"El clan Itoshi se une con el Clan Isagi en un matrimonio arreglado de sus hijos menores"
Matrimonio arreglado / Rin es un híbrido lobo / Isagi es un híbrido lobo también / romance / fluff / enemies to lovers / au dónde son príncipes
Lo que Rin menos esperaba que sucediera apenas abriera los ojos en su cumpleaños número dieciocho sería que su madre con una sonrisa de complicidad le pidiera que se arreglará para ir a visitar a uno de los clanes que rivaliza mucho con los Itoshi: el clan Isagi.
Definitivamente había truco en alguna parte de esa salida tan inesperada y poco recurrente. Pero no quiso darle demasiada importancia, era su cumpleaños después de todo, seguro que solo era una sorpresa o algo así. Aunque su progenitora le aviso que debía escoger un atuendo muy elegante. Raro
Se alistó a con un atuendo sumamente elegante que consistía en unos pantalones blancos junto a la parte de arriba la cual era una camisa de manga larga y cuello largo con diseños hechos a mano, en cima de esta tenía puesto un chaleco azul fuerte con unos estampados de rombos, en su cuello llevaba un liston azul verdoso fuerte que acompaño con una gema pulida a mano con detalles en oro y pequeños diamantes incrustados.
Se puso unos cuantos accesorios más como unas cadenas por su pantalón y chaleco, y para finalizar se puso una capa que solo cubría la mitad de su atuendo. Esta tenía bordados hermosos con toques dorados.
Se peino haciendo que su cabello tuviera más volumen que el otro lado, "peino" sus orejas mientras unos flecos rebeldes se le escapaban por la frente dandole una apariencia de en sueño.
Se miró al espejo una vez más para sonreír conforme con el atuendo. Sus orejas sobresalían mientras que su pelo tenía una apariencia algo rebelde, su atuendo brillando por si solo al ser tan delicado y caro, mientras su cola estaba sumamente peinada. Si su mamá le decía que eso no era elegante, entonces Rin se tiraría desde el sexto piso de su castillo.
Escucho como alguien tocaba la puerta y la abría, giro el rostro y se encontró con su hermano mayor diciéndole que deberían de bajar porque el carruaje los estaba esperando.
Solo dió un leve asentimiento mientras salía de su gran recamara junto a su hermano, bajando las grandes escaleras en espirar sintiendo como su estómago se removía de antemano sobre algo que ni él mismo sabe.
Cuando llegó al palacio de el clan Isagi solté un bajo gruñido. Realmente no quería pasar ahí su cumpleaños dieciocho.
Los empleados los saludaron con una reverencia, abriéndoles las puertas del palacio de la familia Isagi mientras aún seguían inclinados mostrándoles sumo respeto.
Aveces a Rin se le olvidaba que él y Sae eran príncipes y que su padre junto a su madre eran rey y reina de muchos territorios.
Volvió a suspirar por lo bajo aceptando su destino, caminando elegantemente por el camino de piedras que los llevaban a la entrada del palacio.
Cuando entraron inmediatamente pudo reconocer los costosos arreglos y telas de oro que se deslizaban por todo el castillo, dándole un toque hermoso.
Su madre le indico un camino el cual probablemente sea el comedor.
Así que será un desayuno. Pensó.
Llegaron y así era, el clan Isagi se encontraba ahí. La reina, el rey y su único hijo: el principe Yoichi Isagi.
Volvió a soltar un gruñido bajo al notar la presencia del último. Realmente no le agradaba mucho ese tipo.
Se guardo todos los sentimientos que tenía y se sentó al lado de Yoichi por desgracia.
Todos empezaron a desayunar en un silencio tenso. Ninguna persona de la mesa hacia el esfuerzo de entablar una conversación por lo cual en la sala solo se podían escuchar el sonido de los cubiertos chocando con los platos de cristal.
Una vez que todos terminaron de desayunar, las personas mayores de la mesa se dedicaron una mirada de cómplices. Rin entrecerró los ojos al notar esto.
─Bueno, les queriamos dar un aviso a Rin y Isagi─ Su madre hablo con voz fuerte para llamar la atención de todos.
Rin solo dirigió su mirada hacia su madre esperando a que tirará lo que tenía que decir, Isagi hizo lo mismo.
─Queriamos que supieran que después de hablarlo mucho, llegamos a la conclusión de que Rin y Yoichi se van a casar─ la madre de Isagi continuo tirando la bomba.
Rin se quedó estático en su lugar procesando la información que le acaban de dar, Isagi no se encontraba mejor que él.
─¿Qué mier-?─ antes de que pudiera terminar su madre hablo de nuevo.
─No queremos objeciones. Esto es por el bien de los clanes y quieran o no, se van a casar─ La señora Itoshi hablo con firmeza.
Rin solo volteo a ver a Yoichi el cual también lo volteo a ver, y antes de que pudieran siquiera decir una palabra soltaron una bomba más.
─Desde mañana, empezarán a vivir juntos. Ya está todo preparado así que no se deben de preocupar por eso─ la madre de Yoichi sonrió.
Vaya, que asombroso regalo de cumpleaños.
Ahora mismo Rin se encontraba junto a Isagi enfrente de la puerta de lo cual sería su casa.
Realmente no se podía quejar, era literalmente una mansión.
Suspiro mientras volteaba a ver a Yoichi el cual se veía un poco incómodo con todo esto, y ¿cómo culparlo? ¡El estaba igual!, hace tan solo unas horas el mayor no le caía nada bien y ahora tenía que casarse y compartir una casa.
Noto como las orejas del más bajito estaban hacia abajo, se veía un poco lindo así.
Qué
Al parecer ya le estaba afectando hasta el cerebro todo esté lío. No puede creer que llamo lindo a Yoichi.
Sacudió ligeramente la cabeza para dejar esos pensamientos de lado mientras le palmeaba el hombro a Yoichi en una especie de "¡Ánimo!, no estás solo en todo esto".
Yoichi giro su cabeza hacia el y le dedicó una media sonrisa que hizo que el corazón de Rin se acelera.
Y para que Yoichi no notará que se estaba empezando a ruborizar se adentro a la casa.
El tiempo pasa rápido, y Rin descubrió que ese híbrido no era tan malo como pensaba.
De hecho, Yoichi era sumamente atento y amable.
Siempre cocinaba comida deliciosa para ambos, le daba su espacio a Rin para no agobiarlo y aveces veían películas de terror juntos.
Rin se estaba empezando a enamorar y lo sabía.
Soltó un suspiro de derrota al admitir sus sentimientos por el otro lobo. Se preguntaba si Yoichi se sentía igual que él o era tan solo él.
Estaba acostado en su cama matrimonial, esperando que el mayor saliera del baño para poderse acostar a dormir.
Eso ya era una rutina, siempre se esperaban uno al otro para poder dormir. Rin aún no sabía muy bien el porque.
Salió de sus pensamientos cuando escucho como la puerta del baño se abría y giro el rostro solo para encontrarse con la esbelta figura del híbrido caminando hacia el armario en busca de ropa.
Ah, mierda. No sabía si podía soportar esto más, realmente quería besar a Yoichi en ese momento.
Pero se aguanto las ganas mientras desviaba su mirada hacia otra parte de la habitación la cual no fuera ver a Yoichi vistiendose.
Se giró para aroparse con las suaves sabanas de seda, cuando de pronto sintió un peso extra.
Cuando volteo la cabeza vio que Yoichi estaba en cima de él.
Sintió que la respiración se le cortaba al ver cómo caían gotas del pelo mojado de Yoichi sobre su cara.
Contemplo como el mayor estaba viendo detenidamente sus labios y antes de que pudiera replicar o preguntar algo, Yoichi lo beso.
Fue un beso hambriento que no correspondío en su totalidad gracias al shock que sentía.
Cuando sus labios se separaron pudo notar la mirada sonrojada de Yoichi.
─Y-yo lo lamento Rin, realmente no se que me pasó, solo que...─ inmediatamente se intentó excusar de sus acciones, pero Rin no le dió mucho tiempo ya que lo volvió a jalar para unir nuevamente sus labios.
Las posiciones se habían invertido ahora, Isagi estaba debajo de el mientras lo besaba como si fuera lo último que haría.
Empezó a escuchar los pequeños jadeos ahogados de Yoichi y no pudo estar más contento.
El híbrido menor empezó a bajar sus besos al cuello pero antes de que pudiera continuar, una mano lo detuvo.
─Tranquilo, lobo hambriento. Nada de marcas y sexo hasta nuestra boda, ¿Entiendes?─ Yoichi hablo meintras se sentaba.
Rin bufo mientras escondía su rostro en el cuello de Yoichi.
─Pero nuestra boda es mañana...─ gruño levemente Rin.
─Con más razón, no seas un desesperado y aguántate─ se burló Yoichi mientras salía del agarre firme que Rin tenía puesto en su cintura y se acostó en su lado de la cama susurrando un leve "Buenas noches, Rin".
Rin solo bufo mientras igualmente se acostaba, abrazando el cuerpo de Isagi contra el suyo.
Sintió como sus orejas se movían con alegría al igual que su cola.
¿Eso significa que yo igual le gustó a Yoichi?
Un sentimiento de alegría y tranquilidad invadió su ser mientras apretaba más al mayor en sus brazos.
No sé porque me tardo tanto escribir está cosa 😟😟😟