Chaeyoung caminaba de vuelta a casa, con una mochila nueva claro. Todo su material era nuevo, esas chicas eran insoportables. Tuvo que gastar mucho dinero para conseguir de nuevo todo lo que necesitaba para las clases.
Chaeyoung estaba en la clase de pintura, haciendo su trabajo. De repente alguien abre la puerta, ni se molesta en voltear a mirar quién es. Sigue con lo suyo, pintando sus fresas de referencia... El profesor le llama la atención.
- Señorita Son, usted tiene mucho talento para la pintura pero, pienso que no debería limitarse a dibujar fresas. ¿Entiende?
Chaeyoung asiente.
- De acuerdo, ¡clase! Han llegado unas voluntarias para hacer el próximo trabajo. Es importante enfocarnos un poco en el realismo y en las personas, ¿de acuerdo?
Blah blah blah. Tonterías.
El realismo es una mierda.
Chaeyoung bufó y rodó los ojos mientras dejaba su lienzo a medio hacer de las fresas a un lado para poner uno nuevo y hacer el trabajo. Y antes de que se diera cuenta, la voluntaria era su peor pesadilla.... Mina. Abrió los ojos de sorpresa y Mina la volteó a ver con una sonrisa. ¿No se suponía que estaba en la sección de baile? ¿Haciendo ballet y todas esas cosas estúpidas?
Estaba semidesnuda y toda descarada, se puso de frente a Chaeyoung, para mirarla con seriedad, odio, desprecio, asco... Chaeyoung llamó al profesor y le susurró algo que Mina claro, no pudo escuchar.
- Profesor Park... ¿Podría hacer surrealismo en vez de realismo? Por favor...
Un suspiro de parte del mayor.
- De acuerdo... Supongo que es lo que mejor se te da.
Chaeyoung sonrió y miró a Mina sin borrar la sonrisa, Mina frunció el ceño. Chaeyoung comenzó a pintar, sabía exactamente lo que iba hacer...
Era sencillo pero profundo. Era Mina, con una camiseta a rayas roja. Líneas rojas pasaban por el fondo blanco y por partes de la cara y cuerpo de Mina, dejando solo ver parte de su pelo, sonrisa y lunar, piernas que tenían el detalle de que estaba cortadas y la sangre caía en las piernas, pareciendo venas.
No le tomó mucho tiempo, dos horas y media. A Mina le dolía el cuerpo y algunos osea estudiantes ni habían acabado. Chaeyoung mostró feliz su obra al profesor y a este, le encantó. El Señor Park se lo mostró a Mina y ella confusa lo observó. Hizo una mueca de disgusto.
- Ni entiendo nada... ¿No era realismo?
- Uh... La señorita Son tiene un don para el surrealismo, ya ve, esta pintura es muy profundo.... Transmite-...
- No me transmite una mierda.
Silencio.
Chaeyoung tragó duro.
- Además me dibujaste horrible. ¿Acaso me veo gorda? ¿Por qué mis piernas son tan gordas? Claro que es surrealismo, esa no soy yo. Además de que yo no me cortaría las piernas vaya horror.
- Señorita Myoui es una metáfora-...
- ¡¿UNA METÁFORA?! ¿Acaso es una metáfora pintar a una chica gorda que no es gorda y dibujar unas líneas por encima rojas?
El profesor se quedó callado.
- Señorita, usted no estudia esto así que no lo comprende.
- Pues claro que no lo comprende, su pequeño cerebro monótono de movimientos de ballet no puede procesar lo que es el arte. - Dijo Chaeyoung y Mina la miró con una mirada fulminante. Un par de risas en el aula.
- ¡¿Pequeño cerebro-...?!
- Ya basta señorita Myoui.
- ¡No puede dejar que me humille así!
- Si no se tranquiliza la tendré que echar del aula.
- ¡No hace falta! - Mina salió del aula muy molesta. Chaeyoung sabía lo que le esperaba.
Pero Chaeyoung no se lamentaba, estaba cansada y enfadada con esas tres japonesas. Esta vez se iba a defender de esas tres... Alguien tocó su hombro. Era una compañera, Tzuyu.
- Necesito hablar contigo... ¿Te importa si vamos a la zona de música?
Chaeyoung negó, al parecer esa compañero también había terminado así que con tiempo libre salieron al patio y caminaron hasta la zona de música. Ahí los estudiaban practicaban canto e instrumentos. Al lado estaba la zona de baile por cierto.
Tzuyu y Chaeyoung entraron a un aula.