_Narra Kendall_
-¿ Cuando vas abrir el nuevo club? - Massimo entra a la cocina mirando su teléfono.
-Dentro de tres días. - Luciano le sirve una cerveza a Massimo quien se sienta en la mesa de la cocina junto a nosostros.
-Lo dices con tanta seguridad como si no supieras que siempre hay inconvenientes que pueden atrasar los planes.
-Deja de molestar primo, lo vas a poner nervioso y se va a ir antes de lo planeado. - Luciano lo regaña y este solo lo ve con ojos asesinos.
-Aunque no lo creas, ese es mi objetivo, va a cumplir un mes aquí y no hay un día en el que pueda estar tranquilo con mi esposa e hijos porque él está aquí. - Massimo se escucha irritado.
-Tienes que comprenderlo, es su hermana menor y esa hermana tiene dos hijos y como el esta solo en Rusia, tiene que venir a visitar a su hermana.
- Pues que se consiga una mujer y que tenga hijos para que deje en paz a mi esposa.
-Oye, ¿saben que están hablando de mi y yo estoy aquí? - los dos me miran sin importarle mi comentario, tal parece que los dos hacen esto por que mi presencia les afecta a ambos. - Comprendo que a Massimo no le guste que este aquí pero no entiendo porque tú te molestas Luciano.
-Amigo te voy hacer sincero, solo tienes un mes aquí y ya te acostaste con todas las mujeres del personal de la casa y del hotel que hay aquí en la capital, eso me molesta este es mi territorio amigo y tú me estas quitando lo que es mío.
-Ya veo pero que te puedo decir, me encantan todas las mujeres y ellas no se pueden resistir a mis encantos. - los dos comienzan a reírse después de escuchar mis palabras.
-¡¡Tio!! - Adriano corre a mi dejando su mochila en el piso, lo cargo emocionado de verlo, ya me estaba aburriendo de molestar a Massimo y Luciano.
-Hola campeón, ¿porque sales a esta hora del Colegio? ¿No crees de es muy tarde?
-Pero me volvieron a castigar, así que ya estamos igual papá, los dos estamos castigados. -el niño hace con sus manos señales de aprobación a su padre.
-Los dos castigados. - Luciano y yo hablamos al mismo tiempo al escuchar al niño y el mueve su cabeza en afirmación.
-Si, escuche a mi mamá decirle a mi papá que está castigado. - fue inevitable no reír al escuchar las cosas que escucha mi sobrino de sus padres, no fui el único en reír, Luciano parecía que se caería fe la silla.
-Eso no es algo nuevo desde el primer día que ella llegó a su departamento lo castigo y ella hizo lo que quería. - apenas y se lograba entender a Luciano con la risa que tenía.
-Luciano y Kendall, vayan a traer las comparas que traje están en mi auto. - la voz de mi hermana se escucha desde la entrada de la cocina.
- Y porque solo a nosotros nos mandas, aquí también se encuentra tu esposo.
-Porque Massimo esta muy cansado de mucho trabajo y necesita un baño.
- Que tiene eso que... - el pequeño en mis brazos pone su dedito en mi boca para que no siga hablando.
-Tío, mi papá es peor que yo, no puede bañarse solo así que mi mami lo ayuda siempre que mi papá se baña.
-¡¡ Santo cielo!! Que es lo que le están enseñando a este niño. Vámonos antes que diga algo más perturbador. - Luciano nos saca de la cocina a los dos para de dejemos a los dos enamorados en la cocina.
Aunque me cueste ver a mi hermana en brazos de otro tipo, tengo que reconocer que ella es feliz con él y gracias a ello tengo dos sobrino, a veces siento curiosidad por saber que se siente tener lo que mi hermano tiene, una familia que esta junta a pesar de los problemas.
~~~~ jajajaja 🤩🤩🤩 ese niño es un amor, aprenden muy rápido 😁😁 la curiosidad mato al gato Kendall, cuidadito 🤗🤗~~~~