No, solo al tipo que nos invitó. Te aseguro que la gente que está aquí no se a de conocer —él podrá tener más experiencia en esto que yo.

Soy la chica que apenas está descubriendo el mundo.

Caminamos entre toda la multitud. Hay una enorme piscina donde hay gente saltando, riendo e incluso gritando. La piscina queda en medio de toda la construcción, hay unos sofás con mesa donde hay grupos sentados bebiendo y platicando.

—Si vinieron —se nos acerca Kyllian con Karim.

—No teníamos nada que hacer —responde seco—. Así que...

—Lo bueno es que vinieron —sonríe forzosamente ante el comportamiento de mi compañero.

Karim es muy silencioso que solo observa la situación.

—Aún no llevan bañador o no traen, podemos conseguirles unos —por fin habla.

—No, no es necesario si llevamos —respondo yo.

—Los llevo al baño para que se cambien —sugiere.

—Me parece bien, guíanos

—Síganme por aquí —caminamos juntos detrás de Karim.

Llegamos a unos sanitarios.

—El de ahí es el de mujeres y el de este lado el de caballeros —nos señala los lugares.

—Ve, saldré más primero que tú, te esperaré aquí —me dice Jayden.

Asiento dirigiéndome dentro de los baños. Me encierro en un cubículo, pienso por un momento lo que estoy por hacer.

Recuerda, aquí no hay reglas, es de algún modo la libertad que siempre deseaste, vívela, disfruta mientras puedas —me digo a mi misma—.

Estoy lista, tomo el dobladillo de dónde empieza mi vestido para sacarlo. Quedó solo en aquel conjunto rojo.

No entres en pánico que no es fin del mundo, haya que salir que seguro Jayden esta esperando por mi. Abro la puerta del sanitario en frente de mi está un espejo, me observo por segundo, mi piel se ve extremadamente lechosa, mis ojos resaltan el gris.

Que inseguridades se generan en mi, me tiene que gustar, que me gusta como me veo, aunque ¿cómo me verán los demás?

No pienses eso, debe de gustarme a mi, no a todos.

Se valiente y sal. Salgo de ahí.

Ya está él ahí, solo lleva un shorts, su torso va descubierto ya lo he visto así, si pensamos casi lo veo desnudo por completo cuando se le cayó la toalla.

—Ese color te sienta muy bien, resaltas —me sonríe sincero Karim ante sus palabras.

—Gracias

Puedo sentir la mirada de Jayden en mi, me da pena verlo a los ojos.

—Allí hay unos lockers para que pongan su ropa —nos lleva.

Metemos nuestras ropas. Después de eso se pierde Karim.

Camino dispuesta a irme. Jala mi brazo pegándome a la pared, me encierra con sus brazos.

—Sexy, sexy es la palabra que usaré contigo está noche. Sin duda no escogí mal el color, resaltas Eliane, ante mis ojos y antes los demás. Mi esposa es sexy —su cercanía me pone mal—. Justo ahora quiero besarte, no voy hacerlo quiero que me lo pidas no quiero abusar de esto que estamos haciendo.

Solo siento un leve roce de sus labios contra los míos, si ansío ese beso, no solo uno sino varios.

—Ahora vamos allá afuera, cuando quieras el beso solo acércate lo suficiente a mi y sabré que lo deseas —su respiración es pausada—, me encanta tenerte en esta posición, eso sí me encantaría tenerte de otra  forma de mil formas posibles —su voz ha cambiado a una más ronca y sensual.

—Vayamos —trato de separarme de él.

—Espera, deja hago esto —lo miro confundida de no entender el que.

Repentinamente posa un beso en mi frente, al ser muy bajita no se le dificulta.

—Ya estoy listo —toma mi mano entrelazando con la suya.

Buscamos un lugar libre, no lo hay, vamos a la barra donde están sirviendo bebidas.

—Se que estás reacia al alcohol, así que te pido agua —comenta—, yo pediré una bebida.

Hace señal a unos de los que están ahí.
Minutos después posan una bebida a Jayden y a mí una botella de agua, ahorita no tengo ganas de beber agua.

Miro como traga aquel líquido, me llega la curiosidad de también probarlo.

—¿Puedo? —señalo su bebida.

—¿Estás segura?, no quiero que te sientas forzada a probar algo que no quieres.

—Me gana la curiosidad —me extiende el vaso, yo lo tomo.

Lo llevo a mis labios, siento lo caliente y lo fuerte que es.

—¡Esto quema la garganta! —exclamo alarmada.

—Ten cuidado al tomarlo te puedes ahogar, será mejor que bebas agua para que se te pase —él sin preocupación se lo toma de un trago sin hacer gestos.

Yo habría hecho mil.

—Definitivamente le digo "no" a la bebida —que horrible experiencia—. No sé cómo puedes beber eso.

—Te acostumbras —le dan otro vaso con aquel líquido horroroso.

Recorro el lugar, hay chicas bailando al son de música, hombre bebiendo e incluso puedo jurar que están muy borrachos, grupos hablando y riendo. Reparo en un grupo de chicas que están dirigiendo la mirada hacia acá, frunce el seño sin saber a quien miran en específico no le tomo tanta atención.

—¿Se la están pasando bien? —vuelve a llegar como si nada.

También va solo en uno shorts color negro que se ajusta a su musculatura, tiene un cuerpo muy bien marcado, más que él de Jayden, unos cabellos rebeldes caen en su frente. Karim va de igual manera aunque su cuerpo no es tan marcado tiene algo de atractivo que llama la atención con ese sexy lunar arriba de su boca.

Los dos comparten el mismo color de ojos, entre un verdoso y café.

—¿Aún no vas a la alberca? —se acerca a mi Karim, niego—. ¿Te gustaría ir?

—No lo se, no sé nadar —esa es la verdad.

—No te preocupes yo tampoco se —ríe bajito—, tan siquiera vamos a la orilla a sentarnos.

—Ves con Karim —me alienta Jayden—. De aquí te cuido Elaine, me quedo con Kyllian.

Dudo por un segundo. No quiero dejarlo solo.

—Le presentare unos amigos, vayan —esta vez Kyllian nos dice—. No lo dejaré solo si es lo que te preocupa chica.

Nos alejamos de ellos para llegar a la piscina, hay una parte que no es tan onda y que pueden andar caminando en el agua, un poco más allá se ve más profundo. Nos sentamos en la orilla de la alberca.

—¿Qué tal tu luna de miel?

—Bien —no se que contestar ante la pregunta.

—No pareces muy feliz

—Si lo estoy, conocer las Vegas es bonito, estar al lado de Jayden es lo mejor —me apego a las mentiras, una parte puede ser verdad.

—Bueno, pues has notar más esa felicidad —en su cuello brilla aquel collar.

—¿Por qué llevas ese collar? —trato de evadir mi relación con cierto hombre.

—Oh esto —toca la letra "K"—. Un regalo de Kyllian, nuestros nombres empiezan con la misma letra. Ya se que es muy llamativo, no me importa a mí me gusta.

Se ve que le gusta mucho Kyllian se le iluminan los ojos con solo mencionarlo.

—¿Hace cuánto son novios?

—No mucho, hace un mes empezamos con nuestro noviazgo. Lo conozco desde hace cinco meses, fue de alguna manera mi salvación de un lugar como el infierno —lo último llama mi atención—. Siento libertad desde que lo conocí, cosa que no conocía desde hace dieciocho años atrás.

La misma manera en que me expresaría de mi libertad.

—Tienes dieciocho entonces —afirmo para mí.

—Así es, soy joven y ando con un hombre de veintisiete años —tiene una risa tierna—.

—Vaya, yo también tengo tu edad; hace poco conocí la libertad. Llegar con Jayden fue como despertar un nuevo mundo, conocer el exterior —fue así, gracias a la subasta conozco más de lo que se nos permitió.

—Somos jóvenes con hombres más grandes, me sorprende que te hayas casado tan joven.

—Me enamoré —no le voy a decir que no tuve de otra, aunque me gustaría decirlo no puedo.

Karim me causa de alguna manera confianza.

—Chica enamorada, no te enojes, no te alteres y no te vayas a poner celosa por lo que diré a continuación —no entiendo por qué dice aquello.

—Mira hacía allá disimuladamente —señala uno de los sofá donde se encuentra Kyllian y Jayden—, hay dos chicas que están coqueteando con nuestras respectivas parejas.

En efecto, enfoco bien y doy con dos mujeres que están muy cerca de los chicos, una a lado de Jayden y la otra de Kyllian. Una de ellas toca muy cómodamente a Jayden, él no hace nada para alejarla por motivo alguno me da coraje.

—Creo que iré —estoy supuesta a levantarme de ahí e ir a dónde está él, me detiene Karim.

—No lo hagas, no se ha dado cuenta que lo estás viendo. Además son dos mujeres en busca de atención alguna, estoy seguro que tú esposo no le prestara el mínimo de atención —noto que tiene razón no le hace caso a la mujer—. Ves te lo dije la está ignorando, son como las garrapatas no les gusta alejarse aunque les digan no.

—¿No te pones celoso de que la chica le esté tomando el brazo a tu novio? —no quitamos la mirada de ellos.

—La verdad es que no, se los sentimientos que tiene hacia mí, le gustan la chicas y los chicos al mismo tiempo pero está conmigo. Lo tengo yo, no ellas. Si sabe respetarme me dará mi lugar y detendrá a la chica antes de que ella cometa un error.

Si le importa solo lo niega, está bien, de una forma está viendo si le da su lugar como pareja. Quisiera ver lo mismo de Jayden, no tenemos nada de relación sentimental nos hemos besado, tampoco nos hemos puesto hablar sobre que está sucediendo.

La chica que intenta hablar con mi esposo es mi guapa, cabello rubio muy brillante un bonito cuerpo.

—Son lindas —hablo por fin después de minutos de silencio observando la escena.

—Lo son, no obstante la rubia no eres tú y tu marido lo sabe eres bellísima Elaine chicos te miran solo falta  que te des cuenta —es que es muy positivo para todo.

—No me he dado cuenta de ello

—Lo se por que Kyllian no aparto la mirada cuando chocaste con él, en el restaurante fue lo mismo, ya cuando te vio en la discoteca no perdió tiempo en hablarte por un instante me sentí celoso me lleno de alivio que llegara aquel hombre y dijera que eras su esposa —sigue clavando la mirada en su pareja, yo ya he ignorado a Jayden—. No suelo ser celoso, yo también vi lo bella que eres, no dudes de ello, pareces un ángel con ese cabello, tus ojos. Tu cuerpo es hermoso parece un reloj de arena.

—Nadie me ha dicho algo así, gracias por ver algo que yo no veo. Karim, tu tienes también un atractivo, eres guapo, si te llega a perder Kyllian sería un completo idiota, ni hablar de lo positivo y tierno que llegas a ser. Te conozco desde hace poco, me caes muy bien —sus mejillas se encienden.

¡Eso lo hace aún más tierno!

De la nada borra su sonrisa. Dirijo mi mirada a dónde está su novio.

El está sentado en uno de los sofá, la mujer se ha sentado encima suyo. No entiendo por qué no la ha quitado, sin embargo Jayden ha puesto distancia con la otra.

—Creo que probaré una de esas bebidas que están dando por allá —señala un mesero que lleva una charola con varias de esas—. ¿Vienes?

Sigo su andar para parar al mesero, toma dos copas, me da una y él se queda con la otra.

—Salud —choca la copa con la mía generando un sonido.

—Yo paso, probé una, me supo a fuego —no bebo.

—A mi tampoco me gusta el sabor pero hoy haré una excepción —se lleva el líquido a sus labios y bebe generando unas muecas en su cara—. Esto que si sabe a mierda —aún así sigue bebiendo.

Regreso mi mirada a aquella mesa, no se ha despegado ninguna mujer, al menos él ignora la que tiene a lado suyo, él al parecer presta atención a las palabras de los otro hombres.

Puedo ver cómo toma otra copa arruga la cara cuando pasa todo el alcohol a su garganta.

—Será mejor que dejes eso, se te subirá muy rápido al no saber ingerir —trato de detener que no siga bebiendo.

—Kyllian ni siquiera me ha prestado atención, él dijo que quería que funcionará esto, no veo que este interesado es más está interesado en su grupo de amigos y no en mi —en su rostro puedo ver la tristeza con un dolor terrible, le afecta.

¿A quien no?. Cuando te enamoras hasta el mínimo detalle cuenta.

—Estás muy enamorado de Kyllian y no se ha dado cuenta.

—Lo estoy —sonríe con tristeza—, bebe conmigo —me pone la copa en mis labios para que trague.

Para no hacerle el feo, consumo un poco. Trago como puedo.

Por un momento también empiezo a beber a sorbos, cuando me doy cuenta ya me he bebido una por completo.

—Pediré otra para ti —le llama al mesero, enseguida ya está aquí dándonos otra bebida distinta a la anterior.

Pruebo, está sabe mejor un poco más dulzón y no tan fuerte como la anterior, se me hace más fácil ingerir.

—Me gusto está, le diré al chico que me traiga otra —me levanto para buscarlo.

Camino por la orilla de la alberca, está a unos pasos de mi un chico con la charola.

—¡Hey! —le hago señas para que venga.

—Dame otra como está —señalo el vaso.

—Elaine, deja de estar bebiendo —eso sonó a un regaño, parece estar cabreado, lo ignoro—. Te estoy hablando, cuando te hablo me gusta que me hagan caso —alza un poco la voz.

—Sigue con tus nuevos amigos que yo me estoy divirtiendo con Karim.

—Pues vaya forma de divertirte —suelta con sarcasmo—. Te he estado observando desde hace ratos, llevas muchas copas encima se te va a subir muy rápido. Hace un rato me dijiste que esto no era lo tuyo, ya veo que cambiaste de opinión —alega.

—Te he visto antes, estabas muy cómodo con Kyllian y los otros junto a esas chicas —hago seña donde siguen los demás—, tu te diviertes a tu modo yo también lo hago, todos felices.

No entiendo mi drama, no entiendo por qué estoy diciendo todo esto, parezco una novia celosa.

¡Mujer!, ¡Eres su esposa!, con todo derecho.

—¿Te has puesto celosa de la chica?, es eso —interroga.

—No habría por qué —le resto importancia.

—Es lo que haces ver, me gusta verlo. Celosa te ves aún más sexy —no se cómo pasa de estar enfurecido conmigo a ponerse en modo coqueto—. Recuerda que dije si te acercabas demasiado es por qué desearás que te besara —sus manos se posicionan en mi cintura, tocando mi piel desnuda.

—Tu fuiste él que se acercó, no yo —me defiendo.

—Ahora tengo ganas de besarte —nuestros cuerpos están muy cerca, rozándose.

—¿Y qué esperas? —logro pronunciar aquello sin ponerme nerviosa.

No pide permiso, no dice nada pero me toma del brazo y me jala a no se dónde. Pasamos entre la gente incluso chocamos pero parece no importarle, abre la puerta donde están los lockers ingresamos ahí.

No me deja no siquiera hablar cuando me acorrala contra la pared, uno de sus brazos lo posa encima de mi cabeza, mientras su otro brazo me sostiene por la cadera.

—Aquí nadie nos molestará.

Me besa, presiona sus labios con los míos, mueve tan frenéticamente sus labios. Un beso necesitado.

Me aferró a él para profundizar el beso, no lo suelto ni por un instante, su mano empieza a acariciar la curvatura de mi cintura llegando al borde donde inicia el bikini enviándome mil descargas de energía.

De un momento a otro cuela su lengua dentro de mi boca, me sobresalto sin saber que hacer de todas formas le doy acceso de invadir mi boca. Toca la mía y siento el metal que lleva en su lengua, su perforación toca mi lengua no siento incomodidad sino deseo de seguir profanando cada parte de su boca.

Nos separamos para tomar aire, nuestro pechos están muy agitados respiramos rápidamente hasta tratar de calmarnos.

—Hay que regresar

—Vamos

Atravesamos entre la multitud, ya hay cuerpos sudados, otros demasiados bebidos, cuerpos desprendiendo sudor y a olor a alcohol.

Llegamos a dónde estaba anteriormente, Kyllian sigue ahí, la mujer también. No sé le ha despegado. Busco con la mirada a Karim no logro verlo. Después de recorrer con la mirada doy con él.
Esta del otro lado de la piscina, hay un chico guapo a su lado, parece estarse divirtiendo, me alegro que se haya olvidado por unos segundos de este hombre que ni se preocupa por él.

—¿No han visto a Karim? —inquiere algo preocupado

—Lo vi hace ratos estaba con Elaine —afirmo con un movimiento de cabeza.

—Lo estaba me perdí con Jayden por ahí, ya no lo volví a ver —estoy en decirle o no, mejor si quiero ver su expresión—. Pero no te preocupes que ya di de nuevo con él.

—¿Dónde está?

—Por allá —señalo con mi mano donde lo he visto anteriormente con el chico—, parece estar alegre.

Visualizo como de estar preocupado, borra toda expresión de su rostro tornándose a una neutra.

¡Uy!, al parecer ya se enojo. Me río en mis adentros.

—Iré por Karim. Parece estar muy borracho, soy un estúpido al perderlo de vista nunca ha bebido —se levanta de su lugar para ir hacia allá.

—Oye no me dejes, voy contigo —la mujer se levanta también para ir detrás suyo.

—Detente, ya he causado un problema con todo esto. Voy por mi novio que por mi culpa se ha puesto hasta la coronilla de borracho —es todo lo que dice para ignorarla y seguir su camino.

—Se ha puesto celoso de solo verlo con otro hombre —mormulla Jayden.

—Te perdí, te busque pero no te encontré —llega la chica que estaba con Jayden.

—Me fui a disfrutar la soledad con alguien —me mira de reojo.

—Me han ganado —frunzo el ceño por sus palabras.

¿Qué yo le he ganado?. Eso ha dicho, esto me enoja, no se de dónde agarró el valor.

—Disculpa, yo no te he ganado en nada —alzo mi mano donde llevo el anillo de matrimonio mostrándoselo ante su cara—. Este anillo que vez aquí dice una sola cosa, casada, y adivina con quién chica, si, con este hombre que está a lado mío. Jayden es mi esposo, yo soy su esposa somos un matrimonio —recalco lo último dejándola sin nada que decir.

—No sabía —es todo para alejarse de nosotros.

—Has recalcado de todas las formas posibles que no estoy disponible y que soy tuyo —me pasa un brazo encima de mis hombros—. Me gusta la posesividad, si viene de ti, me prende.

Roza con sus labios mi hombro llevándolo cerca de mi cuello. Un lugar sensible que provoca que abra mis labios soltando un suspiro. Que sensación más satisfactoria.

—Tu piel es muy suave —susurra en mi oído—.

—No hagas eso me pones muy nerviosa

—Sabes que me gusta —puedo ver cómo sonríe.

—He regresado con esto —llega un chico que al parecer estaba antes aquí.

Señala en su muñeca un tatuaje de una nota musical.

—¿Dónde te la has hecho?

—Justo ahí —al otro lado del lugar hay un cubículo donde se encuentra gente—. Le han quedado genial.

—Locura de una noche —contesta Jayden.

—Deberías intentarlo

—Paso

Un mesero se acerca ofreciéndonos bebidas.

—Justo las que me gustan —habla el extraño—, pruebénlas, son mágicas —toma una de la charola para beber.

—¿Ha que te refieres con mágicas? —pregunto curiosa.

—No saben tanto a alcohol, eso sí te hacen muy eufórica la noche. Tomen una no se arrepentirán.

Obvio que esto me gana la curiosidad queriendo ver aquel líquido.

—¿Puedo? —volteo a verlo

—Solo un trago, no bebas de más no sabemos que contiene.

—Es suficiente con que beba un par de sorbos, acompáñala en la experiencia, ya me lo agradecerán —le guiña un ojo.

Se para del sofá, se pierde entre el tumulto.

—¿Qué puede pasar?

Y si, lo bebo, toma la mitad de la copa enviándome un sabor algo dulce con un poco de alcohol que no llega a molestar. Jayden toma el resto, no sabemos que estamos haciendo; una diversión de noche, no creo que nos suceda nada.

Y como dije, una diversión de noche, nos llevo a la locura. El resto no lo recuerdo, solo puedo recordar como una persona sacude mi cuerpo.

—Despierta Elaine —escucho a lo lejos que alguien me llama—. Carajo, despierta.

Abro poco a poco los ojos calándome la claridad que se cuela por todos lados.

—¿Por qué me has despertado?, déjame dormir —no le tomo importancia al entorno.

Mi cabeza duele, no se el por qué.

—Te he dicho que te despierte, tenemos que irnos —me jala para que me levanté.

Enfoco en mi campo de visión a un Jayden muy despeinado.

—¿A dónde iremos? —digo extrañada.

—Al hotel, tenemos que regresar —acaso no estamos ya aquí.

—Elaine no regresamos al hotel seguimos en donde se llevó a cabo la fiesta —por fin entiendo.

Caigo en cuenta de todo, miro a mi alrededor, toda la luz de la mañana se cuela, hay cuerpos tirados por dónde quiera, siguen dormidos.

—¿Qué sucedió anoche?. No recuerdo nada

—Ni yo recuerdo nada, después de beber aquello. Tenemos que irnos.

Vamos al baño, me lavo la cara para despabilar un poco. Busco mi ropa para ponérmela. Cuando llegó al área del bikini siento un dolor. Me quedo extrañada. Me golpee a lo mejor y no me di cuenta. Bajo un poco el bikini de dónde viene aquel dolorcito.

Observo como hay algo en mi piel que sigue rojizo, son unas letras. Más abajo de mi cadera reposa en letra cursiva un nombre en el lado derecho. Leo claramente lo que dice.

"Jayden", eso dice las letras. ¡Me he hecho un tatuaje con el nombre de Jayden!.

Quedó pasmada sin saber cómo reaccionar. En qué momento sucedió esto. A continuación veo como entra Jayden.

—Elaine, dime qué esto es una jodida broma —señala el lado izquierdo de su pecho.

Justo ahí hay escrito algo y también en letra cursiva muy bien hecha.

"Elaine", quedó helada.

¡Jayden lleva tatuado mi nombre!

Mi cerebro hace corto circuito.

—Mira esto —bajo un poco el bañador para que pueda ver su nombre en mi.

—Nos hemos tatuado nuestros nombres



🫧🫧🫧

Esto se puso fuerte!!! 🔥

¡Se han tatuado! ¡Esto está intenso!, Pero que locura 😂

Aquí esta una actualización ✨ no se olviden de votar y comentar ✨🫶

¿Se imaginaban esto? 👀

Tuve que cortar el capítulo sentí que ya era mucho, el siguiente estara un poco mejor de intenso 🔥🥵 no se, tal vez los sorprendo 😏 jsjsjsjs

Siganme por instagram estoy como sarahi_salinas04 a veces pongo contenido de libros y también por face estoy como Sarahí Salinas ❤️ mientras esperan la siguiente actualización 😬🥺 háganos amistad por allá.

Continue Reading

You'll Also Like

272 75 11
"Y dijo Dios: Que se haga la luz" Y se hizo la luz... ¿Qué sucedió en aquel momento donde todo era bueno, y de repente no lo fue? ¿Qué es el pecado...
17.7K 1K 46
¿Que pasaría si un día empiezas a ver una sombra en tu habitación? Ceren creyó que se estaba volviendo loca hasta que un día esa sombra tomó forma h...
13.3K 1.5K 21
Dos jóvenes muy bellas pero con mala suerte en el amor intentaran de todo para encontrar los ingredientes secretos del amor, logrando en su búsqueda...
146K 8K 38
Soy una chica un tanto peculiar... ¿guardarías mi secreto? Esta hermosa historia continua en "My No So Secret" ¡Disfruten!