━━━━━ 𝐌𝐀𝐃𝐑𝐈𝐃𝐈𝐒𝐓𝐀;
❛NO ME TOQUES.❜
𝐃𝐄𝐃𝐈𝐂𝐀𝐃𝐎 𝐀
-jerseytrioo
PABLO GAVI QUERÍA SALIR CORRIENDO ANTE LA MIRADA FIJA QUE PEDRI TENÍA SOBRE SÍ; ya sabía que le iba a hacer preguntas con respecto a Fiorella, eso estaba más que claro aunque en el fondo se esperaba que Pedri le hiciera una pregunta con respecto al club u otra cosa, sabía perfectamente por donde iba el tema, así que intentó evadir el mismo, riéndose con nervios y añadiendo:
—Pero si ya me hiciste una.
Los dos rieron, y Pedri volvió a ponerse serio causando que Pablo dejara de reírse también.
—Te estoy hablando en serio.
—Yo a ti también.
—Pablo.
—Pedri.
Estaba tan nervioso que no podía ni responder, y no pudo evitar que se le saliera una risita, Pedri seguía serio y le tocó controlar el nerviosismo que tenía.
—¿Te gusta Fiorella?
Lo directo que había sido con la pregunta lo había dejado completamente paralizado, comenzó a carraspear mientras que soltaba una carcajada y lo veía.
—¿Qué?
—Lo que escuchaste. ¿Te gusta Fiorella?
¿Gustarle Fiorella?
Por favor.
Le encantaba.
—¿Qué me estás preguntando, Pedri? ¿Es en serio? —volvió a reírse mientras que se cruzaba de brazos y lo veía con una ceja alzada, Pedri asintió.
—Obviamente que es en serio que te lo estoy preguntando.
—No, no me gusta Fiorella. ¿Por qué la pregunta? —Pedri pasó ambas manos por su cabello, encogiéndose de hombros mientras que aclaraba su garganta.
—Curiosidad nada más —se encogió de hombros—. Es que como se supone que ustedes dos se llevaban mal pero de pronto los he visto risa y risa, y a unas cercanías demasiado sospechosas.
—¿Cercanías sospechosas? —Pablo se rió y Pedri asintió a su comentario.
—Sí, ya sabes. Si se supone que yo me llevo mal con alguien ¿voy a discutir a centímetros de su cara? Eso no tiene ningún tipo de sentido.
El sevillano no pudo evitar reírse de vuelta, aunque Pedri estaba serio tenía que disimular en lo absoluto que su mejor amiga le gustaba, pero él también quería saber si Pedri sentía algo por la castaña o eran algo más a escondidas, así que se tomó el atrevimiento de cuestionarle sus argumentos.
—¿Centímetros de la cara de Fiorella? Pedri por favor, estás actuando como un novio celoso. ¿Ustedes dos están saliendo? Porque si eso es lo que pasa...
El canario alzó sus cejas, relajando sus facciones y negando.
—¡No, no, no! Por favor Pablo, sabes que Fiore es mi mejor amiga y nada más —él asintió— sólo te preguntaba porque se me hacía raro que ustedes dos se la pasen tan cerca todo el tiempo, y me daba curiosidad saber si te gustaba nada más.
—¿Y habría algún problema si me gusta? Digo —Pedri lo miró sorprendido, y Pablo se quería cachetear, dándose cuenta de que seguía metiendo la pata. ¡Pero es que le molestaba la pregunta de Pedri! ¿¡Cuál era su problema con que otro chico se le acercara si él y ella no eran nada!?— ¡No es que me guste! —aclaró— por favor ¿Gustarme a mí esa madridista odiosa? —sí, le encantaba— está claro que no, solo lo decía porque pienso que te pones muy a la defensiva con los chicos que se le acercan a Fiorella, entonces la pregunta te la debo hacer yo a ti. ¿Te gusta Fiorella? —le repitió la pregunta, Pedri se rió.
—Te estoy diciendo que no, de verdad. La razón por la que siempre la alejo de los chicos es porque los que la siguen son unos idiotas —le mencionó— pero eso y nada más, entonces ¿no te gusta Fiorella?
—Pedri —puso una mano en el hombro de él—. Te dije que no me gusta ¿para qué me vuelves a preguntar?
—Para saber si admites que te gusta ya sabes... pensé que estabas interesado en ella o algo así...
—Que no, que no.
—Vale lo entiendo, entonces ¿las cercanías...?
—Discusiones y nada más.
Pedri iba a decir algo pero Fiorella bajó las escaleras con sus cosas en mano, los dos se giraron a verla con una sonrisa y ella los miró sin entender. ¿Y ahora qué les pasaba a esos dos?
—¿Quieres ayuda con eso? —le preguntaron los dos al mismo tiempo, ella negó.
—No, quiero que enciendas el auto y nos vayamos al aeropuerto. ¡Mira la hora que es Pedri! —se quejó, mostrándole el teléfono— ¡No quiero perder el vuelo!
Bajó las escaleras apurada mientras que salía al garage siendo perseguida por los dos centrocampistas.
—Pero calmate un toque Fiore, todavía faltan un montón de horas para que el juego comience...
—Es que está apurada para ir a ver al Madrid perder —Pablo le dijo soltando una risita, Fiorella lo miró de manera fulminante.
—Tengo que estar en el Bernabéu antes, Isabella y yo tenemos tarea para la clase, y decidimos grabar el partido de hoy.
—¿Un vídeo? —Pablo preguntó, mientras que Fiorella abría las puertas de su auto y metía sus bolsos, asintiendo a las preguntas del sevillano— genial ¿y qué va a llevar de título? "El Madrid siendo goleado por el mejor tridente de París."
Se recargó del auto mientras que ladeaba su cabeza de lado y la veía con una sonrisa divertida, Pedri se palmeó la frente riéndose, Fiorella se giró a verlo.
—¿Goleados? ¿Cuando la conversación cambio a Bayern contra el Barcelona, ocho a dos?
—¡Oh vamos Fiorella, esa todavía es una herida abierta!
Se quejó mientras que ella soltaba una risita y se encogía de hombros.
—Nadie te manda a abrir la bocota. ¿Nos vamos o qué?
Miro a Pedri que estaba mirando algo en su celular, el pelinegro asintió, mientras que la tomaba de la mano y la apegaba a él dándole un abrazo, Pablo tensó su mandíbula al ver como quedaban bastante cerca y Pedri besaba el puente de la nariz de Fiorella, que por más que aparentaba no estar nerviosa, en realidad sí lo estaba.
El sevillano lo miró con indignación. ¿Lo estaba haciendo al propósito?
—No te molestes, mi niña —quitó un mechón que caía por su cara y lo puso detrás de su oreja— seguro que hacen un buen partido hoy, no quiero que llegues molesta al campo.
Ah, lo estaba dejando como el que la había hecho molestar. ¡Que oportuno Pedri González!
—No me voy a molestar solo por las palabras de alguien que juega Europa —ella dijo, Pablo ya no se quería reír, alzó una ceja al ver como Fiorella lo veía con una ceja alzada.
—Te molesta que alguien de Europa diga la verdad sobre tú equipito ¿no? —estaba serio, su ceño estaba fruncido, Fiorella pudo notar el cambio de su actitud y no pudo descifrarlo— ¿Nos vamos o qué?
Pedri asintió, mientras que tomaba las llaves de la mano de Fiorella y se subían al auto, el sevillano siquiera le dirigió la mirada cuando se subió al puesto del copiloto, y extrañamente Fiorella se sintió avergonzada por el comentario mencionado, sabía que a Pablo le dolía estar en Europa League y...
¿¡Pero qué le estaba pasando?! ¡A él no le dolía burlarse de su equipo!
Pero de igual manera...
Sabía que Pablo se había molestado, las últimas semanas solía tener esa sonrisa juguetona en sus labios cuando los dos discutían en broma, y justamente en esos momentos tenía la misma cara de odio que los dos solían dedicarse mutuamente cuando se habían conocido. Mordió su labio inferior con vergüenza, Pablo bajo la ventana.
—¿Te subes o estás pensando en quedarte para ver a tu equipo perder desde la casa?
Ella lo miró, ni un rastro de esa sonrisa divertida que el castaño solía tener, y por más que quisiese gritarle en la cara que era un imbécil, no supo porqué en ese momento no quiso ofenderlo.
Y prefirió ignorarlo, abriendo la puerta del atrás y reaccionando al subir.
—¡Ah, que bello! Es mi auto y yo voy atrás, tan caballeros los culés —sonrió irónica, mientras que los dos soltaban una risita y la veían por el retrovisor.
—Ya lo sabemos, gracias.
—Idiotas.
Los tres soltaron una risita
💌
El vuelo a Madrid fue bastante divertido, Pablo y Pedri estaban casi de incógnito, ya que Pablo estaba empezando a ser bastante reconocido y Pedri ya lo era, lo único que querían era evitar la prensa y la verdad que lo habían logrado, apenas habían llegado a Madrid se subieron al taxi que los llevaría hasta donde iban a hospedarse que estaba bastante cerca del Bernabéu, cosa que lo hacía todo más fácil. Isabella venía hablando con Fiorella mientras que los chicos iban hablando entre ellos sobre fútbol.
Al llegar al hotel Fiorella dió los nombres en recepción y Pedri junto con Pablo entraron después, los cuatro se subieron al elevador mientras que Isabella que había tomado las llaves le daba las de su habitación a Pablo y a Pedri.
—Ustedes dos comparten, la chica de la recepción dijo que no las pierdan —le tendió la misma a Pedri que sonrió.
—¿Y de casualidad no dijo su nombre? Estaba bastante guapa, ¿no crees? —codeó a Pablo.
Fiorella sintió una incomodidad tremenda al escuchar a su mejor amigo decir eso, y aunque no decía nada su rostro había hablado por ella, Isabella lo noto y lo miró con una ceja alzada.
—Si quieres saberlo, averigualo por tí mismo.
—Por supuesto que lo haré. ¿Tú no la viste?
Pablo miró a Fiorella que bajó la mirada, y salió tan rápida como un cohete apenas el elevador les dejó en el piso correspondiente, y se sintió mal por ella, porque era más que obvio que gustaba de Pedri. No entendía como es que el canario podía ser tan idiota y no darse cuenta de lo que Fiorella sentía por él.
Y en parte a veces le caía mal, por la suerte que tenía, de que una chica tan inteligente, bonita, amable... y con tremendas cualidades lindas, estuviese enamorada del canario, y el ni en cuenta.
—No es como que si me importe tampoco —le respondió divertido, mientras que los dos se acercaban a su habitación que casualmente estaba enfrente de la de las chicas.
—Lo entiendo ¿ya tienes a alguien más en la mira?
Isabella abrió la puerta de la habitación y la mirada de Pablo se fue hacia Fiorella entrando de mala gana a la misma, soltó un resoplido.
—Probablemente siquiera le interese —los dos entraron al mismo tiempo mientras que Pablo se lanzaba en la cama y conectaba su celular al enchufe, Pedri dejó su bolso en el sofá que estaba ahí mientras que lo veía sin entender.
—O sea que hay alguien —subió sus cejas de arriba a abajo, sacando cuentas no podía ser Fiorella porque ya le había dicho hacía horas que no le gustaba.
Y Pedri definitivamente era lento para captar indirectas.
—Bueno es que... no lo sé, no quiero hablar de eso ¿vale?
—Está bien, si no quieres hablarlo lo respeto. ¿Jugamos al fifa o quieres acompañarme a pedirle el Instagram a la chica de abajo?
—Ah es que ¿era en serio?
—Andando.
Le dio un golpe en el hombro, mientras que Pablo se palmeaba la frente y se ponía de pie, abriendo la puerta, Fiorella venía saliendo con un suéter en la mano y una cara de pocos amigos, Pedri le sonrió.
—¿Qué pasó mi niña?
—Tú sudadera, ya no la voy a utilizar, puedes guardarla —se la pegó en el pecho, mientras que se daba la vuelta y Pedri la tomaba de la mano, deteniendo su paso y viéndola.
—Pero me habías dicho que—
—Ya sé que te había dicho que me la quería poner, pero ya no la quiero Pedri. Usaré la dorsal de Lukita y si hace frío pues me aguanto, no quiero tapar el número de tú padre en el campo.
Pablo se aguantó las ganas de decir un "uhhhh" porque definitivamente eso había dolido, y se le escapó una risa, Pedri se giró a verlo, y empezó a fingir que estaba tosiendo, él volvió a mirar a su mejor amiga.
—Fiore ¿me puedes explicar qué rayos te pasa?
Y Fiorella sabía que probablemente estaba actuando como una tonta celosa por lo que recién había dicho su mejor amigo ¡Pero es que no podía evitarlo, y le molestaba! Ah pero no fuese ella que hablaba de un chico porque él si le hacía interrogatorios.
—Nada, que estoy apurada. Eso me pasa. ¿A donde iban ustedes por cierto?
—Íbamos a recepción...
—No te aguantaste ni un segundo en ir a ver a la chica de ahí ¿no? —tensó la mandíbula, mientras que Pedri se reía y la acercaba a él— suéltame Pedro.
—¿A caso... estás celosa?
No idiota, está encantada con tus actitudes. Pablo pensó, mientras que ahora quién dejaba de reírse y se ponía completamente serio era él, Fiorella se rió en la cara del canario.
—¿Celosa? ¿Yo? Ubicate y suéltame te lo estoy pidiendo por las buenas, tengo cosas que hacer.
—Si me das un beso me lo pienso —se señaló la mejilla, Fiorella se derritió de amor por dentro, es que ¿cómo iba a superarlo si él se comportaba tan así...?
Y a pesar de que estaba molesta, al escuchar las palabras del canario relajó sus facciones, cambiando la cara y aguantandose la risa, Pablo carraspeó.
—Bueno ¿vamos a la recepción o qué hijo? —el sevillano quiso saber y Fiorella aprovecho a soltarse de su agarre.
—No, mejor pídeselo a la chica a la que quieres pedirle el Instagram.
—También ¿por qué no?
Ella abrió la boca con indignación, Pedri soltó una carcajada.
—¡No es cierto, mi niña!
—No me toques, Pedro.
Puso una mano en su cara alejándolo cuando le quiso besar la mejilla, el canario hizo un puchero.
—Oh vamos, era broma ¿te vas a molestar?
Fiorella no le respondió, entró de nuevo a la habitación mientras que Pedri soltaba un resoplido y despeinaba su cabello, Pablo estaba recargado de la puerta aguantandose la risa.
—En el curso de cómo saber tratar con mujeres déjame decirte, estás reprobado.
—Ah ¿tú muy experto o qué?
—Más que tú sí —se rió, Pedri rodó los ojos.
—"Más que tú sí" —parafraseó en modo de burla haciéndolo carcajearse— ¿Vamos a la recepción o no?
—Baja tú primero y yo te alcanzo, voy al baño.
Pedri asintió. Apenas se desapareció del campo visual del castaño, Pablo volvió a tocar la puerta y Fiorella volvió a abrir, tenía la vista clavada en su teléfono.
—¿Qué quieres?
—Uy ¿por qué tan odiosa?
Subió la mirada para ver a Pablo, alzó una ceja.
—¿También vienes a molestar como Pedri?
—Nah —Pablo negó— ya te dije que no te quiero molestar más Fiorella —ella frunció el ceño— sólo quería decirte que —se acercó más a ella, la castaña subió la mirada para verlo— si de sudaderas se trata, yo estoy a la orden para prestarte las que quieras —pasó a susurrar a su oído— estoy seguro que las mías te quedarían increíbles, así que cuándo gustes, bonita.
Besó su mejilla sonoramente, para pasar a mirarla fijamente y le guiñó un ojo, mientras que empezaba a caminar para irse hasta el elevador y al detenerse en el mismo le volvió a sonreír, dejando a Fiorella ahí parada como una idiota, pesando en serio...
¿¡Qué rayos con Pablo Gavi?!
━━━━━ ORA SI SE VIENE LO CHIDOOOOOOOOOOO
JKJJAJAJAJAJAJAJAAJAJAJAJJAAJA nananana espero que les guste el cap, voten y comenten no les de pena y si quieren un cap dedicado no duden en pedirlo!
💌
—girlofmyidols.