Pequeño Desastre

By suga_yw23

54.4K 4.9K 188

Kim Taehyung, un estudiante algo inquieto que juega a querer ser científico. Jeon Jungkook, un profesor que a... More

Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Sujeto #1
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Sujeto #2
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Sujeto #3
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22: Renacer.
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Querido Taehyung.
Capítulo 33
Capítulo 34
Capítulo 35
Capítulo 36
Capítulo 37
Capítulo 38
Final

Capítulo 27

1.2K 93 0
By suga_yw23

Recién amanecía. Los primeros rayos de sol se colaban por las rendijas del techo y ventanas, iluminando toda la habitación.

Taehyung se removía entre sueños, cubriéndose con las gruesas mantas. Había pasado un poco de frío, gracias a que no se molestó en volver a vestirse por el cansancio. Al menos el calor corporal del pelinegro favoreció su sueño.

Jungkook había despertado cuando el rubio aún seguía durmiendo. No podía imaginar la hora que era, pero quería llegar temprano con los demás y así tal vez evitarse el regaño de Namjoon y Seokjin, y para como veía las cosas, también el de Jimin. Así que tendría que despertar a su rubio.

Empezó dando besos en su nuca, succionando un poco la piel de allí. Siguió con su cuello, enterrando su nariz, inhalando su esencia. En algún punto supo que había despertado, ya que se removía.

—Buenos días, precioso—susurró en su oído, dejando otro beso ahí.

—Mhm—pegó su cuerpo al del pelinegro, esperando que este le arrullara un poco. Había amanecido un poco mimoso ese día.

Aunque no contó con el detalle de que ambos seguían desnudos, y había sentido la erección mañanera de Jungkook, el cual emitió un jadeo cuando lo sintió presionar en esa zona.

—¿Provocándome tan temprano, precioso?—el rubio sonrió, presionándose de nuevo, esta vez, dejando su trasero ahí. Jungkook jadeó—Es enserio, tenemos que llegar temprano.

Taehyung negó, moviéndose hacia atrás y adelante, simulando embestidas.

Jungkook tomó sus caderas, parándolo, aunque el rubio era un terco, y se movía a como de lugar. A parte de mimoso, también había amanecido caliente.

—Mételo—ordenó.

El pelinegro negó. Estaba tratando de resistirse, pero el rubio se la ponía bastante difícil.

Taehyung al ver que se negaba, tomó su pene y lo acomodó en su entrada. Se empaló, pegando totalmente su espalda al pecho de Jungkook, quién gruñó cuando sintió el caliente interior del rubio.

—Eres un caprichoso—mordió su oreja.

—Muévete.

Y así lo hizo.

Un vaivén lento y profundo, sin gemidos muy fuertes, solo jadeos ahogados.

Al cabo de minutos, ambos de corrieron, concluyendo el sexo mañanero. Ahora solo tendrían que darse una ducha, y rezar por llegar antes de que los chicos se despertaran.

—Tenemos suerte de que aún sea temprano.

—Y eso que cierto rubio me distrajo, al menos por una media hora—dijo mientras conducía.

—No te quejes, no parecías molesto cuando te estabas metiendo entre mis piernas.

Iban de camino en el auto. Se fijaron que apenas eras las 7:30 de la mañana. Se alegraron al saber que nadie estaría despierto a esa hora, aunque tendrían que ser cautelosos al entrar.

Cuando estacionaron, caminaron a la casa. Entrarían por la puerta de atrás, la que daba acceso a la cocina.

Entraron, quitando sus zapatos, de esa manera no harían ruido. Subieron las escaleras hasta la habitación que ambos compartían.

Festejaron una vez dentro. Misión cumplida.

—¿Quieres dormir un poco más?—

—No—abultó su labiecito—Quiero mimos.

Jungkook sonrió enternecido—Entonces vamos a la camita, ¿si, bebé?—el rubio asintió complacido, dejándose guiar por el pelinegro.

Taehyung se recostó sobre el brazo lleno de tatuajes, ambos mirándose a los ojos por largos minutos.

—¿Cómo me dijiste antes?—preguntó refiriéndose al apodo de "bebé", que lo había hecho saltar internamente de la emoción.

—¿Bebé?

—Si, eso. Dime así siempre, ¿okay?

—Cómo tu quieras mi bebé—se acercó para darle a Taehyung un beso esquimal.

—¿Soy tú bebé?—preguntó mimoso. Este era como su little espace, comportarse como un pequeño niño, pidiendo mucha atención.

—Claro que lo eres—iba a besarlo, cuando la puerta se abrió de golpe. Era Hoseok.

—Ya está el desayuno—sonrió animado. ¿Cuanto tiempo había pasado? Habían llegado recién—Bajen rápido, antes de que se enfríe.

El rubio se aferró al torso del pelinegro cuando el intruso había abandonado la habitación.

—Quiero quedarme aquí contigo, Jungkookie—hizo un mojin.

—Ya sé, bebé—acarició sus rubios cabellos—Pero necesitas recuperar las energías que perdiste ayer, y el desayuno es importante.

Bajaron entre protestas del más pequeño, y con Jungkook casi empujándolo para que caminara.

Cuando pisaron el comedor, todos les dirigieron una mirada. Aunque distintas, Namjoon y Jimin con el ceño fruncido, Hoseok y Seokjin con una sonrisa, y Yoongi solo estaba existiendo.

Tomaron asiento uno al lado de otro. Taehyung seguía refunfuñando, sentándose con los brazos cruzados y un puchero. Jungkook sonreía nervioso, al parecer su plan no había salido tan bien. Sabía que se habían dado cuenta que no llegaron a dormir.

—Al parecer alguien amaneció mimoso—Jimin rió mirando al rubio caprichoso.

—Cállate, rubio teñido.

—Tu también estás teñido—se burló Yoongi.

—Tú no te metas cara de gato mojado—Jungkook a su lado rió. Le gustaba esta faceta.

Aunque no todo eran risas. Namjoon seguía mirándolos serio, parecía realmente enojado. Taehyung en medio de todo no se daba cuenta, pero Jungkook ya se sentía ligeramente intimidado.

Terminaron el desayuno con pequeñas conversaciones sin sentido. Decidieron que ese día lo pasarían en la piscina, ya que ninguno se sentía con ánimos de salir. Solo les quedaba un día más en Jeju, y querían disfrutar de la tranquilidad del clima y el agua.

Ya se encontraban con sus bañadores puestos. Seokjin y Jimin bronceándose en las tumbonas, Hoseok y Yoongi, quienes se habían empezado a llevar muy bien, estaban jugando en la piscina con una pelota de playa, y los demás, pues...

—Fue lo primero que te dije, Taehyung. Te pedí que llegaran temprano y se cuidarán—suspiró, relajando su semblante—Estoy feliz por ustedes, pero no les costaba nada avisar, estoy a cargo de Taehyung y no me perdonaría si le pasara algo.

El rubio bajó su cabeza, avergonzado. Había preocupado a su hyung, que le había dado la confianza de quedarse un rato con Jungkook.

—Lo lamentó, Namjoon hyung—Jungkook se disculpó—Ha sido mi culpa, y ninguno de los dos tenía un celular funcional. Lamento mucho ponerte en esa situación.

Namjoon sonrió. Le agradaba que sus menores reconocieran su error—No te preocupes, Jungkookie. Y ahora cuéntenme el chisme, ¿Cómo fue que terminaron juntos?

—¡Hyung!—chilló avergonzado el rubio—¿Cómo lo supiste?

—Me di cuenta en el bar, por tu cumpleaños—explicó—Aunque bueno, solo han pasado cuatro días desde eso, y supongo por lo que escuché que fue la primera vez , ¿Aún no son novios?

—¡No!—respondió Jungkook—Aún nos estamos conociendo.

—Ya me imagino la manera en la que se están conociendo—subió la cejas. Ahora Jungkook ya parecía un tomate, rojo por la vergüenza—¡Les dije que aún no eran novios! ¡Ahora me deben dinero!—gritó para que los demás escucharan.

—¡Yo estuve de acuerdo con Namjoon, hyung!—festejó Hobi.

—Esperen...¿Ya lo saben todos?—preguntó el rubio, boquiabierto. El solo le había dicho a Jimin ¡Rubio chismoso!

—Sip, y acaban de hacerme perder una cantidad considerable de dinero—reprochó Seokjin.

Aunque aún había una persona totalmente confundida.

—¿De qué están hablando?

—Ay, mi amor, hace días lo dedujiste, pero no te dije nada porque era un secreto—Jimin explicó a su novio.

—Y claro que aún era un secreto, pero todos son unos chismosos—comentó el rubio abrazando a Jungkook, este recibiéndolo en su pecho.

—Ya bebé, se darían cuenta de todas formas—acarició su cabello.

Los demás los veían con ternura. Eran una pareja muy bonita, y estaban muy felices por ellos. Solo esperaban que la sociedad de mierda no los separara.

—¡Llevan como cuatro días y ya son unos empalagosos!

Veían totalmente preocupados al rubio.

Hace rato se había quedado como petrificado en la cama con una mueca boba en el rostro.

Jimin y Jungkook lo observaban desde la puerta de la habitación, aunque no se acercaban, tratando de decider que hacer.

—¿Y si murió algún familiar?

—No creo que sea eso...—sugirió Jungkook.

—Tal vez se sienta mal...

—Nos lo diría, supongo.

—Tal vez le quedó doliendo allá abajo y no puede moverse.

—Sería probable si no hubiera estado relinchando todo el día en la piscina.

—Mejor dejen de hacer especulaciones y vengan a la cama—habló por primera vez Taehyung.

Les hizo espacio en la cama para que se acercaran. Los chicos caminaron, dudosos.

—¿Que te pasa, cariño? Llevas casi una hora en esa posición—preguntó Jimin tocando su frente para comprobar que no estuviera enfermo.

Lo apartó de un manotazo diciéndole que no se encontraba enfermo.

—¿Me dirás que es lo que tienes, bebé?—preguntó cariñoso, mientras acariciaba sus orejas. Taehyung se acercó al toque, dejándose mimar.

Jimin los miró, indignado. ¿Ahora ya había sido remplazado? ¡Solo le gustaban sus mimos! Y ahora llega un caliente hombre a quitarle el privilegio.

—Suéltalo y deja que nos cuente—jaló la mano del pelinegro, para así alejarlo de su amigo.

Taehyung tomó una fuerte aspiración y sonrió en grande.

—¡Me aceptaron en la universidad!

Esta misma tarde revisó su correo electrónico , y encontró la tan esperada carta. Había quedado muy sorprendido, tenía pocas esperanzas en quedar. Era muy difícil entrar a la Universidad de Seúl.

—Está tarde me llegó la carta. Aceptaron mi solicitud de beca.

Jimin fue el primero en felicitarlo, tirandose encima de Taehyung, dándole muchos besos en sus mejillas sonrojadas.

—Iré a contarle a Namjoon y Seokjin hyung mientras ustedes tienen sexo de celebración—salió de la cama y se fue cerrando la puerta de la habitación.

—¡Indiscreto!—gritó el rubio.

Jungkook estaba profundamente orgulloso del rubio. Meses atrás el mismo le había ayudado con la solicitud y una carta de recomendación dirigida al rector de la universidad. Sabía lo mucho que había estudiado para poder entrar.

—¿No me felicitarás?

Jungkook sonrió—Felicidades bebé, sabía que lo lograrías. Eres un gran estudiante, aunque algo desastroso—acarició sus cabellos.

—¿No me darás ni un besito?—hizo un puchero, que el pelinegro se apresuró en besar.

—Te daré muchos besitos de ahora en adelante, mi pequeño desastre.

Y lo besó por largos minutos, hasta que sus labios se adormecieron.

Continue Reading

You'll Also Like

587K 79K 46
Una sola noche. Dos mujeres lesbianas. ¿Un embarazo? ¡Imposible!
286K 7.5K 138
╭ ╮ • 𝐇𝐞𝐚𝐝𝐜𝐚𝐧𝐨𝐧𝐬 & 𝐝𝐫𝐚𝐛𝐛𝐥𝐞𝐬 𝐭𝐫𝐚𝐝𝐮𝐜𝐢𝐝𝐨𝐬 • 𝐅𝐞𝐦𝐚𝐥𝐞 𝐚�...
18.2K 1.1K 15
Taehyung un pequeño chico Asustadizo gracias a los Relámpagos y truenos que son Ocasionados por la lluvia. ࿉Jungkook...
7.4K 474 8
Una aventura es más divertida si huele a peligro ˀ⌇ Cuento con el permiso para adaptar está historia, créditos a su autora real @-JennxKimTxe ˀ⌇ Re...