New Orleans
—¡Demonios Kol! Eso no es vida, no puedes seguir reteniéndola acá—rebekah me observó desde mi asiento y bajo el rostro ignorando la pelea.
—¿Y que esperas que haga qué la deje salir afuera ¡En dónde Miles de enemigos la estarán esperando para dañarla! ¿¡Eso deseas Rebekah!? —hizo presión en el vaso de whisky qué sostenía.
Davina Claire se acerca a mi silla y me abraza por detrás mientras ambos hermanos de mi progenitor pelean por el mejor futuro qué merezco. ¿Para que hacen eso?
—¡Enemigos qué tú y Nick hicieron—le recalca.—¡Ella merece una vida normal!
—¡Ella no es normal!, ¡Es una Mikaelson!
La rubia lo empuja y lo estampa contra la pared, este enfurece y la toma de el cabello arrastrándola en el suelo, y así son los fines de semana. Nadie se mete en pelea, Davina se encuentra abrazándome mientras ambos Mikaelson pelean por quienes tienen más derecho para definir mi futuro.
—Solo hay una solución, a esta situación y si quieres qué entre a la universidad hope..—me observa—Deberás cambiarte el apellido.
Rebekah me observa y todos lo hacen.
—Esta bien —acepto.