Hey, perdón por subir muchos días después. Me pasaron mil cosas (entre clases, me enfermé por días asi que) espero disfruten el cap!
Suspiro mientras juego con mis dedos en mi regazo, estaba sentado en la silla. No pensaba que iba a estar tan nervioso sobre una prueba, la última en la que estuve nervioso fue en la Academia. Tuvimos que pasar por entrenamiento mental y físico, y como resultado, nos convertíamos en soldados. Era eso o morir en las calles.
Las manos de Louis sostienen las mías, aprieta con gentileza dándome seguridad. Lo miro desde donde estaba sentado, en una pequeña mesa de trabajo, y me sonríe.
— Deja de moverte. — Susurra suavemente pasando su dedo por mis nudillos— Todo estará bien. Puede no suceder nada.
— Pero puede ser algo. — Alzo mi ceja hacia él usando las mismas palabras que había usado conmigo ayer. Sonríe de lado antes de suspirar.
— Sea lo que sea, te amaré de todas maneras, así que esta prueba es solo para calmar tu mente y tu curiosidad. — Louis explica y respiro hondo ante sus palabras. Aún me ama. No le importa si tengo alguna habilidad o no. No puedo negar que tenemos una conexión. Como su toque hacia mi piel erizarse y como nuestros cuerpos se unían juntos como dos partes de una sola pieza. Encajábamos.
Muerdo mi labio y lo miro, estaba a punto de decir algo cuando Lucy entra al cuarto, con una sonrisa en su rostro. Ve a Louis en su lugar de trabajo, sus ojos se agrandan antes de volver a su postura original. Sonríe hacia Louis quien le devuelve débilmente la sonrisa.
— Hola muchachos. — Saluda feliz mientras abre el cajón del mueble sobre Louis, quien se agacha y salta de la mesita dándole acceso para tomar lo que necesitaba. — Así que, Harry, — Se gira hacia a mí. — Estás aquí para hacerte unas pruebas. — Comienza la conversación, notando cuan nervioso estaba y pensando que hablándome, ayudaría a que mis nervios se fueran. Respiro hondo y asiento.
— Si amm... pienso que podría tener alguna habilidad. — Lucy me mira sorprendida antes de ver a Louis para confirmar esto. Louis asiente hacia ella desde donde estaba parado detrás de mí. Coloca una mano en mi hombro y la tomo apretándola, sintiéndome más calmado mientras lo hago.
Lucy mira sorprendida ante mi gesto, aún más notando que estaba tocando a Louis y él no tenía los guantes puestos. La miro nervioso y ella parecía entender porque quería tanto saber los resultados de la prueba.
— Ya veo. — Susurra más para sí misma entendiendo. Luego mira a Louis quien acariciaba mis nudillos con expresión preocupada. Veo una pequeña sonrisa apareciendo en sus labios y como mira nuestras manos entrelazadas. De repente deja de mirar y se gira hacia atrás de ella, aun sonriendo.
Cuando se vuelve hacia mí, me encojo al ver la jeringa en su mano. La coloca sobre una bandeja para desinfectarla antes de ponerse unos guantes. Miro la aguja apuntándome y trago duro.
— Es solo una pequeña aguja, no sentirás nada. Será rápido. Es solo para sacarte una muestra de sangre. — Dice alejando la jeringa y tomando mi brazo. Toma un poco de algodón de la bandeja y la pasa por mi piel justo donde estaba la vena en medio del brazo.
— B-Bueno. — Louis se arrodilla a mi lado y toma mi otra mano en la suya apenas apretándola mirándome con cariño.
— Oye. — Me llama suavemente y lo miro, sin darme cuenta que Lucy tenía la jeringa en su mano. Mira hacia Louis antes de mirar mi brazo. Louis me sonríe. — Mírame a mi amor. Estas haciéndolo muy bien. — Afirma haciendo que Lucy y yo sonriamos ante sus palabras.
De repente Lucy atraviesa mi piel con la aguja y me pongo pálido, mis ojos mirando mi brazo y mi respiración comienza a acelerarse. Louis rápidamente toma mi mentón girando mi rostro en su dirección. Mis ojos mostraban miedo, pero se encontraron con los suyos, azules y cálidos. Me besa tiernamente.
Sus labios se mueven contra los míos y suspiro en el beso, respondiendo a su toque. No sentí la aguja salir de mi piel o la pequeña venda que Lucy coloca sobre mi piel luego de haber limpiado la sangre con un poco de algodón.
Louis se separa, su pulgar rozando mis labios mientras me sonríe con una mirada de amor. Me sonrojo, dándome cuenta que me había besado frente a Lucy.
— Primera jeringa. Lista.
— ¡¿Qué?! — Mis ojos la miran con miedo. — ¿Cuántas más habrá? — Lloriqueo.
— Solo dos más. — Lucy me mira con simpatía antes de tomar una botella de algo del mueble junto a la bandeja. Coloca la sangre quitada con la jeringa en un tubo de ensayo y toma una jeringa nueva del pote esterilizador. La coloca en una pequeña botella con una sustancia antes de abducirla llenando la jeringa. Aprieta un poco la parte de debajo de la jeringa hacia arriba haciendo que salga un poco. Jadeo cuando lo hace.
Tiemblo mirando a Louis bufando para mi mismo. — Tírame una serpiente frente a mí, ponme en un nido de arañas o en un tanque lleno de tiburón y lo haré sin pestañear. Pero me pones una aguja y salgo corriendo-
Louis se ríe ante mi explicación. Su sonrisa se borra cuando cierro mis ojos al sentir la sustancia entrando en mi piel llenando mis venas. Respiro hondo ante el dolor que sentí, los ojos de Louis se posan en Lucy oscureciéndose.
— Tal vez puedes avisar la próxima vez. — Louis dice entre dientes y sus ojos se agrandan.
— Pensé que mientras hablaba contigo podría hacerlo rápido y no iba a notarlo. — Explica mirando a Louis queriendo disculparse. Saca la aguja y jadeo mordiendo mi labio. Louis no podía controlar su molestia, pero lo detuve antes de que haga algo.
— Está bien Lou. — Suspiro y se gira hacia mí. — Solo es que, se me hacen hematomas como si nada. Siento todo. — Me refiero a que el dolor de la aguja parecía un puñetazo en la cara. Louis me mira preocupado antes de rodar sus ojos pensando.
— Yo no siento dolor. Tú sientes todo el dolor. Es una unión hecha en el cielo. Somos fuego y hielo. — Louis afirma en broma y río ante eso, mis ojos arrugándose. Lucy nos observa con una sonrisa y luego toma la última jeringa.
— Bien. — Llama nuestra atención y la miramos. — La jeringa anterior, era un contaminante. Trabajará dentro del sistema de Harry rápidamente y arreglará su problema celular. Probablemente termine de hacer efecto en unos cinco minutos y luego es cuando entra esta. — Señala la aguja y mi piel se pone pálida.
— Esta es para tomar otra prueba de sangre, con tu sangre ahora contaminada. Las estudiaré de cerca. Si la sangre se pone blanca, significa que tienes una habilidad. Luego de eso, veré su fuerza y sabré de lo que eres capaz a partir de ahí.
— ¿Qué sucede si no se vuelve blanca? — Pregunto frunciendo el ceño y ella hace una mueca de duda.
— Bueno. — Comienza. — Hay diferentes casos. Si no cambia y queda roja, significa que estas bien. Si se vuelve rosa, estás enfermo. Verde, significa que tu sangre reaccionó mal a lo inyectado, haciendo que tengas alucinaciones y te sientas muy débil y mareado. Negra... significa que solo tendrás unas horas antes de que el contaminante se coma todas tus células antes de que tengas una hemorragia cerebral.
— ¡Nunca me habías dicho eso! — La voz de Louis retumba en el cuarto mientras se levanta. Sus ojos oscuros mientras grita mientras pongo mi cabeza en mis manos, preocupado. Pensé que sería una prueba simple.
Lucy da un paso hacia atrás asustada.
— Yo-
— ¿¡Me estás diciendo que en tres o cuatro horas se puede morir?!
— ¡No espera! — Levanta sus manos. — No dije eso. Es solo cuando es negra que morirá. Las otras dos son efectos secundarios del contaminante. Aun estaría vivo. Tiene chances muy altas de sobrevivir-
— Una de cuatro. — Louis aprieta sus dientes. — Su vida está en manos de cuatro resultados que no podemos cambiar. A esta hora mañana podría estar malditamente muerto, y si lo está, vendré por ti Lucy. — La voz de Louis es baja y amenazante, y Lucy deja caer una lágrima ante esto.
— No, para. — Digo tomando su brazo con mi mano libre. Me mira, sus ojos suavizándose pero aún oscura. Tiemblo. — Esto no es su culpa. Solo está haciendo su trabajo, lo que fue entrenada a ser. Deberías estar enojado conmigo, no con ella. Esta es mi culpa. Yo quería hacer esto. — Afirmo seriamente y Louis frunce el ceño. Se sienta en el suelo a mi lado de la silla y pone su cabeza en sus manos. — No sabía que podía morir al hacerme la prueba. Lo siento Lou. — Continúo llevando mi mano a su cabello. Paso mis manos por su pelo y me mira con ojos nubosos. Las lágrimas amenazaban con salir de ellos mientras toma mi mano y besa mis nudillos dejando sus labios posados allí antes de separarse y sobarse la nariz.
— Esto no es tu culpa. — Susurra observando mi rostro. Pasa sus manos por las mías y las toma, con miedo que si lo soltaba, podría desaparecer.
No quería desaparecer. No quería dejarlo solo, indefenso. Donde cualquiera podía venir y destruirlo. No podía permitir que eso pasara. Respiré hondo y me incliné hacia él, teniendo cuidado con mi brazo.
— Todo estará bien. Si es verde o rosa, lidiaremos con ello. Son solo efectos secundarios. Se irán. — Le aseguro y asiente, sorbiéndose su nariz antes de cerrar sus ojos.
— No hay humo sin fuego. — Lucy dice desde donde toma una nueva jeringa. Toma mi brazo algo tembloroso, mientras espera unos segundos más, asegurándose que pasen exactamente cinco minutos antes de insertar la aguja lentamente y extrayendo la sangre contaminada de mi sistema.
Suspiro, sintiéndome débil por la cantidad de sangre que me había sacado y las agujas entrando en mi piel. Dejo caer mi cabeza hacia atrás pestañeando varias veces mirando el techo. Louis aprieta mi mano, recordándome que estaba ahí conmigo. Le sonrío sin prestar atención a la jeringa llenándose con mi sangre antes de que la saque de mi piel.
Rápidamente sostiene un algodón en la pequeña herida y coloca la jeringa en el mueble. Toma una pequeña venda y la coloca sobre el algodón. Luego coloca la muestra dentro de otro tubo de ensayo, y no pude evitar mirarla fijamente con miedo. Esperando que cualquier color, excepto el blanco.
**
Louis y yo esperamos los resultados en el cuarto. Louis no dijo ni una palabra en todo el rato mientras caminaba de aquí para allá esperando. Aunque de vez en cuando me preguntaba cómo estaba o se acercaba a mí tocando mi frente para chequear si tenía temperatura.
Suspiro al verlo y sus ojos se posan en mi preocupado antes de acercarse.
— ¿Estás bien? ¿Te sientes enfermo? Luces algo pálido. Maldito infierno Harry-
— ¡Basta! — Lo interrumpo y quito su mano. Su boca se abre, una expresión herida en su rostro y gruño. Llevo mis manos a mis ojos sobándolos.
— Harry-
— Por favor Louis. Me siento bien. Solo deja de... preocuparse. No tiene sentido, todo lo que podemos hacer es esperar los resultados. No tienes que pasear cada dos minutos. — Digo mientras las lágrimas de frustración aparecen en mis ojos. — Siento ser tan duro. Preocuparse nunca fue una emoción que iba conmigo. La odio y aprendí a lidiar con lo que sea que la vida me arroja y deberías hacer lo mismo. Si voy a morir, no quiero que mis últimos momentos contigo sean verte caminar sin parar o preguntándome si estoy bien.
Louis esconde su dolor y preocupación por mí y está a punto de tocarme cuando se detiene. Sabiendo que no es lo que quiero. Asiente hacia mí suspirando.
— Está bien. Lo siento amor, es solo que no quiero perderte-
— Si piensas que vas a perderme en la próxima hora y media, ¿Qué quieres hacer o decirme ya que no tendrás otra oportunidad para hacerlo? — Levanto mi cabeza mirándolo y se muerde el labio inferior.
— Esto. — Dice y se acerca a mí chocando sus labios contra los míos. Gimo en el beso, llevando mis manos alrededor de su cuello y sus manos pasan bajo mis muslos pellizcándolos apenas y entiendo lo que trataba de hacer. Me levanto y paso mis brazos por sus hombros saltando mientras sus manos toman mis muslos poniéndolos en su cintura. Mis piernas rodeándolo, aferrándome a él y beso su cuello con hambre.
— Vive el momento Louis. — Jadeo contra su cuello y gime mientras me lleva hasta la puerta del baño empujándome contra ella suavemente mientras ataco su cuello, succionando y mordiendo, dejando marcas en su piel dejando chupones. Paso mi lengua por las marcas cuando termino y soplo suavemente. Siento una corriente correr su cuerpo mientras gime moviéndose hacia adelante, su parte delantera tapada por el jean chochando contra mi miembro y jadeo ante el contacto. Lloriqueando queriendo más.
Louis jadea por el placer y me mira. Una sonrisa de lado aparece en su rostro.
— ¿Sexo en la ducha?
— Mierda sí. — Jadeo y mis labios atacan lo suyos mientras atravesamos la puerta con movimientos torpes, pero rápido. Me deja en el suelo y tiro de su camiseta levantándola impacientemente mientras ríe.
— Alguien está necesitado.
— Si esta es la última vez que tendré sexo contigo, voy a necesitar todo. Te quiero tener malditamente adentro de mí ahora y quiero que me folles hasta que no pueda ponerme en pie. — Alzo mi voz mostrando el deseo que sentía y mis pupilas se agrandan de lujuria. Lucho contra el botón de su jean y él jadea ante mis palabras. Siento su miembro moverse en donde tenía posadas mis manos sobre el botón y sonrío de lado antes de que mis manos sean retiradas y Louis casi rompa su pantalón mientras se los quita.
Se gira hacia a mí con ojos oscuros. — No te la haré fácil esta vez. Te dije que te haré rogar-
— Cállate y bésame. — Prácticamente le gruño mientras lo atraigo hacia mis labios con mi mano en su nuca. Gimo cuando nuestras lenguas se mezclan y la adrenalina me atraviesa mientras trato de dominar el beso esta vez. No puedo evitar sonreír ante la victoria mientras lo hago.
Louis se separa y toma mi remera quitándomela por la cabeza rudamente haciendo que mis orejas duelan ante el contacto. Rápidamente se encarga de mi jean antes de bajarlos junto a mi bóxer de una. Mi miembro se mueve delante de él en libertad.
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