Decidí hacerme un tiempo para visitar a la señora Park. Lo último que supe de ella es que estaba enferma y por ello Seojun canceló nuestra cita.
Me di una ducha y me vestí. Mamá preparó una comida especial para su amiga. Emprendí mi viaje, antes de llegar decidí pasar por la florería de Hyunjin y comprar un ramo para la señora Park.
Una vez hecho eso me dirigí a su casa. Llegué y toqué el timbre, alguien abrió.
- ¡Lim Mi-rae! - exclamó - ¡Qué alegría verte!
- Hola señora Park - dije sonriente mientras hacía una reverencia - Espero no molestar.
- Por supuesto que no - respondió - Por favor, pasa.
Entré. La señora Park me pidió tomar asiento mientras me preparaba un café.
Llegó con dos tazas. Se sentó frente a mi.
- ¿Cómo está tu madre?
- Está bien - respondí - De hecho, le envía esto - dije mientras le pasaba la bolsa.
- Aish esa mujer - dijo alegre - No se debió molestar.
Se puso de pie y guardó la comida en la nevera. Luego de eso se sentó nuevamente donde mismo.
- ¿Cómo se encuentra? - pregunté - Supe que estuvo enferma.
- ¿Enferma? - preguntó extrañada - Por suerte no me he enfermado últimamente.
- ¿Ah no? - seguí - Pero Seojun...
Me quedé callada. Aún intento procesar lo que me dice.
El día de nuestra cita, Seojun me canceló para cuidar a su madre enferma, pero ahora me entero que no fue así.
¿Por qué me mintió? ¿Por qué inventó esa excusa?
- ¿Lim Mi-rae?
¿Por qué él haría algo como eso?
Y ahora que recuerdo, Jun Eun-ji mencionó algo sobre la cita. Al día siguiente actuó de manera extraña al igual que Seojun.
¿Qué está pasando?
Maldición, me estoy comiendo la cabeza.
- ¡Lim Mi-rae!
- ¿Ah? - dije aterrizando a la realidad.
- ¿Estás bien? - preguntó preocupada - Estás algo pálida.
- ¿Ah? ¡Ah! - exclamé - Sí, estoy bien. No se preocupe.
- ¿Segura?
- Sí señora Park - respondí fingiendo - Le aseguro que estoy bien.
Seguimos conversando de otros temas. Ella no me preguntó la razón de mi visita o el por qué pensé que estaba enferma.
Durante toda la plática no podía evitar pensar en Seojun. Él jamás habría hecho eso o bueno... Eso pensaba.
Después de un rato decidí irme. La señora Park quedó feliz con mi visita y me hizo jurar volver pronto.
Iba caminando por la calle. De pronto recibo un mensaje, era Seojun.
- Hey semáforo - decía el mensaje - Acabo de terminar mi ensayo, ¿por qué no vienes a buscarme?
Le respondí y me dirigí al lugar. Mientras llegaba a mi destino, pensé en si debía comentar lo ocurrido.
Finalmente decidí no hacerlo, pues quiero creer que en algún momento él me dirá.
Llegué fuera del edificio y allí estaba Han Seojun, me acerqué.
- Hola mi niño - dije tierna.
- ¡Mi-rae!
Seojun me abrazó con fuerza. Se separó un poco y depositó un tierno beso en mis labios.
- Te extrañé - dijo.
- Yo también - dije.
Nos volvimos a abrazar. Levanté mi cabeza y me encontré con sus ojos.
Amo estos momentos con él.
- Lamento estar tan ausente estos días - dijo - Nos acaban de asignar grupos, así que me estoy preparando.
- ¿¡Enserio!? - dije emocionada - ¡Eso es asombroso! ¡Estoy muy orgullosa de ti!
Sus ojitos brillaron cuando terminé aquella frase. Me gusta recordarle lo maravilloso que es.
- ¿Eso quiere decir que debutarás pronto?
- La verdad no - respondió - Pero ya se están armando los grupos.
- Eso es genial - dije - ¿Y en cuál grupo quedó Eun-ji?
- Ah... ella ya no forma parte de la empresa - respondió.
- ¿No? - pregunté extrañada - Pero hace poco estaba contenta por ser seleccionada.
- Lo sé - dijo - Pero al parecer recibió una mejor oferta en otro lugar, así que se fue.
Si claro. La verdad es que nunca ha dejado Rock Star Records, solo estaba aquí para acercarse a mi chico.
Es una bruja.
- Hey, ¿te apetece comer algo? - preguntó - Yo invito.
- ¡Claro! - respondí.
- De acuerdo, vamos a...
- ¡Han Seojun!
Seojun volteó para ver de quien se trataba.
Mierda.
- Ten - dijo y le entregó su billetera - Olvidaste esto.
- ¡Oh! ¡Gracias Song Kang! - dijo Seojun - La necesito justo ahora.
Song Kang dirigió su mirada hacia mi.
- ¡Oh! ¡Lim Mi-rae!
- ¿Se conocen? - preguntó extrañado Seojun.
- Claro - respondió él - Somos compañeros de trabajo, estoy con ella en la cafetería.
Seojun me miró buscando respuesta de mi parte. Así que hablé.
- Hola Kang - dije - ¿Cómo haz estado?
- Ahora... mejor que nunca.
- Iremos a comer - dijo Seojun - ¿Quieres venir?
Los tres nos dirigimos a un local de comida rápida. Nos sentamos en una mesa y pedimos.
- Oye Mi-rae, ¿cómo van las cosas con tu novio? ¿Le contaste?
¡Maldición!
- Ah... Yo...
- ¿Qué cosa? - dijo Seojun - ¿Tienes algo que contarme? ¿Estás bien? ¿Estás lastimada? ¿Te duele algo? ¿Alguien te dañó? - preguntó cada vez más preocupado.
- Eh...
- Espera - dijo Kang - ¿¡Han Seojun es tu novio!?
- Sí, soy su novio - respondió Seojun.
Dios, ¿cómo saldré de esto?
- Ahora dime Mi-rae - dijo Seojun - ¿Qué debes decirme? ¿Alguien te molesta? - siguió - Dime quién es y te juro que yo...
- Tranquilo Seojun - dije acariciando su mano - No es nada.
- Entonces, ¿por qué Kang dijo eso?
Le eché un vistazo a Song Kang. Hice una señal con mis ojos para que me ayudase, por suerte entendió.
- Lo siento mucho - dijo Kang - Creo que arruiné la sorpresa.
- ¿Qué sorpresa? - dijo Seojun.
- M-me ascendieron - mentí - Me ascendieron de puesto... ahora soy la encargada de... De...
- ¡De limpieza! - dijo nervioso Kang.
- ¿De limpieza? - preguntó extrañado Seojun.
¿Enserio? ¿No se le pudo ocurrir algo más creíble?
Pues ya que.
- Así es - dije orgullosa - Estás frente a la nueva encargada de limpieza, te dije que estar una hora limpiando el mismo vidrio daría sus frutos - dije irónica.
- Así veo - dijo mientras reía.
La comida llegó y comenzamos a comer.
- ¿Y desde hace cuanto se conocen? - preguntó Kang.
- Cumpliremos un año de conocernos - respondí - De novios cumpliremos dos meses.
- ¡Guau! - exclamó - Eso es increíble.
- Lo sé - dijo mirándome mi chico.
- ¿Cómo se conocieron? - preguntó.
- Casi me atropella con su motocicleta en un cruce peatonal - respondí - Esa fue la primera vez, después hubieron otros intentos.
- Oye, eso fue por accidente y además me gritaste como lunática - se excusó Seojun - Tuve miedo en ese momento.
- Ah... - hizo Kang - Así se conocieron... Interesante.
- ¿Y ustedes? - preguntó Seojun - ¿Cómo se conocieron?
- Ah, nosotros... - dijo Kang.
- En el trabajo - dije rápidamente - Song Kang es hijo de la dueña, así que lo contrató.
- ¿Por qué no me comentaste?
- Ah eso... Es que no te he visto últimamente, estás ocupado con tus ensayos y no quiero interrumpir.
- Sí... los ensayos...
Se instaló un silencio incómodo. Empezamos a comer, después de un largo rato se retomó la conversación.
Terminamos y salimos del local. Kang se fue por su lado y nosotros por el nuestro.
Seojun me dejó en casa. Subí a mi habitación, allí estaba Jukyung pero me ignoró. Últimamente lo ha estado haciendo, creo que aún sigue molesta por nuestra reciente discusión.
Me tiré a mi cama. Comencé a pensar en Eun-ji, necesito encontrar la manera de desenmascarar a esa bruja. Pero debo ser astuta.
Al día siguiente me levanté, es fin de semana por ende me toca trabajar durante todo el día.
Llegué a la cafetería y como siempre la campana anuncia mi llegada. Me dirigí a los vestidores y me puse el uniforme.
Salí y me encontré con Kang.
- Buenos días.
- ¡Mi-rae! - exclamó.
- Déjame ayudarte.
Imité a Song Kang y me puse a limpiar. Tomé una escoba que estaba cerca y me dispuse a barrer el piso.
- ¿Llegaste temprano? - pregunté.
- Así es - respondió - Debo hacerlo o mamá se molestará.
- Cierto - dije y reí - Debe ser difícil ser hijo de la jefa.
- Un poco - dijo y rió.
Seguimos hablando de otras cosas mientras limpiamos la tienda.
- Oye Mi-rae...
Dejé lo que estaba haciendo y lo miré.
- ¿Por qué le mentiste a Seojun? - preguntó - Sobre Eun-ji... ¿aún no le dices nada?
- Ah... Eso... No, aún no le comento lo que me dijo.
- ¿Por qué no lo haces? - siguió.
- No es tan fácil Kang - dije - Ya te dije, no puedo culparla sin tener pruebas. Nadie me creerá.
- ¿Y Seojun? - dijo - Es tu novio... ¿por qué no habría de creerte?
Me quedé callada pues no sabía que contestar.
- ¿Por qué le mientes?
- No lo hago - dije - Solo quiero asegurar las cosas.
- No me refiero a eso.
- ¿Entonces? - pregunté extrañada.
- Mentiste diciendo como nos conocimos - dijo - Sabes que no fue por trabajo.
- Ah... Eso - dije - No veo necesario decir el resto, no quiero que se produzcan malos entendidos.
- Mi-rae, no me molesta que lo hayas hecho - dijo - Es lo de menos, me preocupas tú.
- ¿Yo? - pregunté extrañada - ¿Por qué deberías preocuparte? Estoy bien.
- Sé que estás soportando mucho para no ocasionar problemas - siguió - Pero sobre todo para no dañarte a ti misma, pero te estás equivocando.
No contesté nada y me quedé mirándolo fijamente para que siguiera.
- No permitas que personas externas dañen tu relación - dijo - No puedes soportar eso, así que no lo dejes pasar.
- ¿Y cómo hago eso?
- Debes hablar con él, decir la verdad - siguió - Si se entera de esto y descubre que tú sabías, se decepcionará mucho.
- Tienes razón...
Al día siguiente me dirigí a la escuela. He dormido muy mal esta noche... No he podido dejar de pensar en lo que Kang me dijo ayer.
Me siento demasiado impotente por todo lo que ocurre, no sé como voy a arreglarmelas con esa manipuladora hoy.
Llegué a la escuela, iba caminando por los pasillos.
- ¡Hola Mi-rae! - exclama Eun-ji - ¿Cómo te encuentras esta mañana?
No puedo creer la actuación de esta tipa. Realmente tiene una habilidad impresionante en las artes actorales.
- Hola Eun-ji - dije neutral.
- ¡Tenía ganas de verte! - dijo - Nuestra última conversación fue gratificante, nos siento más unidas - siguió - ¿Verdad que fue divertida?
Eh... ¿¡Hola!?
¿¡Acaso me volví sorda o loca!?
- ¿De qué estás hablando? - dije extrañada.
- ¡Ay! ¡Qué olvidadiza eres! - exclamó - ¡Ya deja de fingir!
No respondí, solo me quedé mirándola fijamente.
- Quita esa cara o realmente creerán que me odias - dijo - Ya no finjas, me alegra que hayamos hablado y arreglado las cosas, estoy contenta de que seamos amigas.
- ¿Amigas? - dije - ¿Estás bromeando?
- ¿Algo no va bien? - preguntó - Me miras de forma extraña.
Dios santo bendito del cielo y de la tierra.
¿¡Qué le ocurre!?
Pensaba seguir su juego, pero realmente no puedo. Así que decidí encararla.
- Ya basta - dije - No te dejaré el camino fácil solo porque pretendes que somos amigas.
- ¿Te haz levantado con el pie izquierdo esta mañana? - preguntó inocente.
- No te hagas la sorprendida.
- Oh... Parece que no bromeas - dijo mientras fingía tristeza - Si alguna vez hago algo mal, espero me perdones. Volveré a hablar contigo cuando estés de mejor humor, ¿okey?
Después de decir aquello se fue. No puedo creer lo cínica y manipuladora que es.
- Creo que sí te levantaste de mal humor hoy - dijo Sooah.
- ¿Por qué lo dices?
- Acabas de discutir un poco con Eun-ji - dijo - Pensé que se llevarían bien después de todo, siempre trata de acercarse a ti - siguió - Por lo que veo no es mutuo.
Realmente no me apetece involucrar a más gente en este asunto. Así que decidí pasar de Sooah.
Mientras iba caminando nuevamente por los corredores recordé lo que Kang dijo.
Es verdad, si los demás se enteran de la verdad y que yo sabía desde un principio y nunca lo detuve. Quedaré como arpía también.
Así que decidí hablar. Tengo muy en claro que me estoy arriesgando con esto, pero sinceramente prefiero ir con la verdad.
Salí al patio y me encontré con Kang Soojin. Me acerqué a ella.
- Hola Soojin - dije amable.
- ¡Hola Mi-rae! - contestó - ¿Cómo estás?
- No muy bien - respondí - Hace un par de días, me enteré algo de Eun-ji.
- ¿¡Ya se va!?
- ¿Cómo? - pregunté extrañada - ¿Por qué lo haría?
- ¿No te enteraste? - preguntó - Firmó un contrato con una discografia en el extranjero, dentro de poco deberá irse.
Mierda, esta tipa es muy rápida.
En ese momento recordé lo que dijo sobre Seojun.
"Quiero que sea mi guitarrista y vocalista principal"
Por ese lado no me preocupo, pues estoy segura que él no planea irse. Dejé mis pensamientos de lado y seguí la conversación.
- No - dije - No tiene nada que ver con eso.
- ¡Uf, que alivio! - exclamó - Realmente me encariñé con esa chica... es muy amable, la voy a extrañar cuando se vaya.
- Lo siento - dije - Pero no es tan amable como crees.
- ¿Qué quieres decir? - preguntó extrañada.
- Es una auténtica manipuladora - respondí - En el pasado provocó una pelea entre Seojun y Seyeon, además que a este último lo acosó por redes sociales, es por eso que se fue del país.
- Claro que no - dijo - El problema que los chicos tuvieron no la involucra - siguió - Además, ella nos comentó que se fue para probar suerte fuera.
- Pues te mintió - dije firme - Claramente no confesaría algo así.
- Por Dios, eso es una ridiculez - dijo - ¿Por qué lo haría?
Soojin me dió una mirada extraña.
- No deberías divulgar ese tipo de comentarios Mi-rae - dijo molesta - No es propio de ti.
- ¡Pero es la verdad Soojin! - exclamé - ¡Te lo juro!
- Conociste hace poco a Jun Eun-ji - dijo - Sé que puedes sentir celos por su relación con Seojun, pero hasta ahora no a hecho más que demostrar que quiere entablar una buena relación contigo - siguió - No sé que es lo que pasa por tu cabeza en este momento, pero espero termine pronto.
- ¡Pero no hay nada que terminar! ¡Es una manipuladora!
- Te aprecio Mi-rae - dijo - Y realmente tengo una buena imagen de ti y no quiero que se arruine - siguió - Haré como que no he oído nada.
Soojin se dió media vuelta y se fue.
Esto empieza mal, pero no hay marcha atrás.
Haré todo para desenmascarar a
Jun Eun-ji.