Advertencia, los adelantes no son 100% certeros de lo que vaya a suceder en la historia, la historia se tardará bastante en actualizar debido a la falta de tiempo, sin más que agregar aquí los dejo.
— Atención a todos los Marines de los sectores cercanos a Alabasta, Habla Sir Crocodile, me gustaría reportar a un pirata fugitivo que esta causando problemas, su nombre es Monkey D. Luffy— La pelinaranja miro al muchacho que tenía enfrente, por más que fuera el nieto de su maestro esta debía cumplir su deber.
— Luffy sombrero de paja —el pelinegro la miró y al momento de quebsus miradas chocarán recordó haber visto esa mirada antes— Vete... Pero no te acostumbres, solo por esta vez te dejare ir —el joven pirata sonrió y le dio un trozo de la carne que llevaba antes de marcharse corriendo, un lindo gesto, que hizo que la Marine sonriera.
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— ¡Crocodile fue derrotado! —se escucho por todo Alabasta.
— Un Shichibukai menos, créeme que pasaras un largo tiempo en prisión —el Marine de cabellera blanca miraba al hombre de arena tirado en el piso mientras que el rival de Crocodile se encontraba con alguien más.
— Peleaste muy bien, pero déjame recordarte que esta vez si te llevare con la justicia —el moreno rió viendo a su captora.
— Si tu eres la que me va a atrapar pues no me importaría —sonrió haciendo que la pelinaranja se sonrojada y desviará su mirada por un momento, tiempo suficiente para que el joven del gorro de las pajas... Digo, del sombrero de paja desapareciera.
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— A... A... A... A... ¡¿Abuelo?! —casi todos estaban en shock en ese momento, pues no esperaban que el abuelo de su capitán fuera un héroe de la marina.
— Vaya que eres despistado Luffy sombrero de paja —el moreno reconoció esa voz y al instante miro a esa cabellera anaranjada sonriendo.
— ¿Nami? ¿Eres tu? —la pelinaranja sonrió feliz de volver a encontrarse con su dichoso amigo.
— Escapaste muy bien en Alabasta, aunque ahora no estoy aquí para atraparte, vine con mi maestro el Vicealmirante Garp a hacerte una visita —explicó mirando como la tripulacion había crecido y conversando un poco con casi todos.
— ¡Soru! —enfrente de Luffy ub pelirosado hacia su aparición, era Coby.
El día paso a un tiempo bastante rápido y el momento de la despedida llegó.
— La proxima vez si te voy a atrapar, podría apostarle —confiada esta miro directamente al muchacho de goma.
— Pues no creas que será fácil, tu arma lanza rayos no funciona contra mi —dicho eso ambos hicieron una apuesta, si Nami lo atrapaba antes de conseguir el One Piece, Luffy aceptaría ser encarcelado, si Nami no lo atrapaba antes de que Luffy ll consiguiera, abandonaría su vida de Marine.
Aunque ninguno sabría que más adelante, todo iría a peor....
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— ¡Detente! ¡¿Porque sigues luchando?! ¡¿Porque sigues arriesgando tu vida?! ¡No quiero pelear contigo! ¡No quiero que mueras! ¡No sigas luchando! ¡Huye de aquí Luffy! ¡No tienes nada que hacer en esta guerra! —las lágrimas de la pelinaranja resvalaban por su mejilla, no quería hacerlo, no quería luchar contra Luffy, no quería que el estuviera en ese lugar, en esa guerra, en la guerra de la cumbre, en Marineford...
— Debo... Salvar... A Ace... ¡No me rendiré hasta que Ace se vaya de aquí conmigo! ¡Nose si lo entiendes Nami! ¡Pero no voy a abandonar a mi hermano cuando lo quieren matar! —Luffy usando su segunda marcha paso junto a Nami sin que esta pudiera hacer nada, encaminados hacia la guerra, sin nada que hacer.
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— ¡Los sombrero de paja! ¡Han vuelto! —el grito de Helmeppo hizo que una Marine de cabellera naranja corriera velozmente, empujará al pobre Helmeppo y le quitara el periódico para rápidamente sonreír como nunca antes.
— ¡Esta vivo! ¡Lo sabía! ¡El rey de los piratas no puede rendirse! —mientras Helmeppo gritaba y hacia escándalo por lo que hizo Nami, Coby reía y detrás de la muralla Garp sonreía al ver a sus estudiantes llevarse tan bien, pero más de ver como ella había reaccionado a la noticia de Luffy.
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— No engañas a nadie con ese disfraz Luffy —en el coliseo corrida de Dressrosa se encontraron nuevamente.
— Te equivocas, yo no soy Luffy, soy Lucy —dijo el pirata con su disfraz tan bien ejecutado.
— Te eh visto imitando a Crocodile y eso te sale mejor que el disfraz que llevas ahora, me sorprende que el idiota de Cavendish no se haya dado cuenta —este siguió negando hasta que Nami le ofreció carne si le decía la verdad.
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— ¡Gear Fourth! ¡Bounceman! —frente al pirata de goma estaba el Shichibukai Donquixote Doflamingo.
La pelea entre estos fue dura y cuando Luffy necesito esos 10 minutos para recuperarse, alguien tomó su puesto.
— ¿Crees que lanzándose rayitos vas a ganarme? —el ex Tenryubito se reía de ella.
— No necesito ganarte, necesito aguantar durante 10 minutos, porque el que te derrotare es el futuro rey de los piratas, de eso no hay duda —siguió luchando contra los hilos de Doflamingo que esquivaba gracias a su gran Haki de Observación.
— ¿Una Marine creyendo en un pirata? Eso es raro —Nami molesta logra darle algo de pelea al Shichibukai.
— Pues el será el rey de los piratas, su voluntad hace que no se doblegue ante nadie ni se rinda, pero yo seré quien capture al rey de los piratas —con un último esfuerzo lanzó un puñetazo envuelto en Haki como se lo enseñó Garp durante los 2 años que Luffy estuvo desaparecido, era lo único que podía hacer con Haki actualmente, un puñetazo, le costaba controlarlo aun, pero fue suficiente para que Luffy volviera y acabará con Doflamingo.
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— ¡¿Que?! ¡Imposible! —Helmeppo grito tan fuerte que sus compañeros pensaron que estaba en peligro y llegaron lo más rápido posible.
— ¿Que sucede? —pregunto el peligrosa antes de partir en su misión de atrapar a Boa Hancock.
— ¿Te encuentras bien? —preguntó de igual manera la pelinaranja cuando esta partía a capturar a Buggy.
— ¡Hay un quinto emperador del mar! —los otros se miraron y con mucha curiosidad fueron a ver el periódico y al leer Nami sonrió de orgullo.
— El quinto emperador del mar... Me siento feliz por ti... Luffy —tras eso recorto la foto del periódico y se llevó a su misión con la excusa de que era para la buena suerte
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— Ganaste... —miro al rey de los piratas que estaba frente a ella.
— ¿Tu uniforme? —el estaba desconcertado de verla sin su uniforme.
— Ya no es mi uniforme... Ganaste la apuesta, pero de todas maneras te voy a capturar —saco su bastón y sonrió, Luffy también sonrió y empezaron una batalla.
— ¿No deberíamos ayudar a Luffy? —se cuestiono el Narizon desde el barco viendo como peleaban.
— No es necesario Nariz larga-kun, ellos no son capaz de lastimarse entre ellos —respondió la arqueologa.
— Parece que alguien se va a confesar —Zoro se rió viendo como Luffy sonreía mientras luchaba con Nami, la cual hacia lo mismo, la tripulacion sonrió al ver a su capitan tan feliz y más cuando ambos cayeron al suelo exhaustos y la pelinaranja se acercó al rey de los piratas.
— Te contuviste —dijo esta sonriendo apoyando su cabeza en el pecho del pelinegro.
— No... No tanto —rió este pasando su brazo por detrás de la cabeza de la ex Marine.
Finalmente lo que ambos esperaban, después de tanto tiempo ella no pudo atraparlo, pero si pudo atrapar sus sentimientos y eso quedó demostrado con un beso que se dieron en aquella isla que se habían encontrado, donde Nami dejó su uniforme de Marine y pasó a ser, la reina de los piratas.