Leo- pues yo creo que está bien, Kutchel ya deberías de dejarlo en paz, que se de cuenta solo de su error
Kutchel- uhg, ese niño es terco pero a niveles inhumanos, que se de cuenta solo de su error, si claro
Leo- debes darle cabeza a algo, Levi está actuando como un hormonal cuando obtenga tu sabes que, ya dejará de ver corazóncitos por ahí
La noche anterior fue como cortarse las piernas ella misma, desesperante, imposible, cansino, mientras que Leo lo tomó todo con calma puesto que ya no daría más consejos si estos eran descaradamente ignorados, sentía que la lógica que ambos tenían con respecto a ese asunto era la más válida, pero Levi ya era adulto y no podrían evitar para nada que siguiera con Eren.
Leo- anímate, Eren fue educado y objetivo, desde que lo conocí lo vi muy buena persona, pasa que en ese entonces no sabía que tenía 31 años, pero trata de ver el lado positivo
Kutchel- te amo eres tan pacifico, ¿a quien habrá salido Levi?
Leo- ¿a quién será?
Terminaron de alistarse puesto que debían ir a visitar a Kenny, debido al estado avanzado de su condición mental sería un reto poder controlarlo, estaba distorcionando la realidad al punto de que ya no sabía identificar qué eran real y que no.
Leo no tenía permiso de conducir pero se arriesgaban, Kutchel lo miraba y su corazón se volvía un malvavisco, blando y fácil de estrujar, lo esperó media vida porque su corazón siempre le dijo que volvería, gracias a él quería que Levi viviera etapas porque las drogas y cosas no aptas las conocía desde tan joven, la única etapa de su vida que estuvo bien puesta fue su niñez, más nada.
Leo- puede sonar tonto pero quiero jugar al baseball con Levi, como antes
Kutchel- no sé porque dejó el deporte, le iba demasiado bien, todo era trofeo tras trofeo
Leo- me duele tanto saber que no lo vi crecer, nunca me lo voy a perdonar
Kutchel- Leo estabas adicto desde que Levi tenía 4 años, ¿qué esperabas?, los viciosos no piensan, no sienten, solo destruyen su cuerpo y vida
Kutchel le tocó el hombro y le dio un pequeño beso en la mejilla, ambos sonrieron un poco y no siguieron hablando del tema, la señora utilizó su teléfono por un rato y luego recordó que Eren le había pasado el contacto de sus padres, respiró hondo y envió el primer hola, tal vez compartían la misma idea.
En otro lugar
Eren- bueno, creo que eso es todo
Luego de pasar 20 minutos gritándole a todos en la empresa podía darse el lujo de un cafecito con leche en la oficina vacía de su superior, se había divulgado una imagen muy mansa y dulce al rededor del castaño, muchos lo veían como un alivio, otros como una forma de intentar salirse con la suya, como compañero Eren era lo mejor del mundo pero como jefe ni lo sueñen.
Subió al último piso mientran pensaba en Levi, veía su vida pasar frente a sus ojos con esos labios finos encima todo el tiempo. Y si en algún momento debía dejarlo todo por él no lo dudaría.
Justamente pensando en él entró a la oficina de Floch y luego del café se sentó frente a la computadora, quería revisar ese asunto del curso técnico, Floch confiaba tanto en Eren que le dio las contraseñas absolutamente de todo, y fue demasiado fácil ingresar, se sentía muy privilegiado, pero era merecido.
Su cara de felicidad y orgullo por su muchacho cambió drásticamente cuando se dio cuenta de los horarios, Levi Ackerman, 20 años, primaria y secundaria completas con notas excelentes, estaba por cursar en el área de "Técnico electricista", entraba a las 8 am y salía a las 2pm, su horario de trabajo entonces empezaba de las 2pm hasta las 5pm, luego llegaría a casa a atender a los niños y posiblemente a limpiar, ¿en que momento iba a estudiar?, ¿en qué momento podría jugar en su consola?, no podía permitir algo así.
Él azabache estaba tomando un poco de agua en la cocina cuando justo Hanji llegó y empezaron a platicar, ella era una chica sencilla y divertida, odiaba admitirlo pero era la primera persona que decía tonterías que le agradaba.
Levi- tu asqueroso helado me enfermó
Hanji- no es culpa mía que no aguantes nada
Levi- tu cara de vagabunda me da a entender que estas ya muy acostumbrada a comer basura, pero yo no, Eren me cocina lo más ric- ah, necesita que suba, ¿se habrá dado cuenta que puse cloro en la silla de Pieck?
Hanji- ¿qué hiciste?
Levi- no te incumbe vagabunda, y no digas nada o te pondré cloro en los ojos
Era curioso como nadie se daba cuenta de que estaban saliendo, es que literalmente no pasaba nada que diera a entender que tenían algo y por una parte no había mucho que hacer, como Levi siempre recalcó solo les faltaba besarse a diario.
Subió rápidamente gracias al ascensor vacío y se preparó para ser regañado, puso su mejor cara de incredulidad y entró para enfrentarse a esa chulada castrosa con el trabajo, realmente estaba furioso con las circunstancias, ¡y pasó en segundos!, nada más entrar y ver esa hermosa imagen que le recordaba una y otra vez que tan lejos estaba de metersela.
Se sentó sin hablar y quedó indefenso ante esa mirada grande y retadora, humedecio sus labios con la lengua y pestañeo repetidas veces antes de volver a clavarle esos ojos de gato encima, tenían un color hermoso y eran profundos como un río silvestre.
Eren- estás despedido
Levi- ¡¿qué?!, tks, ¿es broma verdad?
Eren- según el protocolo debo ser claro y consiso, lamento decírtelo de esta manera mi dulce y amargo chiquitín, pero quiero que te concentres en tus estudios
Levi- ¡lo sabía!, sabía que sí hablabas con mamá ibas a pensar igual que ella, ¿que pretendes?, ¿qué me caiga dinero del cielo?, ¡¿acaso vas a mantenerme?!
Eren- Levi si me vuelves a alzar la voz te voy a poner a dormir en el patio, te juro que soy capaz, sí, voy a mantenerte hasta que acabes el curso
Levi- ¡yo- ¿eh?... Vas- vas a mantenerme hasta que- tks, no Eren, ¿qué más quieres hacer por mí?, ya basta, te quiero mucho pero no quiero eso, me esfuerzo mucho porque quiero estar o a tu nivel, hasta más, no que me des casa, comida, tu amor, y también tu dinero
Eren- ay chiquitín, mi vida, sí te entiendo pero te vas a explotar demasiado y yo solo estoy haciendo correos y atendiendo juntas, me sobra para los dos, quiero que estudies como se debe, descanses, y tengas tiempo para tus pasatiempos
Levi- pero vaquita yo no puedo volver a la vida que tenia con mamá
Se apoyó de la mesa con decepción, salió de casa a la fuerza y quería trabajar para demostrar, sino tenía trabajo y solo estudiaba su madre no se callaria jamás con que no se superó nada y volvió a lo mismo, vivir enteramente de Eren le parecía excesivo, su mísero sueldo al menos lo hacía poder pagar la luz, algunos pañales, y tal vez un par de cosas de la compra, ahora no podía quedarse sin eso.
Eren- corazón, eso no te hace menos, no hay nadie que ponga nuestro hogar tan bonito, que atienda a los niños, que organice de mil maneras la cocina, eso es mucho con demasiado, además eres un gran soporte para mí, ¿hoy hubiese estado aquí sin ti?, me ayudaste a reparar mi vida y eso no tiene precio
Levi- pero yo estaba tratando de avanzar solo (suspira) al menos cuando termine el estudio no me ayudes en nada, ni controles para la consola, ni pizzas, no me busques el empleo, nada de nada, solo así aceptaré tu propuesta
Eren- como guste él muchachito
Levi- ¿entonces me voy?
Él castaño se levantó y se dirigió a la puerta, salió un momento lo que para Levi fue un señal de que debía bajar con él, una de las trabajadoras de la cocina se sentó en el banco frente a la oficina y su novio se veía muy extraño mirando a la señora.
Eren estaba fuera de control, salió para revisar si habían personas por los pasillos porque tenía algo importante que discutir con Levi, era algo muy íntimo, lo hablarían muy, muy, muy de cerca, tal vez tan cerca que sus lenguas tuvieran contacto. Debía disimular muy bien porque está era la oficina del jefe.
Eren- oh Levi, te buscaba justo a ti
Levi- ¿eh?
Eren- antes de que venga el señor Forster debes limpiar sus estantes, ven te acompaño para indicarte
Agarrandolo de los hombros lo metió al lugar mientras la mujer lo saludaba con cariño, Levi logró captar solo cuando puso seguro a la puerta y soltó la respiración que tenía atrapada de los nervios. Era bastante estricto con el trabajo pero merecía un bocadillo.
Levi- eres muy descarado le gustabas a Floch y esta es su oficina, eso es tan despiadado...me encanta
Eren- solo besos
Levi bajaba la mirada y lo demás dejaba de existir, sólo entendió lo que le apetecía y ya estaba despedido, podía portarse como le diera la gana.
El ambiente se hizo silencioso pero sus cuerpos se estaban llamando, cuanto deseo acumulado entre los dos, se acercaron lentamente para recorrerse con sus tactos y la diferencia de alturas hizo de las suyas a favor del menor, él ojos verdes estaba muy ocupado sintiendo esas manos apretar sus caderas con deseo que ignoraba la separación de los dos primeros botones de su camisa.
Un pequeño suspiro de sorpresa dejó escapar cuando el calor de la lengua ajena se paseó por uno de sus pezones, era gracioso que la palabra niño le ofendiera pero sus conductas sexuales eran muy parecidas a tal faceta, era terco, insaciable, y no le molestaba volver a la alimentación materna, un total hipócrita.
Ahí no había sabor, no esperaba que saliera nada, pero era inevitable, se le hacía agua la boca al sentir ese esponjoso espacio, sus labios hacían ventosa con fuerza mientras lo degustaba con tal deseo, maldito perverso que no tenía reparo alguno.
El mayor intentaba quitarlo, era tan sensible a su tacto y ya le dolían los labios por morderlos así evitando las exclamaciones ruidosas de placer, era imposible que algo así le provocara tal excitacion, era tan patético que un inexperto como Levi hiciera que su cuerpo se volviera pura lava ardiendo, patéticamente rico.
Eren- (susurrando) basta, hmf- Lev- sólo besos, solo besos, solo besos...
Levi- no espesificaste donde, eres muy suave, siempre hueles bien
Eren- aún espero ese momento en el que no huelas a talco de bebé, o a detergente
Levi- bueno si ya le di amor a una, no puedo dejar a la otra así
Era tan adictivo, como un visio dulce en donde fundirse y perder la mente por largos ratos, su cuerpo era tan curvilineo, tenía sus dedos en una montaña rusa de contornos, sentía las palpitaciones de su corazón y no pudo evitar tener una reacción corporal.
Eren- oye siento algo ahí, ¿te ayudo?
Levi- después de todo ya estoy despedido
La oficina de Floch era muy normal sin nada que destacar pero ahora parecía un posible maratón de posiciones perfectas para el momento, él joven ubicó un asiento al lado de la estantería y no dudó en ponerse cómodo allí, el bulto en su holgado pantalón hicieron que Eren llegara como por arte de magia.
Eren- uy, se movió
Levi- ¿te sorprende?, sacalo y verás
Era algo relativamente normal, se movía por estímulo hasta podría hacerse de manera voluntaria pero Eren era aburrido y más con los encuentros en los que había participado Farlan, ninguno de los dos se anticipaba a nada, ni siquiera a divertirse un poco.
Sus manos eran delicadas para el roce, por encima de la fina tela le dio un pequeño beso y sus labios fueron correspondidos con las desesperadas palpitaciones, no habría nada más ansioso que Levi.
Lo tocó un poco y luego quitó el largo cierre, el bóxer estaba siendo presionado por el poco espacio que el despierto Levi provocaba en la tela, disfrutaba de su mirada curiosa pero necesitaba ya una buena mamada. Le acarició ese bello y brillante cabello ganándose una linda sonrisa, volvía a repetirlo, nunca pensó ver a un adulto adorable.
Eren- te daré una razón para ser un mantenido
Eren con los ojos brillosos de lujuria comenzó a eliminar de su vista esa prenda interior, el camino de vello negro azabache sobre la base de su pene era tan sexy y varonil, con sus dedos índice y pulgar rodeó aquel tronco caliente y de un leve jalón lo sacó por fin, el líquido transparente goteaba de la punta con insistencia así que tuvo que ayudar con eso.
Lamidas descaradas iban y venían, con violencia se apoderó de la punta y la succión se hizo presente, el rostro fruncido del azabache era realmente motivador, su amado Eren lo tenía todo, hermoso, amable, y la chupaba como nadie. El cabello empezó a ser un problema así que esa mano pálida lo sostuvo con fuerza.
Eren- te ves lindo así, ¿te estoy atendiendo bien o me falta práctica?
Levi- estás perfecto pero tendrás práctica de por vida
Eren- Levi mírame a los ojos en el proceso
Obedeciendo no le apartó la mirada mientras se forzada a tragar todo lo que podía, su respiración en la base era rápida y desesperada, se sentía sofocado pero sin ser empatico le hizo presión para mantenerlo ahí, con mucho amor él mayor lo dejó salir, estaba lleno de saliva y se sentía sucio pero eso no le borraba la sonrisa de la cara.
Eren- ¿qué estás esperando para acabar?
Lo tomó con las dos manos y con la saliva que había dejado embarrada en ese gran miembro empezó a masajearlo con rapidez mientras mordia su labio inferior, era tan delicioso, tan voraz, carcomia su cuerpo con calor y deseo, deseaba mucho, mucho más de él.
Lo sentía muy brusco pero a la vez increíble, las manos ajenas podían dar un estímulo cualquiera y sería riquísimo, le soltó el cabello y lo tomó por debajo de los hombros para que se alzara más, al punto de que pudiese ver su camisa abierta, lo rodeó con las piernas pegándole el pecho a su entrepierna.
Eren- te gusta mucho mi pecho, ¿eh?, hm, Levi no tenemos mucho tiempo
Levi- sube y baja
Los movimientos indicados por el jadeante muchacho fueron el infierno, tan caliente y pecaminoso que no podía dejar de gozarlo, su pene estaba siendo aprisionado por las suaves protuberancias afectadas por la maternidad del castaño, su antebrazo le cubrió los ojos mientras lo sentía cada vez más cerca.
Eren fue sorprendido por el pegajoso esperma en su pecho y la pelvis de su amado, estaba a punto de decir algo cuando su cabeza fue sostenida y con firmeza el joven lo hizo limpiar el desastre de su cuerpo, su cuerpo entero se tensó y sólo le quedó verlo intentar limpiar su pecho.
Eren- eres insaciable chiquitín, pero aunque sigas duro no podemos darnos el lujo de más
Levi- ¿por?, nadie nos espera (suspira) mierda Eren, ve con ese doctor rápido no vas a mantenerme de mamadas más tiempo
Eren- admito qué te tengo miedo
Levi- y te voy a dar motivos
Horas después
Zeke- ya pero, ¿y el novio de Eren?
Levi- tks, ¿hola?, soy yo
Zeke- anda, acabas de cumplir 16
Levi- tengo 20, payaso
Zeke- uy, que carácter, bueno no me lo esperaba
Levi- sí, sí, como sea, hay que llevarnos bien por Eren así que evita volver a decir idioteces
Eren les estaba haciendo la cena puesto que la segunda visita de Zeke fue otra sorpresa, al parecer le encantaba llegar sin avisar, Levi no inició molesto pero otra vez le decían cualquier edad menos la suya, a estas alturas se la escribiria en la frente.
Los bebés seguían siendo muy liberados puesto que otra vez estaban en el pasto, no era algo que le gustara al papá pero no podía hacer nada contra la vaquita y sus miradas enojadas, esos ojazos eran bien expresivos e intimidantes.
Zeke- ¿y cómo se llevan?
Levi- bien
Zeke- realmente me parece muy chocante esto, de verdad es una gran diferencia de edades
Levi- Zeke, ¿verdad?, estuve luchando por esto como burro con carreta para que vengas a opinar que te parece lo nuestro
Zeke- ¿pues perdón?, tienes una actitud que bueno, ya no diré más nada no vayas a ofenderte más
Él rubio se levantó de su silla y fue acompañar a sus sobrinos en los juegos con la hierva, los pequeños se divertían y le daban miradas a su papá mientras le enseñaban con risas los juguetes.
Levi- Zeke cuidado con agarrarlos así, acaban de comer
Zeke- tengo 5 hijos Levi, se de esto como nadie
Con mucha fuerza Zeke levantó a Derian que terminó por llorar, enfadado aún más Levi se paró de su silla y los tomó a los dos para luego llevarlos adentro, no quería causarle problemas a Eren en la reconciliación con su hermano pero ya le estaba cayendo pesado.
Levi- o lo controlas o esto sale mal
Eren- Zeke es bien intenso aveces solo hablale feo y para
Levi- hablarle feo, creo que voy dejar de usar las palabras
Eren le sirvió un plato y le dio un beso para calmarlo, para dejarlo cenar tranquilo se quedó con los niños y rápidamente el ofendido Zeke llegó para quejarse del noviecito bully que se había conseguido.
Eren- Zeke no te confíes, Levi es chiquito pero mete unos golpes... No te gustaría
Zeke- ese niño tiene un mal genio increíble, no sé cómo es que te gusta
Eren- no te metas en eso, ¿sí?, Frieda debe de extrañarte y más si está embarazada, ¿cuando te vas?
Zeke- una reunión con los viejos compas y me voy, que por cierto estas invitado
Eren- bueno veré si puedo
Levi comía con tranquilidad cuando alguien tocó la puerta y decidió abrir él porque escuchaba que estaban conversando y no quería que Eren se levantara, no esperaban a nadie y menos a esta hora así que se le hacía muy raro.
Levi- ¿qué?
Jean- bro, acabo de comprar el nuevo juego y se puede compartir la cuenta, una para mi y la otra no veo a alguien más indicado que tú, ¿qué dices?, ¿jugamos?
Levi- pero mierda todavía no llegaba al país, claro que juego, ahora es el mejor momento ya no tengo trabajo
Jean- bro, nos vamos a llevar muy bien
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