Regresaron por un elevador el cual los llevo nuevamente dentro del castillo, cerca de donde estaba la estatua gigante de Salazar.
Se acercaron al final del pasillo logrando ver la estatua gigante, se veía más grande en persona que en el juego. Viste como el camino estaba sumergido en el agua.
Dentro de poco correrían hacia afuera, lo cual sería algo parecido a un precipicio. Últimamente estabas corriendo seguido.
---La máquina de escribir. ---Te regresaste hacia atrás, sentandote en la silla comenzando a pulsar las teclas.
Leon se acercó, agachandose un poco mirando sobre tu hombro.
---¿Qué haces?. ---Miró con curiosidad, que tecleabas los nombres de ustedes dos.
---Es verdad. ---Te detuviste un momento, mirándolo de reojo. Así que decidiste decirle. ---En el juego, así es como se guardaba el progreso.
Leon pareció algo sorprendido por aquel dato que le diste, aún así pareció entenderlo a la perfección. Te levantaste del asiento cediendoselo a Leon.
Leon se sentó en la silla, viendo el apunte que habías hecho en la máquina. Sonrió un poco de lado y comenzó a sobreescribirlo.
---"La pareja Kennedy". ---Leíste internamente, lo que Leon guardó con la fecha haciéndote sentir la cara caliente.
Empezaste a caminar sintiendo tu corazón acelerandose cada vez más. El rubio al ver tu reacción no pudo evitar reírse levemente antes de seguirte.
---Amo sus reacciones, son tan lindas. ---Pensó caminando detrás tuyo, asegurándose de que ningún enemigo apareciera por detrás.
Leon siguió tu mirada, antes de mirar a las otras direcciones.
---Creo, que ya se lo que necesitamos. ---Pronunció él con seguridad, después de analizar el lugar. ---Tenemos que bajar las palancas para poder habilitar el puente y salir, ¿correcto?.
Asentiste, algo sorprendida de que lo descubriera con esa rapidez. Miraste la escalera al otro lado, caminaste hacia ella lista para subirla.
---Si quieres, iré yo. ---Leon coloco su mano en tu hombro ligeramente, deteniendote. ---Puedes ayudarme con fuego de cobertura desde aquí abajo.
Te giraste confundida viéndolo, pero te detuviste al verlo decidido. Se veía tan atractivo con esa mirada que te daba.
Sin saber, que él estaba así ya que no quería arriesgarte saltando en aquella mano de la estatua que parecía muy inestable.
---Esta bien. ---Respondiste, sabiendo que no lo harías cambiar de opinión. Sacaste tu pistola dirigiéndote a una orilla logrando ver el segundo piso.
---Gracias. ---Te agradeció, dejándote un leve beso en tu cabeza antes de subir las escaleras.
No pudiste evitar mirarlo mientras subía. Era un chico que no podías evitar admirar, tu personaje favorito era tu novio.
Aquel rubio que solo veías a través de la pantalla, en el juego o en videos e incluso algunos edits con música.
Levantaste tu pistola apuntando con la mira como Leon te había mostrado antes. Jalaste el gatillo, acertando directamente en la cabeza de un iluminado con túnica azul.
Leon estaba del otro lado peleando contra algunos iluminados, habían algunos cuantos rodeándolo. Le disparaste a uno que lo iba a golpear por la espalda.
---¡Buen tiro, Darling!. ---Gritó felicitándote desde el segundo piso, seguidamente les disparó con su escopeta deshaciéndose de todos ellos.
Aprovechaste ese momento para dispararle al candado que estaba en la salida, rompiéndolo en el proceso.
Te sobresaltaste un poco cuando Leon aterrizó a tu lado, había saltado desde el tercer piso. Maldita sea, ese chico no le temía a los riesgos.
---Fue un poco fácil, creí que sería más difícil. ---Comentó el rubio, dándole una mirada alrededor del lugar que ya estaba despejado.
---Si yo fuera tu, haría estiramiento. ---Le advertiste dándole una mirada rápida, él te dio una mirada que conocías bien.
Competitiva.
---¿Quieres apostar quién llega a la salida primero?. ---Retó con una voz algo juguetona, parecía dispuesto a ganarte.
---No, thanks bro. ---Negaste imitando la frase que le había dicho a Salazar, el rubio no pudo evitar sentir su corazón acelerado al oirte.
Él sintió su cara calentarse al escuchar que lo imitaste, aunque no pudo evitar querer reírse un poco.
Según él, te quedaba mejor a ti esa frase que a él mismo.
---Andando. ---Instruyó después de estirarse levemente, sabía mejor que nadie que era mejor no desobedecerte.
Se acercaron al inicio del puente listos para comenzar a correr, dieron unos pasos hacia adelante cuando la estatua de Salazar comenzó a moverse levemente.
---Vamonos ______. ---Leon se volteó, listo para darte la mano así que la agarraste rápido comenzando a correr como si no hubiera un mañana.
Tenían suerte ya que iban mucho más adelante que en el juego, sentiste que el ojiazul reajusto el agarre de las manos.
Pronto algunas partes de la construcción comenzaron a caer, esquivaron rápidamente sin llegar a lastimarse. Era muy difícil en vida real, sin embargo no era imposible.
Leon abrió la puerta de una patada rápida antes de que comenzarán a correr hacia afuera, la estatua gigante de Salazar rompió las paredes del castillo saliendo de él.
Saltaste rápidamente hacia el otro lado cuando el puente se quebró en pedazos, la estatua cayó al vacío. El agente agarró el borde del suelo, ya que no había alcanzado a llegar al otro lado.
Sin dudar te acercaste rápido, agarrando sus manos para subirlo a salvo. Hiciste mucha fuerza logrando subirlo a lado tuyo.
---En serio. ¿Qué pasaba por la mente de los creadores al crear el juego?. ---Reflexionó él en voz alta, después de agradecerte.
Ambos vieron la enorme puerta frente a ustedes, ya casi era hora de enfrentar a Salazar. Lo que te ponía algo ansiosa.
---¿Qué pasa?. ---Kennedy te miro con una mirada de preocupación, al verte algo tensa.
---No es nada. ---Contestaste dándole una sonrisa rápida, después de todo incluso si fueran a herirte demasiado.
Podrías regenerarte.
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El sonido de unos aplausos fue lo primero que escucharon al entrar a esa parte del castillo, frente a ustedes estaba Salazar.
Aplaudiendo al verlos completamente vivos.
---Me alegro de que se hayan unido a nosotros, señor Kennedy y señorita _______. ---Habló el más bajo, viéndolos con una sonrisa algo enfermiza en su rostro.
---Otra vez tu. ---Replicó Leon, algo enfadado de haberse encontrado con ese loco.
---El sagrado ritual que está a punto de comenzar en este torre, otorgará a la chica un poder sin igual. ---Informó Salazar, caminando un poco con sus manos en su espalda.
El ojiazul pareció algo indeciso al pensar en Ashley, definitivamente la plaga en ella también estaba comenzando a crecer. Debían apresurarse, para poder eliminar aquello de sus organismos.
---Se unirá a nosotros, será uno más de los nuestros. ---Levanto sus manos pareciendo emocionado.
El rubio dio un paso hacia adelante, de una manera algo amenzadora hacia el contrario.
---Esto no es ningún ritual. ---Rechistó el agente con una voz agresiva. Salazar lo miró expectante. ---Es terrorismo.
---La palabra de moda estos días, ¿no es verdad?. ---Salazar preguntó, dirigiéndose al ascensor que había en el centro de la torre. ---No se preocupe. También tenemos preparados unos rituales especiales para ustedes.
Antes de que el peliblanco pudiera reaccionar, tu novio le arrojó la navaja. Él del sombrero azul, no pudo evitar mirar con horror su mano ahora clavada con la navaja.
Leon pareció algo feliz de hablarle dado a Salazar causándole una leve herida. Un iluminado cerca de salazar, con túnica negra sacó la navaja y se las arrojó a ustedes.
---¡...!. ---La navaja paso rozando cerca de ti, cuando lo esquivaste. Corto algunos mechones de tu cabello, antes de encajarse en la puerta de madera.
---¡Detente!. ---Leon pareciendo furioso, corrió tratando de detener a Salazar en el ascensor. Pero no alcanzó.
Sacaste la navaja y la guardaste en tu bolsillo de la chaqueta. Moviste tu mano hacia tu cabello sintiéndolo.
Efectivamente ahora tenías un lado un poco corto, se notaba a medias. No se notaba poco, pero tampoco mucho.
Tu acompañante enojado, no pudo evitar golpear la reja frente al ascensor por el que había escapado Salazar. Después, se giró para verte.
---Oh. ---Dijo bastante sorprendido al ver el estado de tu cabello. Él agradeció que fuera eso y no tu piel, no quería verte con sangre.
Tomaste su mano comenzando a caminar hacia adelante, él te miro de reojo. En realidad, se veía demasiado disparejo tu corte de cabello desde su perspectiva.
---¿Qué le digo para que se sienta mejor?. ---Pensó el Kennedy algo angustiado por tí, te veías algo inexpresiva al asesinar sin piedad a los iluminados.
Leon no te juzgaba, si a él le hubieran hecho lo mismo también estaría igual. Sin embargo, en sus ojos no importaba el corte de cabello que tuvieras, él verdaderamente te ama.
Hasta que finalmente llegaron al montacargas, empujaron la caja pesada hacia afuera. Comenzando a subir.
Leon finalmente tuvo una idea.
---Darling. ---Rompió el silencio, aprovechando que habían acabado con todos los enemigos a la vista. ---Realmente te ves linda sin importar el corte que lleves. Pero, si quieres puedo emparejarte el cabello.
Levantaste tu mirada pensativa del suelo, encontrándote con sus ojos azules viéndote suavemente. Sonreiste, sintiendo tu corazón cálido que no dudaste en abrazarlo.
---Gracias, en realidad aprecio tu oferta. ---Asentiste separándote de él, el rubio asintió pareciendo de acuerdo contigo y le pasaste la navaja.
Él se acercó a tí moviendo con cuidado tu cabeza a los lados, analizando tu cabello para encontrar una solución precisa.
Sujeto tus otros mechones, comprándolos con los otros que ahora eran un poco más cortos. Cerró los ojos, tratando de visualizar como cortarlo hasta que lo encontró.
---Manten los ojos cerrados, Darling. ---Te ordenó con suavidad, obedeciste cerrando los ojos. Comenzaste a escuchar el sonido de la navaja.
Cuando el montacargas finalmente se detuvo arriba, el rubio te indico que abrieras los ojos. Él se movió poniéndose frente a tí, observando con orgullo su trabajo.
---Te ves increíble. ---Te halago guiñándote un ojo, haciendo que tu corazón se acelerará. El te paso la navaja para que vieras tu reflejo.
En realidad tu cabello se veía muy bien, él había cortado el exceso de volumen de tu cabello dándole una mejor forma.
Te había quitando todo lo maltratado y lo había emparejado.
Ambos caminaron por el camino el cual estaba por fuera, el aire era fresco. Habían algunas cuantas antorchas pegadas en la pared, iluminando con sus llamas rojas el lugar.
---Por aquí extranjeros. ---El buhonero les hablo, ofreciéndoles su nueva mercancía mejorada.
Sabías que en este punto, era tiempo de pelear con Salazar. Él mutaria en un tipo de monstruo que era gigante.
𝗟𝗢𝗩𝗘 𝗠𝗘𝗗𝗜𝗔𝗧𝗢𝗥
Leon ■■■■■ 100% Estado: Enamorado
-Novios
❝𝐈𝐌𝐀𝐆𝐄𝐍𝐄𝐒 𝐃𝐄𝐋 𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎❞