Los exámenes chūnin son probablemente las pruebas más difíciles que enfrentarían los ninjas en ascenso. Se disputan en una sola aldea anfitriona y tienen participantes de todos los demás países elementales. Decenas de ninjas de todo tipo compitiendo en las mismas pruebas para demostrar quien el merecedor del título de chūnin y de paso deshacerse de los que no tienen voluntad suficiente.
El mismo infierno en la tierra.
Las instrucciones habían sido claras; todos los participantes de los exámenes chūnin tenían que reportarse en la academia ninjas de konoha para tomar la prueba escrita.
Sasuke había llegado al lugar de encuentro con su equipo un poco más tarde de lo usual, aunque aún así era el primero en aparecer. Estaba recargado sobre un árbol del patio de la academia que tenía un curioso columpio. Esperaba a que su equipo se reuniera pronto, aunque lo dudaba, después de la pelea con Naruko el día anterior, ni el ni nadie había podido hablar con ella, la chica simplemente había desaparecido.
Temía lo peor. Tal vez Naruko había decidió no presentarse a los exámenes o había salido a caminar a alguna parte y se había perdido o...
Y sus pensamientos pesimistas fueron cortados por el sonido de pasos acercándose. Sasuke entonces presto su atención a la persona que se acercaba, notando de inmediato que se trataba de la chica que había atormentado sus pensamientos durante un tiempo.
Naruko lucia un poco diferente, con sus dos coletas habituales transformadas en una sola, como el peinado de Ino pero con un flequillo enmarcando el rostro bigotudo de la joven y un curioso mechón rojo en el lado derecho del flequillo abierto.
Naruko simplemente llegó y se sentó en el columpio, sin decir nada. Sasuke se sintió bastante incómodo, no sabía que decir o hacer, o siquiera si debía decir algo.
El ambiente se volvía más incómodo por cada segundo que pasaba. Nadie quería enfrentar a nadie, no podían.
Finalmente alguien decidió abrir su boca; Sasuke se estaba cansando de eso. El sabía que Naruko podía ser inmadura a veces, pero eso rebasaba incluso sus límites.
-¿No piensas decir nada?- Cuestionó con voz monótona.
-¿Qué quieres que diga? ¿Qué actue cómo una idiota con unos niños por un arrebato de irá?
Sasuke trago sus palabras. No estaba esperando para nada la repentina cuchilla de palabras que le habían lanzado.
-Si esperas que me disculpe contigo... No lo haré.- Informó la rubia. -Pero estamos por iniciar los exámenes chunnin, así que será mejor esperar hasta después para hablarlo con más calma.
Sasuke de alguna manera se sintió ofendido por eso, si bien no esperaba una disculpa, tampoco quería escuchar a Naruko siendo tan testaruda.
-No hace falta que te disculpes, de todas maneras no esperaba una disculpa.- Sasuke trato se no sonar grosero, pero en veneno en sus palabras se podía detectar a una milla de distancia.
Para suerte de ambos, Sakura llegó trotando en ese instante. La pelirrosa llegó tarareando una canción, emocionada por lo que podía pasar en los exámenes. A su llegada, noto de inmediato el ambiente tenso de lugar, lo que involuntariamente llamo la atención de sus compañeros.
-Que bien que llegas... ya era hora de que entraramos.- Comentó Sasuke, dando un paso al frente y comenzando a caminar hacia dentro del edificio.
Sakura siguió el ejemplo de su compañero y empezó a entrar en el edificio ella también. Naruko fue la única que se quedó atrás, estaba sumida en sus pensamientos, molesta por alguna razón que ella tampoco entendía.
Esperaba que de alguna manera, fuera Sasuke quien se disculpara con ella, por eso había sacado el comentario de que no se disculparia. Quería que Sasuke tomara la delantera y se disculpara, en cambio, Sasuke había demostrado que lo importaba en lo absoluto y eso la había hecho enojar.
Se mordió el labio. Se sentía culpable. Una parte de sí sabía que ella había tenido parte de la culpa, pero su yo testaruda no le dejaría disculparse a menos que alguien lo hiciera primero.
Con un suspiro de resi
gnación, Naruko se levantó del columpio y empezó a entrar en la academia. Debía llegar rápido con sus compañeros o los perdería.
Caminando por los pasillos de la academia, todo se sentía extraño, no solo por la nostalgia que estos les causaban si no porque se sentía como si hubieran estado andando en círculos. Se suponía que estaban llegando a la sala de la prueba.
Sakura inspeccionó el papel que kakashi les había dado, en el especificaba que la prueba se realizaría en el segundo piso. Pero todo se sentía tan extraño, incluso Naruko arrugó la nariz por el disgusto y la confusión. El único que no se sentía incómodo o confundido fue Sasuke, el Uchiha había usado sus ojos discretamente y había descubierto la trampa.
Sasuke comenzó a caminar más lentamente, les hizo señas a sus compañeras y luego las llevó a un lugar apartado donde sería difícil para los demás escucharlos.
-¿Qué sucede?- Cuestiono Sakura ante la iniciativa de Sasuke.
-Todo el lugar... Han notado que se siente extraño, ¿No?- Pregunto Sasuke mientras veía discretamente a los lados por si alguien los espiaba.
-Más raro... Se supone que estamos en el segundo piso, pero las salas y el camino es igual al primero.- Comento Naruko. Hecho una discreta mirada a una ventana solo para fruncir el ceño cuando esta mostró un paisaje que solo se vería desde el primer piso.
-Pues bien, esto es genjutsu.- Sasuke hablo, haciendo visible su sharingan para sus compañeras, así demostrando que decía la verdad. -Estamos en el segundo piso, pero lo han metido bajo un genjutsy para que se vea como el primero.
Ambas chicas se sorprendieron. Si bien ya sospechaban que algo raro pasaba, no esperaban que fuera un genjutsu, tal vez algo más normal, como equivocarse de piso o de edificio, pero no pensaron en genjutsu.
-Tiene sentido, ya están empezando a eliminar a los más débiles.- Naruko murmuró.
Ya con las dudas aclaradas, Sasuke siguió guiando al equipo. Mientras pasaban por los pasillos, vieron gennin de otras aldeas enojados o a punto de entrar en pánico por no encontrar la sala de la prueba.
El equipo siete llegó hasta la puerta donde estarían "Las escaleras al segundo piso" pero ya ellos sabían que en realidad se trataba de la sala de la prueba. En la puerta había dos chunnin custodiando que nadie entrará, no escuchaban los gritos de los gennin que exigían entrar, solo se quedaban estoicos y anunciando en voz alta que ese no era la puerta correcta.
Naruko reconoció una cara familiar, había un chico de corte de cuenco exigiendo con fuerte voz a los guardias que lo dejaran entrar a el y a su equipo a la prueba, "¡La primavera de la juventud arde plena en mis venas! Necesito entrar ahí y probar de lo que soy capaz." Exclamaba el muchacho. Los pobres guardias temblaban por la conmoción.
Naruko se acercó al joven y posó una mano sobre su hombro, el chico corte de cuenco se giro con el ceño fruncido pero al ver a la persona de atrás, cambió a una sonrisa radiante.
-¡Ah, Naru-chan! Que agradable sorpresa el verte por aquí.- Comento Lee con voz burbujeante. -Eres una novata, ¿Pero aún así participaras en estos exámenes? ¡De verdad que las llamas de la juventud arden en tus venas!
-También es bueno verte aquí, Lee.- Respondió Naruko, con un tono más calmado que el de Lee.
-¿Quién es el, Naruko?- Pregunto Sakura mientras se acercaba por detrás de la rubia.
Lee no pudo evitar que sus ojos se iluminarán por ver a Sakura. El chico mostró una enorme sonrisa que casi deja ciegas a ambas chicas debido al brillo.
-¡Sakura-chan!- Exclamó Lee con entusiasmo. -Oh, Sakura-han, espere tanto para poder tenerte cara a cara y decirte esto.- Explicó antes de ponerse sobre una pierna y agachar la cabeza al mismo tiempo que extendía una mano hacia la pelirrosa. -Sakura-chan, por favor, ¡Se mi novia!
Sakura se quedó paralizada, al igual que Naruko. Si bien esta última ya sabía del gran enamorado de Lee hacia Sakura, no creyó que su amigo fuera tan intenso. Por otro lado, Sakura estaba horrorizada, no solo porque este tipo extraño le había pedido ser su novia, si no también porque al parecer conocía a Naruko y parecían llevarse bien.
-¡Hey! Baja la intensidad.- Alguien más se unió a la junta, era Sasuke.
Lee levantó la mirada, al hacerlo noto al novato de año, Sasuke Uchiha, quien le dirigía una mirada molesta.
Rock Lee nunca dejaría pasar por alto el momento de tener un buen desafío y por supuesto que esta no sería la excepción.
Lee se levantó del piso y se puso delante de Sasuke, casi chocando contra el. El Uchiha se quedó estático y serio, como todo buen Uchiha, no se dejaría intimidar por el caótico chico.
-Sasuke Uchiha el novato del año.
-Si, lo soy, ¿Y qué?- Pregunto con un resoplido.
-Yo, Rock Lee, te reto a ti, Sasuke Uchiha, a una batalla por el amor de Sakura-chan.- Lee declaró en voz alta.
Sakura y Naruko casi se ahogan y Sasuke deshizo su postura, nadie esperaba esa declaración.
-Wow, wow, alto ahí, chico juvenil.- Comento Naruko. -¿Porqué quieres pelear con Sasuke?
-Ya lo había mencionado, ¡Quiero luchar con Sasuke por el amor de Sakura!
-¿Porqué con Sasuke?
-Es obvio. Sasuke es el soltero más codiciado entre las jóvenes, se muy bien que Sakura esta enamorada de él y también se muy bien que no tengo oportunidad de competir con Sasuke en este aspecto...- La voz de Lee se volvió un poco triste al último, pero rápidamente recobro fuerzas. -¡Pero demostraré que soy más fuerte! ¡Yo demostraré que soy capaz de proteger a Sakura-chan en todo momento!
Lee alzó su puño al aire. Mientras, Sasuke tenía los ojos en blanco. No tenía tiempo para desafíos estúpidos, además, estaba bastante seguro de que el tipo de verde no tendría ningún oportunidad contra el.
-Escucha, Lee, por mucha que te quiera ver pateando el trasero de Sasuke, necesito a mi compañero vivo y en una pieza para el examen, así que, tal vez si pudieras esperar para cuando los exámenes terminaran...
-¿A qué te refieres con eso?- Pregunto Sasuke, enojado. -¿Patearme ek trasero? ¿El?
-Sasuke, no te metas con Lee, se lo que te digo.
Sasuke entrecerro los ojos hacia Naruko y luego dirigió su mirada a Lee.
-Acepto tu reto, Rock Lee