' ๐’๐Ž๐Œ๐„๐Ž๐๐„ ' | Alice in...

Oleh yxvis0

2.9K 335 21

๐Ÿง ๐ŸฅŠ || ๐’๐Ž๐Œ๐„๐Ž๐๐„ "๐˜“๐˜ข ๐˜ง๐˜ถ๐˜ฆ๐˜ณ๐˜ป๐˜ข ๐˜ฆ๐˜ด ๐˜ฑ๐˜ฆ๐˜ญ๐˜ช๐˜จ๐˜ณ๐˜ฐ๐˜ด๐˜ข, ๐˜ฑ๐˜ฆ๐˜ณ๐˜ฐ ๐˜ญ๐˜ข ๐˜ช๐˜ฏ๐˜ต๐˜ฆ๐˜ญ๐˜ช๐˜จ๐˜ฆ๐˜ฏ๐˜ค๐˜ช๐˜ข ๐˜ฆ๏ฟฝ... Lebih Banyak

SOMEONE
I
II
III
IV
V
VI
VIII
VIX

VII

211 36 2
Oleh yxvis0




"EGOCENTRIC BOY"
episode seven





— Hay mucha gente.

— Si, me preguntó si hay un médico.

Karube y Arisu pasaron primero, ambos murmuraban mientras se acercaban al centro del grupo de personas. En cuanto se alejaron de la mesa y se acercó a tomar un telefono para ella.

Al terminar reconocimiento facial, se dirigió a una de las paredes del edificio y se apoyó en esta, a su izquierda estaba el par de amigos y a su derecha un chico con cabello blanco.

Lo miro de reojo estudiándolo, noto su sudadera y cabello blanco, tenía puesta su capucha tapando un poco su rostro. Pestañeó un par de veces pensativa y se miro a sí misma, su sudadera y cabello negro al igual que su capucha puesta.

Irónico.

Suspiro concentrándose y empezó a mirar alrededor, estudiando a todos sus oponentes como cada vez que entraba a un juego.

Los chicos también miraban el lugar. Antes de salir les explico de la mejor manera que en cuanto a los juegos se trataba, se le daba mejor completarlos sola. Si es que no era un juego de trébol intentaría resolverlo como usualmente lo hacía, por si misma. Pero les prometió que de igual forma les ayudaría en lo necesario, no pensaba dejarlos a la deriva así como así, después de todo no estaba muy segura si las cosas seguirían así, pero los consideraba sus compañeros momentáneos.

Una parte de ella no quería que alguno de ellos muriera tan pronto.

Un chico con una gorra que tenía un logo de algún local de mecánica, una chica de pelo corto, una mujer con lentes, dos nombres en traje, dos chicas adolescentes, el chico de pelo blanco a su lado, y su vista se detuvo en cuanto llegó a el último par de hombres.

El también la observaba, justo como la primera vez que lo vio hace semanas, lo recordaba, claro que lo hacía. Su nombre, ese chico en traje de baño lo mencionó.

Aguni.

Apretó los labios frunciendo un poco el ceño, no entendía que tenía ese tipo pero el hecho de que la estudiara cada vez que lo veía le estaba molestando. No le sorprendió mucho que siguiera vivo, se veía como un jugador fuerte. Le costaba leer su actitud, eso la frustraba un poco.

Desvió la vista en cuanto sintió una mano posarse en su hombro. Karube la miraba con el ceño fruncido.

— ¿Todo bien? — El rubio miro de reojo al tal Aguni que ahora solo observaba a la pared totalmente serio, era obvio que había notado ese intercambio de miradas y su postura tensa.

— Si — Asintió sin dudar, sería. — ¿tú?

— Todo bien. — Asintió de igual forma, sacando la mano de su hombro. Llegó a notar como Nyoko se volvía mucho más inexpresiva e indiferente en cuanto llegaba a un juego.

Ambos volvieron su vista al teléfono en cuanto sonó.

El registro se a cerrado. Hay un total de 14 participantes, el juego está por comenzar.

Se sacó la capucha respirando hondo y movió su cabeza haciendo su cuello tronar.

— Disculpen... ¿que es esto? ¿que está sucediendo? — El chico con gorra se acercó a Arisu y Karube perdido.

Ella solo miro a otro lado ignorándolo y dejándoselo a el par, no quería lidiar con más chicos nuevos, tenía suficiente con los suyos.

Nivel de dificultad: 5 ♠️

Sonrió internamente.

— ¿Cinco de picas? — Karube se giró hacia ella confundido.

— Es un juego físico. — Un hombre se adelantó a responder mientras se acercaba. Llevaba un feo sombrero y una sonrisa de embaucador que le hizo saber que debía mantenerse lo más alejada posible de el. — Aquí la fuerza lo es todo. Soy Nitobe, un placer.

Karube lo miro de arriba abajo en cuanto le ofreció la mano para presentarse, el chico simplemente miro a otro lado ignorándolo. Pero Arisu lo vio como una forma de obtener información.

— ¿Cada palo tiene un significado? — Le preguntó, el hombre sonrió triunfante y asintió, ahora estirando su mano en dirección al desaliñado.

— ¡Exacto! — Nyoko noto como el tipo le dio un buen apretón en cuanto estrechó manos con Arisu y su expresión se volvía más seria. — El palo de la baraja por lo general indica el género. El trébol es juego en equipo, diamantes es de ingenio, y el de corazones... — Volvió a sonreír al parecer muy divertido. — Esos son los más problemáticos.

— ¿Problemático? — Arisu frunció el ceño y le dio una rápida mirada a la Ahane que los observaba seriamente.

— Si, es un juego de traición, juegas con el corazón del otro.

El chico se mantuvo un segundo en silencio y trago saliva con dificultad. — ¿y los números?

— La dificultad. — El sujeto se encogió de hombros y se apoyó a su lado observando el teléfono. — Cuanto más alto el número, más difícil de terminar. — Nitobe levantó la vista y se giró a verla, Nyoko tuvo ganas de darle un golpe en cuanto le sonrió como pervertido. — Oh no me presente con su compañera, es todo un gusto, soy Nitobe, ¿me dices tu nombre preciosa?

— No.

Le presto atención al teléfono ignorando la mueca del sujeto, al igual que el carraspeo de Karube con el cual intento ocultar su risa.

Juego: tocado.
Reglas: huir de la cosa.

Un murmullo se creó entre los jugadores que se notaban eran nuevos.

— ¿Quien es la cosa? — Arisu le susurró al rubio.

— ¿Como voy a saberlo?

Nyoko los chito a ambos haciendo que la miraran. — Presten atención.

Volvió la vista al teléfono en cuanto ambos obedecieron sin rechistar y se quedaron en silencio esperando saber con que condición debían ganar.

Condición para ganar: descubrir la zona segura que está en uno de los cuartos en el tiempo estipulado. Terminará el juego en cuanto cumplan con el objetivo.

Tiempo límite: 20 minutos.

Tras los 20 minutos, explotará la bomba de tiempo escondida en el edificio.

Guardo el teléfono en su bolsillo mientras pensaba la manera más práctica de ganar el juego. Era muy parecido al primero en el que participó ¿es que la cosa también será un animal? esperaba que no.

Podría usar la misma técnica que en las escondidas, se había subido a una repisa para poder ver todo el panorama del lugar. Debía encontrar un punto exacto en el edificio y así localizar en todo momento donde estaba la cosa, además de tener vista a todas las habitaciones.

Si había alguna pista, seguramente la vería desde el último piso.

Fue una de las primeras en moverse y acercarse a las escaleras, Karube y Arisu la siguieron al instante. Le irritaba un poco como algunos jugadores pasaban por su lado corriendo despavoridos y chocando con ella, así que suspiro en cuanto ya solo quedaban ellos en las escaleras.

Quedan dos minutos para que comience el juego.

— Tienes algo en mente ¿verdad? — El castaño le preguntó observándola.

— Si. — Asintió sin detenerse, iban por el tercer piso. — pero si lo digo prefiero que ese tipo no esté aquí.

— Ya deja de seguirnos. — Karube bramó molesto, el tal Nitobe caminaba detrás sonriendo, sin despegarse de ellos ni un segundo, parecía garrapata.

— Los estoy midiendo, tal vez sean buenos aliados míos. — Comentó manteniendo las manos en sus bolsillos.

Rodó los ojos con algo de burla pero no dijo nada, ese sujeto enserio pensaba que iban acceder a ser sus compañeros, tenía demasiada confianza en si mismo. Seguramente en el Shibuya real era un vendedor o agente de algún tipo de negocio, tenía buena labia y era demasiado cabeza dura como para tener otro oficio.

— Que chistoso. — Karube sonrió falsamente mientras se ponía a su altura, dejando detrás a Arisu y Nitobe. El castaño parecía ser el único dispuesto a estar cerca de él.

— ¿Eres médico? — Nyoko negó sin creérselo ante la pregunta del desaliñado, claramente no lo era.

— No, agente inmobiliario.

Soltó una pequeña risa, sabía que tenía razón.

— ¿Y tu preciosa? ¿Que hacías antes? — Nitobe le preguntó al escucharla reír. El par de chicos también la miraron por un segundo, ellos tampoco lo sabían, no habían sacado el tema.

Lo miro de reojo indiferente y se encogió de hombros. — No es de tu incumbencia.

— ¿Mhm? Una mujer reservada, entiendo. — El asintió mirándola sonriente de arriba abajo.

— ¿Cuál es el plan? — Karube preguntó a la chica mientras se acercaba a ella y le daba una mala mirada al sujeto, ya dando por hecho que no se despegaría de ellos.

— Es un juego de picas, habilidad física. Pero no puedo simplemente correr por todo el lugar abriendo puertas, así que iré al último piso donde tendré a la cosa en la mira todo el tiempo al igual que los cuartos. Será más fácil encontrar la zona segura.

— También una cerebrito, serás una buena aliada. — Nitobe se le acercó por detrás sonriendo, demasiado para su gusto. Frunció el ceño y estuvo por darse vuelta y alejarlo de un empujón, pero alguien se le adelantó.

— Es suficiente, aléjate ¿quieres? — Karube puso una mano en su hombro mirándolo con el ceño fruncido. El de sombrero alzó ambas manos con una sonrisa divertida.

Suspiro bastante irritada y le dio un empujoncito al rubio para que siguiera caminando y lo ignorara. Al llegar a las escaleras que llevaban al sexto piso se detuvo y miro a los chicos.

— Yo iré al último piso ¿tienen pensado que harán? — Los miro alzando las cejas, ignorando olímpicamente al de sombrero. Quería saber cómo se las planearían ellos mismos, no iba a entrar a todos los juegos con ellos así que esperaba tuvieran iniciativa.

— Si estarás en el último piso, podemos revisar los cuartos y encontrar la zona segura. — Arisu respondió dudoso. No le gustaba mucho la idea de tener que escapar de la cosa pero no tenía otra.

Nyoko asintió en silencio, pensativa. Un dilema rondando en su cabeza, no estando segura de si correría mucho riesgo ayudándolos con lo que estaba por decir, pero haciéndolo de todas formas. — Si veo que están en peligro, intentaré llegar rápido a ayudarlos ¿okay?

En cuanto ellos asintieron se apresuró a terminar de subir las escaleras. Tenía ideas contradictorias, podría llevarlos con ella al último piso, pero tanto ella como Arisu entendieron que cuatro personas en un mismo lugar llamaría mucho la atención, serían cuatro porque el tal Nitobe ya parecía una lapa.

Al llegar al último piso suspiro acercándose a la esquina del pasillo, pero frunció el ceño cuando escuchó detrás de ella las puertas del ascensor abrirse.

Se giró mientras se apoyaba y alzó una ceja en cuanto se encontró con el chico de sudadera blanca. Este ni se inmutó en cuanto cruzaron miradas, pero noto como alzaba las comisuras levemente a la vez que caminaba con porte relajado.

Parecía como si estuviera caminando en su propia casa, la mirada altiva que mantenían sus ojos hacían que los suyos se entrecerraran en su dirección, ni si quiera había cruzado palabra con el pero estaba segura que ese sujeto pensaba que era mejor que todos en el lugar.

Lo observo fijamente hasta que llegó a su lado y se apoyo de igual forma, ambos en completo silencio.

— Como posición inicial este es el lugar perfecto. — el chico comentó y finalmente se giró hacia ella. — ¿no crees?

— Claro. — Respondió indiferente encogiéndose de hombros, volteando hacia el frente para observar el panorama. No tenía muchas ganas de hacer amigos, solo quería que el juego terminara de una vez.

Otro silencio se hizo paso, donde ambos solo observaron a los jugadores correr de un lado al otro, pero sentía como el chico la miraba de vez en cuando.

Su postura se tensó en cuanto por el pasillo frente a ellos apareció el tal Aguni junto a otro hombre, pero se sorprendió al ver como el chico a su lado les sonreía y los saludaba agitando la mano, como si fueran amigos desde siempre.

El militar miró al rubio con mala cara y luego desvió su vista hacia ella por unos segundos, antes de girarse e irse por otro pasillo.

— Que desagradable. — comentó el chico aún observando por donde se fue el par.

— Mhm. — contestó sacudiendo un poco la cabeza y volviendo a concentrarse, intentando ver en que piso se encontraban sus compañeros.

El rubio miro su perfil atentamente, detalló la cicatriz que cruzaba su mejilla y concluyó que seguramente se la hizo en algún juego, también le llamó la atención el color de sus ojos, eran de un marrón demasiado claro.

— ¿lo conoces? — le preguntó a la chica curioso, refiriéndose al militar.

— ¿tu lo conoces? — devolvió la pregunta alzando una ceja, era claro que lo hacia y al parecer al hombre no le caía bien.

— Algo así. — asintió cruzándose de brazos con una pequeña sonrisa, parecía divertirle sus cortas respuestas. Si el ya era de pocas palabras, la chica era el doble. — A ver... parece que todos están por morir, como siempre.

— Te acostumbras. — Nyoko se encogió de hombros y no dijo más. Decidida a dejar de hablar con ese egocéntrico chico y prestar atención a lo que estaba por suceder, ya que solo quedaban segundos para que el juego empezara.

No le paso desapercibido como negó con la cabeza ocultando su sonrisa.

El juego está por comenzar, el tiempo es de 20 minutos y... empiecen.

Un silencio abrumador lleno el edificio al mismo tiempo que unas trompetas sonaban desde algún lugar. No lograba encontrar a Arisu y Karube así que supuso estarían en alguna esquina escondidos.

El elevador se detuvo un piso abajo y escuchó las puertas abrirse. Ignoro el escalofrío que la recorría cada vez que un juego empezaba y se asomó un poco. En cuanto el sujeto con cabeza de caballo apareció se alivió un poco, con esa máscara su visión debía ser muy limitada así que no podría verlos a menos que estuvieran justo frente a él.

Este llevaba un arma, probablemente una ametralladora. El hombre era muy grande y corpulento, debía de ser militar o algo parecido. Si pudiera quitarle el arma habrían posibilidades de que logre vencerlo, pero no le hacía sentido que se confiara de una simple arma y su fuerza, probablemente llevaba otra arma escondida en alguna parte de su chaqueta por si acaso.

— Tendría que quitarle ambas armas... — murmuró pensativa, olvidándose por un momento que ese chico seguía allí.

— ¿Piensas enfrentarlo tú sola? — el rubio preguntó llamando su atención, sus cejas estaban alzadas mientras la miraba con atención.

— ¿Piensas que no podría? — entrecerró los ojos, una de las cosas que más le molestaba era ser subestimada.

— No e dicho eso, pero hacerlo sola sería algo estúpido. — se encogió de hombros mirándola divertido ante su ceño fruncido. — Más considerando que...

— Si si, el arma escondida. — Lo interrumpió y asintió respirando hondo. El chico era inteligente, de eso no había duda. Pero no podría decir si le agradaba o no esa actitud suya. — Probablemente sea un arma blanca, es más fácil de cargar y para mí más fácil de quitar.

Cerró los ojos por un segundo diciéndose a su misma que se focalizara, el tono altivo que usaba hacía que quisiera responder a todas sus palabras y así cerrarle la boca.

— Te diste cuanta, nada mal.

Rodó los ojos ladeando la cabeza y pidiendo paciencia. ¿Nada mal? enserio empezaba a molestarle.






NEXT LEVEL?
—>

Lanjutkan Membaca

Kamu Akan Menyukai Ini

377K 12.2K 32
โ€ขโ’น๏ธŽโ’บ๏ธŽโ“ˆ๏ธŽโ’ธ๏ธŽโ“‡๏ธŽโ’พ๏ธŽโ“…๏ธŽโ“‰๏ธŽโ’พ๏ธŽโ“„๏ธŽโ“ƒ๏ธŽโ€ข ๐Ÿ–คใ‚ใชใŸใฏ็งใฎใ‚ธใƒงใƒผใ‚ซใƒผใงใ™๐Ÿ–ค แดกสœแด แด‡xแด€แด„แด›สŸส ษชs แดŠแดแด‹แด‡ส€? แดกสœส แด…แดแด‡s แด›สœษชs ษขแดœส แด‹แด‡แด‡แด˜ แด„แด€สŸสŸษชษดษข แดแด‡ แด›สœแด€แด› Chishiya x Fem!Reader
11.9K 188 37
Rozonda tries to hide her strange crush for the bad girl in town from her boyfriend Chris. Her bestfriend Meah only knows about this secret, its hard...
Doors open. Oleh ash

Fiksi Penggemar

551K 8.5K 85
A text story set place in the golden trio era! You are the it girl of Slytherin, the glue holding your deranged friend group together, the girl no...
84.4K 1.4K 16
In the Game of tag is where it began...