JUEVES
Porfiiiiiiiin.
Se había acabado la clase de matemáticas y tocaba recreo. Estaba empezando a estresarme porque la geometría se me da MUY mal.
Estaba saliendo de clase y fui a mi taquilla, saqué mis cascos, me los puse y salí de allí enfadada y frustrada. Llegué a las gradas y revisé el terreno. No había nadie. Menos mal o iba a acabar con una patada en los huevos.
Me senté en mi sitio favorito—debajo de un árbol—y saqué mi libro. Estaba en momentos intensos los protagonistas y eso me quitó un poco de rabia, jeje.
Ojalá hacer eso con Lukie-tookie-pookie.
Calla.
¡Es la verdad!
Me da igual, que te calles.
Iba por la mitad del libro cuando escuché unos pasos acercándose. Rodé los ojos antes de girarme hacia la misteriosa persona que venía a molestarme, pero mi corazón se aceleró cuando vi que era el idiota.
—Hola—saludó.
—Hola—le respondí y le di unas palmadas al asiento que tenía al lado indicando que se sentará, lo que él hizo sin rechistar.
—¿Que haces?—preguntó.
—Leer.
Él enarcó una ceja.
—¿Y eso? Nunca sueles estar sola y prefieres la compañía.
Como nos conoce...
—Pues...estamos en la época donde, a Emma la que saca buenas notas en mates, resulta lo contrario.
Luke sonrió.
—Vaya...parece que a doña perfecta se le da mal geometría.
—No te burles. Hoy no es mi día. Es lo que peor se me da y lo digo en serio.
—Vale, vale. Tu ganas.
Sonreí como un angelito y guardé el libro y los cascos. Nos quedamos un rato en silencio, admirando el paisaje que teníamos delante. Muy bonita para ser de un instituto, la verdad.
—¿Vas a venir hoy a volley?—dijo rompiendo el silencio.
Yo puse una mueca.
—No lo sé, la verdad—suspiré—.No sé si prefiero quedarme estudiando o ir a entrenar. Necesito al menos sacar un 5 para aprobar y lo veo un poco imposible.
Luke me miró y me tiró suavemente de la cabeza para que la dejara en su hombro.
—Ay Emma...debes de confiar más en ti—suspiró dramáticamente, a lo que yo sonreí—Mira, hagamos esto: tú vienes a entrenar y te la pasas bien para olvidarte de toooooodo lo que te estresa. ¿Que me dices?
Suena a un buen plan.
¡Acepta!
—Está bien. Pero si no apruebo, es culpa tuya ¿eh?
—Dicho y echo, señorita espía.
Yo negué con la cabeza, sonriente, mientras notaba su mirada encima de mi.
—Emma—me llamó.
—Dime. ¿Pasa algo?
—Recuerdas que hace unos días fue tu cumpleaños, ¿no?
—Sí. Tan tonta no soy.
—Y también recordarás que en los cumpleaños se dan regalos—siguió hablando.
¿A donde quiere llegar con esto?
Buena pregunta.
—Sí, eso también.
—Y también recordarás que yo no te di nada, ¿verdad?
—¿A donde quieres llegar con esto?—me separé de su hombro para mirarlo.
Luke me dedicó una sonrisa y sacó una cajita azul del bolsillo de su sudadera. Yo lo miré con una sonrisa cuando me la tendió.
—¿Es para mi?—pregunté, aunque ya sabía la respuesta.
—Felicidades atrasadas, Emma.
Me mordí el labio para no sonreír más—si es que se podía—y cogí el pequeño regalo. Lo abrí y me encontré con un brazalete súper bonito. Tenía una E en medio, y a los lados unos abalorios de mis cosas favoritas: uno de un corazón con las iniciales GR—gimnasia rítmica—; otro con una pelota de volley; otro con un cuaderno y el último con una carita sonriente. Alzé la mirada para ver a Luke, que intentaba esconder su cara de nerviosismo.
—Luke no tenías porque...
—Es mi regalo. O lo aceptas o lo aceptas. Una de dos—sonrió—. Y bueno... ¿que te parece?
—Es...precioso. Muchas gracias Luke. ¿Puedo darte un abrazo?
Luke se levantó a modo de respuesta estirando los brazos y yo me lancé—literalmente—a él. Tuvo que dar un paso atrás antes de devolverme el abrazo y no pude contener mis ganas de sonreír. Inhalé el olor de su sudadera. Olía a él. Traté de que se me quedara el olor a caramelo en mi mente. Joder, que bien olía.
Como huele Luke: añadido a la lista de debilidades.
—No tienes que preguntarme si me puedes dar un abrazo. Lo sabes, ¿no?
—Es que...prefiero preguntar primero.
Por si me rechazas, finalicé en mi mente. Nos quedamos así un ratito: él acariciándome el pelo y yo rodeándolo con mis brazos por la cintura. Hasta que rompió el silencio:
—¿No vas a ponerte mi regalo?—preguntó divertido.
—Mmm...no—Luke frunció el ceño y yo sonreí—. Es broma, ayúdame anda.
Le di la pulsera y él me la puso con mucho cuidado. Lo miré de reojo y mis mejillas cogieron un poco de color. Joder, ¿porque tenía que ser tan perfecto? ¿No podía enamorarme de alguien no tan perfecto, increíble y guapo?
No.
Pues no. Cupido no me ayuda.
[* * *]
Llegué al pabellón. Allí tuve que correr hasta la pista porque el autobús no pasó a su hora y bueno... aquí estaba, corriendo como una loca.
Odiaba llegar tarde. Bueno...es que me gusta la puntualidad ¿vale? Y además, faltaban 5 minutos para que empezara la clase. Y por eso mismo llegaba tarde jeje.
Por suerte, llegué cuando iban a empezar a correr, así que me quité la mochila y la chaqueta rápidamente. Estábamos en enero y seguía haciendo frío, pero corriendo se me quitaba y se reemplazaba por el calor. Una vez terminamos de correr, me fui con Annie y Kyra a calentar a una esquina.
—¿Quien te ha dado ese brazalete?—preguntó Kyra y yo me sonrojé—. Deberías quitártelo, te vas a hacer daño en la muñeca.
Bueno...en eso tiene razón.
—Sí, debería quitármelo.
—No has respondido su pregunta— dijo Annie.
Puse los ojos en blanco.
—Pesada.
—Misteriosa.
—Imbécil.
—Tonta.
—¡Vasta ya!—intervino Kyra—. Dejad de pelear. Emma, solo te hecho una pregunta fácil de responder. Ni que te la hubiera dado Luke.
El color de mi cara bastó como respuesta para Annie, quien ya se levantaba con un dedo acusador señalándome.
—No puede ser, ¡ha sido él!
—¿Y porque te sorprende tanto? Era un poco obvio, ¿no?—traté de calmarla.
—Tengo que hablar con Luke. Ya.
—¡Annie si se te ocurra...!
Pero ya era demasiado tarde. Annie se acercaba al grupo de chicos que estaba de pie charlando entre sí. Observé cómo ella tiraba del brazo de Luke alejándose de ellos. Vi como él asentía y hablaba un par de veces hasta que mi amiga volvió aquí, y él volvía con Jeremy, Matt y Jack.
—¿Que le has dicho?—pregunté.
—Nada. Quería dejarle un par de cosas claras.
Puse los ojos en blanco, otra vez, y fui a por una pelota de la canasta del almacén. Allí me encontré a Jeremy.
¿Lo molestamos?
Eso ni se pregunta, conciencia.
—Jeremitooooooooooooo.
—Oh no...
—Holaaa—saludé alcanzándolo—. ¿Que tal?
—¿Que quieres?—preguntó directamente.
—Vaya que borde...
—¿Quieres algo?
—Sí.
—¿Que es?—preguntó impaciente.
Yo sonreí y cogí una pelota. Se la pasé y cogí una para mí. Me la puse entre la cintura y mi brazo y lo miré con una ceja enarcada.
—¿Que se supone que sois Naya y tú?
Jeremy se enrojeció y yo sonreí aún más.
—Nada—mintió.
—Ya.
—Sí, solo amigos.
—Claro.
—Ajá.
—Mhm.
Lo miré con mi cara de Sherlock Holmes y bufó.
—Está bieeeeeeen. Te lo contaré, pero no le digas nada a Naya que me mata.
—Sabes que no haría eso.
—Era ironía.
—Bueno da igual...cuéntamelo todo.
—A ver...por donde empiezo...vale. Todo empezó el día de la fiesta. Cosa que Naya ya te habrá contado de por sí. Después fui yo el valiente de pedirle su número y ella me lo dio encantada—sonrió—. Recuerdo su sonrisa. Joder, es guapísima y perfecta y...
—Céntrate—lo regañé. ¡No me podía dejar el chisme a medias!
—Perdón, jeje. Luego, esa misma noche, ella me escribió y nos quedamos hablando hasta tarde. Así unos días...hasta que empecé a llamarla. Y así otros días hasta que empezamos a quedar. Y así unos días hasta que yo la invité a cenar una vez. En esos momentos no estaba muy seguro de si iba a aceptar, pero cuando lo hizo...Joder, me enamoré aún más. Ah, por cierto, ahora somos más que amigos.
—¿Mejores amigos?—bromeé. Jeremy se mordió el labio intentando no sonreír—. Es broma, me alegro por vosotros.
—Te lo juro que, si me deja algún día, me da una depresión gigante.
—Naya no es así, hazme caso. Haber...puede que en alguna fiesta flirtee con otros chicos pero...
—¿Qué?
—Nada—dije rápidamente—. Vamos que nos regañan.
—Serás...
Sonreí inocentemente y cogí más pelotas para llevar, al igual que Jeremy. Volvimos a la pista y de camino Luke me dedicó una sonrisa, la que yo devolví. Le pasé una pelota y otras dos a Annie y Kyra. El entrenador nos dijo que practiquemos un poco en la pared y luego haríamos un partido.
Apartamos los tapices de gimnasia—que estaban enrollados en el tubo raro ese—y los dejamos a un lado para empezar a trabajar. Pasó media hora cuando Mario nos dijo que le ayudáramos a poner la red para el partido. Al final, fuimos Luke y yo.
—¿Te has quitado el brazalete?—preguntó con una mueca triste.
—Sí, tristemente. No quería romperme la muñeca con la pelota.
—Ah, cierto. Pero te la volverás a poner no?—quiso aclarar mientras sacaba los soportes.
—Estoy deseando ponérmela de nuevo—dije a sus espaldas porque estaba buscando la red.
Me puse de puntillas. Donde la guardaban esta una estantería bastante alta a la que tenía que alcanzar saltando. No era tan baja, de hecho, era alta, pero para algunas cosas me sentía como un pitufo. Tras dar unos saltos, me rendí y busqué una silla, pero no la encontré. En su lugar encontré un pequeño taburete al que no me dudé en subir. Ahora sí que alcancé la red y bajé del objeto de un salto.
—¿Problemas con tu altura espía?
—Hey, que soy alta, solo es que ponen las cosas muy altas para mí.
—No van a hacer todo a tu medida—rió.
—Ojalá.
Salimos del almacén y Luke montó todo con Jack y Matt. Jeremy se limitaba a verlos. Sí, era un vago. Yo, en cambio, volví con Annie y Kyra y fuimos al baño a rellenar las botellas. Mientras Annie entraba a hacer pis, me apoyé en el lavabo y la otra hizo lo mismo en la pared.
—¿Al final como te fue con el médico ese?—pregunté.
—Bueno...la cena estuvo bien. Me estuvo hablando de sus trofeos, medallas...y sobre todo de su carrera como médico—rodó los ojos con la palabra <médico>.
—¿Pero no era pediatra o algo así?—preguntó Annie que acababa de salir.
—Es cardiólogo.
Puse una mueca al oír el nombre <cardiólogo>.
—Bueno...¿estaba cañón?—preguntó Annie con curiosidad.
—Bueno, para ser médico no está mal.
Alcé las cejas inconscientemente. Con Kyra había un 1% de que te dijera algo bueno de alguien que traían sus padres.
—Pero es que se empeñan en traerme un médico. No podían traerme un jugador de basket o de volley, no. Tenían que traerme médicos y gente nerd y fea que usa gafas. Puaj, los odio.
Reí y salimos del baño. Ya habían montado la red y estaba todo listo. Mario hizo los equipos: Yo iba con Jeremy y Matt. Annie y Kyra con Luke. Esto iba a ser interesante, nunca habíamos jugado en estos equipos.
Al final, cansada, quedé derrotada en dos sentidos: mental y físicamente. El equipo de Kyra nos había ganado por un punto. Te prometo que ganábamos si hubiera estado más activa, pero no podía más. Y lo peor es que tenía que aguantar a Luke todo el viaje.
Me despedí del equipo cuando Luke estuvo listo y andamos hasta su coche. Hacía frío así que me puse la chaqueta. Llegamos rápido al coche y Luke puso la calefacción. Dejé de abrazarme a mi misma cuando sentí que el calor volvía a mi cuerpo. Pero...algo iba mal. Luke estaba muy callado, y yo sabía porque.
—Puedes hablar del partido si quieres—dije poniendo los ojos en blanco.
Él sonrió y me miró.
—Bueno...si tú lo dices.
Y empezó a hablar de salvadas, de tácticas, etc. Yo solo podía escucharlo y mirarlo con una sonrisa. Joder, estaba completamente enamorada de su cara, su forma de hablar, sus gestos, sus labios, sus ojos, su sonrisa...de todo. Cuando me di cuenta, ya habíamos llegado a mi casa.
Nooooooooooooo.
Pensamos igual conciencia.
Claro. Soy tu conciencia.
Ah claro... eso tiene sentido jaja.
—Bueno, gracias de nuevo Luke.
—De nada de nuevo, espía.
Me acerqué a él y le di un beso en la mejilla. Enrojecí al instante pero me apresuré a salir del coche.
¡Eso es mi ciela! ¡Di que sí! ¡Como mola esa Emma se merece una ola!
Oooooooooooooleeeeeeeee.
Otra ola.
Oooooooooooooleeeeeeeeee.
Pues al final, espero que se dé cuenta de la indirecta del beso y así mi vida planeada será perfecta. Con Luke, el amor de mi vida.
Hoooooolaaaaaaaaa. ¿Que tal?
He terminado este capítulo en poco tiempo para ser yo. El jueves tengo examen de biología y no lo supe hasta hoy Jajajajja.
Espero que nos haya gustado el capítulo y voy a darme prisa para subir el siguiente.
Besooooooooos💋💋💋
✨🫶🏻🎧🤍