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By _skywxlker

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โ€ขยฐ โ˜•๏ธi need a coffee break. . .
๐Ÿฌ๐Ÿฌ โ”€โ”€ ๐—ฒ๐—น ๐—ฐ๐—ผ๐—ฟ๐—ฎ๐˜‡รณ๐—ป ๐—พ๐˜‚๐—ถ๐—ฒ๐—ฟ๐—ฒ ๐—น๐—ผ ๐—พ๐˜‚๐—ฒ ๐—พ๐˜‚๐—ถ๐—ฒ๐—ฟ๐—ฒ
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By _skywxlker

━━━ CAPÍTULO UNO

❛𝗧𝗢𝗗𝗢𝗦 𝗟𝗢𝗦 𝗖𝗔𝗠𝗜𝗡𝗢𝗦 𝗖𝗢𝗡𝗗𝗨𝗖𝗘𝗡 𝗔 𝗚𝗥𝗘𝗖𝗜𝗔❜

( Charles's pov ).

diciembre 2021








❛ ¡MAX VERSTAPPEN, POR PRIMERA VEZ EN LA HISTORIA, ES CAMPEÓN MUNDIAL!❜.  La cabeza de Charles Leclerc estaba hecha un lio, la imagen de Max levantando el trofeo se repetía una y otra vez dentro de su mente. Se sentía decepcionado, como si no hubiera dado todo de sí mismo para poder conseguir el primer lugar en el campeonato de corredores. " ¡Charles Leclerc, por primera vez en la historia, es campeón mundial! ", ¿sonaba bien, no?. Comenzaba a creer que por más que sueñes algo con tanta fuerza, si la vida no lo tiene preparado para ti, jamás sucedería. 

Los problemas en la scuderia se hacían presentes, nadie estaba conforme. Comenzaba a sentirse miserable. Se sentía perdido, como si su lugar no fuera ese. Los periodistas lo volvían loco; "¿Qué piensas sobre el campeonato que hizo Max, Charles?", le preguntaban. Charles nunca había deseado tanto que la tierra se lo tragara. Mattia lo sacaba de quicio, por un momento pensó en las muchas maneras en que podría hacerlo cerrar la boca. Se arrepintió. Muchas de ellas lo llevarían a prisión. Decidió entonces que la mejor opción era mantenerse en silencio. 

El receso de la fórmula uno había comenzado hacía unos días, eran las cinco y media de la tarde cuando Charles se torturaba en sus pensamientos. Podría estar en un yate disfrutando de sus vacaciones, o viajando a Los Alpes para disfrutar de la nieve y un poco de esquí. Pero no, era todo lo contrario. Estaba encerrado en su lujoso departamento en Montecarlo, no tenía muchas ganas de salir, tampoco quería hablar con nadie. Comenzaba a creer que estaba entrando en un pequeño cuadro de depresión... 

Se sentía cansado, amargado y decepcionado. Sus pensamientos le jugaban en contra, no se sentía para nada bien. Charles estaba triste, él quería más de lo que podía conseguir; pero, al final, ¿no es eso lo que queremos todos?. Anhelaba más, quería ser el mejor del mundo, el número uno. Los días se  hicieron mucho más largos, casi interminables para Charles. Constantemente se replanteba su vida,  ¿qué quería en realidad?, ¿no estaba satisfecho con todo lo que había logrado?, ¿por qué nada sucedía como él deseaba?

The Strokes sonaba en sus auriculares, lo ayudaban a relajarse. Por unos cortos segundos, Charles no pensó en nada. Eso fue un alivio. ¿qué debía hacer para sentirse así por el resto de su vida?

Pese a ello, su realidad tomaba protagonismo nuevamente. Él había querido eso desde que era pequeño. Lo había compartido con su padre durante muchos años, antes de que falleciera. Lo comparte con uno de sus hermanos día a día. Todo giraba en torno a llegar a lo más alto, a ser un verdadero corredor de fórmula uno. Todos sus pensamientos y anhelos giraban en torno a volverse campeón mundial.  Al principio, amaba como su corazón latía con fuerza por la emoción, la euforia que sentía en su cuerpo al acelerar el monoplaza, el olor de las ruedas desgastadas y el calor que emanaba el asfalto de la pista cuando el sol pegaba en ella. 

Su padre lo entendía; lo hacía a la perfección de hecho. La vida era muy injusta a veces, te arrebata todo lo que quieres. Compartir la fórmula uno con su padre, por un corto tiempo, se sentía pleno. No habían ruidos en su cabeza, no existía tal exigencia. Lo hacía solo por placer; por compartir con él.  Charles recordaba cuando murió y lo poco que tardó en cambiar todo. Recordaba cada momento; el llanto de su madre y el dolor en sus hermanos. Su propio dolor. 

Quería ganar por él. 

Pero ahora, ya no se sentía de esa manera. Estaba apagado, no era el mismo de antes. Quería un cambio, buscar un nuevo aire. Encontrar un nuevo camino para él; ¿era tan difícil conseguir algo así?. Quizás la fórmula uno ya no era lo que quería para su vida; o  tal vez sí, pero Charles comenzaba a creer que no tenía idea de lo que quería para su vida.... Quizás el peso de la fama comenzaba a hacer efecto. Eso es lo que dicen... 

La mañana del día siguiente, su madre lo visitó. Podría decirse que prácticamente enloqueció cuando vio el estado deplorable en el que se encontraba su hijo. El amor de una mamá por su hijo es inmenso, y todas tienen ese inexplicable sexto sentido para saber cuando algo andaba mal. Pascale lo tenía multiplicado por un millón.  Charles sabía que la única persona que lo entendía, era su madre. Era, quizás, una conexión inexplicable. Su madre se sentó a su lado y le acarició, con ternura, la mejilla. Le sonrió,  y por unos cortos segundos, volvió a sentirse en paz. 

Mamma. — la miró con una leve sonrisa en su rostro. — Voy a estar bien, necesito relajarme unos días. —  minimizó, pensando que podría creerse esa gran mentira. —  Eso es todo, no te preocupes.

— Dile eso a tu rostro, hijo. — se burló, tratando de hacerlo reír un poco. — No soporto verte así. — acarició la mano de su hijo. — Quizás necesites alejarte de todo por un tiempo, Charles.

— Es imposible alejarme de esta vida, mamá. — suspiró, rascando un poco su barba crecida de hace algunos días. Nada puede alejarme de todo esto, pensó. — Salgo a la puerta y ya tengo mínimo cinco cámaras apuntando mi rostro, siguiendome en sus autos.— rodó los ojos al ver cómo su celular sonaba por décima vez en media hora. —  Mattia no ha parado de escribirme.

Ese sentimiento volvió a crecer dentro de Charles. Las mil y una opciones que pensaba para hacer callar a Mattia. Asesinarlo era una de ellas; rápidamente la borró de su mente, no era la opción correcta. 

Pascale odiaba ver a Charles así. Y, las madres siempre saben lo que necesitan sus hijos. 

Pascale recordó entonces que, en su juventud, antes de casarse y tener a sus hijos, había visitado una pequeña ciudad en una isla de Grecia. Alejada de todos, desconectada del mundo, con muy pocos habitantes que vivían de la pesca o el turismo. Placentera en muchos sentidos. La Canea era un lugar mágico, de esos lugares que te ayudan a encontrarte de verdad. Y, si alguien quería desaparecer del mundo por un tiempo, ese era el lugar perfecto. Muy pocos barcos hacían alguna parada en La Canea para bajar pasajeros, debías encontrar el indicado. Pascale, conocía al indicado. 

Pascale le envió un link de contacto a su hijo por Whatsapp, sin decir nada. Vio como su hijo leía atentamente la información que ofrecía el perfil de contacto que le había mandado su madre hace un par de minutos atrás. Su mirada se iluminaba y por su mente se cruzaba una loca idea. Tan loca que, en otro momento de su vida, no se le hubiera ocurrido hacer. Pero estaba desesperado; y las personas desesperadas, toman medidas desesperadas.

Será nuestro secreto. — su madre le guiñó con complicidad un ojo, viendo como su hijo se levantaba a abrazarla.

Grazie, Mamma. 





























🏎. . . 

Charles sonreía relajado recostado sobre la proa del barco que lo llevaba hacia La Canea. Sentía la suave brisa chocar en su rostro, el calor de los rayos del sol se sentía sobre sus mejillas. El aire que ingresaba a sus pulmones se sentía puro y, nuevamente, su mente se calmó.  Miró hacia el frente, notando como pequeñas casitas pintorescas se asomaban, sus colores se mostraban en total armonía y equilibrio, hermoso a la vista pero no abrumador. Notaba equilibrio en todos los lugares a donde mirase. Placentero, tal y cómo su madre lo había descripto. 

La vista era impresionante. Y por un momento se sintió totalmente agradecido. 

— Llegaremos a puerto en unos quince minutos, Charles. — Antoine era un viejo amigo de su madre, siempre se la pasaba viajando por el mundo y conociendo lugares de los cuales muy poca gente sabía. Era un hombre adulto, de aproximadamente unos sesenta y seis años, de mucho dinero pero poco ambicioso. Era sencillo, y se conformaba con estar sobre su barco y viajar a conocer el mundo. 

— ¿Y cómo mi madre y tú están tan seguros de que nadie me encontrará en este lugar?. — quitó su vista del paisaje por unos segundos. — Esto es hermoso, ¿cómo nadie sabe de él?.

— Todos los caminos conducen a Grecia, Charles. — sonrió, poniendo una mano sobre el hombro del castaño. — Pero no todos los caminos, conducen a La Canea. Solo quién en verdad lo necesite, logrará llegar. 

—Qué poético — se burló, sonriendo. — Hay...paz. — confesó admirando la claridad del paisaje. 

— Y te gustará aún más cuando conozcas el café de el viejo Dennis. — le recomendó Antoine, recordando a uno de sus más antiguos amigos. 

Todo se volvía real. Ya no había Ferraris, no había carreras, ni equipos. Estaba solo, como si estuviera a punto de comenzar una nueva vida. Todo desde cero, una nueva historia. Y, entonces, todo parecía encontrar su sitio. Charles bajó en el puerto y, ninguna cámara corrió a apuntarlo en el rostro, se sintió bien. Su madre y sus hermanos eran las únicas personas que conocían su ubicación, se sentía como un fugitivo. Estaba bien, el aire era pleno y el viento en su rostro generó una sensación extraña. Charles se sintió extraño. 

¿Era lo correcto?, pensó. No lo sabía.

El ruido de los motores, fue suplantado por el de las olas chocando contra la playa. El olor a combustible no existía; el aire era impregnado por ese olor a naturaleza, la sal del mar y un poco de olor a pescado a la parrilla; sonrió. Los gritos de los pescadores tratando de competir entre ellos por quien lograba sacar el pescado más grande, llegaron a sus oídos. Las  ruedas de las bicicletas chocar contra pequeñas piedras. 

Y, ese olor... Café. Un riquísimo café. 

Todo apuntaba a ser perfecto. 

Bienvenido a La Canea. 
































vota y comenta si te gustó. <3



























༄*ੈ━━━━━ NOTA DE LA AUTORA. OSEA YO, LOLA... 

Holaa! primer capitulo, cortito pero necesario. Conocemos un poco de como se sentía Charles y como llegó a La Canea. Pascale es todo, quería que ella tuviera esa importancia en ser quién le recomienda ese lugar a su hijo. Me pareció necesario.

Bebe Charles, todos queremos verte campeón. 

Dejenme saber que les pareció, y voten y dejen comentarios, me aydan mucho.

En el proximo capitulo conocemos un poquito de Olivia y prontito ellos se van a conocer. AMAMOS.

Besosss

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