Le miro con los ojos bien abiertos cuando dice eso, pero no digo nada, él solo me mira fijamente sonriendo, parece que me quiera comer con la mirada.
-¿Entonces quieres que siga? -asiento de nuevo tímidamente desviando mi mirada de la suya- ¿No te vas a arrepentir luego? -vuelvo a mirarlo ahora un poco más nerviosa.
Creo que él nota que me he puesto nerviosa, ya que rápidamente pega sus labios con los míos y los besa lentamente y con pasión a la vez, me relajo cuando me besa así, su mano vuelve a moverse lentamente encima de mi zona íntima, cierro los ojos e intento no gritar, no tengo que hacer ningún esfuerzo mental para relajarme, él solo ha conseguido que todos mis nervios hayan desaparecido solo con besarme. Grito cuando sube la velocidad con su mano, sigue moviéndola de una manera rápida y con descontrol por encima de mi ropa interior, creo que ha roto mis medias porque ni las noto. No puedo evitar los gritos que salen de mi boca, siento tantas cosas cuando me toca así que es imposible no chillar.
-Me vuelves loco. -por su tono de voz se nota que está muy excitado al igual que yo.
Muerde mi labio y se quita su camiseta, lo hace tan rápido que no me doy ni cuenta, levanta mi cuerpo de la cama e intenta quitarme el vestido, pero yo ahí sí que me pongo muy nerviosa y le paro con mi mano, él me mira fijamente unos segundos y se pega la mano en la frente.
-Joder, casi se me va la cabeza. -se acerca a mí, besa mis labios rápidamente y se levanta de la cama- No dejes que lleguemos a tanto.
-No es culpa mía tampoco. -exclamo algo enfadada y avergonzada.
-Tienes que parar tú, a ti te perjudica más que a mí que pasen estas cosas, a mí si te follo me da igual, a ti no, luego te arrepientes de lo que hacemos y me formas un pollo increíble. -le miro con los ojos bien abiertos.
-Me dijiste que nunca llegarías a eso, que tanto no se te puede ir a la cabeza.
-Cuando te tengo así la cabeza no es lo único que se me va. -le miro sin entenderlo, él señala a su "amiguito", abro los ojos a más no poder cuando lo miro, está muy abultado y grande.
No me lo quiero imaginar sin pantalones... Si ya así se ve enorme en ropa interior tiene que ser...
No debería de pensar estas cosas, ahora no me sale ni la voz para poder hablar.
-Eso tan- tan grande es tu... -logro decir tartamudeando.
-Es mi pene sí.
-¿Pero por qué está así de grande? -él se ríe y se acerca más a mí.
-Tú lo has puesto así -mis mejillas deben de estar rojas como un tomate- y esto no es nada, si lo saco fuera y estuviera al cien por cien créeme que te asustarías al verlo.
-¿Al cien por cien?
-Excitado a tope princesita.
-¿No estás excitado a tope? -pregunto sorprendida, él se ríe.
-No, para mí esto no es nada, lo que ha pasado solo ha sido un calentamiento, y ni eso la verdad, yo en el calentamiento hago más cosas con las mujeres, pero tú no me has dejado seguir -sonríe sin mostrar sus dientes- aunque conociéndote si hubiera seguido seguro que sales corriendo de la cama asustada.
-¿Entonces eso se puede poner más grande? -pregunto haciendo caso omiso a lo que me acaba de decir.
No sé ni como he podido preguntar eso.
-Sí -responde sonriendo de una forma que no me gusta nada, me pone nerviosa por como me mira y me sonríe- si quieres seguimos y compruebas tú misma como se pone mi pene cuando estoy al cien por cien. -doy un salto hacia atrás en la cama alejándome de él.
-No voy a comprobar nunca eso, además siempre me dices que nunca llegarías a tanto.
-Te digo que nunca te follaría, pero si quieres te puedo enseñar un par de cosas en este tema para que dejes de ser tan inexperta, a mí no me importaría.
-No voy a dejar que me hagas el amor.
-No te estoy diciendo que te vaya a follar Sofia -coge mi mentón con su mano para que lo mire a los ojos- eres una inexperta en todo, ni siquiera sabes besar, conmigo podrías aprender mucho si tú quisieras.
-No quiero aprender nada, y mucho menos si tú me tienes que enseñar. -él sonríe de lado y se acerca a su chaqueta, la cual está colgada en la silla.
-Pues tú te lo pierdes, una lástima que no hayas querido seguir, nos lo hubiéramos pasado muy bien.
Cuando dice eso sonríe de lado y saca del bolsillo de su chaqueta una caja roja que pone "Durex" en ella, le miro con el ceño fruncido sin saber que es.
-¿Que es eso?
-Son condones princesita. -abro los ojos a más no poder muy sorprendida y algo asustada, me levanto de la cama y me quedo lo más alejada que puedo de él, alzo mi mano para que no se acerque a mí -¿Quieres que abra uno y te lo enseñe? -pregunta caminando hacia mí de una manera peligrosa.
-¿Tu cuando has comprado eso? -mi mano sigue levantada para que no se acerque más, él la coge con la suya y la baja.
-Cuando he ido a comprar la toalla.
-¿Los has comprado para violarme esta noche? -pregunto con un hilo en la voz, Logan se ríe a carcajadas.
-Sí, tenía pensado violarte esta noche -le miro con terror- no pongas esa cara, hubiera sido mejor para ti, te quitas dos cosas de encima -le miro con el ceño fruncido y él se acerca más a mi rostro- piensa, la misma noche que das tu primer beso también hubieras perdido tu virginidad, te quitas eso de encima y así las siguientes veces que lo hagas ya sabrás besar y ya no te dolerá al follar, te haría un gran favor princesita. -guiñar su ojo, yo le pego un empujón, pero no se aleja demasiado de mí, coge mi brazo para que no me pueda alejar de él.
-¡Aléjate de mi! -él no deja de reirse- ¡No te rías estúpido! ¡No me vas a tocar un pelo! ¡Y eso ya lo vas tirando a la basura! -señalo la caja roja con mi dedo.
-No voy a tirar los condones princesita, me son muy útiles siempre. -vuelve a guiñar su ojo.
-¡Pues conmigo ya te vas olvidando de usarlos!
-No los voy a usar contigo. -intento soltarme de su agarre, pero él sujeta con más fuerza mi brazo- Tranquila vale, estaba bromeando, no voy a usarlos contigo ni tampoco tengo pensado violarte ni quitarte la virginidad.
-¿No me estás mintiendo ahora? -niega con su cabeza- ¿Entonces no has comprado eso para violarme?
-No, joder eres mas mal pensada que yo y eso ya es decir, los he comprado porque nunca habías visto uno y quería enseñártelo -quito un poco la cara de susto- si quieres te lo enseño ahora en vivo y en directo.
-¿Vas a sacar uno? -pregunto un poco mas tranquila, pero aún así sigo alerta.
-Para algo los he comprado.
-¿Los has comprado solo para enseñármelos?
-Bueno, solo para eso no -sonríe de lado y los deja en una mesita que hay al lado de la cama- ya los usaré- vuelvo a poner cara de susto- joder pero no contigo, con otras mujeres.
Rápidamente todos los nervios y el miedo que siento en el cuerpo desaparecen, ahora estoy cabreada, estoy más bipolar que mi madre, pero me me ha enfadado mucho que me haya dicho eso.
-Pues úsalos con ellas, mientras a mí no me toques un pelo todo bien.
Cuando digo eso le miro a los ojos, él solo sonríe y me mira fijamente, logro soltarme de su agarre, cojo mi maleta y sin decir nada más entro en el baño.
-No te pongas celosa princesita, ya sabes que a mí solo tú me pareces preciosa.
No puedo evitar sonreír cuando escucho eso. Rápidamente me quito el vestido y me pongo el pijama, me desmaquillo con las toallitas que Diana me ha dejado en la maleta. El cabello mejor me lo voy a dejar suelto, siempre duermo con una trenza, pero me da vergüenza hacérmela con Logan y que me vea así, bastante que ya me tenga que ver en pijama.
Cuando abro la puerta del baño fijo mi vista en Logan, abro la boca y los ojos como platos y cierro la puerta del baño rápidamente metiéndome en el otra vez.
¡Está en ropa interior el muy desvergonzado!
-Princesita, ¿qué haces? ¿Por qué te has vuelto a meter en el baño? -exclama riéndose.
-Estás en ropa interior. -respondo alzando la voz muy nerviosa.
-Me estaba poniendo el pijama al igual que tú.
-Pues haber avisado de que te estás poniendo el pijama y así no hubiera salido hasta que estuvieras visible.
-Yo siempre estoy visible, ya sea vestido o desnudo.
-Pues conmigo vístete. -escucho como se ríe, yo sigo apoyada en la puerta del baño sin salir.
-Ya puedes salir.
Abro la puerta del baño y salgo de él con cara de susto. Menos mal que lleva puesto unos pantalones de pijama, aunque eso sí, arriba no lleva nada. No puedo evitar mirar sus grandes y musculosos brazos.
Dios mío, cómo puede existir un hombre así en el mundo... Su cuerpo es de un Dios griego en toda regla.
-Puedes mirar todo lo que quieras, no te cortes -cuando dice eso desvío mi mirada hacia el suelo muerta de la vergüenza.
¡Córtate un poco Sofia! ¡Va a pensar que nos gusta su cuerpo!
-Si quieres me puedo quitar los pantalones también para que disfrutes más. -le miro enfadada y roja como un tomate.
-¡No seas tan creído, solo te he mirado porque me ha sorprendido verte así, nada más!
-Tú di lo que quieras, pero mi cuerpo te encanta -se acerca a mí, yo retrocedo un poco- ¿Por qué no piensas la propuesta de aprender conmigo?
-Yo no quiero aprender contigo nada -le miro enfadada- sabes, creo que ese es tu truco para llevarte a la cama a las mujeres que no se quieren acostar contigo. -él se ríe a carcajadas cuando digo eso, deja de reírse cuando me mira a la cara, pero no quita su estúpida sonrisa de su rostro.
-Nunca le he propuesto eso a ninguna mujer, si te lo he propuesto a ti ha sido porque me das pena, nunca había conocido a una mujer de tu edad que no supiera ni besar.
-Pues no te debería de dar tanta pena porque no la doy, a mí no me falta ningún brazo ni ninguna pierna para que yo te de pena.
-Que exagerada eres siempre con todo eh princesita -me quedo callada y cruzo mis brazos- Al menos piénsate lo de enseñarte a besar.
-No necesito que me enseñes a besar. -sonríe de lado y también se cruza de brazos, no puedo evitar desviar mi mirada hacia sus brazos.
-Créeme, sí que lo necesitas, corta muchísimo el rollo que no sepas besar.
-Me da igual que te corte el rollo a ti.
-¿Y querrás cortarle el rollo al tío que te mole?
-Si le gusto no creo que se queje porque no sepa besar.
-No se quejará pero perderá el interés en ti. -ahora le miro algo preocupada.
-¿Tan malo es que no sepa besar? -él asiente con la cabeza, coge con sus dedos mi mentón para que lo mire a los ojos.
-Si ya te has besado conmigo qué más da que lo hagamos más veces, yo te podría enseñar muy bien.
Vuelvo en sí cuando acerca demasiado su rostro, me alejo un poco de él.
-Precisamente porque ya nos hemos besado no quiero volver a hacerlo más, me siento mal por haberme besado contigo.
-No lo parecía hace un momento en la cama -coge mi brazo y me acerca a él- estabas gimiendo de placer debajo de mí, y eso que no he hecho nada. -noto mis mejillas arder.
-Has hecho mucho, demasiado diría yo. -sonríe mostrando sus perfectos dientes.
-Eso no ha sido nada, si tú me dejas podrías sentir el triple de lo que ya sientes cuando te muerdo el cuello o te toco por encima de tus bragas.
Ahora mismo tengo ganas de que la tierra me trague, tengo que estar más roja que un tomate, y encima no sé ni qué contestarle.
Logan toca mi mejilla dulcemente y roza su nariz junto a la mía.
-¿No quieres sentir más? -le miro con los ojos bien abiertos y trago saliva nerviosa.
Cierro los ojos por su cercanía, a los pocos segundos noto sus labios moviendo los míos lentamente. Una de sus manos está en mi cintura, si me intento alejar él me acerca a su cuerpo, y la otra mano la tiene por detrás de mi cuello. No puedo explicar lo que siento cuando me besa así, pierdo tanto la cabeza que deseo que nunca deje de besarme.
Muerde mi labio con cuidado y sin querer abro la boca, ahí profundiza el beso, mete su lengua y juega con la mía, yo no sé que hacer, solo me estoy dejando llevar por él.
La mano que sujeta mi cuello la baja hasta mi culo y lo aprieta, cuando hace eso abro los ojos, ahora sí que me estoy arrepintiendo de esto... Se me está yendo demasiado la cabeza deseando que esto vaya a más y eso no puede ser.
-No, Logan esto está mal, no deberíamos de besarnos. -logro alejarme de él, pero rápidamente agarra mi cintura con sus manos para que no me separe.
-Solo son besos princesita, no hacemos ningún daño a nadie.
Vuelve a pegar sus labios con los míos, yo me dejo llevar por él. Ahora mismo tengo una lucha interna conmigo misma, mi cabeza quiere pegarle un tortazo por lo que está haciendo pero mi cuerpo no quiere que pare de besarme.
Dejo de pensar cuando sin dejar de besarme él coge mis muslos y los tira hacia arriba cogiéndome en brazos, me intento separar de sus labios, pero no me deja de besar. Con cuidado me tira sobre la cama y él se coloca encima de mí apoyando sus brazos en la cama para no aplastarme, sin previo aviso coge mis pantalones del pijama con sus dos manos y lo comienza a bajar, cuando hace eso me levanto un poco de la cama y le miro algo asustada, quita mis pantalones tan rápido que no me doy ni cuenta y vuelve a besarme, besa mis labios de una forma rápida y con mucha pasión. Su mano la coloca en mi zona íntima y comienza a moverla rápidamente y con descontrol, al principio me da algo de miedo por cómo lo está haciendo, pero rápidamente se me quita todo, echo la cabeza hacia atrás y muerdo mi labio intentando no gritar, cuando hago eso Logan besa mis labios y los muerde él sin hacerme daño.
-¿Quieres sentir más? -pregunta sin dejar de tocarme, su voz es ronca y está agitado al igual que yo, yo no se que contestar- Esto no es nada, puedo hacer que pierdas la cabeza del placer que te puedo hacer sentir, pero me tienes que dejar seguir.
-Te-te dejo... -logro decir, por su mirada se nota que está muy sorprendido, yo también estoy sorprendida por lo que acabo de decir.
-¿Segura? -asiento con la cabeza sin pensarlo mucho- ¿Si me dejas seguir no te vas a arrepentir? -pregunta, ahora me están entrando dudas.
-No lo sé...
Me estoy poniendo muy nerviosa, no se si me voy a arrepentir o no luego de esto, ahora mismo estoy muy excitada y no puedo pensar con claridad.
-Te voy a quitar las dudas que tienes.
Le miro sin saber que decirle, él sonríe de lado y vuelve a besarme, esta vez me besa despacio y con calma, juega con mi lengua lentamente, hace que mi mente no piense, solo me dejo llevar por sus labios. Su mano vuelve a moverse, pero no tan rápido como antes.
-Vas a suplicarme que siga, princesita. -susurra en mi oído sin dejar de mover su mano.
Le miro con los ojos bien abiertos, pero rápidamente los cierro cuando me besa, noto su mano querer entrar por debajo de mi ropa interior, antes de que pueda entrar cojo su mano y le miro nerviosa.
-No quiero seguir Logan, esto se nos ha ido de las manos. -él me mira sonriente, parece que se esperaba que dijera eso por cómo me está mirando.
-Sabia que no ibas a querer seguir -no quita su sonrisa de su rostro- que pena que no me hayas dejado seguir, nos hubiéramos divertido mucho con esto.
Coge la caja de los preservativos, yo abro los ojos como platos, ya tengo que estar roja como un tomate. Él se acerca a mí y besa mis labios unos segundos, cuando se separa los deja sobre la mesa y se sienta en la cama.
-Los dejo ahí por si luego los utilizamos.
Algo hace clic en mi cabeza cuando dice eso, me levanto rápidamente de la cama con un cojín en mis manos y tapo mi cuerpo con él.
-Logan no digas esas cosas ni en broma. -él se levanta de la cama y se acerca a mí con una sonrisa en su rostro.
-No lo decía en broma princesita.
Le amenazo con la almohada para que no se acerca a mí, él la coge y yo le intento pegar, pero la tira bien lejos de nosotros.
-¿Que te pasa? -pregunta él acercándose más a mí, yo retrocedo nerviosa para alejarme de él.
-No vuelvas a decir cosas como esas Logan, tú no eres mi marido.
-Ya se que no soy tu marido -me mira de arriba a abajo- ni lo voy a ser nunca. -frunzo el ceño, ahora estoy algo enfadada.
-Por eso mismo no quiero que me digas cosas como que dejas la caja de preservativos encima de la mesa por si luego los utilizamos, sabes de sobra que yo solo haría el amor con mi marido. -noto como se tensa, pero rápidamente sonríe de lado.
-Me sorprende que sepas para que se utilizan los preservativos con lo mojigata que eres. -ahora está demasiado cerca de mí, me tiene arrinconada en la pared, pero yo no agacho mi mirada en ningún momento- Me das una pena increíble niña, aunque no sé si sentir pena o reírme de ti -sonríe mostrando sus dientes de una manera burlona- cualquier tío se burlará de ti cuando se entere que no sabes ni besar.
-No soy ninguna mojigata -le miro muy enfadada- ¿pero de qué vas Logan? Primero parece como si estuvieras enamorado de mí en el restaurante y ahora te estás burlando de mí. -él se aleja un poco de mí, su rostro ha cambiado a uno serio y frío como el hielo.
-Yo no estoy enamorado de ti. -me acerco un poco más a él, él no mueve un pelo pero tampoco se acerca a mí.
-En el restaurante parecía que sí.
-Se te ha ido completamente la cabeza si piensas que yo puedo enamorarme de ti. -me mira como si estuviera loca.
-¿Y por qué no podrías enamorarte de mí?
No debería de haberle preguntado esto lo sé, parece que yo quiera que esté enamorado de mí, pero me da tanta rabia como me está mirando que lo he preguntado sin pensar.
-Ya sabes la respuesta. -responde más frío que el hielo.
-¿Tan repulsiva soy para los hombres o que? -pregunto muy enfadada acercándome más a él.
-Para mí sí.
Abro los ojos a más no poder, siento un dolor en el pecho horrible, tengo ganas de arracarle la cabeza y a la vez llorar hasta no poder más acostada en la cama con las sábanas tapándome entera para que nadie me pueda ver. Pero no, no voy a permitir que este gilipollas se ría más de mí ni me vea afectada por lo que me acaba de decir.
Encima me tiene que pegar los malditos insultos... Yo nunca insulto y por su maldita culpa hace que sienta deseos de decir malas palabras.
Cierro los puños e intento controlar las ganas que tengo de llorar y de golpearle.
-Y si soy tan repulsiva para ti porque mierdas me besas y sientes deseo de tocarme.
-Yo no siento deseo de nada contigo.
-No te creo, si lo que tú dijeras fuera verdad no hubiera pasado lo de antes en la cama.
-Pues no me creas, mira niña, abre los puñeteros ojos de una maldita vez vale, si te he besado ha sido porque me ha dado la gana, y si te he tocado igual, porque me ha salido de los huevos hacerlo y siempre hago lo que quiero, nadie ni nada me para nunca, por eso lo he hecho, pero no siento nada por ti como tu cabeza piensa -vuelve a mirarme de arriba a abajo- pero mírate, ¿en serio puedes pensar que yo en algún momento he podido sentir algo por ti?
Ahora me duele el pecho más que antes.
-Eres justo lo contrario a lo que yo busco, y para el colmo eres virgen.
Yo me quedo callada, me mira como si no valiera nada y esto último lo ha dicho con un tono como si no valiera nada solo por ser virgen, ahora sí que siento ganas de llorar.
Levanto la cabeza, le miro seria pero sin derramar ni una sola lágrima
-Gracias a Dios que mi futuro marido será todo lo contrario a ti, y gracias a Dios que dentro de poco volveré a estar en mi zona y me olvidaré de ti y de este sitio gobernado por el diablo, doy gracias todos los días por haberme criado en mi zona y no aquí. Eres la persona más horrible que he conocido y que conoceré en mi vida.
Cuando digo eso Logan se acerca a mí tan rápido que vuelve a arrinconarme en la pared, coloca sus manos en la pared para que no me pueda alejar de ahí, por su rostro parece que ahora está enfadado.
Acerca su rostro demasiado al mío, pero yo no desvío mi mirada de la suya.
-Ni se te ocurra volver a besarme nunca más, no me gustaría vomitarte en la cara. -exclamo sin dejar de mirarlo.
Él da un golpe a la pared, está furioso, yo me asusto mucho cuando hace eso, me mira y parece que vaya a salir fuego de sus ojos en cualquier momento, no puedo evitar que mi corazón vaya a mil por hora de lo nerviosa que estoy, este hombre es capaz de pegarme o incluso de matarme, es un psicópata.
-No pongas esa cara que no te voy a pegar.
Me mira con odio, se aleja de mí y coge su chaqueta y la caja de preservativos que está encima de la mesita de la cama, sin decir nada más y sin mirarme sale de la habitación pegando un portazo al salir. Cuando ya no está me siento en el suelo con el corazón todavía muy acelerado.
-Dios... Pensaba que me iba a pegar. -intento calmarme, pero sigo muy nerviosa.
No sé cuanto tiempo me quedo sentada en el suelo intentando tranquilizarme, pero creo que bastante. Cuando escucho el sonido de mi móvil vibrar me levanto rápidamente, seguramente será Logan o Diana, son los únicos que tienen mi número de teléfono, bueno y mi madre, pero ella no quiere saber nada de mí así que no creo que sea ella, pero ojalá y sí, necesito hablar con alguna persona normal que no sea de esta maldita zona...
-Si es el gilipollas ese no pienso cogerlo. -digo muy convencida.
Pero para mi sorpresa cuando cojo el móvil no es nadie conocido, es un número que no tengo agregado, con mi otro teléfono no solía atender llamadas desconocidas, pero aquí no me lo pienso mucho y la cojo.
-¿Sí? ¿Quién es? -sonrío sorprendida cuando escucho la voz de Lucas- ¡Lucas que sorpresa! ¿Cómo has conseguido mi teléfono? ¡Anda! Te lo ha dado Diana, ¿en serio estás por aquí? -me quedo callada unos segundos- Espérame en la puerta del hotel Palacio, estoy aquí ahora mismo. Sí estoy segura, no, tranquilo, no va a pasar nada, estoy sola además, el idiota no está conmigo. -sonrío más animada- Ahora nos vemos.
No sé que está haciendo Lucas aquí, pero me ha dado mucha alegría escuchar su voz, y más después de lo que ha pasado con Logan, me apetece muchísimo salir de aquí y dar una vuelta para no pensar tanto en lo que me ha dicho el muy desgraciado.
Rápidamente me desnudo y vuelvo a ponerme el vestido azul, maquillo mis labios, cepillo mi cabello y cojo mi tarjeta para poder abrir la habitación. Salgo casi corriendo de la habitación y cierro la puerta de un portazo.
Sigo mal por lo que me ha dicho Logan, menos mal que con Lucas siempre me lo paso bien, con él parece que vuelva a estar en mi zona con mis amigos de toda la vida.
Nada más salir del hotel me encuentro con Lucas apoyado en una farola, me mira sonriente, lleva puesta una chaqueta de deporte de color azul, la cual le queda algo grande, sus pantalones vaqueros de siempre y sus deportivas.
He de admitir que hay una gran diferencia entre él y Logan, Logan se viste mil veces mejor que él, y es muchísimo más atractivo que Lucas.
¡No tengo que pensar así de él con todo lo que me ha dicho en el hotel! Parezco tonta, Dios...
-¡Sofia, estás muy guapa! -me acerco a él algo tímida por el comentario que acaba de soltar.
-Gracias. -respondo tímidamente.
-Yo parezco ahora mismo una mierda a tu lado. -me río ante su comentario.
-Tampoco digas eso hombre, ¿pero que haces tú aquí? ¿Por qué no estás en tu casa? Mañana tienes que trabajar en la casa del gilipollas. -me mira bastante sorprendido.
-Sofia nunca te había escuchado decir palabrotas.
-No te creas que a mí me gusta hablar así, es que con ese sujeto me sale solo insultarlo, te juro que no lo aguanto.
-¿Ha pasado algo con el jefe? -ruedo los ojos y cruzo mis brazos.
-Si yo te contara...
-Bueno si quieres podemos dar una vuelta y me cuentas.
-Pero antes respóndeme que estás haciendo tú aquí. -se rasca con su mano la cabeza y sonríe.
-El padre del jefe me ha pedido que viniera a por unos papeles a la oficina de aquí, se me ha hecho tarde y al final me quedo aquí a pasar la noche, he avisado por llamada y ya mañana bien temprano iré para allá.
-¿Pero Logan sabe que estás aquí?
-No.
-¿Pero por qué te ha hecho venir hasta aquí a por unos papeles? Si nosotros vamos a ir dentro de poco al castillo. -me mira de una forma algo extraña.
-Esos papeles los necesita el padre del jefe para mañana, se suponía que mañana ibais a volver, pero parece ser que el jefe quiere que os quedéis aquí más días, ha llamado a su padre al terminar la reunión esta mañana y le ha dicho que se va a quedar aquí más días por eso estoy yo aquí y he recogido los papeles que necesita, mañana a primera hora se los entrego, así que no hay problema.
-Pero no entiendo, si tan importante son esos papeles porque Logan y yo no nos marchamos mañana a la casa.
-Se ve que quiere pasar aquí más días contigo. -me pongo algo colorada cuando dice eso, pero sigo enfadada.
-No digas tonterías Lucas.
-No las digo, si no contéstame, porque os vais a quedar aquí más tiempo cuando la reunión de esta mañana ya ha terminado y ya no tenéis nada más que hacer aquí, además de que los papeles de mañana son bastante importantes por lo que parece ser, si no no estaría yo aquí ahora -me quedo en silencio- el jefe lo que quiere es pasar tiempo contigo a solas Sofia, ya te lo dije cuando se fue él solo de viaje, yo creo que siente algo por ti aunque quiera esconderlo.
-Si nos quedamos aquí más días es porque Logan ya ha pagado el hotel toda la semana y dice que si nos vamos no le van a devolver el dinero.
-Y qué más da que no le vayan a devolver el dinero, es millonario y tiene todo el dinero del mundo, no te das cuenta de que si se queda aquí toda la semana es porque quiere pasar tiempo contigo.
-Será un tacaño, no querrá perder su dinero. -me encojo de hombros, el sonríe y comienza a caminar.
-Si quieres paseamos por el paseo de la playa y me cuentas que te ha pasado con él.
-Lo de pasear por el paseo me parece bien, lo de él mejor no te cuento lo que ha pasado, solo te voy a decir que es un gilipollas.
-Dime algo que no sepa entonces. -le miro y los dos nos reímos- El jefe no sabe que tú estás conmigo aquí ahora mismo, ¿verdad?
-Que va, si te he dicho antes que no estaba conmigo en la habitación, se ha marchado hecho una furia y no sé nada de él desde que se ha ido -me quedo callada unos segundos- es más, creo que no va ni a pasar la noche en el hotel donde tenemos habitación.
-¿Por qué piensas eso? -le miro algo colorada.
-Yo sé porque lo digo.
-¿Pero dormís en la misma habitación?
-Para mi desgracia sí -me mira asombrado- dice que no le da la gana de pagar una habitación para mí, así que me toca dormir con él estos días. -exclamo apenada y enfadada a la vez, él no quita su cara de asombrado.
-Madre mía, ya le tienes que gustar para que quiera que duermas con él. -le miro con el ceño fruncido.
-Yo no le gusto.
-Entonces respóndeme porque no paga una habitación para ti con todo el dinero que tiene.
-Porque es un tacaño, ya te lo he dicho.
-Sofia abre los ojos, está loco por ti, en la vida ese hombre ha dormido con una mujer. -me río burlonamente.
-No me hagas reír Lucas, ese sujeto se acuesta todos los días con mujeres -ahora estoy enfadada- es más, ahora mismo se estará acostando con una.
-¿Y tú cómo sabes eso?
-Porque ha cogido la caja de preservativos que ha comprado cuando se ha ido. -abre los ojos como platos, yo agacho la mirada algo avergonzada.
No debería de haber dicho eso, que vergüenza...
-Entonces sí que estará por ahí follando con alguna.
-Por eso me he reído cuando me has dicho que el nunca se acuesta con una mujer -miro al frente- si se acuesta con todas el muy desgraciado. -coge mi brazo para que deje de caminar.
-¿Tú te has acostado con él también?
-¡No! Por quién me tomas Lucas, ¡yo jamás en la vida me acostaría con ese hombre! -noto como se queda más tranquilo- Me daría asco acostarme con él.
-Dicen que es muy bueno en la cama, yo si fuera mujer me daría curiosidad saber si es tan bueno como dicen.
-A mi créeme que no me da ningún tipo de curiosidad saber eso.
-¿Pero por qué te daría asco? Entiendo que no te cae bien, pero de ahí al asco.
-Se ha acostado con muchas mujeres, ya no tengo porque seguir hablando, creo que ya he dicho bastante para que sepas porque me daría asco. -exclamo bastante seria.
No puedo evitar pensar que Logan ahora mismo se estará acostando con una mujer, me daba igual que hiciera eso, pero después de haberme besado con él no sé por qué pero ya no me da tanto igual.
-Tranquila, no te enfades conmigo Sofia, solo quería saber, nada más.
-Perdona, he tenido una pequeña pelea con él y no me apetece hablar de él la verdad. -vuelve a mirarme sorprendido, pero cambia su rostro a uno sonriente y camina más deprisa.
-Vamos a darnos prisa que quiero comprarme un gofre, estoy muerto de hambre.
-¿No habrán cerrado ya? Es bastante tarde.
-Que va, aquí no cierran en toda la noche. -asiento bastante sorprendida y seguimos caminando.
En la zona segura cierran los comercios a las nueve y media de la noche, a las diez ya no hay nada abierto, todo esto es un mundo nuevo para mí, que así es, es un mundo completamente diferente al mío.
Caminamos hasta llegar a una gofreria, Lucas se compra un gofre con chocolate y nata por encima, me ha parecido extraño que no me haya preguntado si yo quería otro gofre, pero mejor así, tampoco me apetece comer nada, estoy muy llena por la cena de antes con Logan, con lo bien que se ha comportado conmigo antes en el restaurante... Parece mentira que luego haya pasado lo que ha pasado en el hotel.
-¿Estás bien? -pregunta Lucas mientras se come el gofre, yo le miro- Estás algo seria.
-Sí, estoy bien. -sonrío falsamente.
-Parece que has tenido una buena pelea con el jefe, si solo hay que mirarte la cara para darse cuenta. -le miro con el ceño fruncido y algo molesta.
-Pues sí, me he enfadado bastante.
-¿Pero me quieres decir lo que ha pasado?
-Mejor que no. -miro la discoteca donde hemos entrado antes Logan y yo, no sabía que estaba aquí al lado de la gofreria.
-¿Te apetece entrar para bailar un rato? -le miro pensativa unos segundos- Así seguro que se te quita el cabreo que llevas por dentro.
-Vale, vamos a entrar. -respondo muy convencida.
Sin decir nada más entramos a la discoteca, sigue igual de llena que antes, la música está altísima, pero no me molesta.
-Madre mía que alta está la música, hacia tiempo que no entraba a una discoteca, desde que trabajo no tengo tiempo de nada. -exclama Lucas en mi oído, está tan cerca de mí que me pongo algo colorada por su cercanía.
-Ya, imagino que cuando tienes tiempo libre querrás descansar. -digo casi gritando para que me escuche bien, él asiente con la cabeza.
-¿Quieres tomar algo?
Cuando pregunta eso miro la barra, el corazón se me para por un segundo cuando veo lo que tengo enfrente de mí. Sentado en la barra se encuentra Logan, besándose con una mujer, más bien parece que le está comiendo la boca por como le está besando, no puedo evitar sentir tristeza y rabia por dentro, nunca he sentido esto en mi vida, pero la verdad no me gustaría estar sintiéndome así, odio tener que sentirme así de mal, y lo peor es que no puedo evitarlo.