Taehyung sonreía en grande, pasar tiempo con los niños le fascinaban. ¡Eran muy lindos!
Los pequeños siempre saltaban en sus brazos cuando llegaban al jardín, es que a pesar de ser un híbrido de tigre—estos son considerados los más agresivos y con menos tolerancia hacia las personas de su alrededor—.
Taehyung detestaba convivir con las personas, no le agradaba por el hecho de que algunos solo querían sexo y el al ser un híbrido de tigre podía dar una camada de 3 cachorros. Le gustaba convivir con los niños, puesto que ellos solo eran pequeños seres inocentes que no sabían nada de esta vida y solo disfrutaban de su vida.
Kim era feliz cuidando a aquellos pequeños, algunos eran hibridos y otros solo personas, puesto que sus dos padres si eran humanos y ninguno llevaba algún otro gen en su sangre.
—¡Muchas gracias Kim!—agradeció una híbrido de gato con una gran sonrisa en su rostro—Mi pequeño es muy feliz viniendo aquí, y eso es lo que me gusta, que el sea feliz.
—No es nada Manoban, el feliz aquí soy yo quien esta encantado con estos niños. Son algo traviesos, pero tengo mis trucos para hacerlos controlar—Taehyung sonrio un poco.
—Eso veo, bueno no te quito más tiempo, todavía te falta entregar a más pequeños.—Lisa se giro hacia su hijo—Cariño, despídete.
—Chao profe—el pequeño movió su mano de un lado a otro.
—Adiós pequeñito—Taehyung revolvió un poco su cabello—nos vemos el lunes.
Los dos hibridos de gato se retiraron dejando a Kim solo esperando por el próximo padre que vendría por su pequeño.
Su rostro cambio de uno feliz a uno enojado, sentía el olor de cierta persona.
—Profesor Kim, ¿Como se encuentra?—sonrio de lado.
—Señor Eunwoo—saludo sin animos—ya le traigo a su hija—y sin más Taehyung se giro para buscar a aquella niña—¡Eunsoo!—llamo—tu padre vino por ti.
Una risita se escucho a los lejos mientras que unos pasitos se escuchaban por aquel pasillo.
—¡Papi!—la niña salto a los brazos de su padre.
—Hola pequeña—saludo—tu madre te esta esperando en el auto, espérame haya con ella mientras yo hablo con el profesor Kim. ¿Si?
—Si papi—la niña se viro para con un movimiento de manos se despedía de Taehyung y salía corriendo para irse a encontrar con su madre.
—¿Que necesitas?—taehyung trato de no sonar tosco.
—Quería ver si ya habías aceptado mi propuesta—se acercó un poco más a Taehyung.
—Te acercas un poco más y dejo salir a mi tigre y no se si sepas que los tigres son muy violetos, no me gustaría dejar a Eunsoo sin padre.
—No serias capaz—ataco.
—¿Me quieres poner aprueba?—alzó una ceja.
Eunwoo no dijo nada y con un bufido se retiro, dejando a un Taehyung echando humos por las orejas.
—Humano idiota, no sabes cuanto te detesto—gruño alto.
Taehyung suspiro mientras salía de aquella guardería, estaba cansado y solo quería llegar a dormir a su casa.
O bueno, eso tenía planeado hasta que su olfato logró percibir un rico aroma, su tigre se puso ansioso y lo hizo dirigirse hacia aquel lugar.
No le costó mucho llegar, pues con unos tres pasos que dio pudo encontrar una pequeña bolita blanca que temblaba.
Taehyung se agacho para ver que era un pequeño conejo indefenso.
—Oww, que cosita más linda—sonrió mientras agarraba al pequeño animal en sus brazos—No puedo dejarte aquí afuera a tu suerte, te podría pasar algo malo—acaricio un poco su pelaje—te llevaré conmigo, tengo una que otra zanahoria en mi casa, con eso puedo mantenerte hasta mañana que abren las tiendas—sonrio mientras se dirigía a su auto.
Kim abrió la puerta de este y dejó dejó cosas en el asiento trasero, ya un poco más libre colocó al pequeño conejito en el asiento del copiloto.
—¿Te quedaras quieto bueno? El cinturón de seguridad luego te apretara y puede dañarte, no puedo arriesgarme a lastimar a un lindo animalito como tu. Pero por seguridad manejare despacio para evitar cualquier accidente—sonrió por una última vez.
Y había sido así como se encontraban en aquella situación, con un Taehyung asustado y un lindo chico desnudo mientras tenía un puchero en su rostro.
—Por favor, no te asustes, me voy a portar bien—sus ojos se cristalizaron.—soy alguien aseado, no causó problemas, puedo ayudar con las cosas de la casa. Pero por favor no me eches, las calles son muy frías.
Taehyung solo lo miraba, no sabía que decir, por una parte no podía echar a aquela chico, sabía perfectamente como eran las calles de frías y lo peligrosas que podían llegar a ser.
—¿Me vas a prometer que no me traerás problemas?—lo miro fijamente.
—¡Lo prometo!.—exclamo con una gran sonrisa en conejito.
—Bien, puedes quedarte aquí entonces. Pero te digo, me causas algún problema por más mínimo que sea y te echo a patados, ¿bueno?—amenazo.
Jungkook asintió mientras que sus orejitas se movían feliz.
—Yo...¿Podría pedirte algo?—agacho su mirada sonrojado por la vergüenza.
Había acabado de llegar a su nuevo hogar y ya estaba pidiendo cosas.
—Dime.
—¿Podrías alimentarme? Es que tengo hambre—hizo un puchero—No como desde hace más o menos una semana, mi pancita no puede más.
—¿Quieres zanahorias o ramen?.
—Zanahorias—sonrio—pero, ¿podrías picarlas en cuadritos?—hizo un puchero
Taehyung solo suspiro—Bueno, ya te las traigo entonces.
Jeon mantuvo su sonrisa todo el tiempo mientras esperaba sus zanahorias picadas.
Después de unos minutos Taehyung volvió con un plato en sus manos—toma—se lo extendio.
Con la misma sonrisa Jungkook recibió el plato.—Eres muy amable, gracias—sonrió.
Taehyung no dijo nada y solo observo cómo aquel híbrido de conejo se comía aquello.
—Come despacio, te vas a tragantar. No quiero un conejo muerto en mi apartamento.
—Es que desde hace mucho no comianalgo así de rico—hablo después de haber tragado.
—Solo es zanahoria picada—Kim lo miro con una ceja alzada.
—No importa—y sin más Jungkook siguio comiendo.
Taehyung había lavado el plato que aquel chico había ensuciado y volvió a su habitación para encontrarse a aquel híbrido acurrucado en su cama.
Bufo y se acostó a su lado.—No te voy a dar mi cama, me costo comprarla así que aquí dormiremos los dos. Tampoco puedo ser tan hijo de puta y hacerte dormir en el piso.
—¿Como te llamas?—pregunto curioso mientras jugaba con la punta de la manta.
—Kim Taehyung.
—Lindo nombre—sonrió—¿Puedo decirte TaeTae?—hizo un pequeño puchero.
—uhmm si.
Hubo un pequeño silencio hasta que se escucho un pequeño ruido.
Alguien tenía hambre.
—¡Perdón! Tengo hambre—Jungkook se cubrió el rosto con sus manos.
—Pero si ya comiste—Kim frunció su ceño.
—Pero no es ese tipo de hambre.
—¿Entonces cual?—preguntó confundido.
Jeon quito sus manos de su rostro y dejó ver sus dos colmillos.
Tenia una gran sed de sangre.
Tenía hambre.
—No, no voy a dejar que me mueras. Eso nunca—se alejo del cuerpo del menor.
—Por favor...yo...necesito—sus ojos se cristalizaron y formó un puchero mientras se acercaba un poco a Taehyung.
¿Como podía negarse a aquella carita inocente? Debías ser muy desconsiderado para negarte a aquello.
Y Kim TaeHyung era alguien muy desconsiderado, pero su tigre gruñia por aceptar a aquel híbrido.
¡Me gusto el resultado! Wa, quedo muy soft para ser mi primer soft jsjsjsjjs
Le tengo esperanzas a este fic.
Voy a hacer lo posible por no dejarla olvidada y tratar acabarla a medianos de diciembre o un poco antes.
¡Esperó les haya gustado!<3