Gripe.

Por -SplashSplash

10.8K 1K 560

Una cosa extraña acaba de suceder: Chuuya se ha enfermado. Pero no es la única cosa rara: Dazai, el demonio p... Más

Advertencias
Tos
Fiebre
Moquitos

Recaída

1.1K 120 58
Por -SplashSplash

Este era un mal día para Chuuya.

Su cabeza dolía, sus ojos dolían, su cuerpo dolía. Su nariz estaba irritada de tantas veces que tuvo que limpiarse.

No quería molestar a Mori para que le diera tiempo libre. Estaba convencido de que solo tenía un leve resfriado debido al cambio del clima. Los inicios de invierno siempre lo enfermaban, pero nunca era algo grave.

Aun podía trabajar, y era lo que le intentaba demostrar a Akutagawa que lo veía con incredulidad. Ese niño se ha vuelto demasiado insolente desde que Dazai dejó la mafia.

Caminado por Yokohama, el fuerte viento hacía que la mayoría de gente se refugiara en sus calidos hogares. Las únicas personas que se hallaban afuera eras los desafortunados que tenían que trabajar, y cuyo único medio de transporte eran sus propios pies.

Chuuya y Akutagawa se cubrieron con sus abrigos cuando una brisa particularmente violenta chocara con su cuerpo. El frío le hacía doler el cuerpo aún más, y pronto se vió en la necesidad de entrar a una tienda buscando un poco de calor.

Su alivio duraría poco cuando una fuerte tos lo obligara a hincarse sobre el piso, sin fuerzas para mantenerse de pie.

Tal vez necesitaba descansar un poco.

Akutagawa trato de ayudarlo a levantarse, pero todo el cuerpo le dolía y le costaba demasiado esfuerzo ponerse de pie sin tambalear.

El pelinegro llamó a la mafia para pedir un auto, y la dueña de la tienda le regaló un té para mantenerlo caliente. Trataría de recordar esa tienda, y evitar posibles asaltos y enfrentamientos cerca.

Cuando el auto llegó, Chuuya ya estaba muy mareado como para mantenerse despierto. A penas se sentó en el auto cayó inconsciente.

*

El teléfono en el escritorio no dejaba de sonar, y por lo tanto, Dazai no podía dormir.

El castaño había decidido aprovechar que Kunikida no estaba para poder dormir una pequeña siesta, pero alguien parecía empecinado en arruinar sus planes.

Terminó contestando el teléfono con brusquedad.

"¿Qué quiere?" dijo sin importarle sonar grosero.

"Dazai-san" con tan solo escuchar la voz ronca de cierto pelinegro, Dazai rodó los ojos y colgó.

Volvió a acomodarse en su escritorio a dormir. Era una tarde tranquila, con todos los miembros de la Agencia afuera ocupados haciendo algo, sería un crimen no tomarse una siesta en un día así.

Muy a su pesar, el teléfono volvió a sonar.

Tuvo que usar toda su capacidad mental en mantenerse sereno y no volver a las viejas costumbres de la mafia.

"¿Qué?" contestó en tono brusco.

"Dazai-san, Chuuya enfermó pero no puedo quedarme a cuidarlo y no-".

"Ya voy." Lo interrumpió, tomando su gabardina y saliendo tan rápido como podía.

Cuando al fin llegó al edificio de apartamentos donde vivía Chuuya, Dazai se arrepintió un poco de no traer un abrigo que lo protegiera del fuerte y frío viento que casi lo lleva arrastrando.

Chuuya había cambiado de departamento muchas veces, cada uno mejor que el anterior. Para el castaño no era difícil averiguar a donde se había mudado, pero trataba de no averiguar mucho, solo lo suficiente por si un día quisiera enmendar las cosas.

No sabía que tan seguro era que un miembro de la Agencia fuera al hogar de un mafioso, pero poco le importaba, ¿qué iban a hacer? ¿Matarlo? Le harían un favor.

Entró al edificio, y un escalofrío le recorrió la espalda al al fin hallar un lugar cálido.

Iba de camino al elevador cuando se dio cuenta de que... No sabía en qué piso vivía Chuuya, pero conociéndolo, seguramente en el último.

Pulso el último botón, y espero pacientemente a llegar al último piso. ¿Qué debía hacer cuando llegara? ¿Tocar o solo entrar y ya? 

Ya que Chuuya estaba enfermo, iba a ser un poco educado y tocar la puerta, como las personas normales lo hacen.

No tardó mucho para que la puerta se abriera y un pelinegro sin cejas se asomara.

"Dazai-san, no tenía por que venir".

"¿Cómo de que no? ¿Entonces para que me llamas?" Entró al departamento sin esperar una invitación.

Observando su alrededor, todo parecía muy Chuuya. Era lo que esperarías de una persona como él. Con estilo occidental, moderno, y aunque había una tendencia al minimalismo, todo se veía muy lujoso.

" Le llame para pedirle el número de Kouyou-san".

"¿Por qué yo tendría el número de esa bruja?"

"Ey, déjalo en paz" apareció Chuuya, con voz ronca y muy pálido. Flotaba como un pequeño fantasma, sin interés en tocar el frío suelo. "Nadie te pidió ven-" no pudo terminar lo que decía, con velocidad se dirigió al baño aguantando tanto como podía el vómito.

Con cuidado, Dazai se acercó hasta él. 

"¿Cuánto tiempo llevas enfermo?"

"No es de tu incumbencia"  pronunció como pudo el enfermo.

"Que grosero, vine hasta acá muerto de la preocupación y tú ni un gracias". Trató de bromear, pero Chuuya no contestó, ni siquiera le hizo una mueca, solo se quedo cerca del váter por si volvia a vomitar.

Se quedaron un tiempo en silencio, mientras Dazai buscaba la mejor solución. Ya no era el mocoso que estaba encaprichado con Chuuya y quería estar cerca de él aunque eso molestara el pelirrojo. Ahora trataba de ser lo que Odasaku llamaría una buena persona, o al menos una decente, y acompañar a una persona enferma que te detesta y no pidió tu ayuda no era algo que haría a Odasaku estaría orgulloso.

Él solo había venido para volver a estar en contacto con Chuuya, no imaginó que estuviera taaan enfermo.

"012-345-67-89" murmuró Dazai, alejandose un poco del baño.

"¿Que?" preguntó Akutagawa.

"El numero de Kouyou es 012-345-67-89" 

El pelinegro de inmediato sacó su celular, pero fue interrumpido por el susurro de Chuuya, que apenas se atrevía a salir del baño.

"No va venir"

"¿Por? No vendra a cuidar a su subordinado favorito?" Bromeó un poco el castaño.

"No esta en la ciudad, fue a Tokyo a no sé qué".

El castaño contuvo un suspiro de frustración. Cuando fue a la tumba de Odasaku a confesar que quería volver a hablar con Chuuya, no se refería a esto.

El celular del pelinegro comenzó a vibrar, avisando de una llamada. Se alejó un poco para contestar, pero Dazai tenía mucha experiencia siendo chismoso, por lo que pudo oir perfectamente lo que decía. 

"Ahora? Pero Chuuya-san esta muy enfermo y-"

Evidentemente la capacidad auditiva de Dazai no le permitía escuchar lo que decia la otra persona, que él creía era Mori, pero podía adivinarlo.

"Bueno, esta Dazai aquí."

<Entonces dejalo con él> pensó el castaño que le respondería.

"Pero ¿y si se va?" 

<No se irá>

Y tenía razón, Odasaku no habría querido que se fuera. 

Al poco tiempo Akutagawa regresó, e hizo una pequeña reverencia ante sus dos mayores y salió corriendo a la salida antes de que Chuuya pudiera quejarse.

"Ese mocoso..." el chaparrito floto hasta el sofa para recostarse.

"Lo has malcriado mucho, Chibi" se rió.

"Va, ahora resulta que es mi culpa." Se tapó los ojos con un brazo. 

Dazai solo sonrió, definitivamente era su propia culpa.

"Bueno, al menos te tengo buenas noticias."

"¿Cuáles? ¿Conseguiste un vino caro y me lo darás?"

"No, no gano tanto. Pero, un rubio histérico me enseñó a preparar caldo de pollo."

El pelirrojo levanto un poco su brazo para mirarlo y sonreírle con burla.

"Lo dudo." 

*

Chuuya veía con desconfianza el plato que estaba frente a él. Para la sorpresa de Chuuya, Dazai si había sido capaz de preparar un caldo de pollo. 

No había nada fuera de lo habitual, no olía a algo venenoso ni putrefacto, se veía como un simple caldo de pollo. Aún así no se atrevía a comerlo.

"No soy un experto, Chibi, pero creo que para poder obtener los beneficios que te da el caldo tienes que comertelo". 

Aunque Dazai lo dijo para poder aliviar un poco la tensión, Chuuya lo miró con una profunda sospecha.

El castaño suspiró. Debió de haber preevisto esto.

"Te prometo que lo le puse nada".

"¿Si? pues no te creo, Caballla." Chuuya se recargo en el respaldo de la silla, sin ninguna intención de probar ese caldo que fue hecho, casi literalmente, por un demonio. "Seguro le pusiste algún veneno o laxante".

"¿Por que querria envenenarte?" preguntó Dazai, se estaba sintiendo algo ofendido por la falta de confianza.

"No lo sé, nunca te he entendido. Supongo que por la misma razón por la cual explotaste mi auto al irte de la mafia. " exclamó.

"Ay, por dios, Chuuya, sigues enojado por eso, eso fue hace mucho tiempo ya".

A mi me viene valiendo madre si fue hace cuatro o diez o veinte años! No solo desertas de la mafia y explotas mi auto, te escondiste como una vil rata incapaz de enfrentar las consecuencias de tus actos y lo que es peor: te uniste al enemigo. Y ahora finges ser tan amable y buena persona y ahora sabes hacer caldo de pollo y blah blah." Le reclamó Chuuya, usando su habilidad para elevarse a una altura más grande que la de Dazai. Tomó aire, tratando de calmarse. "¿A que veniste?"

Dazai se tomó su tiempo en pensar en una buena respuesta. Era obvio que Chuuya ya no confiaba en el como lo hacía antes, y para ser honestos, la desconfianza había empezado a crecer en él también. Aún así, extrañaba poder confiar en alguien plenamente sin tener que fingir ser una buena persona. Estar con alguien igual a él.

"Para poner en practica mis clases de cocina" bromeo, pero Chuuya no se rio. No era nada nuevo. Rara vez Chuuya se reía de sus chistes. Suspiró. "Por Odasaku, supongo." El pelirrojo no contesto, solo espero a que Dazai siguiera hablando. "Me dijo que tratara de hacer cosas buenas y todo eso. Y realmente lo estoy intentando, me estoy esforzando para hacerlo. También sé que no crees que ningun gesto amable que pueda hacer es genuino, y tienes razón, no lo son. Aún así quiero intentar".

Chuuya se cruzó de brazos aún flotando en el aire.

"Woaw, has mejorado muchisimo en tu actua-" fue interrumpido por la tos que era tan fuerte que le hizo perder el control de su habilidad y lo hizo caer al suelo. Se asustó al ver como gotas de sangre salían de su boca. 

Dazai tardo unos segundos en reaccionar, ¿qué debería hacer? Chuuya no confiaba en él y se podía asustar si se acercaba, por otro lado toser sangre es algo preocupante, ¿qué habría hecho Odasaku?

Al final decidió acercarse y ayudarlo. Chuuya se resistió al comienzo, pero para ese punto se estaba sintiendo muy débil. Se dejo ser arrastrado por Dazai (porque aparentemente era muy pesado para cargarlo) hasta su habitación.   Afortunadamente aún tenía fuerzas para subirse a la cama y poder desparramarse agusto. 

Dazai fue por el caldo de pollo para calentarlo y mientras le llamaba a Yosano para saber qué hacer, comentandole los síntomas que había notado.

"Por los sintomas que me cuentas, podría ser solo una infección respiratoria alta. Nada grave. Aún así hay que monitorearlo, si en unos días no mejora, deberías llevarlo a un hospital. Mantenlo hidratado, dale un antiinflamatorio y un analgésico."

 Dazai le llevo el caldo y un gran vaso de agua a su paciente. Improvisó una mesita con una caja y acomodó a Chuuya para que se sentara y pudiera comer.

"No me voy a comer eso".

"Ni modo, te lo vas a tener que comer, quieras o no".

Mientras discutian, Dazai esculcaba cada cajón y caja de la habitación.

"¿Qué buscas chismoso?"

"¿Dónde guardas las pastillas?"

"No te vayas a suicidar aquí" le advirtió. "No quiero que mi casa apeste a muerto".

"No son para mi. A parte, no hay nada de divertido en un suicidio por sobredosis".

Chuuya lo miró, debatiendose entre si confiar en él o  no. 

"En la cocina, en la alacena que esta a la izquierda" le indicó con un suspiro.

El castaño se contuvo de sonreir, pero tal vez le estaba gustando ser un enfermero.

*

Las pastillas y el cansancio hicieron dormir a Chuuya, pero un ruidoso trueno seguido de una fuerte lluvia lo hicieron despertar. 

El pelirrojo trataba de no volverse a quedar dormido, pero tan tan tan difícil, sus parpados se cerraban en contra de su voluntad, su cabeza se sentía pesada y era incapaz de mover un dedo por el cansancio.

"¿Por que no te vuelves adormir?" le preguntó Dazai.

"Porque no quiero" dijo de forma lenta y adormilada.

"Claro que quieres"

"Noup" se apoyó en la cabecera y comenzó a cerrar sus ojos poco a poco.

"Oye, Chuuya" el mencionado hizo un sonidito para dejarle saber que lo escuchaba, aunque Dazai lo veía mas dormido que despierto. "¿Te acuerdas cuando te enfermaste y yo tuve que soportar los regaños de Kouyou porque no te sabía cuidar?" Chuuya no emitió ningun sonido ahora. "Se que la estabas pasando fatal, pero para mi... es un buen recuerdo. Y, de hecho, esa vez que dormimos juntos, fue tal vez la única ocasión que dormí bien".

No hubo respuesta. No es que Dazai esperara una, así que tomo su gabardina listo para irse.

"Duermete en el sofa" escuchó decir a Chuuya, que se acomodó de tal forma en la cama que era imposible ver su cara roja por la vergüenza. "Que esta lloviendo y te enfermarás".

Esta vez, Dazai no contuvo la sonrisa. 

***

Jelou, pipol.

Con esto termina esta historia, aunque como no hubo ni un besito ni nada tal vez haga un capítulo extra que sea más romanticon, pero quien sabe, nada confirmado.

Esta vez trate de hacer a Dazai un poco más simpatico y menos como el psicópata, sádico, maquiavelico, jueputa, cabrón, sociopata, villano h1tleriano retorcido, vagabundo mata-perritos, maltrata-akutagawas, que suele ser. Aquí Odasaku tuvo más influencia en Dazai, llevandolo a genuinamente intentar mejorar como persona y no solo aparentarlo. Pero como que a mitad de camino me enojé con Dazai y bueno equisde, se tuvo que tragar un regañito por parte de Chuuya y que bueno la verdad, se lo merece.

Es muy difícil escribir a Dazai no siendo malo, jajs.

Ahora que acabe esta, tal vez es momento de comenzar a publicar otra de las dos historias que tengo en borradores. Una es de de la epoca de 1920 con Chuuya como periodista que trabaja un monton pero su vida mejora un poquito cuando se vuelve a encontrar con Dazai (que era su amigo de la infancia) y la otra es de una isla semi desierta en donde vive Dazai y Chuuya queda de naufrago ahí, ¿cuál quisieran leer ustedes?

(Elijan la primera)

Bueno, eso es todo. Muchisimas gracias por leer. Bai.

Seguir leyendo

También te gustarán

174K 4.7K 31
la tipica historia de universos viendo otros universos atraves de pantallas flotantes que aparecerán en sus mundos aunque también agregare otras cosa...
200K 25.5K 120
𝐅𝐀𝐊𝐄 𝐂𝐇𝐀𝐑𝐌 || 𝙴𝚕 𝚎𝚗𝚌𝚊𝚗𝚝𝚘 𝚎𝚜 𝚎𝚗𝚐𝚊ñ𝚘𝚜𝚘, 𝚢 𝚌𝚘𝚗 𝚜𝚞 𝚋𝚎𝚕𝚕𝚎𝚣𝚊 𝚑𝚊𝚛á 𝚚𝚞𝚎 𝚝𝚎 𝚊𝚛𝚛𝚎𝚙𝚒𝚎𝚗𝚝𝚊𝚜. Teen Wolf...
702K 19.6K 80
"...Vamos a pecar juntos..." ❝One-Shots sobre personajes masculinos del anime "Naruto" , escritos por un fan para otros fans , con alto contenido +18...
202K 17.2K 36
|𝐀𝐑𝐓𝐈𝐒𝐓𝐒 𝐋𝐎𝐕𝐄| «El amor es el arte de crear por la sensación misma, sin esperar nada a cambio,más allá del placer mismo del acto creativo...