La verdad es la verdad...
El experto en medicina admitió con voz temblorosa.
── Bueno, pero... es un error utilizar más de diez hierbas medicinales diferentes al mismo tiempo. Sin duda, la Duquesa estaba utilizando un método de tratamiento muy peligroso.
Eso también es incorrecto, pero la gente asintió como para confirmar las palabras.
«En este mundo, se considera verdadero.»
Sin embargo, no podía bajar las manos tan fácilmente, así que insistió con firmeza.
── Ciertamente es peligroso mezclar hierbas de manera imprudente. Más concretamente, es peligroso mezclar hierbas medicinales incompatibles. Sin embargo, si son compatibles, es muy eficaz...
Y luego,
── Fuu.
Un suspiro tranquilo.
El sonido de su respiración interrumpió las palabras de Kanna.
No sólo ella, sino todos los ojos de la corte estaban fijos en un lugar.
Sólo se oyó un breve suspiro, pero se llevó toda la atención.
── ¿Cuánto tiempo más tengo que escuchar estas tonterías?
Fue el suspiro de la Emperatriz.
── Contéstame, Juez.
── Vale la pena esperar, Su Majestad.
── El Juez de la Corte Suprema retrasa la decisión aunque ya se ha confirmado el delito de la Duquesa. Qué ridículo.
¡BANG!
La Emperatriz golpeó el tablero de madera.
── ¡La Princesa Imperial está muerta!
Todos se apresuraron a sacudir la cabeza ante el enfado de la Emperatriz.
── ¡Te atreviste a darle a la Princesa una receta usada por los paganos! ¡Esto ofende a la Familia Imperial y a la Princesa! ¡Por este pecado es justo destruir 3 generaciones!
Después de gritar, respiró un poco y se quedó en silencio.
── Sin embargo, su Majestad el Emperador ha respetado los logros de los Valentino y a la familia Addis, por ello no se les involucraría en esta situación.
── …....
── Así que ahora el castigo de la Duquesa Kanna Valentino debe llegar a su fin.
Ella sabía que esto pasaría. Kanna se rió para sus adentros.
«En este mundo, ya sea un juicio o cualquier otra cosa, ¿No son las palabras imperiales lo más importante y lo más prioritario?»
¿Pero qué? ¿Una receta propia de los paganos?
«¡Sí, fuiste tú quien corrió hacia mí, suplicando una cura!»
La Emperatriz, sin embargo, habló con severidad, como si tal cosa no hubiera ocurrido nunca.
── Si cree que la sentencia imperial es errónea, dilo.
── La sentencia de Su Majestad es correcta.
Era como si el Juez de la Corte Suprema estuviera esperando las órdenes de la Emperatriz.
── Se ha cometido el crimen de matar a Su Alteza por una prescripción peligrosa. Se trata de un crimen que merece la muerte para toda la familia según la ley imperial, pero su majestad se ha apiadado y, teniendo en cuenta esto, sólo Kanna Valentino es condenada a muerte.
¡TANG, TANG, TANG!
Cuando el juez dio un golpe en la mesa, los caballeros agarraron a Kanna por los brazos y la arrastraron fuera.
Entonces.
── ¡Muere, presagio de la muerte!
Los gritos de la tribuna.
Kanna levantó la cabeza.
Sin embargo, había tanta gente presente que no sabía de dónde venían las palabras. Ella sólo trataba de ignorarlo...
── ¡Si! ¡El presagio de la muerte! ¡Bruja de cabello negro!
── ¡Te atreves a matar a su Alteza la Princesa, tú misma deberás morir y pagar por tus pecados!
── ¡Los paganos deben morir!
Si el primer grito se ha producido, el siguiente no tardará en llegar. Las condenas de los plebeyos se multiplicaron.
Kanna fue vilipendiada lanzando palabras soeces.
Inclinó la cabeza mientras era conducida por los caballeros.
Todos aquí pensaron que estaba llorando, pero....
«¿Qué demonios está pasando...?»
Sin embargo, la verdad estaba oculta.
«Una expresión profundamente pensativa en su rostro, incluso un poco aburrida...»
¿Esperaba algo diferente?
⚘⚘⚘
Tras ser condenada a muerte, Kanna fue encarcelada.
«La prisión fue hecha originalmente para los nobles.»
Fue enviada a una celda muy fría y siniestra donde se enviaba a los verdaderos criminales.
«Hace frío.»
Gotas de agua goteaban de los fríos suelos, paredes y techos de piedra.
«Además, me quitaron la ropa.»
Diciendo que el pecador que asesinó a un miembro de la Familia Imperial se le quitó el vestido no merecía usar seda.
Me dieron un uniforme de prisión. ¿Ni siquiera se me permite llevar mi propia ropa?
Kanna se puso en cuclillas en la esquina.
«Hace frío. Frío. Creo que me voy a resfriar.»
Quería acostarme en mi cama. Pero no aquí, en mi cama en Corea.
Quería abrazar a mi gato y volver a dormir....
Al reflexionar, se quedó dormida sin darse cuenta. ¿Cuánto tiempo había pasado?
⚘⚘⚘
Se despertó con malestar.
La oscuridad fuera de la ventana había desaparecido. Parecía que estaba amaneciendo. Y...
── ¡…….!
¡Oh, Dios mío!
Detrás de los barrotes de hierro había un hombre.
Su figura era enorme y dominante. Su cabello rojo brillaba a la luz de la luna.
Parpadeó para asegurarse de que estaba equivocada, pero por desgracia tenía razón.
── … ¿Tú?
Entonces los labios del hombre se curvaron en la oscuridad.
── Te ves bien.
¡Dios mío, es realmente Orsini!. Un rostro que nunca podría haber imaginado en un lugar así...
¿Desde cuándo está ahí de pie?
── ¿Por qué estás aquí? ¿No te fuiste?
── He venido a ver lo que te espera.
── ….....
Este bastardo.
Kanna miró a su alrededor y giró la cabeza.
── Oh, sí. Me esforcé por observar desde la distancia.
Entonces se me ocurrió de repente. Vio una silueta familiar en el podio durante el juicio.
Llevaba una capucha para ocultar su rostro...
── ¿Viniste a ver el juicio antes?
── Has estado por todas partes, y esto es lo que has hecho.
Sin embargo, Orsini no respondió a la pregunta de Kanna. En cambio fue sarcástico.
Pero por qué, no parecía divertido. Resultaba extraño que Kanna volviera su mirada hacia él.
Al final Orsini no sonrió. Una mirada de emoción sin alegría en su rostro.
── Pensé que un día te alcanzaría un desenlace así. Supuse que algún día, semejante inmundicia mancharía el honor de la familia.
── Sí, eres un gran profeta. ¿Por qué no predices?
Entonces Orsini agarró los barrotes. Al acercarse un paso, su expresión se volvió más precisa.
── ¿Cuánto tiempo vas a fingir ser tan impertinente? ¡Mírate!
── ¿Qué está mal conmigo?
── Si tienes ojos, ¿por qué no echas un vistazo? Sin ropa decente, ¡Como una prostituta callejera con moretones y la cara hinchada!
Ah, sí. Mi aspecto es repugnante.
Kanna confesó suavemente.
── ¿Y qué? ¿No es eso lo que querías ver?
── …....
── Mira, tengo muchas heridas. Después de hoy, algo así sería difícil de ver.
Kanna dijo que una situación así no volvería a ocurrir, pero Orsini entendió lo contrario.
Si la ejecutaban, no la volvería a ver.
Apretó los barrotes con tanta fuerza que incluso las venas del dorso de su brazo sobresalieron.
── Estás a punto de ser ejecutada.
── Lo sé.
── Nadie puede detener la ejecución a menos que mi padre o tu vulgar esposo se opongan.
── Por supuesto que eso no va a suceder.
── ¡Maldita sea, está perra realista! ¿Dejarás alguna vez de comportarte así?
¡BAAM!
Estaba pateando la pared y maldiciendo.
── Escucha bien, mugre, mañana tu sentencia entra en vigor. ¿De acuerdo? ¡Perderás!
Kanna le miró fijamente. No podía entender qué demonios estaba haciendo.
«¡De ninguna manera!»
Kanna, que tenía mucho de qué preocuparse, se dejó caer sus hombros, fingiendo estar triste.
── Lo siento, Orsini.
── … ¿Qué quieres decir?
── No tengo nada que decir.
Orsini no reaccionó inmediatamente. Fue un cambio de actitud repentino.
Kanna, con una expresión devastada, se comportó de repente como un cachorro herido.
── Siento mucho haber arruinado el honor de la familia. Ahora la familia Addis está en deuda con la Familia Imperial. Especialmente con su Majestad la Emperatriz.
Debe haber querido escuchar esa frase.
Sorprendentemente, Orsini, sin palabras, la miró fijamente, agarrando los barrotes con fuerza.
Cuando ví sus ojos, quise chasquear la lengua.
Oh, este bastardo. Caerá en esto de nuevo.
── … ¿Creías que iba a decir eso?
Se sentó, apoyada en la pared, y sonrió en vano. Continuó con el dedo de en medio extendido.
── No lo siento en absoluto. Y no tengo nada que disculparme contigo, así que cállate y piérdete.