DELICATE | julián álvarez

By lvndrhaze

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"Mi reputación nunca estuvo peor, y soy consciente de que esto no es lo mejor, pero aún así me gustaría que m... More

DELICATE
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By lvndrhaze


— GIANNI, CORAZÓN, ¿DÓNDE ESTÁ EL BOLSO DE ALLEGRA? Así le preparamos una meme antes de ir a la visita.

— Está en la mesa de la cocina Cathy. —respondió Gianna dejando de mirar la valija que estaba abierta en el piso frente a ella para colocar su mirada en la puerta de la habitación que le había tocado con su hija— También está el bloqueador ahí adentro, hay que ponerle un poco porque pega bastante fuerte el sol acá.

— Perfecto, ahora mientras Ori le prepara la leche yo le pongo bloqueador.

— Gracias Cathy. —la mujer venezolana le dedicó una sonrisa afectuosa antes de alejarse hacia la cocina, dejando a la chica con su tarea nuevamente.

Unas horas atrás las dos mujeres Dybala habían llegado a Qatar, siendo recibidas por Oriana y su madre, Catherine Fulop, quien tan solo ver a Allegra se había acercado para llenarla de besos y abrazos. Desde que Allegra había nacido, Catherine la había tomado como su nieta, viendo también a Gianna como una hija más, la mujer tenía adoración por la chica desde que la había conocido gracias a la relación de Oriana y Paulo, y ni que hablar de la adoración que tenía por Allegra.

Era veinticinco de noviembre, al día siguiente se llevaría a cabo el partido de Argentina contra México, y siendo el día previo al partido les habían dado unas horas para visitar a los jugadores en el predio de la Universidad de Qatar donde se estaban quedando. Mientras Oriana y Catherine pasaban tiempo con Allegra, Gianna aprovechaba a ordenar sus valijas para ya dejar todo armado antes de irse con ellas para ver a Paulo y los demás.

Junto a Oriana se estaban quedando en un departamento que estaba cerca del centro de Doha, todo gracias a Osvaldo Sabatini que les había dado una mano en la búsqueda, encontrando una opción perfecta para las tres. Ni bien habían bajado del avión, la cordobesa había recibido un mensaje de Paulo preguntándole como estaban y como había estado el vuelo, aunque no había sido el único, porque Julián también le había escrito queriendo saber lo mismo, queriendo saber como se sentían, como estaba Allegra y si había sido un viaje complicado. Gianna no había podido evitar el revoloteo que sintió en su interior ante ese simple gesto por parte del portador de la camiseta número nueve, repitiéndose a sí misma que solo eran amigos, que no viera cosas donde no las había.

La de ojos claros soltó un quejido cuando se puso de pie, sintiendo como se le habían acalambrado las piernas por haber estado tanto en cuclillas, tomando su teléfono que estaba en la cama para ir hacia la parte de la cocina. Gianna sonrió al ver a Allegra sentada mientras Catherine terminaba de pasarle el bloqueador y Oriana guardada la mamadera con la leche caliente en una bolsita térmica para que se mantuviera la temperatura.

— ¿Ya estás Gia?

Ante la pregunta de su cuñada, la cordobesa asintió— Ya dejé todo acomodado, así después no me vuelvo loca buscando las cosas.

— Vamos yendo entonces, Caro y Agustina me dijeron que ellas ya estaban saliendo, así que estamos bien de tiempo.

— ¿Vamos mi amor? —Gianna se agachó frente a Allegra, colocándole un piluso de su tamaño que combinaba con el color de su ropa. La nena asintió, estirando sus brazos para que su madre pudiera alzarla a upa.

Así, las tres se dirigieron hacia donde estaba estacionado el auto que habían alquilado para poder movilizarse sin problema, Catherine ayudando a llevar el paragüitas de la nena mientras Oriana llevaba el bolso con todas sus cosas y un bolso con el equipo de mate. En el viaje hacia la Universidad, Catherine se había puesto a hablar con las chicas sobre como iban a ser las cosas en Por el Mundo Mundial, los lugares que iban a visitar, y de qué iba a ir la visita a la que Oriana había sido invitada. La modelo ya le había comentado un poco sobre eso a Gianna, y la cordobesa iba a acompañarla con Allegra, pero ellas dos iban a quedarse fuera de cámara mientras los demás hacían el programa.

Cuando llegaron al predio, las tres mostraron sus identificaciones para corroborar de que estaban dentro del grupo de visitantes. Justo cuando ellas llegaban, también lo estaban haciendo Carolina y Agustina acompañadas de la pequeña Nina, que se emocionó al ver a Allegra. De esa forma, el grupo de mujeres ingresó charlando, hablando de como había ido el viaje de Gianna y Alle, de donde se estaban quedando y de que tenían que organizar para salir a recorrer juntas.

— Pau dijo que iban a estar todos en el patio de atrás, que teníamos que pasar por el costado. —explicó Oriana, mientras pasaban por el lateral del edificio. Gianna tenía su mirada en Allegra, que caminaba unos pasos más adelante con Nina, abrazada a sus peluches de Pascal y Sullivan, no queriendo dejar ninguno en el departamento.

Y así era. Cuando las mujeres llegaron al patio trasero, ya varios de los jugadores se encontraban con sus familiares, hablando, tomando mate y riendo. Algunos se habían juntado con otros jugadores, por lo que se habían juntado varias familias, como era el caso de los Messi y Di María, o el de los Otamendi y los Gómez.

— ¡Tío Pau! —Gianna sonrió viendo como Allegra salía corriendo hacia donde estaba Paulo hablando con Leandro. Con rapidez, Paulo se levantó de su asiento para agacharse con sus brazos abiertos, recibiendo a la nena con un gran abrazo.

— ¡Hola princesa del tío! —Paulo la alzó, dejando muchos besos en sus cachetitos provocando que Allegra riera— ¡Hola Gia! —el cordobés abrió uno de sus brazos para que Gianna pudiera acercarse, rodeándola en un fuerte abrazo, cargado de amor y cariño— Dios, las extrañé muchísimo. —murmuró dejando un beso en la cabeza de Gianna.

— Nosotras también Pau, teníamos muchas ganas de verte ya.

El resto de los jugadores que estaban ahí se encontraban mirando a los hermanos Dybala sonriendo, al igual que sus familias que ya conocían a Gianna y Allegra, mientras Paulo y ella se ponían a hablar con Oriana, Cathy y los Paredes. Entre esos estaba Julián, que miraba sobre todo a Gianna y la nena, sin poder evitar sonreir al verlas reír felices.

Julián tenía ganas de acercarse y saludarlas, de darles un abrazo y disfrutar de la compañía de las dos, pero no daba. Le daba cosa porque no quería molestar, quedar como un pesado, cuando se suponía que eran amigos nomás.

— ¿Viendo algo que te guste? —le preguntó Enzo, llamando la atención del cordobés. Su mejor amigo estaba sentado a su lado mientras sus familias hablaban y tomaban mates— ¿Por qué no las vas a saludar?

— Porque voy a quedar como un pesado, boludo.

Enzo chasqueó la lengua— Si esas dos te adoran, dudo mucho que les joda.

— Igual, no quiero joder, hace banda que Paulo no las ve, viste que se la pasaba hablando por videollamada con ellas dos.

— Como vos, Julián. —el cordobés se puso todo rojo ante las palabras de su mejor amigo, provocando que este riera— Creo que no hubo día desde que dejamos Argentina donde no hablaran, tas re enganchado pa'.

— ¿Quién está enganchado con quién? —los dos jugadores giraron sus cabezas para ver a Rafael Álvarez, que le tendía un mate a su hermano.

— Nadie, chusma de mierda.

Enzo ahogó una carcajada al ver la cara indignada de Rafael— ¿Nos levantamos con la tanga cruzada hoy?

Julián estaba dispuesto a responderle, cuando escuchó que alguien gritaba su nombre. Rápidamente, el cordobés dejó de ver a su hermano para ver la pequeña figura de Allegra que se acercaba corriendo a él con sus peluches, mientras Gianna se acercaba por detrás a paso rápido diciéndole que no corriera.

— ¡Juli! —Allegra se tiró sobre él, provocando que Julián riera mientras la alzaba en sus brazos, poniéndose de pie y dejando besitos en su cabeza con suavidad.

— Hola, hermosa. —la saludó, tocando la punta de su nariz soltando un "pop" como si fuera un botón, todo bajo la atenta mirada no solo de Enzo y Rafael, sino también del resto de la familia, cuya atención había sido llamada por el grito de Allegra y la voz de Gianna.

— Alle, hija, te dije que no corras, te vas a caer. —la cordobesa soltó un suspiro, negando con su cabeza, para luego ver al futbolista del City— Hola, Juli. —saludó con una sonrisa tímida— Hola, Enzo. —el jugador del Benfica agitó su mano con una sonrisa a modo de saludo, alzándola para que Allegra le chocara los cinco.

— Hola Gia. —respondió el cordobés, abriendo se brazo libre para que pudiera acercarse a saludarla, tomando por sorpresa a Gianna cuando la rodeó en un cálido abrazo. Una sensación de confort recorriéndola de pies a cabeza.

— Ah bueno. —susurró Enzo tratando de aguantar la risa, ¿dónde había quedado el Julián tímido que no quería acercarse para no joder? La magia de tenerlas cerca, claramente, porque Enzo había notado que cada vez que Julián estaba junto a ellas, estaba mucho más suelto, más relajado y tranquilo.

Fue Rafael aclarándose la garganta el que llamó la atención de ellos, provocando que rompieran el abrazo. Gianna dejó de mirar a Julián, para mirar al chico que lucía demasiado igual a él, por lo que supuso que era su hermano y pudo sentir como su rostro se calentaba y se ponía rojo por la vergüenza.

— Gianna, este es mi hermano, Rafael. —lo presentó Julián, al notar las miradas de los otros miembros de su familia se giró para señalarlos— Esos de ahí son mis viejos, Gustavo y Mariana, mi hermano Agustín y ella es Agustina, mi cuñada, la mujer de Rafael. Ella es Gianna, la hermana de Paulo Dybala.

Gianna los observó con una sonrisa dulce— Es un placer conocerlos.

— Sos cordobesa también, ¿no?

— Sí, aunque no sé si se me nota tanto la tonada ya, me dijeron que la perdí un poco.

— Naaah, se re nota.

— ¿Y esa nena hermosa? —preguntó Mariana parándose para acercarse a Julián que seguía teniendo a Allegra en brazos, que al ver a la mujer se escondió toda tímida contra el pecho del jugador— ¿Cómo se llama?

— Allegra, es la hija de Gianna.

— Es muy linda, me la como a besos. —Agustina también se había parado junto a su suegra, completamente enternecida por Allegra— ¿Cuánto años tiene? —preguntó mirando a Gianna.

— Tiene dos, en enero va a cumplir los tres.

— Como el Juli. —dijo Gustavo observando a la nena con una sonrisa desde su asiento.

— ¿Querés un mate Gianna? —la pregunta de Agustín llamó su atención, y al ver la mirada indecisa de la cordobesa Julián se giró para mirarla, soltando una risita.

— Lo preparé yo, si estás preocupada por eso, te va a gustar. —sintiendo la mirada de su familia, Julián señaló a Gianna con su cabeza— No le gusta el mate, el único que le gusta es el que preparo yo.

— ¿Cómo que no te gusta? —cuestionó Rafael incrédulo, si se suponía que era algo que le gustaba a todos los argentinos.

— Viste, es re rara esta. —dijo Enzo riendo, y justo en ese momento se acercaron Valentina y Olivia que habían ido a buscar agua con otro termo. Valentina se acercó a saludar con entusiasmo a Gianna y Allegra, para luego tenderle el termo a su pareja.

Mientras Gianna agarraba el mate que Agustín le tendía con un "Gracias", Mariana se acercó a la mesa tomando un paquete de galletitas para darle una a Olivia y luego acercarse a Allegra que seguía en los brazos de Julián.

— ¿Querés una Allegra? ¿Puede comer? —indagó Mariana, su mirada posándose en Gianna que seguía de pie a un lado de Julián.

— A ver vieja, dame un segundo. —dijo Julián antes de que Gianna pudiera hacerlo, bajo la mirada confundida de los demás y la sorprendida de la cordobesa, el jugador del City se puso a mirar la información de los ingredientes— Puede, no tiene maní, ¿le doy una?

Aún medio desorientada, Gianna asintió, sorprendida de que Julián hubiera recordado lo que ella le había contado, y sorprendida de que incluso se hubiera tomado el trabajo de verificarlo él mismo.

— ¿Es alérgica al maní? —preguntó Rafael mirando a la nena con una sonrisa, viendo como dejaba atrás la timidez para agarrar la galletita que Mariana le tendía.

— Si, eso lo heredó de mí. —Gianna se encogió de hombros— No pensé que te ibas a acordar de eso, lo conté por contar. —agregó ahora mirando a Julián.

El cordobés la observó con una sonrisa dulce— Era algo importante sobre ustedes, obviamente iba a prestarte atención.

— Ya entendí quien estaba enganchado. —le dijo Rafael en un susurro a Enzo provocando que este soltara una carcajada— Dio' mío, disimula como el tuje este pibe.

— Siéntense, acá tenes una silla libre Gianna. —le ofreció Gustavo a la chica, moviendo la silla hacia donde Julián acababa de sentarse aún con Allegra en brazos, dejándola entre él y Agustín.

De esa forma, las Dybala se quedaron con la familia Álvarez y los Fernández, tomando mate y comiendo algunas de las cosas que habían traído, incluida Gianna que había sacado varios paquetes de galletitas para compartir con los demás.

— Me parece que alguien quiere probar el mate.

Gianna, que estaba hablando con la cuñada de Julián, giró su mirada hacia Mariana, notando que esta miraba a Julián con la nena. Y es que Julián, que hablaba con Enzo y Rafael, tenía el mate en una mano y Allegra lo estaba mirando con mucho interés, como si quisiera amagar a tomar.

— ¿Puede tomar? —preguntó Julián, mirando a Gianna en busca de aprobación para darle a la nena.

— Puede, pero no sé si le va a gustar, Paulo también trató de hacer que tome.

— Probemos. —el cordobés acercó la bombilla a los labios de Allegra con cuidado, aprovechando que el agua ya no estaba tan caliente, soltando una risa cuando vio como Allegra le daba un sorbo para luego darle otro y otro— Bueno, parece que le encantó, claramente tienen algo por mis mates ustedes.

Gianna soltó una risa, y fue entonces que vio como se acercaban su hermano, su cuñada y Catherine, porque la madre de los Dybala todavía no había podido viajar.

— ¡Otra traidora más! —exclamó Paulo al ver como su sobrina estaba tomando mate con Julián— ¿Primero Gianna y ahora Alle? Años llevo tratando de que tomen mate conmigo, ¿y vienen a tomar el suyo? No, no, la decepción, la traición, hermana.

— ¿Acaba de citar a "¿Dónde están las rubias?"? —preguntó Agustín soltando una carcajada, mientras Oriana negaba con su cabeza ante la actitud de su novio.

— Dios que dramático de mierda.

El jugador del Roma le sacó la lengua a su hermana, acercándose a Julián para tenderle una galletita a Allegra, de esas que sabía que a la nena le encantaban, sonriendo cuando su sobrina le agradeció con su vocecita tierna.

— ¿Mate? —ofreció Gustavo a Paulo, mientras Valentina con el otro equipo le ofrecía uno a Oriana, que los dos aceptaron con gusto.

Así, las tres familias se quedaron tomando mate y conversando durante el resto de la visita. Gianna observó a su hija, que ya llevaba un rato a upa de Rafael, mientras él y su mujer la hacían reír con sus peluches junto a Agustín, ya se habían ganado a la nena y había dejado atrás toda su timidez. Y estaba claro que Allegra se sentía cómoda con ellos, porque transmitían la misma energía linda que Julián. Paulo estaba hablando con el padre de Julián mientras compartían unos mates, y Oriana y Catherine hablaban con Mariana, mientras ella se había quedado charlando con Enzo, Valentina y Julián.

— ¿Cómo se sienten para mañana?

Ante la pregunta de Gianna, Enzo hizo una mueca con sus labios— Otra vez estamos de suplentes.

— Pero tienen muchas chances de entrar, Scaloni sabe que tienen tremendo potencial, solo está esperando el momento para que puedan explotar ese potencial.

— Eso mismo le dije yo Gianni. —le dijo Valentina con Olivia a upa.

— Sí, obvio, pero igual te la baja.

— Bueno, ahí tenés razón, eso lo veo con Paulo. —la chica observó de manera fugaz a su hermano— Sigue ahí porque si el equipo lo necesita él quiere estar ahí para darles una mano, siempre quiere dar lo mejor de él, pero el no sumar minutos termina pesando. —Gianna hizo una pequeña pausa, observando a Enzo y Julián con una sonrisa— Hay que creer que las cosas pasan por algo, y que cuando llegue el momento de que jueguen es porque tenía que ser así y van a hacer cosas tremendas.

Julián la observó sonriendo— ¿Mañana van a estar en palco?

— No, con Ori elegimos mirarlos en las gradas con los demás, Catherine también va a estar en gradas con el equipo de Por el Mundo Mundial, pero nosotras vamos a estar con la hermana y el padre de Oriana, mi vieja todavía no podía venir.

— Se llevan bien con la familia de Oriana, ¿no?

Gianna asintió— Cuando los conocí, me trataron como otra más de la familia, y con Allegra lo mismo, la adoran. Catherine dice que es su nieta, la vuelve loca cada vez que la ve, y siempre que podía iba a visitarnos cuando iban a ver a Oriana.

— ¿Cómo vas con el libro? —Enzo y Valentina ya sabían del trabajo de Gianna, de los libros y el asunto del pseudónimo, Valentina incluso se había comprado el primero en el momento en que salió en español para arrancar a leerlo, y le había gustado tanto que se había comprado el segundo y ya esperaba el tercero.

— Bastante bien, en el avión aproveché a adelantar un poco mientras escuchaba música para inspirarme un poco. —la chica hizo una pausa, aprovechando para tomar el mate que él le tendía— Supuestamente la traducción de este va a salir mucho más rápido que las anteriores, y ya me dijeron que quieren continuar trabajando conmigo, así que en ese sentido todo está yendo más que bien, y espero que siga así.

Julián le dedicó una sonrisa— Seguro que sí, si tenes tremendo talento.

Gianna ladeó su cabeza ligeramente— ¿Cómo sabes si no leíste los libros?

El cordobés mordió su labio inferior nerviosamente— Ehhh, bueno, sí. Pero escuché reseñas, e incluso me saltaron Tiktoks de gente dando su opinión y eran todos elogios, dudo mucho que te llenen de elogios si las historias fueran una mierda ¿no? Si hasta a Valu le gustaron.

Gianna rió— Bueno, ahí tenés razón.

Un suspiro de alivio escapó de los labios de Julián, la había bastante piloteado bien. Todavía no quería contarle eso que estaba haciendo a Gianna, quería esperar a terminar. Porque si lo iba a hacer, quería hacerlo bien.








nota de la autora: 

buenasss, vieron que se suponía que tenía que rendir un final? me acobardé porque empecé a ver que preguntaban cosas que no tenía, me agarraron episodios de ansiedad y llanto y no me terminé mandando jaja,,, no pateen finales, no sean como yo ahre

aprovecho a dejar algunos edits que estuve haciendo para despejarme mientras estudiaba, sobre enchanted, que es la historia de pedri que ya está publicada, y dos historias más que tengo pensadas hacer más adelante con licha y dybala de intereses amorosos

en fin, espero que estén disfrutando de las historias y muchísimas gracias por tomarse el tiempo de leer, de comentar y votar! los tkm!!!

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