☆ Jensoo Superhéroinas ☆
La vida como superhéroes dentro de una agencia encubierta encargada de mantener a la humanidad a salvo de amenazas extraterrestres es bastante complicada. O al menos lo es para Jennie y Jisoo. Quienes son parte de esta agencia desde los últimos diez años.
La primera en ser reclutada fue Jennie. Semanas después de graduarse con honores como piloto de las fuerzas áreas escuchó el timbre de su departamento. Al abrir la puerta se encontró con al menos 5 hombres portando un traje perfectamente uniformados. Los miro con extrañeza y cómo si fuera su hogar, entraron uno a uno sin decir una palabra.
—Seremos directos con ustedes, Mayor Kim— dijo uno de ellos después de unos minutos. Jennie se limitó a quedarse de pie con los brazos cruzados y una mirada mortal.—¿Alguna vez había escuchado de SWORD?
Jennie los miro confundida. Durante toda su estadía en bases militares, se decía que esa agencia era un mito, un secreto a voces.
—Su desempeño como piloto es excepcional, Mayor Kim. SWORD está buscando a alguien como usted. ¿estaría interesada en unirse a nosotros? de por hecho un salario mucho más que generoso y su nombramiento como jefa de nuestras fuerzas aéreas.
Lo demás es historia. Negaría si dijera que no amaba su trabajo. Pelear con naves espaciales se había convertido en algo de todos los días para Jennie. Se había vuelto experta en cómo lidiar con todo tipo de amenaza intergaláctica.
Por otro lado, Jisoo era parte de los superhéroes que conformaban SWORD. Nadie sabía con certeza cómo la reclutaron, pues toda su vida se había escondido del mundo. Desde el día en que nació le habían hecho creer que era una amenaza para la sociedad, en su defensa, ¿quien no pensaría algo así de alguien que nació con ojos púrpuras brillantes?
Hasta el día de hoy Jisoo—mejor conocida como Índigo en la agencia— como habían dado con ella. Supone que fue por aquel incidente en aquella tienda de conveniencia años atrás. Ni siquiera recuerda que había pasado, su mente se sentía borrosa cuando entró a esa tienda; al recuperar su consciencia la gente la miraba asustada y de sus manos salían aquellas auras iridiscentes.
Ambas chicas se conocieron meses después de haber entrado a la agencia. Se encontraban peleando en algún planeta en otra galaxia, lo usual. Esta vez era un poco diferente, pues la amenaza presentaba mayor riesgo, tanto, que estaban todos los sectores de SWORD peleando aquel día.
☆
—¿Te sientes bien?— preguntó Jennie. Su ahora prometida se veía preocupada, algo no usual en ella.
—Si, es solo que estas misiones me ponen nerviosa.— dijo riendo.— No se tu, pero jamás me acostumbrare a pelear con aliens.
Jennie soltó una carcajada.— Yo si estoy acostumbrada a pelear con ellos. Y por eso estoy segura que todo saldrá bien, siempre sale bien. Además, eres la mejor dentro de la agencia.
—No digas eso, todos son geniales aquí.— jamás le había gustado admitir que sus habilidades estaban por encima que la mayor parte de los demás superhéroes.
—Deberíamos irnos, creo que solos las únicas que faltan para abordar la nave.— dijo Jennie mientras rodeaba con sus brazos a Jisoo. Le dio un beso en la frente y caminaron a la estación de abordaje.
A los pocos minutos estaban frente a la gran nave que Jennie estaba a punto de navegar. Los demás agentes, soldados, y superhéroes las saludaron. Nadie sabía sobre su relación, pero algunos sospechaban; siempre eran las últimas llegar a las estaciones y era muy raro verlas separadas.
—Buen día agentes. Aquí la Kim, estoy a cargo de la misión del día de hoy. Saben las reglas, suerte haya abajo.— dijo antes de abrir las compuertas de la nave. Quienes iban a pelear en tierra bajaron. Algunos con paracaídas, y uno que otro contaba con el poder de volar, como Índigo.
El campo de batalla estaba extrañamente callado. Usualmente siempre había una formación de aliens enemigos esperándolos. Índigo, quien estaba a cargo de la división de superhéroes, dio unos pasos para ver si algo ocurría.
—Háblame, Índigo.— dijo la agente Kim a través de sus monitores en sus orejas.— ¿qué pasa allá abajo?
—No hay nada agente Kim. Ninguna señal de movimiento.
—No es una buena señal. Dispérsense y procedan con cuidado. Enviaré naves para ver si ellos logran ver algo. Out.— dijo antes de cortar la comunicación.
Jisoo suspiró y le dio las órdenes recibidas a su equipo. Mako, otra súper de su equipo iba junto a ella. Caminaban con precaución, viendo a todos lados esperando alguna señal de la agente Kim, o en su defecto, cualquier ataque sorpresa de sus enemigos.
—¿Logras ver algo?— preguntó Índigo a su compañera, quien convenientemente, su poder era la supervisión. Mako suspiró y puso dos dedos en el lado izquierdo de su cabeza, estaba preparando si visión.
—¡Veo algo!— murmuró.— No es bueno, son bastantes, creo que nos superan en números, Índigo.
Rápidamente Jisoo le hizo saber a todo el equipo lo que acaban de ver. En menos de un minuto estaban todos cerca del nuevo campo de batalla. Las naves que había enviado Jennie estaban volando sobre ellos. Ahora solo debían esperar y desear que aquellos aliens fueran algo con lo que ya habían lidiado antes.
—Posiciones listas, héroes. Los quiero a todos con los ojos bien abiertos. Yo cuido sus cabezas.— vociferó la agente Kim desde sus monitores.
Una gran explosión tomó lugar solo unos metros delante de ellos. De ella emergieron numerosas criaturas que rápidamente se dirigían hacia ellos con claras intenciones de eliminarlos. Las naves y equipo de héroes hacían lo mismo.
Todo parecía ir a la perfección. A pesar de tener desventaja en números, SWORD no llevaba ninguna baja, y el ejército de aliens mutantes, bueno, habían perdido a la mitad de su tripulación. A nadie la parecía extraño, excepto a Jennie.
—¿Qué tal las cosas allá abajo?— preguntó.
—Como esperábamos. Hemos eliminado a la primera mitad, agente.— respondió Jisoo con la voz entrecortada debido al cansancio.
—¿Disculpa? ¿podrías repetirlo?— la voz preocupada y confundida de Jennie detuvo a Índigo de golpe. No es la respuesta que usualmente recibe al decir que están a punto de ganar una batalla.
—Ya hemos eliminado a la mitad.— contestó. Se detuvo un momento antes de volver a hablar.— Ya hemos eliminado a la mitad... y solo han pasado quince minutos.— la realización golpeó a Índigo, esto no era bueno.
—¡Mierda!— grito la agente y llevo sus manos a su cabello de forma desesperada.— ¡Todos fuera del campo! ¡Ahora!
No era bueno. La agente se dio cuenta que todo había sido una emboscada. De acuerdo a sus diez experiencia normalmente tomaba una hora eliminar un cuarto de la tripulación enemiga. Estaban muriendo a propósito. Tramaban algo.
Los héroes, quienes seguían peleando con aquellas criaturas, dispararon y comenzaron a correr devuelta a la nave. Algunos, incluyendo a Índigo, seguían lidiando con ellos, tardarían más en poder llegar a la nave.
—¡Índigo, a tu derecha!— como si fuera un reflejo, la mencionada dejó salir un rayo hacia la dirección mencionada.
Al momento de lanzarlo se detonó una gran explosión. Todos se detuvieron, incluso los que estaban corriendo hacia la base. Lo poco que recuerda Jisoo fue ver cómo todas las criaturas—incluyendo las que habían eliminado— se levantaban y cambiaban su forma a una más grande y fuerte. Listos para pelear, esta vez de verdad. Habían utilizado sus poderes para volverse más poderosos.
Respiró de forma entrecortada y se congeló en su lugar.
—¡¿Qué acabas de hacer, Índigo?!— escuchó decir a todos sus compañeros. No sabían si seguir corriendo a la nave, o si debían quedarse a pelear.
Jisoo se sentía inmóvil, juraba que la voz que acababa de escuchar había sido de un miembro de su equipo, estaba más que segura. Pero todos la mirarán confundidos, con ira. Dio unos pasos hacia atrás y sintió sus piernas fallar.
—¡Regresen todos! ¡Los quiero corriendo y abordando la nave ahora!— Jennie gritó en sus monitores.
Todos corrieron y cómo se los habían ordenado, estaban arriba de la nave y evacuando aquel lugar desconocido.
—¿Qué demonios pasó allá abajo?— apreció la agente Kim con un semblante molesto. Mientras se acercaba a los demás superhéroes y agentes se sacó con frustración su monitor de su oreja.
—No sabemos, agente. Todos estábamos devolviéndonos a la nave, cuando de repente Índigo lanzó un rayo en dirección a la mitad que ya habíamos eliminado.— respondió un tripulante.
Todos asintieron y aseguraron que eso había pasado. Algunos incluyendo más detalles que otros.
—¿Qué tienes que decir, Índigo?— cuestionó la agente Kim.
Espero unos segundos por una respuesta. Nadie respondió. La tripulación comenzó a mirar a los lados buscando por Índigo.
—No tienes que esconderte, Índigo. Te hice una pregunta.— volvió a llamarla. Nuevamente nadie respondió.
En ese momento la tensión creció en la parte trasera de la nave. Todos seguían buscando con la mirada a la superhéroe mencionada. No les tomó mucho darse cuenta que no estaba en la nave.
Jennie sintió una punzada en el corazón y desesperadamente volvió a ponerse el monitor dentro de su oreja.
—¡Índigo!— llamó. No obtuvo respuesta.— Mierda, Índigo, ¡responde, es una orden!
Lo único que se escuchaba era la estática del monitor. Toda la tripulación la miraba con temor, jamás habían visto a la agente tan asustada y preocupada.
—¿A-agente Kim?— se escuchó de forma entrecortada del otro lado de la línea. Jennie suspiró tan aliviada al escuchar su voz que sintió sus piernas flaquear.— Lo siento, no se qué pasó. Se han ido, se han ido sin mi.— dijo Jisoo. A pesar de apenas poder escucharla debido a la interferencia en el monitor, Jennie noto el tomo asustado en su voz.
—Volveremos por ti, Índigo, ¿estás a salvo?— preguntó Jennie con la voz entrecortada.
—No, creo que todo este tiempo han estado tras mi. Son demasiados.— dijo Jisoo con la poca energía que le quedaba. De pronto la agente escuchó un gritó del otro lado del monitor y se cortó su comunicación.
—¡Indigo!— subió la cara y se encontró con las miradas de la tripulación. La miraban con extrañeza, confundidos y con temor.
Esta no era la agente Kim a la que estaban acostumbrados. Sus ojos se llenaron de lágrimas a los pocos segundos y fue corriendo al centro de pilotaje de la nave. Se encontró con su copiloto, quien había tomado su lugar cuando ella había salido a hablar con los demás.
—Agente Kim, ha vuelto. ¿cómo les fue? salió bastante apurada de aquí.— dijo el copiloto de forma animada al verla entrar.— ¿quiere tomar el volante ahora? estamos a menos de 5 minutos de volver a la tierra.
Jennie volvió a sentir otra punzada en el corazón.— Tenemos que regresar.— logró decir, se encontraba al borde de las lágrimas.
—¿Disculpe?— rió su compañero.— Sabe que no podemos hacer eso, agente. Es parte del protocolo no volver al campo de batalla si las cosas salen mal. Además, ¿por qué necesitamos volver?
Jennie dejó caer sus lágrimas al escucharlo.— Índigo no logró abordar la nave, ocurrió un incidente, está en peligro.— dijo con la voz entrecortada.
Su compañero la volteó a ver y abrió la boca ligeramente en forma de sorpresa. Índigo era una de las personas más queridas dentro de SWORD.
—Debo llamar al centro de control. No podemos volver.— dijo en voz baja mientras veía cómo su compañera lloraba y temblaba. Tomó la radio y la encendió.
—A la mierda el protocolo y el centro de control. Yo estoy al mando de esta misión y yo digo que hacer. Da la vuelta en este instante.— su miedo se transformó en ira y miró al copiloto a los ojos, quien solo asintió asustado.
Jennie volvió a la tripulación y comenzó a buscar algo por toda el área. Los demás superhéroes comenzaron a hacerle preguntas de forma masiva.
¿Vamos a volver? ¿Índigo está viva? ¿Agente, se encuentra bien? ¿Estamos yendo de regreso?
—Agente, ¿que está haciendo? no podemos volver.— escuchó a uno de ellos, fue la gota que derramó el vaso.
—¡Todos ustedes son unos malagradecidos! Índigo sí hubiera vuelto por ustedes.— dijo molesta mientras alistaba su uniforme.
—Pero agente, no podemos volver a pelear con ellos. Eran el doble de poderosos esta vez, vamos a acabar muertos.— dijo un agente. Los demás asintieron preocupados.
—¡Nadie les está pidiendo que bajen de nuevo! Iré yo.— dijo con la respiración agitada y las manos temblorosas.— Índigo está en peligro y si alguien debe ir a buscarla soy yo. Preparen el equipo médico y todo lo que lleguen a necesitar.
Fue lo ultimo que dijo antes de saltar de la nave hacia aquel planeta desconocido. Era un área gigante y no sabía cómo comenzar a buscar a su prometida. Su vista se nublaba ocasionalmente por las lágrimas acumuladas en sus ojos, y se tropezaba debido al temblor en sus piernas. No había señal de Jisoo, solo algunas criaturas muertas a lo largo del campo de batalla.
Sentía que tenía el corazón en la garganta. Tenía tanto miedo, su mente se imaginaba los peores escenario posibles.
—¡Jisoo!— la llamó por su nombre real. Esto dejó de tratarse de un asunto de la agencia el momento en que se enteró que la involucrada era su prometida. La tripulación tenía acceso a su monitor, así que podían escuchar todo lo que decía. Para algunos fue una gran sorpresa, para otro, solo una confirmación de sus sospechas.
—¡Jisoo necesito que envíes una señal! Lo que sea, solo necesito saber que estás a salvo.— su voz se rompió al decir la última palabra.
Caminó por unos metros más hasta que de pronto vio unos destellos iridiscentes del otro lado del que había sido el campo de batalla. Sintió como su alma regresó a su cuerpo y comenzó a correr a esa dirección gritando su nombre entra lágrimas.
En el camino se tuvo que enfrentar con algunas de las criaturas restantes, de las cuales se deshizo rápidamente con un arma, después de todo, había tenido entrenamiento militar.
—¿Jisoo? oh no, no.— dijo al ver el cuerpo de su novia en el suelo, inconsciente y bastante lastimado.— ¿Estás bien, necesito saber si puedes oírme?— dijo nuevamente con lágrimas sobre su rostro.
Espero unos momentos y el dedo de Jisoo se movió ligeramente para dejar salir un único destello para después bajar lentamente. Jennie sonrió y la abrazo con cuidado. Cómo pudo, levantó a su novia y lo cargó de vuelta a la nave los más rápido que su cuerpo le permitía. Dentro de ella la espera toda la tripulación y el equipo médico. Se introdujo en ella rápidamente y corrió con su prometida en sus brazos hacia el área médica.
—¡Vuela ahora!— le ordenó a su copiloto, quien asintió y se adentró a la cabina de pilotaje.
Uno de los doctores tomó a Índigo y la llevó con cuidado a una de las camas preparadas. Jennie corrió pero unos brazos la detuvieron. Era su tripulación.
—Agente, no puede entrar.— le hicieron saber. Ella los miro desesperada, pero seguían sin soltarla.
☆
Jisoo despertó después algunos días. Cuando abrió los ojos ya estaba en la tierra y no recordaba cómo había llegado a esa camilla. Su cabeza dolía y sentía su cuerpo débil. Estaba cansada. No se esforzó mucho en intentar recordar, estaba en la base de SWORD, estaba a salvo.
Su mente divagó sobre Jennie, se preguntaba dónde estaba. Supuso que en alguna misión, es lo que hacía todos los días. También sabía que su relación seguía siendo un secreto y una agente no tendría porque estar todo el día a lado de una héroe herida.
—Que alegría ver que has despertado, Índigo.— una enfermera entró a su habitación con algunos medicamentos en la mano. Jisoo le regalo una pequeña sonrisa, aún estaba débil.
—¿Cuánto tiempo llevo aquí?— preguntó.
—Dos días. Llegaste muy herida después de la misión, todos tenían miedo de que no lo lograrías. Pero yo estaba segura que estarías bien. No eres como los demás, llevas el poder en tu sangre, siempre logras sanar.— dijo tranquilamente mientras revisaba todas las intravenosas a las que estaba conectada Jisoo.
Tenía tantas ganas de saber sobre Jennie, no sabía cómo preguntar sin levantar sospechas.— Uhm, tengo una pregunta. ¿Sabe si la a-
—¿La agente Kim? no debe tardar en llegar.— la interrumpió. Jisoo la miró confundida y con la boca entreabierta por la sorpresa. La enfermera se percató de su reacción y soltó una carcajada.— Toda la agencia sabe sobre su relación, Índigo.
La mencionada abrió los ojos con sorpresa. Intento hablar pero estaba en shock.
—Cuando la ingresaron al área médica de la
nave, la agente Kim intento entrar pero la tripulación la detuvo. Estuvo forcejeando con ellos un rato hasta que gritó ¡Ninguno de ustedes me va a prohibir ver a mi prometida!
La puerta de la habitación se abrió, era Jennie. La enfermera le dio una mirada graciosa a Jisoo y las dejó solas. Una vez salió, Jennie corrió y se lanzó con cuidado a los brazos de su novia mientras enterraba su rostro en ella. Jisoo la envolvió en un abrazo cálido. Levantó su rostro para encontrarse con los ojos llorosos de Jennie.— Me tenías tan preocupada.— dijo en voz baja.
—Estoy bien, sabias que estaría bien.— dijo mientras ponía sus manos sobre su rostro y secaba sus lágrimas.
—Lo sé, pero era imposible no hacerlo, ¿sabes lo difícil que es salir a misiones sin ti, o sin escuchar tu voz en el monitor? es una tortura.
—No debes que sufrir más.— dijo entre una risa suave.— Ahora puedo acompañarte a todos lados, al pareces nuestro compromiso ya no es un secreto.
Jennie rió y su cara se tornó roja. Jisoo volvió a tomar su rostro y cerró la distancia que había en un corto beso. Se separaron cuando escucharon como la enfermera soltaba un chillido de emoción y su cabeza se asomaba por la puerta.
se me ocurrió esto después de soñar con superhéroes 🥲
¿les gusta más dc o marvel? (en lo personal prefiero marvel <3)
les dejo un visionboard para que puedan imaginar la visión que tenía de jichu y jennie. ojalá hayan disfrutado el capítulo 💗