THE PRICE OF FREEDOM

By jenifersiza

119K 16.2K 606

Después de su enfrentamiento con Voldemort al final de su primer año, Harry decide que ya está harto de que l... More

Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Capítulo 33
Capítulo 34
Capítulo 35
Capítulo 36
Capítulo 37
Capítulo 38
Capítulo 39
Capítulo 40
Capítulo 41
Capítulo 42
Capítulo 43
Capítulo 44
Capítulo 45
Capítulo 46
Capítulo 47
Capítulo 48
Capítulo 49
Capítulo 50
Capítulo 51
Capítulo 52
Capítulo 53
Capítulo 54
Capítulo 55
Capítulo 56
Capítulo 57
Capítulo 58
Capítulo 59

Capítulo 6

3.3K 452 15
By jenifersiza

-Bueno, me preguntaste por qué me pintaron el retrato cuando llegaste aquí-, suspiró Lily, 'y supongo que es hora de que te cuente toda la historia-.

-Verás, James y yo habíamos estado escondiéndonos originalmente en la isla de Shaw porque todo el lugar es infranqueable y la casa tiene todos los antiguos pabellones de Fleamont. A James no le hacía mucha gracia la idea de estar tanto tiempo aislados, pero fue el compromiso que hicimos de quedarnos en Inglaterra, ya que yo había querido llevarme a Harry al extranjero cuando nos enteramos de que había una profecía que decía que él podría ser quien venciera al señor tenebroso. Sin embargo, James se había negado a abandonar el país, incluso haciendo que Dumbledore y McGonagall intentaran convencerme de que me quedara y, al final, sentí que tenía que decir que sí. Este será para siempre el mayor remordimiento de mi vida pero, por aquel entonces, aún creía que mi relación con James podía funcionar, al menos por tu bien, mi querido muchacho.

Por desgracia, la constante proximidad no era buena para mi relación, especialmente sin mucho que hacer, y empecé a encontrar cualquier excusa para no escaparme, queriendo estar en compañía de James lo menos posible. No es que James fuera mucho mejor, seguía insistiendo en salir a correr con los merodeadores cada mes y volvía agotado, como si hubiera estado despierto toda la noche.

-Fue uno de esos días cuando recibimos una carta de Dumbledore en la que nos decía que el hijo de Charlus acababa de fallecer y que James debía ir a Gringotts a buscar el anillo del heredero Potter para protegerse. James estaba demasiado cansado para revolverse, así que dejé a Harry con Marta, la elfa doméstica adscrita a la isla de Shaw, y corrí rápidamente al banco, deseosa de cualquier protección extra que pudiera conseguir para mi familia. Por mucho que me preocupara la posible influencia de James, no quería arriesgarme a dejar a mi bebé solo en este mundo.

-El banco acababa de abrir cuando llegué, así que no esperaba encontrarme con nadie y menos con una vieja amiga del colegio, Mary Mcdonald. Me quedé de piedra, en parte porque no la había visto desde que dejó el colegio, pero también porque parecía tener restos de pelirrojo en el nacimiento del pelo. En aquel momento no sabía cuál había sido la causa, así que le pregunté y me habló de los bombones que al parecer le había enviado Matthew Selwyn, sólo que debían de estar mezclados con una poción de multijugos chapucera y ella había acabado pareciendo un gato medio transformado, por lo que la habían expulsado del colegio. Supuso que algo había salido mal, ya que los sanadores de San Mungo habían tardado más de seis meses en curarla siquiera un poco, así que sus padres habían decidido educarla en casa para que no acabara retrasada un año-.

Severus, que había empezado a reírse a carcajadas al mencionar el nombre de la chica, ahora rugía de risa pero Lily sonrió con tristeza. -Te estás riendo Severus pero ese incidente fue el comienzo de la ruptura de nuestra amistad. Cuando Mary desapareció del colegio empezó a correr el rumor de que Mary se había ido porque había sido violada por ti y tus compañeros de casa-.

-¡Lily yo nunca lo haría! Ni siquiera me interesan las mujeres!- Exclamó Severus.

-Lo sé y cuando James trató de convencerme de ello le dije que no podías ser tú ya que habíamos estado estudiando juntos sólo para que me dijera que si bien tú no lo habías hecho definitivamente habías animado a tus compañeros Slytherins a hacerlo. No me convenció, pero, aunque confiaba en ti, definitivamente no confiaba en mis compañeros de casa, así que fui a preguntarte sólo para que te rieras y dijeras que era divertidísimo-.

-¡Estaba hablando del multijugos!- Severus echó humo. -Había oído a tu supuesta amiga quejarse de ti diciendo que no sabía por qué todo el mundo pensaba que eras tan guapa, ya que tus ojos eran demasiado felinos para llamarlos bonitos. Pensé que era justicia poética, sobre todo porque lo había alterado a propósito para que no se pudiera revertir fácilmente-.

-Ahora me doy cuenta-, Lily sonrió con tristeza, -tus peores travesuras siempre eran para defenderme y ya te dije antes que no merecía tu amistad. La única excusa que puedo dar es que era joven e ingenua y demasiado susceptible a las sugerencias. Empecé a alejarme un poco de ti en ese momento, lo que obviamente hizo que pasaras más tiempo con lo que yo consideraba el "elemento oscuro", gracias a lo que ahora veo que fue un lavado de cerebro por parte de McGonagall y Dumbledore. Sin embargo, en aquel momento no me di cuenta, confiaba en la opinión de mis profesores y sólo veía tus acciones como una corrupción más, así que cuando me llamaste "sangre Sucia" aquel verano lo tomé como una señal de que te había perdido para siempre-.

-¿Qué es Sangre Sucia?- preguntó Harry.

-Es un nombre despectivo que se usa para describir a los no sangre pura-, explicó Severus. -Cuando llamé así a tu madre fue en un momento de gran angustia personal. Como ella dijo, se había estado alejando de nuestra amistad, lo que me tenía preocupado, y entonces tu padre decidió usar mi propia maldición contra mí y hacerme parpadear ante medio colegio cuando salíamos de un examen. Me enfurecí cuando intentó ayudarme, aunque me arrepentí al instante e intenté disculparme esa noche-.

-Y debería haber aceptado. Por desgracia para ti, McGonagall me había convocado a una reunión antes de que me encontraras, para ver cómo me encontraba. Sólo que se pasó todo el tiempo reiterando que te estabas volviendo oscuro y que debía cortar mis lazos contigo, concentrándome en cambio en mi incipiente relación con James. Lo gracioso es que sólo habíamos tenido una cita antes de eso y James la había cortado, diciendo que estaba preocupado de que Sirius estuviera haciendo algo estúpido y yo no le había dado otra oportunidad desde entonces, pero me estaba esperando cuando salí y tuve el impulso de aceptar cuando me invitó a salir de nuevo-.

-¿Compulsiones crees?- Sugirió Severus.

-Posiblemente, eso fue lo que hizo que James y yo nos juntáramos y, aunque perdí tu amistad, gané a Harry y por eso nunca podré arrepentirme de lo que pasó, espero que lo entiendas-.

-Nunca perdiste mi amistad-, susurró Severus.

-Gracias, Severus, siempre has sido mejor persona que yo y me alegra saber que cuidas de mi hijo- dijo Lily, los ojos de su retrato brillaban de lágrimas. -De todos modos, obviamente me di cuenta de que me habían mentido después de volver a encontrarme con Mary y me enfrenté a James en cuanto regresé a la isla de Shaw. James aún estaba medio dormido cuando llegué y no estaba pensando realmente en lo que decía y, de hecho, admitió haber empezado el rumor de que Mary había sido violada como forma de separarnos a Severus y a mí. Nos enzarzamos en una gran discusión e incluso acabó contándome el incidente con el hombre lobo, admitiendo que sabía desde el principio lo que Sirius tramaba y que me sacó a propósito para tener una coartada en caso de que ocurriera lo peor y te mordieran, Severus.

-En ese momento yo estaba acabado y simplemente esperaba mi momento hasta que pudiera encontrar una manera de dejarlo. Me puse en contacto con Charlus para ver si podía ayudarme a resolver mis opciones, ya que, aunque era tío de James, seguía siendo el cabeza de familia de los Potter y yo seguía siendo una Potter, aunque solo fuera por matrimonio. Por suerte lo entendió y fue él quien me sugirió que me hiciera un retrato para poder contarle la verdad a Harry en caso de que ocurriera lo peor. También quería más protección para Harry. James había vetado mis ideas para los padrinos, y yo no confiaba del todo en Sirius ni en Alice, y definitivamente no confiaba en Dumbledore en ese momento. Estudiamos un par de cosas y al final se nos ocurrió la idea de un contrato de esponsales para que Severus pudiera convertirse legalmente en el tutor de Harry pasara lo que pasara.

-Seguía queriendo alejar a Harry de todo, así que hice planes para huir al continente con él y, de hecho, estaba empaquetando todo cuando Dumbledore nos informó de que había mortífagos cerca de la isla. Dije que seguíamos a salvo, ya que no podrían desembarcar, pero una vez más mis deseos fueron ignorados y James hizo que nos mudáramos a Godric's Hollow, justo a tiempo para que sus amigos celebraran tu primer cumpleaños, Harry. No es que la mudanza detuviera mis planes, aunque al principio los retrasó un poco, ya que me sentía vigilada y ya no podía ir a ver a Charlus. Me quedé de piedra cuando me enteré de su fallecimiento y me entristecí al saber que no podría asistir a su funeral, pero recibí una carta de los duendes mientras James estaba fuera en la que me informaban de que Charlus me había dejado dinero en secreto, que era lo último que me faltaba para irme.

-Había recogido todo y me preparaba para desaparecer la noche de Samhain, ya que era luna llena, lo que significaba que James solía salir con los merodeadores. Esa noche, sin embargo, James había decidido quedarse en casa. Resuelto a salir a pesar de todo iba de camino a recoger a Harry y nuestras cosas cuando Voldemort atacó-.

-Eso parece un poco casual-, dijo Severus, -¿es posible que Black te hubiera oído y se hubiera asustado?-.

-¿Qué tiene que ver Sirius en todo esto?-. preguntó Lily.

-Era tu guardián secreto, te traicionó-, replicó Severus.

-¡Tonterías! Peter era nuestro guardián secreto, Sirius sólo hizo de señuelo para que aparentemente todos asumieran que era él. Se suponía que era una especie de medida de seguridad. Le había sugerido a Dumbledore que colocara el encantamiento y me hiciera a mí el guardián secreto, ya que no estaba seguro de si realmente confiaba en alguno de ellos, pero al parecer estaba demasiado ocupado, así que me tocó a mí-. Lily puso los ojos en blanco. -¿Por qué todo el mundo piensa que fue Sirius?-.

-Porque fue arrestado corriendo después de que Pettigrew y 13 muggles murieran en el fuego cruzado. Black fue arrestado en el lugar y ha estado en Azkaban desde entonces-, explicó Severus.

-¡Dios mío!- exclamó Lily, -por eso Harry no está con él. No me digas que a los Longbottom también les pasó algo!-.

-Los atacaron unos días después que a ti. Los Lestrange y Barty Crouch hijo fueron a interrogarlos para averiguar información sobre la desaparición del señor tenebroso, sólo que se pasaron de la raya y Frank y Alice acabaron en el pabellón Janus Thickey de San Mungo- afirmó Severus -Desgraciadamente, el grupo nunca recibió un juicio en condiciones, así que nadie sabe lo que ocurrió en realidad, ya que fueron encarcelados después de que Bellatrix informara sin remordimientos al tribunal de que eran mortífagos-.

-Y por todo eso Dumbledore pudo colocar a mi hijo con la arpía de mi hermana sin oposición-, acusó Lily.

-Creo que ya me había colocado allí- añadió Harry, -cuando los duendes me hicieron el escáner rúnico decía que me había salido una dermatitis del pañal el 1 de noviembre de 1981, por estar demasiado tiempo sentado con el pañal mojado-.

-Así que era su plan desde el principio-, reconoció Charlus, -aunque no sabemos con qué fin. Probablemente sería mejor que le dijéramos a la vieja cabra lo menos posible hasta que tengamos más información. Por suerte, los esponsales son privados a menos que se anuncien, así que de ustedes dos depende lo que hagan-.

-Por suerte, aún tenemos el resto del verano para resolver las cosas-, asintió Severus. -Así, con un poco de suerte, podremos adelantarnos al viejo cascarrabias antes de que empiece el curso-.

En ese momento, el estómago de Harry gruñó ruidosamente, haciendo que se sonrojara. Nada más oír el ruido, apareció en la mesita un surtido de sándwiches, fruta y pasteles, junto con zumo y té.

-Llama a tu elfo, Harry-, exigió Severus, -y dile que te traiga las pociones del almuerzo, ya que tendrás que tomarlas antes de comer-.

-Gracias por recordármelo, señor-.

Severus suspiró cuando los tres retratos lo miraron mal. -Creo que ahora puedes llamarme Severus en privado, Harry, ya que estamos oficialmente prometidos-.

-De acuerdo Severus-, Harry sonrió antes de pedirle a Collie que trajera la poción apropiada de su escritorio en Privet Drive.

-Me gustaría ver tus escáneres, si me lo permites, Harry-, dijo Severus una vez que el elfo hubo regresado, -no es que dude de los duendes, pero me gustaría ver si se me ocurren algunas alternativas mejores, si no te importa que las prepare para ti, claro-.

-Oh, definitivamente deberías dejarle-, intervino Lily, -Severus siempre fue un mago con las pociones y a menudo le ganaba la partida al viejo Sluggy-.

-Deberías echar un vistazo al laboratorio de pociones que tenemos aquí-, sugirió Charlus, -no es tan moderno como el que Fleamont tenía en la isla de Shaw, pero sigue siendo de buena calidad y está justo al lado de los invernaderos y el jardín de ingredientes-.

-Los duendes dijeron que era bueno-, dijo Harry, -por eso acordamos vivir en este lugar en el acuerdo de esponsales-.

-Entonces deberías hacer una visita guiada después de comer-, anunció Dorea, -así podremos contarte todos los secretos de la familia-.

Los dos estuvieron de acuerdo y pasaron una tarde agradable recorriendo todas las habitaciones, con Charlus y Dorea saltando de cuadro en cuadro para comentar lo que estaban viendo, mientras Lily los seguía, pero pasaba la mayor parte del tiempo charlando con Severus, recordando su infancia. Harry disfrutaba conociendo a su "tía" y a su "tío" y se alegraba de ver a su nuevo prometido tan feliz reavivando su amistad pero Harry podía admitir que estaba un poco celoso de lo unidos que estaban. Había creído encontrar una buena amistad en Ron y Hermione, pero ahora tenía dudas. Claro que pasaban el rato juntos en la sala común, pero en realidad no hablaban, no como lo hacían su madre y Severus.

Entraron en el noveno dormitorio, un número que a Harry le pareció un poco excesivo al principio, hasta que recordó que a menudo había varias generaciones de la familia viviendo en la casa al mismo tiempo y, de repente, se preguntó si realmente sería lo bastante grande. Oyó que Severus y su madre volvían a reírse de algún recuerdo compartido y no pudo evitar suspirar.

-¿Va todo bien, Harry?- Preguntó Severus de repente, casi pareciendo un poco preocupado.

-Huh, oh sí, sólo un poco cansado, supongo-, respondió Harry, mirándose los pies.

-Bueno, ha sido un día largo y has tenido mucha información que digerir-, sugirió Lily, pero Severus no parecía convencido.

-No, Lily-, espetó, -me he pasado el último año vigilando a este chico intentando evitar que se metiera en líos, y no es que sirviera de mucho, pero conozco esta mirada y es la que ponía después de que le diera una redacción de pociones especialmente larga. Algo pasa y tienes que decírmelo, Harry, o no puedes esperar que nada cambie-.

-Pensarás que soy infantil-, gruñó Harry.

-No te ofendas, Harry, pero ni siquiera tienes doce años todavía, se supone que eres infantil-, argumentó Severus, -aunque por lo que ya he cosechado imagino que en realidad no has tenido mucha oportunidad de disfrutar de tu infancia hasta ahora-. Harry negó con la cabeza. -En ese caso, mi objetivo en las próximas semanas es aprovechar al máximo tus vacaciones, siempre que hagas todos los deberes, por supuesto, que revisaré y te pediré que rehagas si no están a la altura, pero primero tienes que decirme qué te pasa-.

-Ojalá tuviera la clase de amistad que tienen tú y mamá-, murmuró Harry.

-¿Y qué hay de Granger y Weasley?- preguntó Severus, aunque parecía un poco sorprendido.

-Bueno, yo suponía que teníamos una buena amistad, aunque en realidad antes no tenía con qué compararla, pero ahora creo que es algo escasa. Quiero decir que Hermione se pasa casi todo el tiempo enfrascada en un libro y si no está leyendo nos está contando lo que ha leído; no discutiendo, sino contando, y Dios nos libre de intentar contradecirla. Y no es que me oponga a coger un libro, pero Ron siempre pone mala cara cuando lo hago y luego sugiere jugar Snap Explosivo o algo asíasí-.

-No es una buena reacción-, resopló Dorea, -pero no debería esperar nada mejor de un Weasley, sobre todo porque supongo que es de la línea de Cedrella-.

-¿Qué les pasa a los Weasley?-. preguntó Harry.

-No son de fiar-, anunció Dorea, -desde que mi prima Cedrella se fugó con Septimus Weasley. Fugarse en sí sería un escándalo, pero el hecho de que ella hubiera firmado un contrato de compromiso con Tristan, el hermano mayor de Septimus, sólo unos meses antes, bueno, casi provocaron la caída de los Black y los Weasley quedaron en desgracia. Fue una lástima, ya que estaban empezando a recuperarse después de que una chica Weasley dejara a un Malfoy en el altar en el siglo XVII, lo que provocó que la familia quedara condenada a engendrar sólo varones a partir de entonces-.

-Qué raro, porque estoy segura de que Molly tuvo una hija-, les informó Lily.

-Si te refieres a la antigua Molly Prewett, esa mujer es una zorra viperina y deberías mantenerte lo más alejada posible de ella, ya que es igual que era su madre-, anunció Dorea. -Juraría que Hyacinth Prewett era la razón por la que Lucretia no podía quedarse embarazada. No es que tuviera pruebas, sólo una sensación cada vez que salía el tema de la falta de hijos de Lucretia-.

-La señora Weasley parecía muy amable cuando me ayudó a atravesar las barreras de King's Cross, hasta el andén 9 ¾-, les informó Harry.

-¿Qué hacían los Weasley en la entrada muggle del andén?-. cuestionó Severus. -Estoy seguro de que entraron por floo cuando Bill estaba asistiendo-.

Harry se encogió de hombros. -No sé lo que es el floo, pero me alegro de que estuvieran allí o nunca habría subido al tren, ya que Hagrid se limitó a dejarme en la estación cuando me dejó-.

-¡Para empezar, qué hacía ese idiota de Hagrid llevándote a la estación!-. rugió Dorea. -Quiero decir, ¿quién en su sano juicio permite a un medio gigante vagar por el mundo muggle, eso es buscarse problemas?-.

Harry respiró hondo. -Por favor, no insultes a Hagrid delante de mí. Fue la primera persona que fue amable conmigo, incluso me trajo una tarta de cumpleaños cuando vino a buscarme a casa de los Dursley y me compró a Hedwig, mi primer regalo de cumpleaños, cuando fuimos a comprar mis cosas del colegio-.

-Severus-, graznó Lily.

-Lo sé, estoy tomando nota. No temas, lo comprobaré antes de dictar sentencia para que sepan por qué se les castiga-, tranquilizó Severus a su amiga.

-Comprendo tu sentimiento Harry-, dijo Dorea, -pero debes entender que a mí me pasa lo contrario. Verás, Hagrid iba a la escuela con mi sobrina Walburga, aunque ella era unos años mayor que él. Desgraciadamente, eso no impidió que fuera presa de las criaturas que él solía traer al castillo, en particular una acromántula que una vez la mordió gravemente cuando se dirigía a clase. La pobre chica nunca volvió a ser la misma y sufrió terribles pesadillas; más tarde descubrimos que el veneno de la mordedura era alucinógeno, pero para entonces ya era demasiado tarde y el daño estaba hecho.

Había habido algunos otros ataques de criaturas en el colegio y los aurores acabaron arrestando a Hagrid después de que un chico llamado Tom Riddle les informara de su costumbre de mantener criaturas peligrosas en el lugar. Al parecer, todo el dormitorio de Slytherin se alegró de la intervención del chico y respiró aliviado, ya que, al parecer, no era la primera infracción de Hagrid en este terreno, pero lo habían dejado libre cuando Dumbledore intervino-.

-Por supuesto que Dumbledore no se preocuparía por el bienestar de los Slytherins-, se burló Severus.

-Sí, y difícilmente le estaba enseñando al chico la lección correcta-, continuó Dorea. -Al consentir su comportamiento, Dumbledore no hacía más que alentarlo y quién sabe a dónde podría llevar eso-.

-Un cerbero y un dragón-, admitió Harry.

-¡Por favor, dime que estás de broma!-. jadeó Dorea.

Harry negó con la cabeza. -El cerberus, Fluffy, estaba guardando algo en el castillo y el dragón lo incubó de un huevo en su cabaña-.

-¡De todas las idioteces!- gritó Dorea antes de respirar hondo para calmarse. -Harry, aunque alabo tu lealtad hacia tu amigo necesito que entiendas lo peligroso que fue su comportamiento. Quiero decir que tener un dragón en la cabaña del jardinero suponía un enorme riesgo de incendio y Merlín sabe cuántos niños podrían haber resultado heridos o muertos si eso hubiera ocurrido. No lo digo a la ligera, y no es en absoluto un castigo, pero me sentiría mucho mejor si no volvieras a pasar tiempo con él-.

-Estoy de acuerdo, Harry-, dijo Lily. -Entiendo el vínculo que probablemente sientas con él, pero no tiene noción de las consecuencias y me preocupa que su comportamiento te meta en problemas o te haga daño-.

La cara de Harry se desencajó. -Sin embargo, se le rompería el corazón si lo hiciera-.

-Entonces, ¿qué tal un compromiso?-, sugirió Severus, -ya que sé que si tratamos de prohibirte rotundamente que lo veas, sólo nos saldrá el tiro por la culata y probablemente te anime a pasar más tiempo con él, así que probemos esto no ignores a Hagrid, pero asegúrate de que siempre haya otros cerca, como en el gran comedor. Incluso puedo conseguir que nos acompañe a recoger ingredientes si te ganas algún castigo el año que viene, que estoy seguro de que lo harás a pesar de mis esfuerzos-.

-Más te vale que no, Harry, o tendremos unas palabras-, advirtió Lily.

-Sí, mamá-, tragó saliva Harry, -aunque tampoco es que haya ido a ver a Hagrid yo solo. Ron y Hermione solían acompañarme-.

-Esos dos no parecen buenas brújulas morales si nos atenemos a las hazañas del año pasado-, señaló Severus. -Si no pueden decirte que incubar un dragón en una cabaña de madera es una mala idea, entonces no se puede confiar en ellos para que te mantengan en el buen camino-.

-Por lo que parece, te interesan las criaturas mágicas, ¿verdad, Harry?-. preguntó Charlus.

-Un poco, sí señor-, respondió Harry. -Sé que no sé mucho pero lo que he visto hasta ahora me fascina-.

-En ese caso llama a Asher y que lleve un cuadro a la casa de fieras y te puedo enseñar las criaturas que hay allí abajo- sugirió Charlus.

Harry sonrió. Aquello sonaba como una forma excelente de pasar la tarde.

Continue Reading

You'll Also Like

652K 63.7K 48
Luego de haber destruido a Voldemort y salvado la piedra, Harry despierta en la enfermería, bajo la custodia del director Albus Dumbledore. En ese mi...
469K 42.2K 32
Que pasaria si toda mi vida cambia de la noche a la mañana... - leer para saber- [Tendran algunas cosas del libro y de las peliculas,capaz los capitu...
209K 25.1K 48
Por un caso que esta investigando la aurora Hermione Granger llega a la mansión Malfoy en busca de su ex compañero, llevándose la sorpresa de que el...