·𝑬𝒎𝒑𝒂𝒕𝒉𝒚 & 𝑰𝒍𝒍𝒖𝒔�...

By lagatanegra03

2.7K 436 2.9K

Escrita junto con @anfitriteytalasa ✿.。.:* ☆:**:. Fanfic Fate: The Winx Saga .:**:.☆*.:。.✿ Alphea, el interna... More

●Cast de personajes●
💜🧚🏻‍♀️💚 PREMIOS 💚🧚🏻‍♀️💜
Capítulo 1: El chico de los cuchillos
Capítulo 2: Hada del engaño
Capítulo 3: Lío de habitaciones
Capítulo 4: El hipotético rubio
Capítulo 5: ¿Has tenido un mal día?
Capítulo 6: Meteduras de pata
Capítulo 7: Temperamento explosivo
Capítulo 8: Habilidades sociales
Capítulo 9: Cobarde, capullo e insoportable puercoespín
Capítulo 10: Exnovias y futuras novias
Capítulo 11: Encuentros fortuitos, los Haaly y una nueva amenaza
Capítulo 12: Una mañana catastrófica
Capítulo 13: Las comparaciones son odiosas
Capítulo 14: La cólera del hada verde
Capítulo 15: La fuerza de la mente y del cuerpo
MUSA
Capítulo 16: El estratega
Capítulo 18: Susurros tras la puerta
Capítulo 19: Presentimientos y champú de coco
Capítulo 20: Espiando conversaciones y enfrentando monstruos
Capítulo 21: Los poderes de Melody

Capítulo 17: Los celos del traidor

69 15 97
By lagatanegra03


—Cuando quieras volver al mundo real y dejar de mancharte los pantalones con el whisky, avísame.

Beatrix está con una cómica sonrisa a pocos centímetros de mi cara que empieza a enfocarla con retardo. Siento mi pantalón ultra mojado y, sí, me he echado la copa en los vaqueros. Joder. Mientras intento quitar con unos pañuelos el líquido o al menos secarlo, Bea se da la vuelta para husmear entre los libros de la antigua biblioteca del despacho de la señorita Dowling. Un lugar de techos altos de madera, el material que más destaca en este amplio habitáculo. La biblioteca misma, el suelo. Solo cambian las tonalidades. También es probablemente el lugar más ordenado que he visto nunca. Tan perfecto que da asco.

Aquí estamos los dos, tal y como me ofrecí, desde hace diez minutos. Un momento. ¡¿Diez?! Miro de nuevo el reloj blanco de agujas marrones que hay justo delante de mí en la pared, sus agujas marcan la una y diez. Genial, en cosa de unos cinco minutos vendrá el pardillo del secretario para volver a su trabajo y no mucho después, Dowling. Hay que ir abreviando.

—No sé qué estás buscando pero te recomendaría ir más rápido —le advierto a la pelirroja.

Me ignora por completo, está ocupada utilizando sus poderes sobre la estantería. Relámpagos blancos y finos surgen de sus pequeñas manos y siento cómo se erizan todos los pelos de mi cuerpo. Aún no me ha dicho ni qué narices busca. ¿Por qué estoy aquí? Abro de nuevo la botella de whisky bueno que tenía escondido en un armarito la directora y me bebo un buen copazo. Esta vez evitaré quedarme ensimismado y que se me caiga de nuevo.

El líquido quema mi garganta con fuerza y se siente tan bien. En realidad sí sé qué hago aquí. No quería ir a comer y encontrarme con Melody, le había hablado bastante mal. Me arrepentí instantes después, cuando sus ojos pasaron de color marrón claro a morado. Fueron dos segundos y ella se marchó sin dirigirme la palabra, no pasó nada. No me gritó, no me dio una patada en los huevos y ahí supe que me había pasado de la raya. Puto Timmy, si ya de por sí mi compañero de cuarto no me caía muy en gracia ahora menos. ¿Por qué se tiene que meter en todo?

—¿Has venido muchas veces, no, señor colocado? —inquiere con picardía Bea.

—Eso tú ya lo sabes. Si no, yo no estaría aquí porque no me habrías pedido ayuda —replico. Me coloco mejor en el asiento de terciopelo azul oscuro, uno de los cuatro que hay. Iba a sentarme en el importante, el negro, pero ella me ha quitado la idea de la cabeza nada más entrar—. ¿Qué buscas?

—¡Oh! Te noto un pelín irascible —Se aparta de la biblioteca con algunos destellos aún en sus manos con uñas moradas y me dedica una sonrisa burlona—. ¿Problemas con el unicornio de pelo violeta?

—Déjalo y no la llames así... —murmuro. Lo que me faltaba, tener que hablar de Mel con la pelirroja que me ha prometido algo después.

—Hmm...duele que te hayan intercambiado por el gafotas bocazas, entiendo —se compadece falsamente ella.

Con poca sutilidad se sienta sobre mis piernas y tengo su pecho resguardado por un corsé blanco y negro al que intento no mirar a pocos centímetros de mi cara. Mejor ver sus ojos verdes por encima de mi cabeza que relucen como diamantes, como sabe el poder que tiene.

—¿Por qué hablas de Timmy?

—Porque sé el numerito que ha ocurrido hace un rato y no debo ser la única en todo el internado —Pone su dedo índice suavemente sobre mis labios—. Deberías de contener tus celos y tu tono si quieres conquistarla.

—¿Cómo lo sabes? Si no estabas cerca —Estoy flipando. Ha ocurrido hace nada y si ella hubiese estado a un par de metros el hada verde le hubiese arrancado la cabeza de un mordisco. Bea sonríe—. Y no tengo celos. ¿Celos de ese idiota?

—Yo lo sé todo —presume con voz siseante y sensual. Su dedo ahora viaja hacia abajo por mi camiseta blanca que se mueve al ritmo de mi respiración. Un poco rápida teniendo en cuenta que Bea se ha acercado aún más y mi amiguito se está despertando—. El porqué lo sé tan rápido no te lo puedo contar pero...quizá te interese saber alguna otra cosa —Sus labios se deslizan por mi cuello con soltura, solo rozando la piel.

—¿O sea que eres una historiadora buenorra con ansias de encontrar algo en este despacho? ¿Pero no lo sabías todo? ¿No sabes qué esconde nuestra apreciada directora?

Me levanto rápidamente de la silla con ella agarrándose a mi cuello con sus brazos y sus piernas enredadas en mi cintura. Es como llevar a una niña, es muy pequeña. Sin embargo, no se corresponde con su apariencia, tan oscura, tan malvada, tan sexy y tan dominadora. Olvidándome por un momento de todo, incluso la cagada que ha hecho de contar lo de Ellie por todo Alphea, comienzo a besar sus carnosos labios pintados de morado. Venga, sí más pronto que tarde se hubieran enterado de lo de ese hada.

Creo que voy a hacer algo de lo que me voy a arrepentir pero la pasión me puede y ella se apreta contra mi cuerpo como una garrapata besándome por todo el cuello y soltando alguna risilla cruel, cruel porque quiero que siga y no se pare ni un solo segundo. La tensión sexual que tengo con la enana pelirroja tengo que resolverla ya. Mi cuarto ahora mismo está vacío, Sky no aparecerá hasta dentro de un buen rato y Timmy tiene entrenamiento.

Estará como un perrito faldero detrás de Mel, o peor, quizá ya haya conseguido robarle un beso. Te gana la partida.

La idea de montármelo con Beatrix se intensifica y dentro de mi cuerpo siento un gran resquemor que crece rápidamente. Incontrolable. El problema es que Dowling viene en cosa de diez minutos y aunque es tentador hacer esto en un lugar prohibido, no quiero que me vea así y me expulse.

No tardamos ni dos minutos en llegar a mi cuarto y que ella se quite su minifalda morada y se lance, divertida, hacia mi cama. La adivina a la primera, claro que la de Sky es la más ordenada y la de Timmy es un desastre. Me quito la camiseta mientras ella abre uno de los cajones de mi mesilla. Saca tabaco de liar y un mechero. Perfecto, me ha leído la mente. ¡Joder, qué bien me va a sentar este polvo y el piti después de estos dos días de mierda!

—¿Esto qué es? —inquiere Bea. Sostiene una pequeña chapa negra que reconozco enseguida.

—Nada, déjala ahí —respondo quitándosela de las manos. No quiero que la toque nadie, es una cosa mía muy preciada—. No es nada.

Bea se queda pensativa por un momento pero cambia el gesto cuando me la quedo mirando empanado porque sinceramente esta chica me encanta. Me agarra de las trabillas del pantalón con fuerza para acercarme a ella, que está con las rodillas sobre el colchón. Ni así es más alta que yo. Sus ojos verdes se iluminan de deseo y tuerce un poco la cabeza. Ahora mismo que haga lo que quiera conmigo, me dejo llevar.

—Habrá que quitarte ese pantalón. No querríamos que Dowling supiera que te bebes su whisky preferido.

💜💚🖤💙

Está claro que Beatrix no se anda con chiquitas y eso me pone bastante. Yo he puesto en su sitio a Padre Santo Sky pero el problema de esto es que termina siempre por ser algo relacionado con Melody. Se va a convertir en costumbre ya y solo son los primeros días. Mel por todas partes.

Sabía que Ellie era hada de las ilusiones, la de pelo morado misma me lo había contado antes y también escuché cuando estábamos todos juntos que Beatrix había expandido lo sucedido en la clase de magia por todo el instituto. Su justificación sobre el asunto era que le caía mal y le debía una por ser tan insoportable. Lo que le ocurra a la otra me la sopla y por eso no le he dado más importancia de la que en verdad tiene. Aparte de que Bea me mandó callar porque estábamos follando.

Ahora se añade otro cargo a mi conciencia a que yo me relacione con Beatrix y más que relacionarme. Sabía que me iba a arrepentir. Nos hemos echado dos polvos tremendos pero ahora mi cabeza está más hecha lío que antes. Se suponía que con ello iba a sacar los problemas un poco. No es solo que me pueda gustar Mel o no, sino que la pelirroja le ha hecho daño a su mejor amiga, a Ellie, y si sabe que me llevo con ella me mata. Mel me hace trizas con sus diminutas manitas.

De verdad que después de esta regañina del rubio solo quiero fumarme un buen porro y olvidarme de todo. No me dejan en paz. ¡Puto Sky! Nunca puede estar callado, siempre tiene que ser "Don perfecto". Tiene una moral intachable, un ingenio digno de admirar, bla bla bla. Luego él es el primero que ha ligado con tres chicas en un mismo día: la loca pelirroja, la rubia psicópata y la peligrosa hada verde. No es posible tener tan mal gusto y tan mala suerte, todas para llevar al manicomio.

Sus palabras han hecho que todo en mi interior se revuelva y mi mente, dormida tras el buen momento, se despierte. Si alguien dibujara en un papel un montón de rayas sin levantar el boli de papel saldría un revoltijo de líneas que son semejantes al barullo que hay por mi cabeza.

Sky tiene razón y deberías centrarte en Melody.

¡Ah, muy bien! ¿Ahora nos queremos centrar en ella, cerebro, cuando ya sabemos que la hemos traicionado? ¿Apareces con esa reflexión justo después de la de antes, que si Timmy te gana la partida? Me estás volviendo loco.

Si fuera tan fácil, ya lo hubiera hecho. Ella es como un objeto que está en una torre de arena y que, si esta se derrumba, el objeto va con la arena y se pierde y se hunde y desaparece. Es algo que quiero cuidar aunque se me da fatal eso de encargarme de algo, es la chica más buena que me he echado a la cara y quiero tenerla a mi lado. Me va a aportar cosas muy buenas y hasta es posible que aprenda de ella, pero si la cosa llega a mayores la destrozaré. Soy consciente, porque yo mismo estoy roto y no es algo que nadie me pueda solucionar, lo tengo que hacer como todo lo que he hecho en esta vida: solo.

—Cuando este se vaya podemos continuar con la conversación, ¿o prefieres hacer lo de antes? —murmura la pelirroja a mi oído sin dejar de besarme—. Ha sido muy divertido.

Aunque dejo que me haga esas cosas no puedo quitar los ojos de la espalda de Timmy que revolotea por el cuarto en busca de una chaqueta con el ceño fruncido. Recordar las palabras de Sky hacen que me irrite aún más y que mi enfado aumente, como cuando antes mi conciencia me ha dicho que este es muy probable que me está ganando la partida con Mel.

Además, una imagen se repite en mi cabeza martilleando incansablemente y es que no he sido el único que se ha dado cuenta de la extraña sonrisa que tenía el de gafas antes, al entrar. ¿Por qué será que sonreía? Era una sonrisa pícara, con un toque de algo que no llego a adivinar. No sé qué cojones está pasando por la mente de ese chico y me raya muchísimo porque está despertando en mí cosas que no quería. Con lo bien que estaba con Bea...

Aparto de un manotazo un poco brusco a la pelirroja de mi cuello para aislarme, lo que mejor se me da. Tengo que hacer algo. ¿Qué le ha dado con pelo multicolor, joder? Ante la pregunta de Sky, él no ha contestado en un primer momento, aunque ya lo hicieron sus mejillas. No hace falta ser muy listo para saber que Timmy creía que era Mel. Que fuera Bea le ha aliviado en sobremanera.

Hay que añadir a todo que estos dos cotillas nos han estado espiando detrás de la puerta. A saber qué han escuchado, espero que lo de que hay una descendiente de brujas en Alphea no, pero me preocupa más ahora el hecho de que ya sé, después de muchas vueltas, cuál es el significado oculto de la sonrisa de Timmy: pura satisfacción. De saber que no era Melody, de que él puede ir ahora mismo a decirle a Mel que me ha visto con Beatrix en, bueno, una posición comprometida y que eso le puede hacer ganar puntos.

Me preocupa la reacción que pueda tener el hadita y no quiero que se entere de todo esto. Admito que pelo multicolor me interesa pero no las tengo todas conmigo de que le pueda gustar y es algo peligroso que surja algo entre ambos. Sin embargo, el último con el que quisiera que ella estuviese es este pringado.

Timmy, por otra parte, en cuanto salga de aquí va a ir corriendo a abrir su gran bocaza. ¡Qué cabrón! Encima se ha atrevido a mirarme directamente mientras se pone su chaqueta roja. Retarme, más bien. Sus ojos verdes relucen con malicia a través de los cristales de sus gafas negras. Oh, conque esas tenemos...

—Bea, ¿me dejas a solas un momento con Timmy? —pregunto con el tono más neutral que puedo conseguir pero dejando claro que se vaya de aquí. Rápido—. Tenía ganas yo de hablar contigo, es genial que hayas aparecido por aquí.

Beatrix me mira extrañada, no parece querer moverse de su sitio en el suelo y no entiende qué pasa. Le hago un movimiento con la cabeza, señalando la puerta. Esto es entre el gafotas y yo. La pelirroja con un lánguido suspiro me termina por hacer caso y se levanta del suelo, molesta.

—Que os vaya bien en esta guerra de machitos —nos desea ella antes de irse dando un portazo.

—¿A qué juegas? —le increpo nada más retiro la mirada de la puerta.

Él sigue en el mismo sitio apretándose la tirita contra el dedo. No me contesta, se queda callado viendo el suelo como si no le importase qué le pueda decir. Le conozco desde hace dos años y sé que no es así. Tiene un tic particular, cada vez que está nervioso se tiene que chascar los dedos varias veces. Ahora no para de hacerlo inconscientemente y, en medio de este silencio sepulcral, resalta.

Me levanto de un salto de la cama y voy despacio hasta su lugar, frente a la cómoda y cerca de su armario. Timmy carraspea, bastante incómodo por la situación. Lentamente eleva su cabeza para mirarme. Estamos frente a frente pero algo alejados. Ahora que no hay nadie más no es tan gallito por lo que veo. Me cruzo de brazos para no partirle la cara, no sé qué me pasa pero desearía tanto hacerlo. Este idiota me tiene mosqueado.

—¿A qué juegas? —repito. Nada, no dice nada. Solo se escucha el sonido de un molesto pájaro que le ha dado por tocar el cristal de una de las ventanas—. Si se te hace una pregunta, lo mínimo es contestar, ¿no crees?

Mis manos viajan peligrosamente hasta posarse con fuerza en los hombros de un asustado Timmy, que se echa hacia atrás y su espalda acaba pegada al armario. Creería que iba a pegarle...que no lo descarte todavía. Nervioso, comienza a juguetear con el hilo de su camisa de franela.

—No sé a qué te refieres —masculla con la vista baja.

—Sí. Lo sabes —digo rabioso porque me intente mentir—. Timmy, Timmy, Timmy. No toques a Melody o será lo último que tus manos tocarán porque te las cortaré. ¿Lo entiendes, pringado?

—Que yo sepa Melody puede decidir sobre qué compañía quiere. No es tonta —responde esta vez con los ojos fijos en mí. Traga con fuerza saliva y continúa en tono elevado—. Si ella quiere estar conmigo y teniendo en cuenta que tú te estás follando a otra, no veo cuál es el problema.

—Mel no va estar contigo. Nunca —Río, divertido—. ¿Cómo le vas a interesar tú, por favor? Eres un bocachancla, no puedes callarte nunca. Jamás en tu vida. No tienes una sola característica que le pueda atraer.

—¿A qué este ataque entonces si estás tan seguro de que no le podría interesar, eh? —inquiere quitando mis manos con enfado de sus hombros. Paro de carcajearme con su pregunta—. ¿Me tienes miedo a mí o a quién? No lo entiendo, quizás tengas que hacerme un croquis.

—Un croquis te haré en la puta cabeza si no te callas. No le cuentes a Melody lo que has visto esta vez —le grito. Creo que debería calmarme pero el chico me está poniendo de los nervios y pienso que eso es lo que quizá busca—. No le interesa saber nada de esto.

—¿Por qué estás liándote con otra si te gusta Mel? —Me da un pequeño empujón hacia atrás. Abro la boca sorprendido de su cambio de humor y su atrevimiento—. Eres asqueroso, estás jugando con ella. No hace falta que yo diga nada para que se dé cuenta ella sola de que eres una mierda de dos patas con chaqueta de cuero y olor a colonia barata.

—Eso no es así...

—Te tiras a una y a la otra te la camelas para ser la siguiente. Eres tú quien tiene que dejarla en paz. No necesita ningún problema más —finaliza con indignación ajustándose las gafas en el puente de su nariz.

Me quedo callado, asombrado por todas las palabras que ha soltado en menos de treinta segundos y no solo eso, la cólera impregnada en cada una de ellas, como si le estuviera atacando a él. También me ha empujado, me ha movido apenas unos centímetros hacia atrás pero ya es algo viniendo de este escuálido que pierde en todos los combates cuerpo a cuerpo. No sé cómo está en Alphea.

Tras una última mirada de fuego se aproxima a la puerta y su mano agarra el pomo dorado con fuerza. La abre de golpe dejando que el ruido de los pasillos porque comienza a llegar la gente del comedor inunde nuestra habitación. Risas, gritos...

—Eres...Eres un imbécil —rumia él. Está dándome la espalda y solo veo que se pone la capucha—. Déjala en paz.

—¿O qué? —murmuro irritado de que este me intente dar lecciones como Sky. Aquí todos quieren ser mi puto padre. Que se vayan a cagar, que buena falta le hacen.

—Nada. Solo quiero que esté bien y si tú perteneces a su vida nunca estará bien.

Aquí, después de mucho tiempo, volvemos Mar y yo con nuevo capitulito. Para Sharon, para Raquel y para Marta, nuestras únicas lectoras, las mejores y más fieles💜💚🖤💙

Another day, another drama. Ya la ha vuelto a cagar el Riven. No se le puede dejar solo con su rabia que luego la lía...¿o quizás no se arrepiente tanto de lo de Bea? ¿Y qué ha pasado en ese intervalo de tiempo con Sky? ¿Cómo que una descendiente de brujas en Alphea? 👀

Continue Reading

You'll Also Like

501K 51.3K 128
La verdad esta idea es pervertida al comienzo, pero si le ves más a fondo en vastante tierno más que perverso. nop, no hay Lemon, ecchi obviamente, p...
149K 20K 21
Viajar al Amazonas a pesar de su disgusto le abrió los ojos para darse cuenta que al final... Todavía no era verdaderamente libre. . . . No. 1 en #t...
165K 8.3K 110
𓂋 Spanish translations ៸៸ ⊹ 𓈒 ˚ ⸰ 백 합 𝐓𝐮𝐦𝐛𝐥𝐫 ٫٫ ♡⃞ ⟡ ׅ ﹙ Lector masculino ﹚ ♡︭ ✦⠀⠀ᣞ ⬭ Ninguno me pertenece ...
788K 118K 99
Toda su vida fue visto de menos y tratado mal por las personas que decían ser su familia, estaba cansado de que todas las noches llorara por aunque s...