a-ni-ma-ción: sustantivo femenino
1. Acto o efecto de animar.
2. Alegría, entusiasmo.
3. Técnica de simulación de movimiento a través de una secuencia de dibujos o imágenes.
¡Aquí voy con la manía de senos grandes!
Borro la hoja del cuaderno y aprovecho para limpiar la página antes de que comience a volver a dibujar la imagen. Con cada línea en este papel mi heroína cobrando vida, su cara en forma de corazón, sus enormes ojos marrones y sus labios carnosos.
Ah, cómo me gustaría besar esos labios.
Mi lápiz comienza a definir sus piernas llegando a su cintura delgada, también debajo de los senos perfectos. Elimino las líneas de boceto y obtengo los detalles correctos finales.
Ahora ella es perfecta. Es posible que no pueda hablar con chicas, pero sé dibujarlas muy bien. Levanto mi cuaderno y continúo admirando mi trabajo antes de colocarlo justo al lado de la caja registradora.
Al menos parece que he superado esta obsesión por los senos enormes.
¡Maldita sea! En los primeros meses, cuando descubrí la pornografía en línea empecé a dibujar senos cada vez más grandes. Si mis dibujos fueran reales estas chicas ni siquiera podrían caminar. Picasso tuvo su período azul, yo tuve mi período de pechos. Después de un tiempo, me cansé de aquellos episodios.
Dejé la mecánica del sexo virtual. Ahora que soy más madura, comencé a estudiar los viejos modelos pin-up y también leyendo algunos cómics que todavía dejo algo a la imaginación. Como resultado, mi trabajo fue más artístico y mis chicas, por ahora, podrán caminar sin tropezar.
Oigo a alguien toser y, ajustándome las gafas, puedo ver a un chico fascinado con uno de los nuevos juegos de Playstation 3. Él maneja la consola como si fuera un tesoro, un regalo sagrado de los dioses del videojuego.
Me gusta mucho este chico Theo, que visita la tienda todos los sábados mientras su madre se hace las uñas en un salón al otro lado de la galería. De hecho, me recuerda mi período de inadaptación, a esa edad cuando ni siquiera podía mirar a las personas a los ojos porque era muy tímida.
Ahora incluso hablo con los clientes cuando pagan la factura. Con seguridad es el progreso para una persona que solo comenzó a hablar después de los cuatro años de edad.
Dejo que Theo siga admirando los juegos, pero ya sé que no será capaz de comprar cualquier cosa esta semana, se acabó su mesada. Él gastó todo lo que tenía el sábado pasado en la última versión de Dragon Age.
Cuando un auto toca la bocina afuera, el niño echa un vistazo y se despide.
—Hasta la semana que viene, Lauren. — Habla antes de correr y subirse al auto de su madre.
Cuando tenía su edad, pasaba mis sábados con mis padres, asistiendo a varios eventos deportivos en los que participó mi hermano Chris. Siempre llevaba mi cuaderno y lápiz y pasaba horas dibujando.
Aprendí muy pronto a perderme en mis borradores y crear mundos en mi cabeza para escapar de la realidad. De hecho, nada ha cambiado mucho, solo que ahora me pagan por trabajar como animadora en un estudio y ya no necesito sufrir durante horas un juego.
Recojo mis crayones y empiezo a completar el dibujo cuando escucho el timbre de advertencia que un cliente ha entrado. Miro rápido y puedo ver un cuerpo femenino dirigiéndose a uno de los pasillos de la tienda.
Siento la adrenalina correr por mi cuerpo.
No, no puede ser. No es ella. Ella no puede estar aquí comprando en El Mundo Geek de Jimmy. Imposible.
¡No!
Cierro los ojos y trato de calmarme contando hasta diez hacia atrás. Cuando llego a cuatro, dejo de contar y miro hacia adelante, tratando de averiguar si no es solo un truco de mi imaginación.
Ella está parada justo en el medio del pasillo y comienza a caminar lentamente hacia mí, el movimiento de caderas me distrae, pero noto las botas altas negras, la falda plisada corta y la camiseta vieja con el logo de The Sex Pistols. Me giro y agarro el borde del mostrador para equilibrarme.
—Hola. — Ella me saluda tranquilamente. — ¿Podrías ayudarme? — El largo cabello castaño parece seda, como el de un champú comercial.
Es la mujer de mis sueños, mi obsesión, Camila Cabello, está justo delante de mí. Empiezo a recordar que aquí es exactamente donde mi fantasía comienza y termina con nosotras besándonos en el cuarto de inventario.
Pero este momento es real y necesito concentrarme.
—Claro, ¿En qué puedo ayudarte? — Mi respuesta tiene un tono muy emocionado, pero ella ni siquiera se da cuenta. Estoy segura de que no tiene idea de quién soy.
—Necesito ese cable, esa cuerda para mi computadora, pero yo realmente no sé lo que es.
—¿Usb? — Sonrío, dejo el mostrador y camino con autoridad a la sección. — ¿Necesitas un cable USB?
—¿Qué es eso? — Ella se cruza de brazos y frunce el ceño, parece que yo hice una pregunta sobre las enfermedades de transmisión sexual en lugar de puertos de entrada de computadora.
—Un cable USB facilita la conexión de periféricos a tu computadora y también ofrece una transferencia de datos más rápida. — Ajusté mis lentes de montura gruesa, esperando que se quede impresionada con mi explicación.
Ella pone sus manos en sus caderas, se acerca a mí y miro directamente sus senos. Casi pierdo el aliento antes de darme cuenta de que ella está realmente leyendo mi nombre en la placa.
—¿Peri qué? — Pregunta ella casi afirmando. — Creo que ahora es un buen momento para hacerte saber que no hablo ese lenguaje técnico. ¿Me puedes dar una respuesta más simple para que pueda entender de qué estás hablando? Solo necesito la cuerda para conectar mi computadora vieja a la nueva.
Considerando mi pasado e historia de impresionar a las mujeres, no debería sorprenderme que ni siquiera se preocupe por mi gran conocimiento tecnológico. Miro hacia abajo y pido desesperadamente que suene el teléfono o que alguien entre en la tienda y pueda escapar de este desastroso momento para arreglar mis pensamientos pero la tienda es silenciosa como una tumba.
Me imaginé este momento tantas veces, estar con ella, hablar con ella, y terminé estropeando todo. No quiero empeorar la situación y quemar mi gran posibilidad de dejar una impresión positiva. Me temo que ella ya piensa que soy una chica rara.
Cuando finalmente levanto la vista, veo una sonrisa en su rostro, y ella
pregunta: — ¿La cuerda, Lauren?
Tomo un cable. — Esto es probablemente lo que necesitas. ¿Me puedes decir si la entrada es masculina o femenina?
—No tengo idea. —, responde ella, riendo.
Dios mío, ella piensa que estoy hablando de sexo. Quiero desaparecer pero dónde ¿En mi capa de invisibilidad? Intento recuperar mi autocontrol.
—Mira, puedes probar este, y si no funciona, tráelo de vuelta. — Respondí.
Ella riza un mechón de cabello con sus dedos perfectos pensando en mi sugerencia y responde: — Ok.
—No, eso es todo.
Mientras caminamos hacia la caja, respiro su perfume, una mezcla de cítricos con mañanas de verano.
Saca su billetera de su bolso y veo que tiene una larga cadena de Hello
Kitty atascada. — ¿Cuánto te debo?
—Doce con cuarenta y nueve. —, respondo después de comprobar el precio.
Cuando abre su billetera para obtener el dinero, recuerdo que mi cuaderno todavía está abierto al lado de la caja. Lo recojo tan rápido que el lápiz y la goma se va volando y puedo cerrar antes de que pueda mirar bien.
Camila se gira hacia un lado y pregunta: — ¿Tú lo dibujaste?
—Sí. — Respondo casi susurrando.
—¿Eres artista?
No puedo mentir. Ella podría terminar reconociéndome en la oficina ahora.
—Bueno, en realidad soy una animadora de cómics.
Los ojos de Camila brillan de alegría y ella dice: — ¿En serio? Yo también trabajo en animación.
—Lo sé. Trabajo en la República del Garabato. Eres del área de desarrollo, ¿Verdad?
Bueno, eso fue realmente genial. Casi plausible como si no hubiera soñado con ella todo el día y dibujarla desnuda todas las noches.
—¿Trabajas allí también? Perdóname, no te reconocí. Si, trabajo en desarrollo, pero lo que realmente quería era ser animadora. No tengo el talento necesario, así que tuve que concentrarme en lo que sé hacer bien. ¿En qué serie trabajas?
—Con el equipo de Joel en Bernie and Beaver Patrol. Mi amigo Nicholas es el escritor principal.
—Amo a Nick. — Responde ella con entusiasmo. — Él es muy divertido.
—Es cierto, todos lo adoran, él es un personaje. — Respondo, llena de envidia.
—Entonces dime, ¿Qué haces aquí? — Pregunta ella usando sus manos para señalar las diferentes secciones de juegos y accesorios. — ¿No te estamos pagando bien? Siempre pensé que los animadores recibían un buen salario.
—No, déjame explicarte. El padre de un amigo es el dueño de esta tienda, estoy solo echando una mano mientras el gerente se recupera de la cirugía en la rodilla solo por unos meses, hasta que regrese, y solo los sábados.
Camila aprueba y dice: — Entonces muéstrame tu trabajo. —, trata de atrapar mi cuaderno. — ¿Eres realmente buena?
Me alejo inmediatamente, dejando el cuaderno fuera de su alcance. — Sí, claro. — Respondo, llena de confianza.
Además, esto es una cosa de lo cual sé con absoluta certeza. Tengo mucho talento. Los maestros de CalArts, el Instituto de las Artes de California, me dijeron lo mismo y conseguí el trabajo en el estudio tan pronto como terminé la universidad.
—Me encantaría mostrarte mi trabajo, pero estas son solo ideas y quiero mostrarlo como producto final.
Ella levanta las manos y dice: — Está bien, cuando estés lista me encantaría ver tu trabajo. Sabes dónde encontrarme.
Sí, me encantaría encontrarme con ella. Ah, si supiera por cuánto tiempo la admiraba.
—¿Me recordarás si te lo muestro en una hora? Deberías ver muchas obras de diferentes artistas.
Ella sonríe y responde: —Estoy segura de que te recordaré, Lauren. Eres muy llamativa.
Inmediatamente saco la billetera del bolsillo y le entrego un rectángulo colorido.
—Aquí, por si acaso, déjame darte mi tarjeta. — Me siento extremadamente agradecida de seguir el consejo de mi padre y llevar siempre una tarjeta de trabajo porque nunca se sabe cuándo aparecerá una oportunidad.
Camila lo toma con cuidado y lo mantiene cerca para leer. Ella le da la vuelta y estudia el diseño.
—Qué linda tarjeta. — Dice ella antes de ponerla en su monedero.
—Gracias. — Respondo, tratando de capturar cada detalle de su expresión.
Ella me mira, me estudia por un momento y dice: — ¿Y esa bufanda? ¿Es una tendencia de moda?
Siento que mi piel se enrojece mientras ajusto mi bufanda.
—Es un poco parte del uniforme. ¿Puedes creerlo? Es para que los empleados no sean tan geeks, el estilo elimina cualquier duda. Nosotros ni siquiera podemos usar jeans. Tiene que ser estos pantalones de cintura alta terciopelo o sarga. Cuando el padre de mi amigo, el dueño, está cerca, él incluso nos hace poner la camisa dentro de los pantalones.
—Wow, ¡Eso es gracioso! — Ella responde. — Me acordé de esa ropa rara que las chicas usan en el Hot Dog on a Stick.
—¿Crees que uso una bufanda por propia voluntad?
—No estoy segura. En realidad es incluso extrañamente sexy. De seguro que deberías atraer a muchas chicas con ese estilo. Creo que hay una escondida en esa habitación en la parte de atrás.
Mi imaginación vuela cuando pienso en Camila en el cuarto de inventario.
—Está bien, es mejor hasta que nos apuremos para que ella no se sienta celosa. — Respondo sonriendo, feliz con la conversación. Ese libro que leí sobre cómo funciona realmente hablar con mujeres funciona.
—¿Y qué lleva puesto? ¿Tu gatito en la trastienda? — Ella pregunta, burlándose de mí.
—Nada, en realidad.
Ella da una carcajada. Dios, amo ese sonido.
—¿Está atada?
Esta conversación no me está ayudando a domar mi fantasías Jesús, vamos, concéntrate, mujer.
—Quizás. — Respondo un poco nerviosa.
—Ustedes los animadores son todos pervertidos. — Ella me responde burlándose. — Me encanta.
De repente, la mirada de Camila cambia y ella se acerca mucho diciendo:
—Tienes dientes perfectos. Me encanta... Cuando estaba en la secundaria, incluso pensé en hacer odontología. Pero cuando me di cuenta de que no lo haría solo trabajando en bocas sexys como la tuya, me di por vencida con la idea inmediatamente.
—Muchas gracias. — Respondo con una amplia sonrisa, mostrando todos mis dientes. Ese comentario sobre mi boca siendo sexy me atrapó sin preparación, y empiezo a imaginar situaciones casi salvajes en mi cabeza, pero trato de recomponerme.
Parece que a Camila le gusta, o al menos tolera a los geeks, pero definitivamente le gustaron mis dientes. Me puse en su radar ahora y, de repente, ganar su corazón ya no parece ser esa tarea imposible. Ahora mis posibilidades son las mismas que para las personas que ganan en la lotería, y sucede todo el tiempo, ¿Verdad?
Ella toma la bolsa y la cambia y dice:
—Entonces, tal vez nos veamos en la oficina.
—Claro, avísame si tu conexión funciona. Y también si tienes problemas con el aporte masculino y femenino.
Su sonrisa tiene el poder de derretir los glaciares y siento que mi corazón late fuerte dentro del cofre. Nunca me he sentido así antes. Juro que debe ser amor, ¿Que más si no? Quiero abrazarla y nunca dejarla ir.
—De acuerdo. — Responde ella, luego se da vuelta y camina hacia la puerta.
Sigo mirando cada paso, capturándola en mi memoria. Mis dedos estaban con ganas de tomar el lápiz y registrar este momento en papel, también ella siempre se quedará conmigo.
La mano delgada y pálida sostiene la puerta y ella me mira, absolutamente segura de que también estoy mirando, y dice:
—¿Sabes qué? Lauren, no dejes que mi apariencia te engañe. En el fondo yo también soy un poco geek, siempre lo he sido y siempre lo seré. Todas mis personas favoritas también lo son. Los geeks somos los mejores porque sabemos quiénes somos y no tratamos de ser nadie más, ¿Verdad?
Aunque tengo dudas sobre su declaración, sacudo la cabeza de acuerdo antes de dejar la sombra de la puerta al sol. La chica que me encanta brilla más que nadie. Y mientras la miro desaparecer de mi campo de visión, estoy completamente segura de algo y es que si incluso tengo desafiar la lógica y la razón.
¡Estoy enamorada!
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¿Las lectoras de Divorce me van a matar por no actualizar pero si subir algo nuevo/viejo del 2020? Probablemente.
Bienvenido Comic nuevamente a mis manos, vamos a ver que se puede hacer aquí.